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Picantes relatos de sexo con maduros. ¿Que hombre maduro no ha fantaseado alguna vez con follarse a una jovencita caliente y morbosa? ¡Descubre los detalles!
RELATO DESTACADO
Sexo con maduros - Pág. 1
Sexo con maduros
Una joven accidentada y un hombre maduro (3 de 3)
mc70 -
No quería mover la lengua, ni la boca, ni los labios, me encontraba totalmente pegado a él, notando su calor, y notando casi las palpitaciones que su clítoris sentía a cada golpe de latido de su corazón. Retiré suavemente la boca mientras iba cerrando los labios tras de cada centímetro que me retiraba, notando cómo mis labios eran los que
Sexo con maduros
Una joven accidentada y un hombre maduro (2 de 3)
mc70 -
De hecho, mi ansia al besarla venía motivada por la paja tan monumental que me estaba haciendo. Ni mis propias pajas mañaneras que algunos días me regalaba, tenían la habilidad de en cada movimiento, pasar por tantos puntos diferentes. Y sentir la juventud de esa mano, también ayudaba a que mi excitación fuera en aumento, haciendo que mi polla se
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Una joven accidentada y un hombre maduro (1 de 3)
mc70 -
Y diciendo esto, su mano se dirigió a mi cinturón, que abrió de manera lenta y sugerente, mientras alternaba su mirada a mis ojos con otras miradas a lo que iba apareciendo a cada gesto que sus manos hacían. Desabotonó mi pantalón... y bajó suavemente la cremallera, dejando a su vista unos slips negros, pero que dejaban ver la erección
Sexo con maduros
El papá de mi mejor amiga (1)
Bishops -
-Los hombres solemos ser todos así a una determinada edad –yo no podía dejar de mirarlo. No paraba de desearlo. Quería sentir ese abdomen sobre mí, esos hombros redondos, esa espalda ancha, bombeándome. Quería sentir su sudor, su piel… su sexo. Cada tanto miraba de reojo su bulto. Parecía haber crecido, aunque al no poder mirarlo con detenimiento, no podía
Sexo con maduros
Un viaje apretado con final feliz
Apenas de reojo me di cuenta que era un señor de unos 50 años que se amoldó perfectamente a mí pues no era alto. Con el vaivén del viaje sentí como su pito se fue poniendo duro y me lo repegaba mucho. Zorra como era y soy, decidí disfrutar el momento, aunque pensé que en algún momento se bajaría en
Sexo con maduros
Lluvia y calentura en una ciudad extraña
Le mamé su pito lentamente y le lamí toda la macana y hasta sus testículos. Seguí haciéndolo un rato más pues estaba encantado de esa mamada. Posteriormente me acerqué a su cara y le puse mi coño en su boca y él lo lamió como todo un experto. Realmente sentí mucho placer y comencé a gemir. La lluvia volvió fuerte
Sexo con maduros
Fantasía de una mujer casada con un hombre mayor (parte 5)
Sin sacar el miembro de Sergio de mi boca, me quedé en 4, sobre el asiento del coche. Sergio, estaba con la espalda apoyada contra la ventanilla derecha trasera. Poco antes de arrancar de nuevo el vehículo, haciendo un escorzo, Pepe, se giró. Sacando una mano, me dio un azote. Duro. Muy duro. Resonó en todo el vehículo. O eso
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El señor del bastón
Cristina -
Descomunal, calculo que mediría unos 20 cm y su grosor era tal que con una sola mano casi no la podía rodear, recién para agarrarla toda tuve que usar ambas manos, no era algo duro como se le pone a un tipo de 20 años, pero si tenía una firmeza que creo nada usual para un hombre de su edad
Sexo con maduros
Fantasía de una mujer casada con un hombre mayor (parte 4)
Abrí la puerta. El chico, joven, aún con el casco puesto, me miró. Primero a los ojos, luego, a mis pechos. Yo me moría de la excitación. Sonreí, seductora, llevando una de mis manos, al cuello de la camisa. Le pregunté el precio, me di la vuelta, para que viera la parte baja de mis nalgas. Y llamé a don
Sexo con maduros
Repetimos trío con el viejito
Sacaba la lengua chupándose los labios y con la mano me frotaba la polla sobre el pantalón buscando toda su longitud mientras le decía al viejo cosas como “esta polla es la que me abre mi coño”, “esta polla es la que me como hasta la garganta”, “la que me folla es culo”, “la que se corre en mi cara