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Suerte que tuve hermana

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Leandro era ya un hombre maduro, su vicio eran las mujeres pechugonas, sobretodo las nalgonas, un culo bien parado era su locura, cuando viajaba en metro tenía un truco que siempre le había resultado, primero buscaba unas buenas nalgas, levantaba su paquete y lo acercaba a aquellas nalgas, la idea era que la dueña de ellas sintiera un enorme vergon detrás de su culo, por lo regular así lo sentían, disimuladamente se iban acomodando hasta tener bien abiertas las nalgas para que el ejerciera presión, muchas de ellas se agachaban ligeramente y el entendía perfectamente que debía de restregar con maestría ese paquete, el resultado siempre era el mismo, hasta que una vez, no habiendo encontrado un buen culo, se resigno a esperar su parada, una chica de escasos 17 años se coloco delante de el, llevaba un vestido de vuelo ligeramente transparente, su aroma jovial despertó el instinto de Leandro, sabía que no debía intentarlo por ser menor de edad, sin embargo su calentura fue mas fuerte, hizo lo que jamás había hecho, palpar nalgas, lo hizo cálida y delicadamente, la tela era súper delgada que sintió claramente que esta chica o no llevaba pantaleta o era una tanga la que llevaba puesta.

La nalga la sintió desnuda, vio que la chica no dijo nada, ni siquiera se movió por lo que descaradamente la toco, tampoco hubo rechazo, coloco su mano en medio de ellas y metió un dedo tratando de sentir el culo, la chica se agacho como buscando a alguien, eso lo enardeció y desesperadamente metió la mano bajo el vestido de la chica, realmente se dio cuenta que esta chica no llevaba nada en su interior, eso era demasiado para el, sentía que esta chica estaba sumamente mojada, comenzó a acariciar los húmedos labios vaginales, la chica seguía agachaba, así que con facilidad comenzó a dedearla, con la otra mano Leandro se bajo la cremallera y saco su enorme verga toda mojada, la acerco a esas pequeñas nalgas y trató de cogerla, era inútil, no podía y estaba a punto de reventar, como pudo la agarro de la cintura y empezó a hacer presión con su verga, la chica volteo a verlo y quedamente le dijo, "me duele", porque no mejor la chupas, eso fue el fin, saco su pañuelo y empezó a derramar su leche presa de una intensa lujuria, como pudo la limpio y la guardo, disimuladamente se acerco a la chica y quedamente le dijo que porque no iban a otro lugar, rápidamente la chica le lanzo una mirada furiosa, se aparto y se alejo de el, se dio cuenta el gran error que cometió, se regaño así mismo y trato de seguir a la chica, tarde era para remediar su error, claramente vio como un chico se movía detrás de ella, eso indicaba que si se la estaba cogiendo, no entendía porque se había colocado tras de el siendo ya una persona madura, eso lo inquieto, sabía que su verga no entraría en ese pequeño coño por lo que trato de calmarse y bajarse en la primera parada.

Vivía con su hermana mayor era viuda con una hija, lamentablemente su sobrina sufrió una crisis cuando falleció su padre y tuvo parálisis lumbar, imposibilitada para caminar tenía a una señora que era su guardián, estaba en tratamiento y aunque gozaban de una fuerte pensión, su madre puso un negocio con el seguro de vida que su esposo, tenía sirvienta y ayudaba a su hermano, Leandro trabajaba en una empresa de jefe de personal, pero no pudo quitarse de la mente a la chica y cada que veía a su sobrina recordaba aquella chica depravada, hasta que una ocasión al entrar baño la vio desnuda, Adela la señora que la cuidaba la había dejado así porque había ido a contestar el teléfono y lógicamente la puerta estaba sin seguro, eso lo inquieto mucho, vio que su sobrina Amanda a sus 17 años tenía buenas tetas, paradas con un pezón gordo y abultado tan rico como para chupárselos y unas piernas estupendas, Amanda distraída como era su costumbre no se dio cuenta luego, lo que permitió a Leandro examinar perfectamente ese bello cuerpo, cuando ella volteo se tapo sus pezones, él se disculpo y cerro la puerta, sus pechos debían de ser mas grandes porque su mano no abarco completamente su teta, eso lo hizo sudar, tenía su verga enormemente dura, tenía que encontrar una hembra para saciar su calentura, salió y se fue directo al metro, se paro detrás de la primera mujer que vio, lamentablemente aquella mujer se alejo de el, eso lo frustró, jamás lo habían rechazado, su verga aun estaba totalmente parada, se puso detrás de otra pero también se alejo, tuvo que bajarse porque se sentía avergonzado, nunca le había sucedido y su verga ya le dolía de lo dura y parada que estaba.

