Todo comenzó en las vacaciones de Semana Santa, no soy muy afecto de salir soy mas un chico reservado, así que decidí irme a la casa de mi abuela en el rancho donde todo es tranquilidad. Mi nombre es Marcos tengo 22 años, mi estatura es de 1.75 m, tengo cuerpo atlético ya que practico fútbol y hago algo de ejercicio aparte.
Llegaron las vacaciones y le llame a mi abuela para ver si podría pasar las vacaciones en su casa, ella accedió y dijo que no había problema ya que ella pasaba sola, mi abuela Maura es una mujer de 72 años algo arrugada por la edad, tetas grandes pero ya caídas por su edad, en sus juventud por lo que se ve en fotos las tenía muy bien, tiene nalgas y piernas normales.
Llegó el sábado por la mañana y le dije a mi madre que me iría a pasar con mi abuela las vacaciones que después regresaba, mi madre dijo que no había problemas que en unos días nos echaba una vuelta, tome el carro y salí rumbo a casa de mi abuela.
Llegue el sábado a la hora de la comida mi abuela había preparado un excelente caldo de pollo con arroz, comimos juntos y pase a instalarme en uno de los cuartos.
Así pasó el día, a la mañana siguiente me desperté temprano y mi abuela tenía ya listo el desayuno huevo con tocino y tortillas echas a mano un manjar de los dioses, después del desayuno mi abuela dijo que se metería a bañar para ver si la podia llevar un rato más a unos mandados y le dije que si.
A: marcos puedes venir ayudarme con esto, por favor
Y: claro deja voy a tu cuarto
Ahí estaba mi abuela, parada frente al espejo solamente en calzoncillos y tratándose de poner el sostén.
A: vamos marcos ayúdame a colocarme este sostén.
Mi abuela sin morbo hay estaba parada,
Pero al verla con esos calzones blancos y el sostén aún sin poner me llamo mucho la atención, no podía dejar de mirar sus tetas grandes y caídas, por lo que para que no viera mi excitacion rápido le puse el sostén y me salí, le dije que me bañaría.
Me metí al baño y no me sacaba a mi abuela de la cabeza por lo que tuve que recurrir a masturbarme para bajarme un poco la calentura.
Salimos a los mandados y yo no dejaba de mirar a mi abuela con cierto morbo y ganas de mamarle las tetas y por qué no tener un buen revolcón.
Llegó el día lunes y al momento de bañarme me di cuenta qué hay estaban unos calzone de mi abuela, dirán que estoy enfermo pero los tome y comencé a olerlos y acariciar mi verga con los calzones, hasta llegar y vaciarme en la taza del baño. Estaba decidido a querer cogerme a mi abuela, pero no sabía cómo llegarle. Así que ese día después de la cena, cuando estábamos en la sala, comenzamos a platicar mi abuela y yo.
Y: abuela en sus tiempos de joven usted bailaba con mi abuelo
A: claro que si mi marquitos, no mas escuchábamos música de banda y nos parábamos a bailar.
Y: abuela no creo que usted sepa bailar Banda
A: ay no sabes lo que dices
Y: a ver muéstreme
Puse algo de música en mi celular y comenzamo a bailar, se movía bien para su edad pero como la tenía pegada a mi sus tetas me empezaron a excitar, la agarre de la cadera y me pegue más a su cuerpo quería que notara mi ereccion, mi pene de 18 cm y bastante grueso comenzaba a cobrar vida, y más me pegaba mi abuela al cuerpo quería que conociera mi miembro, después de varias canciones nos separamos
A: qué te pareció para mi edad no está nada mal
Y: la verdad que baila muy bien
A: bailo y hago otras cosas muy bien
Y se comenzó a reir
Y: qué cosas abuela?
A: olvídalo yo sola me entiendo, bueno qué quieres cenar mijitooo
Y: a usted, perdón lo que usted quiera hacer
A: qué dices? Pues yo se hacer muchas cosas, que quieres que te haga.
Y: no sé usted dígame qué quiere hacerme
A: pues yo te hago lo que me pidas,
Sentía que nuestra conversión estaba tomando otro giro.
