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PERVERTIDOS (RELATO ILUSTRADO) CAP IV

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De nuevo Sara e Ester, en casa de la segunda, pasan la noche estudiando. Sara no tiene un plan preconcebido; llevan ya un buen rato, pero no quiere arriesgarse metiendo la pata. Ester de forma espontánea le da pie.

- hoy no tienes calor?

- que quieres verme las tetas Ester?

- yo? Quédices?

- ay Ester, quésentido del humor...

- es verdad, soy muy tonta. Perdona.

- no pasa nada. Lo que eres es discreta, no tonta.

- ¿Discreta yo? Con lo cotilla que soy.

- haces preguntas pero creo que te gustaría saber más y no te atreves a seguir. A eso llamo ser discreta. ¿A que sí?

- bueno... quizás tengas razón. Es que no pararía de chafardear y...

- y no te gusta contar cosas tuyas y temes que te pregunten.

Ester se ruborizó. Sara continuó:

- no te preocupes. Pregúntame lo que quieras. Ya te dirébasta.

- y tú también, de verdad. Oye  verás, me dejaste intrigada la otra noche.

- ah sí? Porqué?

- por esa relación tan "especial". No sé, no os pega.

- el quéde todo no nos pega. Que no nos importe lo que hagamos con otros? ¿Que a mi me vayan  las tías?

- no séSara, por el aspecto me parecéis  más convencionales. ¿Quéquieres que te diga? Además, aquello de que hay más cosas que no me quisiste contar.

- ah, era eso.  Oye, síque eres curiosa.

- (sonriendo) sí, síque lo soy.

Sara recordó  la sugerencia de Nico y pasóal ataque:

- Ester, déjame preguntarte ¿has experimentado cosas con el sexo?

- a qué te refieres? No te entiendo.

- me refiero a que si has hecho cosas fuera de lo habitual, sexo oral, coito...

- Sara, soy virgen. Aparte de besos, achuchones, tocarse y cosas asíno he hecho nada.

- vaya, eso no me lo imaginaba. ¿Es que esperas a un príncipe azul o qué? Tienes 23 años hija!

- lo sé, pero no he conocido a nadie que pudiera interesarme  tanto.

- nunca nadie te ha excitado tanto... o has tenido un ataque de deseo que... que te haya hecho perder tu control?

- bueno, hubo una vez... Casi, casi lo pierdo.

- ¿Te apetece contármelo?

- si, te lo cuento. Fue en el instituto. Yo tenía 14 años. Jugaba en el equipo de balonmano. Después de un partido, me quedéla última en la ducha. Estonces aparecióNacha. Ella era la capitana del equipo, una chica mayor que yo, muy sensual. No había cortinas, y me di cuenta que venía hacia mí. Me tocóel hombro. No se porquéal girarme ya sabía que algo iba a pasar

- Al verla se me erizóel vello.

- Ella estaba desnuda, sin quitarme la vista de encima. Yo me quedéparalizada, quieta. Me sonrióy...

- y?

- me besó.

-  y tú, quéhiciste?

Sara la escuchaba extasiada. Sus bragas estaban mojadas por lo que Ester le estaba contando. Tenía la mano debajo de la mesa. Impulsivamente metiósus dedos por debajo del elástico de las braguitas rozando sus dedos con su clítoris. Apenas pudo reprimir un gemido.

- nada

- como que nada?

- si. Fue un beso muy largo. Acabó, me miró, se rióenigmáticamente y se fue otra vez hacia el vestuario.

- y no fuiste detrás de ella?

- no.

- porquéno lo hiciste? ¿Porque era una chica?

- no, no lo séen realidad.

- tuviste miedo ¿Verdad?

- sí, creo que sí. ( pausa) Sara...

- dime.

- ¿tu crees que eso es ser bisexual?

Sara suspiró,

- Ester, todos los somos. Bueno, excepto Nico, ja ja.

Después de esto Sara se marchódiscretamente al baño y se masturbó. Se juramentófollarse a esa bobalicona, taladrándola por su coño y por su ano con un arnés y después marcarla con la fusta especial de Nico. Se corrióentre espasmos maliciosos y pérfidos.

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