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Mi vecinita. Amante y puta

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Mi vecina se llama Karla. 

Ella es güerita, delgada, no tiene gran culo.

Pero si grandes pechos, ella es madre soltera. Tenía como tres años que había llegado a la nueva casa donde vivo con mi hermana y mis sobrinos. Yo estudio y mis ingresos sólo dependen de los trabajos vocacionales que tenga. Mi vecina tiene 21, yo 24 con novia...

Resulta que sólo existía amistad con mi hermana, yo no la conocía y la había visto un par de veces. Como yo reparo computadoras, mi hermana le había comentado eso a Karla. Esa chava trabaja en su casa, dado que la oficina de su papá es la planta baja de su casa, ahí administran una compañía constructora. Ella vive sola con su madre y hermana ambas solteras. Frente a mi casa.  

Yo no conversaba con ella, hasta que un día le envié solicitud por Facebook y sin dudarlo, enseguida me aceptó y me mandó un mensaje. De inmediato sabía que le había interesado y empezamos a charlar y después de dos días, me invitó a un almuerzo en su oficina. Ya saben, solos los dos. Ella sabía que tenía novia y después de horas de charla, al despedirla, me pidió de regalo un beso y me dijo “ya no me busques porque eres prohibido...”. Y le dije “ok”, yo absteniéndose de besarla pensando en mi novia... Y la besé.

Caí en el encanto de su hermosa mirada...

Pasaron los días y todos los días platicaba con ella, hasta que un día nos cayó la madrugada, ¡eran las 2 de la mañana! Platicando en la planta baja... y empezamos a besarnos y comenzar a tomarla de los enormes pechos... y se los mamé... como un bebé... Después de tanto cachondeo, le toqué las nalgas y me quitó la mano... asustado le pedí disculpas por ello y me dijo que había partes del cuerpo que no se tocan si no se va a llegar a nada. Quedé pasmado y estaba a punto de retirarme hasta que me lo volvió a decir y entendí... Por suerte llevaba un condón, yo sabía que todo podía pasar... Y se lo di, ella me dijo “¿qué es eso?” y se dio cuenta, se levantó y dijo “vamos a la oficina…”

Entramos y la empecé a besar y acariciarle los senos que estaban enormes y ella gemía fuerte... después me puse el condón y le retiré la ropa hasta que quedamos totalmente desnudos.... Y me acosté en el piso y ella me dijo, que no quería saltar porque tenía problemas de espalda, la acosté y apoyado con los brazos comencé a penetrarla como si hiciera lagartijas... (levantamiento en piso) (push-ups).

Ella sorprendida me dijo “como aguantas tantooo...”. Y me abrazaba y besaba. Me decía ¡que tenía 2 años que no cogía desde que quedó embarazada...!!! Le dije “estoy yo para darte diario...”. Y gritaba “¡sí!”.

Pasaron más días y me quedé a dormir en su cuarto, sin que su mamá dijera nada y mi hermana menos, total estaba enfrente de casa. Ahí volví a cogerla y me quedé hasta el siguiente día.

Yo sorprendido le dije “eres mi amante”, ella aceptó sin duda alguna, el sexo era muy rico para los dos. Dormía cada dos días en su casa y el fin de semana en casa de mi novia.

La cogida número 4 fue espectacular, se decidió a mamarme la verga. Se fue agachando y sacó mi verga y la mamó hasta que terminé en su boca. Me dijo “mi cuerpo es tuyo haz lo que quieras”. Otro día, la agarré de la cabeza, acostado de lado, comencé a meterle la verga por la boca despacito y rápido y iba en aumento, llevaba como 5 minutos de menear su cabeza, volví a eyacular dentro de su boca, ella sólo escupía el semen, pero yo terminaba rendido.

Llevamos meses de sexo a todas horas, le hacía de todo. Un día, sólo de aburrimiento en la cama, la desnudé e hice que mi hiciera una rusa con sus pechos, obvio la terminé cogiendo de perrito y me dejó ver su culo y se lo llené por fuera de leche porque siempre usaba condón.

Meses y más meses de sexo hasta que me harté de engañar a mi novia y la mandé a volar.

La hice sufrir y sufrí yo… fue una experiencia horrible porque engañé a una persona para satisfacer mi apetito sexual, pero después no me arrepentí. Ella siguió su vida y yo la mía.

Pasó más de un año y ella se juntó con un joven divorciado. Y se fue a vivir con él.

No me dolió en lo más mínimo, pero ella aún sentía algo por mí. Me mandó un mensaje por wat para saber cómo estaba y platicamos y le dije que por que se había ido con ese perro. Ella me dijo “porque tú ya no quisiste seguir” ... la puse a prueba para saber qué tan dispuesta estaba y le ofrecí salir y me dijo “a donde” y le dije “a un lugar donde no haya nadie...” Me dijo “ok si acepto”.

Seguiré más adelante con la historia.

(9,30)