A los pocos días del trío que hizo la puta de mi mujer con Alejandra y el marido, le mandaron por whatsapp la foto de un chico de 21 años, era el amigo que esa mujer había dicho que le quería presentar, tengo que confesar que el pibe era un bombón divino, lo tenía todo, de estatura media, carilindo
Estaba descansando en la terraza de mi casa en una calurosa tarde de verano, mientras mi esposa se preparaba un trago en la cocina y Erick terminaba de limpiar las hojas que había en la piscina. Erick era, por decirlo de alguna manera, mi asistente personal, me ayudaba en algunas cosas de mi trabajo
Mientras esa música sonaba, ella se movía sensual delante de nosotros. Estaba buenísima en ese vestido de seda ceñido al cuerpo, muy atrevido por lo corto y escotado, dejando imaginar y más todo lo que suponía esconder debajo
Todo comenzó un día en el que mi esposo y yo, cogíamos muy rico como siempre... Yo lo estaba montando, la temperatura empezó a subir y empezamos a decirnos cosas súper calientes... Y de pronto, él me dice: "Quiero que seas una puta, quiero ver qué otro te de duro"... Yo al principio pensé que solo
Mi marido había acordado con un hombre que conoció en una página de contactos sexuales, que venga a visitarnos hoy a la tarde, con la intención de hacerme acostar con él y ser testigo de como ese hombre me hacía su hembra en nuestra cama.
Estaba viviendo un sueño, tenía a un hombre entre mis piernas y a otro besándome el cuello. Diego tomo mis tetas, que no son grandes, pero si redondas, las juntó ambas y comenzó a deslizar su lengua alrededor de mis pezones.