Al llegar a su casa, su hermana estaba cenando, le ofreció la cena y cuando estaba sirviendo Leandro se dio cuenta que su hermana tenía un culo fenomenal, nunca se había fijado en ella, disimuladamente vio sus dos grandes melones, necesitaba esa hembra, quiso sacárselo de la mente y se levanto al baño a echarse agua, tenía que sacarse esa idea de la mente pero su cuerpo quería una hembra, su verga exigía una vulva, sin pensarlo entro a su habitación y saco una pastilla para dormir, la machuco lo mas que pudo y bajo a la cocina, su hermana aun estaba esperando, le dijo que solo sentía mucho calor, ella también estuvo de acuerdo, le pido agua y cuando Nora se levanto a servirle, el vació el polvo en el plato de Nora, se le quito y lo revolvió, le dijo a su hermana que estaba muy rico su cereal, movió la boca como si en verdad lo hubiera comido, estuvieron charlando y Nora termino su cereal, dijo que se retiraría a acostarse, tenía mucho sueño, Leandro se inquieto cuando pensó en Amanda, tenía dos mujeres disponibles solo para el, ellas estaban en las habitaciones de arriba y el dormía abajo, no había problemas, hoy cogería a Nora y mañana a Amanda.

Espero el tiempo necesario para que la pastilla surgiera efecto, era el momento de hacerlo, con sumo cuidado salió y subió a la habitación de Nora, por suerte no estaba con cerrojo, así que entro, se desnudo y sigilosamente avanzo hasta la cama, encendió la lámpara del buró y vio a su hermana que estaba profundamente dormida, le quito la sabana, se llevo una sorpresa porque su hermana estaba completamente desnuda, eso le paro la verga como burro que ya estaba totalmente hambrienta, lentamente la movió poniéndola boca arriba y se extasió, comenzó a tocarla suavemente, le chupo el cuello, las tetas, eran deliciosas, su pezón gordo como Amanda, con la diferencia de que era mas grande, las mamo y succiono a su antojo, bajo a su abdomen, hasta llegar a su pelvis, le abrió las piernas y empezó a mamar su vagina, no tenía prisa, tenía disponibles seis horas así que lo disfrutaría, termino de mamar y la acomodo para cogerla, le doblo completamente las piernas y casi se monto en ella para coger con profundidad su rica vagina, entraba y salía con suavidad, disfrutando el calor de aquella vulva, no tardo mucho cuando se vació casi convulsionándose, sacó con cuidado su verga para no regar el semen, se limpio la verga con su playera y seco la vagina de Nora, la movió y volvió a limpiarla, no quería que se derramara nada, así que coloco la sabana en medio de sus piernas, se vistió y salió en silencio hasta llegar a su habitación, tenía mucho tiempo que su hermana no tenía esposo, a caso no necesitaba sexo o que sucedía, eso lo tendría que averiguar.

Al día siguiente no se entretuvo en el metro, tenía que seguir con su plan, cuando Leandro llegó a su casa, Nora no estaba, solo su sobrina y Adela, Leandro entro a su habitación a ponerse ropa cómoda, aprovecho para hacer polvo la pastilla, su sobrina seria suya esta noche, se sentó en la sala con Amanda a ver el televisor, de reojo veía el cuerpo de su sobrina, estaba sentada en el sofá, comenzaron a charlar hasta que llego Nora, con mucha tranquilidad saludo a su hija y a el, Leandro se sintió nervioso quiso percibir algo en la mirada de su hermana pero no encontró nada, Adela preparó la cena y Leandro se ofreció llevar a Amanda hasta la silla del comedor, cuando la abrazo sintió el calor del cuerpo de sobrina, quiso saber si en verdad su sobrina no sentía nada, así que apretó sus dedos presionando la piel de su pierna y ella no dijo nada, era verdad no sentía nada, cenaron y charlaron tranquilamente dándose las buenas noches, Adela se despidió y se retiró.

