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Estrenando su culito

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A una ex novia y a mi nos gustaba ir al cine a las funciones de matiné, ya que no había mucha gente y eso se prestaba para darnos una buena manoseada, y algunas veces porque en mi casa estaba alguien.

Les describo rápido a mi ex, 1.65 de altura, piel clara, ojos claros, cabello rizado, labios carnosos y lo que más me gustaba de ella y no solo a mi, si no a muchos amigos y a los que la veían en la calle, sus piernas bien torneadas y firmes, acompañadas por un par de nalgas muy ricas, gracias a que jugaba basquetbol. Es más la conocí en la canchas, ya que yo también jugaba basquetbol.

Ella y yo, ya habíamos tenido sexo y vaya que varias veces en varios lugares (que luego les contaré), aunque nunca habíamos tocado el tema del sexo anal, y yo ya le traía muchas ganas a su culito, pero siempre me decía que no o que no sabría si le dolería mucho o le gustaría.

Total, que ese día en el cine, ya se imaginarán, antes de que comenzará la película, nos besamos, nos tocábamos por todos lados, ese día ella iba vestida con una blusa de licra negra que le marcaba muy rico sus tetas y pues para mí mejor, ya que le podía tocar y sobar sus tetas sin ningún problema, mientras ella me sobaba mi pene por encima del pantalón, la verdad ya estábamos muy excitados los dos, como pude le metí la mano entre su pantalón, que era de mezclilla y como les mencioné, gracias a sus piernas y a su trasero, le gustaba usarlos ajustados y que se le marcara bien, al meter la mano note que su blusa se abrochaba exactamente en la entrada de su vagina, esta blusa no la conocía yo y, en ese momento me dijo que se la había regalado una tía, note que ya estaba húmeda y que aparte se había puesto una diminuta tanga que también había sido regalo, y me dijo que esa era una sorpresa que me tenía para ese día.

Bien, la película comenzó y pues la verdad la trama estaba muy lenta al principio y con lo calientes que estábamos, seguimos con el manoseo y ella aprovecho para sacar mi pene del pantalón y seguir jugando con él, aprovechando que el líquido pre seminal ya hacía su presencia, me lo distribuía al rededor del glande y me seguía masturbando, en fin era tanta nuestra calentura que la verdad no poníamos mucha atención a la trama de la película, hasta que empezó en la pantalla una toma, donde un sujeto que acababa de salir de la cárcel (creo), e iba en busca de su mujer, la encontró en su casa y la comenzó a forzar para tener sexo, mi novia se detuvo y comenzamos a poner atención.

En la pantalla veíamos que el sujeto logró convencer a su mujer de tener sexo, vaya que lo hicieron buen rato y varias veces en su reencuentro, al tratar de que tuvieran sexo anal, ella se niega y él le dice que se lo mame y que se relaje, mientras tanto mi ex seguía tocando e y yo a ella pero ya sin tanta atención hacia nosotros, sino más bien estábamos ahora si poniendo atención a la película. En la película el sujeto logra meterle su pene en el ano de su mujer y a ella le duele un poco y después lo disfruta. En eso que mi ex me dice:

I: si te gustaría hacérmelo así?

Yo: a que te refieres?

I: por el ano, todavía te haces el que no me entendió, si bien que se nota que no se te baja la calentura.

Yo: pues que quieres si también no me dejas de tocar y aparte, ya sabes que te lo eh pedido varias veces.

I: ok, terminando la película nos vamos a tu casa.

Yo: y si mejor nos vamos ya? ya quiero sentir tu cuerpo y poder comerme tu culito.

I: está bien, solo arreglemos nuestras ropas y vámonos. Porque tal vez me arrepiento.

No me tuvo que decir dos veces, porque inmediatamente nos acomodamos la ropa y nos salimos de la sala, camino a mi casa me decía que se sentía aún excitada por ver esa escena y que ya quería sentir mi pene en su ano. Acelere el carro y no tardamos más de 10 minutos en llegar a mi casa.

