Esta es la primera vez que escribo un relato. Yo soy una chica de 18 años, alta y delgada, pelos castaños oscuros y largos, mi novio tiene 19 años y también es alto, delgado y un físico bien contorneado ya que frecuenta al gimnasio, llevamos 8 meses de noviazgo.
Lo que les voy a contar es lo que sucedió en su auto cuando salíamos de una fiesta de cumpleaños de una amiga:
Ya era un poco tarde y me acordé que mi papá me dijo que volviera a las 3:00 en punto y ya eran las 3:20, cuando me acordé le dije a mi novio que nos fuésemos ya porque ya era un poco tarde y que mi papá me pondría de castigo si no llegaba a la hora que él me dijo, aunque ya hayan pasado veinte minutos...
Nos dirigimos hacia el estacionamiento donde dejamos su auto y nos fuimos, nos íbamos acariciando las manos como siempre lo hacíamos, hasta eso nunca había pasado nada de intimidad entre nosotros, nada más los famosos besos y abrazos... aunque él siempre había intentado tocarme y yo sé que él quería ya hacer el amor conmigo, pero yo no se lo dejaba porque estaba un poco insegura... Bueno continuando, nos acariciábamos las manos mutuamente y en cada semáforo nos besábamos en la boca, a mí siempre me encantaron sus besos porque empezaba lento y terminaba en un besos apasionado con su lengua que me entraba y salía, nuestros besos siempre fueron mojados y a la vez mi cosita se mojaba también por la excitación que sentía..
Cuando ya estábamos por llegar a mi casa mi novio paró su auto y me dijo que en tres días cumplíamos 9 meses de estar juntos... y que cada vez me desea más... Yo lo abracé y le susurré al oído:
—Yo también bebé y quiero estar contigo para siempre, sos mi primer y único amor.
—Te amo bebé... —me dijo él.
Me dio un beso con toda su fuerza, movía su boca junto con la mía de una manera como si quisiera comerme, y sus manos estaban en mi cintura hasta que después fueron entrando bajo mi blusa, yo estaba mojada ya y sentía unas pulsaciones riquísimas en mi cosita, nunca las había sentido con tanta acentuación como esa vez, después de un rato me miró fijamente a los ojos y me dijo:
—Amor, dejame chupar tus pechos que seguro deben ser riquísimos, ya no aguanto más, te quiero comer completita.
Cuando me dijo eso yo me sentí re excitada y sin pensarlo dos veces me saqué mi blusa y dejé mis pechos al aire... no son grandes pero están bien paraditos... cuando mi novio los vio puso una cara de hambriento y se acercó y me empezó a succionar suavemente mis pezones... uff!! Me sentía en el cielo, era la primera vez que un hombre me chupaba mis pechos, es lo máximo, alternaba uno y otro pecho y a veces aumentaba la velocidad de sus chupadas, yo no hacía más que gemir y apretarle la cabeza contra mis pechos como para que no dejara de chuparme nunca... (yo estaba sentada y el arqueado hacia mi), y con su otra mano me tocaba mis piernas por encima de mi pollerita que llevaba puesta, una pollerita de jeans cortita.
Después de chuparme mis pechos empezó a subir y me beso en la boca de vuelta, después bajaba a mi cuello, yo ya estaba empapada, no pensaba en nada más en ese momento, hasta me olvidé que tenía que llegar a mi casa... Ese momento era único. Acto seguido mi novio me dijo que nos fuésemos a la parte trasera del auto y así lo hicimos, ya que había más lugar allí, él medio se recostó y yo frente a él me senté con mis piernas abiertas, lo empecé a besar el cuello, lo lamía y le mordía de vez en cuando él me tocaba mis nalgas ya que estaban a su disposición por la posición en que estábamos. Después le saqué su camisa negra que llevaba puesto y uyy que rico pecho se le veía, le acaricie y le empecé a besar por todas partes, me bajé de encima de él y me arrodillé en el plan del auto y el quedo con sus piernas abiertas hacia mí, yo le seguí besando hasta que llegue a su vientre y me excite mucho cuando mi el caminito de pelos que tenía y el acariciándome los brazos me dijo:
—Si sigues ese caminito llegarás junto a mi amiguito que está por volar de tan ansioso que está porque le des un cariñito por lo menos...
Yo no sabía qué hacer, era la primera vez que me decía eso, entonces él me dijo que me mostraría a su amiguito. Se bajó el cierre de su pantalón y se bajó su bóxer y su pija saltó... ¡yo quedé roja! No sabía si mirar o no, me sentía avergonzada y a la vez curiosa. Era grande y de color rosadito, él me agarró una mano y me llevó hasta su cosa para que lo toque, me dijo:
—Toca mi amor, hacé lo que querés con él, es todo tuyo...
Yo le toque por todos lados y sentía que estaba calentita. Y después vi que salía de la puntita un líquido transparente… era el líquido pre seminal, quise oler y me acerqué…
—Meté en tu boquita bebé, chupame... ya no aguanto más...
Abrí mi boca y metí la cabeza y mi novio me puso una mano detrás de mi cabeza y me movía hacia el para que le chupe más y más.
—Mete todo, hasta el fondo amor... quiero que sientas hasta lo más profundo de tu garganta mi pija que desde hace 9 meses está esperando por ti... dale amor, chupamee... te adoro…
Yo estaba re excitada con todo lo que me decía, mi cosita estaba mojadísima y bajaba y subía mi boca en su pene, cada vez más rápido. Nunca me imaginé que chupar una pija fuese tan rica, sentir algo en la boca que entra y sale es lo mejor. Después paré un momento y bajé a sus huevos, no aguanté y empecé a chuparlos... ¡ufff! Eso me calentó aún más y el escuchar los gemidos de mi novio con más fuerza me hizo sentir un cosquilleo por toda mi región pélvica. Hasta que en un inesperado momento me largó su semen en mi cara, ya no aguantó más, también era riquísimo sentir su semen caliente.
Nos miramos y nos besamos, nos quedamos abrazados un rato mientras que nos dijimos que ha sido la más hermosa experiencia que hemos tenido. Pero no termino ahí, él me dijo:
—ahora me toca a mí darte el placer que te mereces.
Me sentó en el asiento y él se arrodillo ante mí me quitó la tanguita que tenía, me colocó mis piernas sobre sus hombros y con una mano me abrió mi cosita mojada...
—ayy estas toda mojadita mi nena... que gusto!
Se acercó y le empezó a lamer los bordes de mi cosita, ¡uyyyy!! Yo sentía morirme, era lo mejor sentir su lengua, sus labios en mi cosita... me pasaba por todos los lados su lengua hasta que llego a mi virginal agujerito y metió su lengua lo más profundo que pudo, metía y sacaba como si me estuviese cogiendo... yo le apretaba su cabeza contra mí... me chupó mi clítoris y tuve un orgasmo intenso... cada vez sentía que me mojaba más... y así me siguió chupando un buen rato hasta que ya no di más. Nos volvimos a besar, y yo sentía mis jugos en sus labios... era riquísimo.
Miré mi reloj y eran las 4:30. ¡Dios mío! Mi papá me va matar le dije. Nos vestimos y nos fuimos, diciéndonos por el camino que nos amábamos y que ha sido maravilloso lo que hicimos y esperando que la próxima vez ya lo haríamos todo, con penetración y tres días después al completar los 9 meses de estar de novios lo hicimos, fue muy rico, pero eso les voy a contar en otra ocasión.
Me despido de ustedes, ojalá que les haya gustado mi relato.
Besos