No tuvo oportunidad de darle nada a Amanda, mas tarde, se levanto a tomar un vaso de agua y vio que su hermana bajaba la escalera, le dijo que iba por un vaso de agua para Amanda, el se ofreció a servirlo, aun llevaba el polvo en su bermuda, rápidamente vació el contenido y se lo dio a Nora, vio como subía las escaleras, admiro realmente su culo, era encantador, movía las nalgas como gelatina y eso lo comenzó a calentar, se metió a su cuarto, busco un condón, saco su dura herramienta para acariciarla, la toco con las dos manos jalándola y apretándola, cerro los ojos y se imagino a su hermana como mamaba aquel rico pedazo de carne oscura, se tranquilizo pensando en el rico culo de su sobrina, transcurrido el tiempo necesario, salió sin hacer ruido, subió y abrió la habitación de Amanda, encendió la lámpara, la destapo y con sumo cuidado le quito su pijama, comenzó por chupar ricos melones, los succiono con ansia, lentamente bajo a su vagina, abrió las piernas y se perdió en aquella mata de bellos, separo sus labios vaginales y comenzó a mamar su coño, quería comerse aquella belleza, no pudo mas y la volteo, metió su brazo debajo de su abdomen y la levanto para parar sus nalgas, le ensalivo su coño, acomodo su verga y mucho cuidado la fue cogiendo, el condón estaba lubricado lo que ayudo a deslizar exquisitamente su verga, ya entrada comenzó a moverse con mucho cuidado para no lastimarla y evitar los ruidos, la entrada y salida era riquísima, lo estaba gozando exquisitamente, apuro la cogida estaba a punto de reventar pero pensó en el culo de Amanda, ni tardo ni perezoso comenzó a maniobrar para cogerse también ese agujero, saco con sumo cuidado su verga y la limpio para no derramar sangre, lubrico con saliva el culo de Amanda, coloco la cabeza de su verga en la entrada de aquel rico culo y la deslizo suavemente entrando profundamente, se sentía en la gloria, estaba de apunto de eyacular cuando le fue inevitable retener aquella leche deliciosamente caliente en ese culo ya profanado, termino satisfecho y con mucho cuidado la dejo como la encontró.

Sin embargo Nora se había convertido en su tormento, el solo verla le paraba la verga, así que tenía que buscar el pretexto ideal para que ella cooperara y su cogidas fueran mutuas, así que aprovecho la charla de la cena cuando estuvieron solos y quiso investigar que pasaba con su hermana haciéndose la víctima:

-Sabes Nora?, hay algo que quiero confiarte pero no se si deba

-Sabes que puedes confiar en mi, que sucede?

-Es que últimamente me he sentido muy raro, tu sabes que no tengo mujer, llevo mas de cuatro meses que no toco a una mujer, no quiero ir a lugares de esos por higiene, entonces me he sentido muy inquieto, tu crees que sea malo masturbarse?

Había dado en el clavo, Nora se quedo callada y noto cierto nerviosismo cuando le contesto.

-Te entiendo, es muy duro conllevar esto, dime te ha dolido?

-Si por lo regular amanece muy dura y me duele para hacer pipi

-A caso no has hecho nada en cuatro meses?.

-No, primero me aguantaba las ganas y trataba de no pensar ello pero últimamente he tenido sueños casi reales y como es lógico despierto con ella muy dura y totalmente húmeda.

Quería provocar calentura en ella, su mente buscaba las palabras adecuadas que fueran eróticas y estas la ponían nerviosa.

-La solución tu la tienes, busca un lugar limpio, y si no quieres pues... no creo que haya algo de malo en lo que tu piensas...

-No entiendo....

-Pues... pues... es decir que te desahogues tu solo...

-No lo se, lo voy a intentar, dime tu que haces para no inquietarte

-Me baño con agua tibia y trato de no pensar en nada, y... bueno... te contare algo... la otra noche soñé con Juan y amanecí casi chorreando, no es la primera vez que sueño con el, sin embargo si es la primera vez que estoy húmeda.