Te haré algo rápido para que no te duermas con la panza llena.
Y: pues puedo cenar algo bien y ya con algo de ejercicio se me baja
A: te pondrás hacer ejercicio
Y: yo decía otro tipo de ejercicio
A: a cual te refieres
Y: vamos abuela hay que cenar
Mi abuela hizo molletes con una rica salsa mexicana.
Nos dimos las buenas noches y cada quien a su cuarto.
Me fui y me meti al cuarto pero de la calentura que llevaba no le puse seguro al cuarto, y estaba masturbandome cuando mi abuela abre la puerta, pero me alcanzo a tapar con la colcha.
A: disculpa hijo no podía dormir, pero estás ocupado
Y: no pasa abuela qué pasó
A: se me fue el sueño pero qué es eso que vi mi niño.
Y: nada abuela deja me cambio y platicamos
Sin decir nada se sentó en la cama y comenzó a tocarme mis pies y subió hasta que me dijo que me destapara que podía ayudarme a terminar lo que estaba haciendo.
A: mijitooo es algo grande y grueso tu pene
Comenzó agarrarlo y a darme pequeñas masturbadas.
Yo tenía los ojos cerrados y la cabeza hacia atrás disfrutando lo que hacía con sus manos.
A: esto le gustaba que le hiciera a tu abuelo.
Se agachó y se metió el pene a su boca para hacerme una mamada.
La agarre de su cabeza y comencé a disfrutar de la mamada que me daba
Y: y qué más le gustaba a mi abuelo.
A: le gustaba que me tomara su lechita caliente
Y: quieres probar mi leche
A: deja ordeño este pene para ver qué tal sabe la leche.
Y seguí haciendo lo suyo, manándomela y masturbandome la verga, la verdad que si lo hacía muy bien, le hice saber que ya venía la leche caliente, aumentó el ritmo de la mamada hasta que salieron mis chorros de leche.
Y: qué te pareció mi leche abuela
A: muy buena, tenia muchísimo tiempo que no probaba lechita caliente, pero no me digas abuela, dime Laura, ahora te toca a ti comerte mi vagina, tú Abuelo lo hacía muy bien a ver si tú lo superas.
Se acosto le subí su bata que usa para dormir y le baje sus pantaletas, mostró su vagina peluda, un poco oscura, pero sin pensarla me deje ir sobre ella hacerle un excelente sexo oral, lo disfrutaba mucho, le conté como dos orgasmos hay estaba Laura siendo feliz.
A: creo que superaste a tu abuelo, ya cobro vida tú pene?
Y: ya está listo para la acción
A: bueno a mi me gusta que me suban mis piernas a sus hombros y me den duro vamos a ver qué tal.
Le agarre sus piernas y fui acomodando mi pene a la entrada de su vagina.
Y: despacio que ya tengo mucho sin tener una verga en mi vagina, así que ya soy señorita de nuevo, no me vayas a lastimar
La agarre con delicadeza como si fuera una mujer Virgen, le fui introduciendo mis 18 cm hasta que su carita de sufrimiento se fue quitando y se volvió cara de placer, le di durísimo hasta que ella terminó.
Y: lauritaaa ahora te toca montarte arriba de mi, así que móntate y quítate esa bata que te quiero mamar estas tetas
Y así fue me mostró tremendos melones y estaban ahí para que yo me los comiera y así fueron las cosas, mamaba esas tetas como un loco, mi abuela brincaba como una joven los dos terminamos al mismo tiempo con un largo orgasmo. Nos acostamos.
Y: qué gran noche
A: y esto apenas empieza no sabes cómo me gusta tener sexo y no sabes todas las sorpresas que tengo
Y: ufff yo encantado
A: bueno vamos a mi cuarto que como eres mi hombre tienes que dormir con tu mujer.
Se estaban convirtiendo en mis mejores vacaciones que había tenido.
No olviden sus comentarios para ver si les gustaría que les platiqué sobre los demás días y también valoren el relato. Su gran amigo golozo69.