Inmediatamente al llegar a mi casa, verifique que estuviera sola y nos metimos a mi cuarto. Rápidamente nos desnudamos y comenzamos a besarnos, si de por sí ya veníamos calientes del cine, le tocaba sus tetas, se las apretaba, se las besaba, bajaba mi mano por su espalda y le tocaba ese rico par de nalgas, mientras seguía mamando sus tetas, comenzaba a sentir que su cuerpo se relajaba y ella emitía unos ligeros quejidos y me decía que no parara, la acosté en la cama y ella abrió sus piernas para recibir mi pene dentro de su vagina, de lo lubricada que estaba, por el faje del cine y de la escena que vimos, fue muy fácil que mi pene entrara, pero como me gustaba verla disfrutar, solo le metía la cabeza y se lo sacaba, sabía que le gustaba mucho que le hiciera eso, pero era tanto su excitación que me dijo que se lo metiera todo, y así fue, se lo metí todo y comenzó a moverse, como solo ella sabía, subía y bajaba su cadera, se quedaba quieta, y lo repetía, yo aprovechaba para mamarle sus tetas y tocarle sus piernas, le subí u a pierna a mi hombro y comencé a acelerar el mete y saca, cuando sentí que tuvo un orgasmo y sus fluidos comenzaron a escurrir entre sus nalgas y mis piernas.

I: ahora me toca a mi, (se recostó boca abajo y me dejó admirar su trasero y se separó sus nalgas con ambas manos).

Yo: ahora si va ser mío tu culito.

Le bese sus nalgas y se las abrí, le pasaba la lengua de su vagina a su ano, aprovechando nuestros fluidos, así estuve un rato a hasta que me dijo:

I: ya métemelo, pero despacio, ah y ponte el condón (por la calentura que teníamos solo lo habíamos puesto a un lado de la cama).

Yo me lo puse y le dije que se lo metería hasta donde ella se sintiera bien.

I: ya hazlo o me voy a arrepentir.

Primero se lo metí a su vagina y le di unas tres o cuatro metidas, para que se lubricara un poco, mientras ella levantaba su cadera y comenzaba a moverse, como sabía que me gustaba cogérmela de perrito, seguimos así un rato y me dijo:

I: ya métemelo por el culo!! Que tengo otro orgasmo.

Así como estaba, de perrito comencé a meterme poco a poco, primero se puso un poco tensa y le dije que se relajara; así me duele mucho, mejor yo me lo meto sola. Así que me recosté y ella se subió en mi, una de las mejores vistas que uno puede tener, tu mujer dándose unos ricos sentones, así lo hizo ella, se puso en cuclillas sobre mi y dirigió mi pene a su ano con ayuda de su mano derecha y con la izquierda separaba más sus nalgas.

poco a poco se lo fue metiendo, yo veía su cara, al principio entre de dolor y de nervios y después que ya llevaba la mitad de mi pene dentro, se detuvo y me dijo que se quería acostumbrar a esa nueva sensación, nos quedamos así unos segundos, mientras yo tocaba su clítoris con mi mano y ella comenzaba a cambiar su rostro de dolor al de satisfacción, cuando siento que sus nalgas ya estaban completamente sobre mis piernas, dio un ligero grito y comenzó a moverse de arriba a abajo, al principio lento y cada vez más rápido, ella llevaba el control de la rica ensartada que le estaba dando, yo aproveché para sobarle y apretar sus tetas.

Yo sentía como me apretaba con su ano y luego lo soltaba, siguió así por unos minutos cuando le dije que me iba a venir, entre sus quejidos y sus pequeños gritos que daba me dijo, yo también, ella se vino primero, dejándome ver como escurrían sus fluidos sobre mi, ya no pude aguantar más y me vine, a lo que ella me dijo, ah que rico se siente que te vengas en mi culo, acomodó su cuerpo para recostarse sobre mí, y dejó que mi pene se saliera de su culo.

Yo: en verdad que ya quería sentir tu culito así.

I: pensé que me dolería más, pero en verdad que lo disfrute mucho.

Nos quedamos así un rato, hasta que escuchamos que alguien entraba a la casa, era mi hermana que llegaba de su trabajo, nos vestimos lo más rápido que pudimos, medio recogí mi recamara y nos fuimos a la cocina.

Espero que les guste, y después les seguiré contando de otras veces que lo hacíamos donde nos agarraran las ganas.

(9,18)