-Si tu sueño te dijera que necesitas algo mas lo harías?

-No lo se, yo también quisiera saber si hay un lugar para las mujeres...

Los dos se quedaron viendo, tenían la solución en sus manos, sin embargo ella esquivo la mirada y cambio de tema, siguieron charlando pero Leandro había tocando el punto vulnerable, solo era cosa de seguir en plan de víctima para sacar provecho.

Terminaron y se quedo en la sala a ver la televisión, era ya tarde, así que subió a la habitación de Nora y suavemente toco y ella sin tardar le abrió :

-Dime

-Puedo hablar contigo?

-Qué quieres, es tarde, mejor mañana

-Es que... es que....

Leandro empezó a llorar, Nora lo abrazo y lo dejo pasar, se sentaron en la cama y el pudo ver que Nora tenía una bata transparente, estaba desnuda.

-Perdona Nora, pero es que no puedo mas...

-Me asustas, que sucede?

-Es que intente masturbarme pero me dolió

-Como que te dolió?

-Si me duele mucho

-A caso no te lubricaste?

-Si, si lo hice pero me dio asco

-Entonces te dolió o te dio asco?

-Las dos cosas

Nora se levanto y comenzó a dar vueltas, Leandro disimuladamente admiro las bellas piernas de su hermana, veía como sus nalgas eran redondas y recordó como la cogió, recordó que la cogida no fue tan satisfecha como creyó, se dio cuenta que no pensó en cogerse su culo, lamento no haberlo hecho, rápidamente aprovecho el efecto en Nora

-Nora... hermanita... por favor... ayúdame... siento que ya estoy a punto de eyacular pero me duele

-Pero.... que hago... no me digas que necesitas que yo te toque...

-No hermana.... tu eres mujer... solo déjame acabar dentro de ti.... por favor... te lo suplico...

Nora se clavo en el piso, se había quedado callada, veía con lastima como Leandro lloraba como niño, ella le había jurado a su madre que cuidaría de el, se lo había prometido, así que no tenía otra opción, pensó que si estaba a punto de eyacular el acto sería rápido, así que correría el riesgo

-Estas seguro que ya los tienes ahí?

-Si... no tardare mucho... será rápido

Nora abrió un cajón y saco un tubo, era lubricante, se hecho en su coño, se agacho al tiempo que su baby doll le descubría las nalgas, abrió las piernas esperando que el entendiera la situación y actuara, Leandro rápido se levanto, se quito su bermuda y se acerco a su hermana

-Gracias Norita... gracias

-Tu dijiste que rápido, así que espero no te tardes...

Leandro tomo su verga y acaricio suavemente la entrada de la vagina para lubricar la gran cabeza, poco a poco enterró su vergon en aquella vagina húmeda, Leandro no sabía que Nora se había untado lubricante para que no se diera cuenta que estaba totalmente mojada, el solo imaginarse una verga la volvía loca, claramente sintió como iba entrando la cabeza, paro mas las nalgas y se sintió inundada de su coño, era delicioso saber que una verga de verdad la estaba cogiendo y no un juguete como los que acostumbraba, casi bramo de placer al darse cuenta que aun no terminaba de entrar y ella no pedía mas, se sentía totalmente llena, Leandro tenía una verga deliciosa, larga y gruesa como ella siempre había querido tenerla, disimuladamente abrió mas las piernas y quiso que la cogida fuera profunda, Leandro ya había agarrado ritmo, su verga entraba y salía con maestría, estaba a punto de explotar que tomo fuertemente las caderas de aquella hembra y sus embestidas fueron crueles para ese coño, de pronto se quedo quieto, había explotado y estaba derramando su semen dentro de la vagina de su hermana, Nora babeaba porque obtuvo al menos dos orgasmos y estaba a punto de lograr un orgasmo intenso, solo que no pudo hacerlo, aun así sentía una electricidad en todo su cuerpo, Leandro se salió despacio, quería que Nora se diera cuenta que aun satisfecha su verga era del mismo tamaño, cuando se separo de ella Nora volteo rápidamente y vio como la verga de su hermano era un gran instrumento de placer, eso le provoco mas espasmos en su cuerpo, Leandro ya con su bermuda puesta abrazo a su hermana y le dio las gracias, salió de su cuarto con la sonrisa mas irónica que jamás tuvo.

