Una tarde mágica en la que no esperaba que tuviéramos un encuentro, nuestros besos siempre son robados y nos saciamos en lo privado...
Hace unos meses prometí fidelidad sexual a mi suegro así que cada vez que ando ganas el me coge o cuando él tiene ganas. En uno de nuestros últimos encuentros fuimos a un motel muy cómodo, estaba nerviosa porque tenía días sin verlo al bajar del automóvil entre a la habitación pensando en que iba a pasar así que me desvistió y él se desvistió para mí, me tumbe en la cama y comenzamos a besarnos pero el decidió tomar una ducha así que al rato entre y lo acompañe mi primer ducha con él y fue muy nuevo para mí, mientras entraba a la ducha el me beso y me toco cada parte de mi cuerpo y paso barra de jabón a la vez mientras yo me humedecía por él y la sensibilidad que mi cuerpo sentía por él era muy fuerte no lo pensé tanto y pedí que me penetrara mientras nos duchábamos pero que lo hiciera anal y cuando lo hizo fue lo más rico que podía sentir su gran verga entrando y saliendo y provocando gemidos más fuertes en mí, salimos mojados de la ducha y siendo penetrada analmente aun él se sentó y me senté sobre el su pene estaba muy erecto y me lastimaba un poco pero mis ganas eran más grandes luego de un rato me puso contra la pared y me penetro duro una y otra vez hasta acabar y sentir todo su semen en mis caderas y trasero, terminamos la ducha y volvimos a hacerlo vaginal hasta terminar.
Nos vestimos y nos fuimos pero luego de ello mientras estaba en clases pensaba en lo bien que la había pasado y en las ganas que tenía, después de hacerlo solo quería relajarme de esa forma y volvimos a vernos ese día por la tarde ya más aseada y con ganas de el empecé a besarlo al nada más verlo, entramos a nuestro apartamento para hacerlo el amarro mis manos cuando ya estaba completamente desnuda y me tiro a la cama, debo confesar que ni con mi novio me ha gustado tanto pero él me dio las nalgadas más ricas que pude sentir y estaba disfrutándolo pero luego me desconcentre porque pensé que me penetraría anal y no quería porque andaba lastimada pero él me dijo que me relajara luego solo sentí su lengua y sus labios recorrer mi trasero hasta que me dio un beso negro nada incomodo diré y fue excitante pero para sorprenderme más luego de hacer eso el me dio sexo oral, jugo con mis labios vaginales y me lleno de placer para luego abrir mis piernas y penetrarme duro y rápido su pene me dio el placer más rico que pude esperar y logre tener el mejor orgasmo el día pero al tiempo que termine el también acabo y saco su pene y rego todos sus jugos en mis senos y mi estómago y un poco en mi rostro, era tanto que trague un poco el desato mis manos y limpie mi cuerpo.
Ambos nos vestimos y salimos de regreso a casa han pasado ya varios días pero aun imagino el placer que me dio y humedezco cada que lo recuerdo.