Nora se quedo inquieta, cerrando los ojos y disfrutando esa extraña sensación que le provocaba espasmos en su vientre, apenas escucho a Leandro alejarse, puso el cerrojo en la puerta y saco de cajón una verga de hule, le unto lubricante, se acostó, abrió las piernas y comenzó jugar con el semen de su hermano clavando ese juguete en su coño, cerro los ojos y se imagino la verga de su hermano, por mas que se cogió con locura no alcanzo lo que quería, sintió que se moría, pensó que si ayudo a su hermano él también la ayudaría, así que se limpio con un pañuelo húmedo y bajo a la habitación de Leandro, ni siquiera toco, abrió la puerta y Leandro ya dormía placidamente, estaba desnudo, eso la mojo en un instante, así que solo se quito la bata pues ella también estaba desnuda

-Leandro... Leandro... despierta...

-Mmmmhhmmm

-Leandro... ahora yo soy la que te necesito

-Como?

-Si... ahora yo quiero que me ayudes

No espero su respuesta, se le encimo y empezó a besarlo, Leandro se puso como loco, quería llegar con su lengua a la traquea de Nora, eso le gustaba a ella, era su momento mas sublime, sentir el calor de un cuerpo, sentir la húmeda y tibia saliva de su hermano, la estaba volviendo loca, Leandro ya recorría cada rincón del cuerpo de Nora, cuando se encontró con sus pechos les dio una mamada estupenda, Nora sentía que su cuerpo se convulsionaba por el orgasmo ya alcanzado, quería mas, estaba gozando como una perra en celo, cuando Leandro empezó a mamar su coño ella abrió desmesuradamente sus piernas, quería que no le estorbara nada a la boca de su mamador, el estaba saboreando como nunca lo había hecho, había estado con mujeres mas bellas que su hermana, mas ricas, pero no las había gozado como lo estaba con la hembra que tenía a su disposición, era el momento adecuado cuando con exquisita maestría subió hasta su cuello y empezó a mordisquear sus oídos, a decirle que estaba muy rica, que era una hembra deliciosa, que lo volvía loco, cuando entro toda su verga en el coño de su hermana, ella subió sus piernas a los hombros de Leandro para elevar su pelvis, su cogida fue especial, le metía y le sacaba la verga hasta la cabeza para volver a profundizar, Nora ya había tenido tres orgasmos, así que esa mete y saca era la cúspide de su calentura, Leandro se volteo quedando abajo y Nora arriba, la levantaba de la cadera para profundizar mas aun su cogida, en ese momento Nora comenzó a moverse como una loca, restregaba sus labios contra la pelvis de su hermano, claramente se oía el chasquido de sus intimidades, Nora obtuvo su orgasmo junto con Leandro, que quedo desmadejada sobre el cuerpo de su hermano, Leandro solo acariciaba su cabello, le decía una y otra vez que la quería mucho y que le agradecía haberlo ayudado, Nora levanto el rostro, lo beso en los labios y le dijo que ella también lo quería mucho.

A partir de esa noche tuvieron varias cogidas riquísimas, el día era largo pero la noche corta, se cogían hasta el cansancio, llego el momento de cogerla por el culo, ella jamás había tenido la verga de su esposo en su ano, así que coopero y aunque le dolió mucho la primera vez las demás las disfruto como una perra, exploraron sus cuerpos, inventaron poses y disfrutaron las ya conocidas por ellos, todo era fabuloso para Leandro, fueron muy afortunados de haberse aprendido a coger, Leandro dejo su vicio porque su satisfacción estaba con su hermana, así estuvieron hasta que Amanda se recupero y pudo caminar, Leandro conoció a una mujer y se fue a vivir con ella, Nora nunca supo que su Amanda fue cogida también por su amante, Amanda se dio cuenta que no era virgen hasta que tuvo relaciones con su novio pero este nunca le reprocho nada.

Nora de vez en cuando va a visitar a su cuñada Amelia y cuando se puede se coge con su hermano, o el la busca, Nora aun no consigue quien supla a Leandro pero ya esta pensando en Roger, el novio de Amanda.

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