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La rebelión de mi madre (VI): La abstinencia de mi madre

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Anteriormente: Me masturbé con la tanga roja de mi madre que colgaba en la canilla de su baño.

Después terminé con Andrea, la amiga socia de mi madre en mi departamento cogiendo de manera desenfrenada.

Andrea, a diferencia de Maribel, era una mujer independiente, sus hijos ya eran grandes, era divorciada hace muchos años.

Mi madre tenía de amigas a dos putas, una hipócrita y la otra deliberada, no sé como pero espero que mi madre no siga el consejo de estas dos amigas.

Al menos Maribel no sabía que yo era el hijo cuando me cogió. Andrea solo apeló a que guardemos el secreto.

Al siguiente día tuve que despertar a Andrea, era un día hábil. Fue incómodo tener que decirle que debía salir conmigo e irse del departamento, pero así ocurrió.

Andrea, se viste y con el maquillaje corrido del día anterior se sube en su auto, estacionado detrás del mío.

Me tira un beso desde adentro mordiéndose el labio.

En ese momento me dieron ganas de decirle que vayamos a hablar y dejemos las cosas en claro, lo que menos quiero es que una cincuentona se me enamoré y crea que quiero un noviazgo.

Pero bueno, así se dieron las cosas. Se va en su auto y yo en el mío al trabajo.

Pasan los días y a mitad de semana por la noche mientras miraba un partido de fútbol en repetición me cae una notificación de la aplicación de citas.

Cuando abro, veo con horror que es mi madre quien me envía un corazón a mi perfil falso.

Lo falso era que no estaba mi cara, sino que era la de uno parecido a mi que encontré en el buscador.

Las manos me temblaban, transpiraban, no sabía qué hacer.

Jamás me imaginé que mi madre seguiría buscando por estas aplicaciones y tan jóvenes.

Le devolví el corazón y se activaron sus fotos privadas.

Nada del otro mundo, pero más sexies, minifaldas, escotes, boca roja, medias y tacos por doquier.

Inmediatamente al dar el corazón, me escribe un mensaje:

"hola, como estas, me llamó la atención tu perfil"

Le respondo:

"hola, ¿cómo estás? ¿qué te llamó la atención?"

Y ella contesta:

"no sé, jaja, solo me llamó la atención, no suelo dar corazones a tan jóvenes, pero hay algo en el tuyo que me gustó"

Mi corazón palpitaba furioso, una mezcla de nervios, miedo y excitación pasaban por mi cuerpo.

"Espero que no te moleste que una señora mayor te hable" sigue conversando mi madre.

Le respondo:

"para nada, es mas, me parece agradable"

"ah bueno, solo agradable, como simpática la vieja jajaja" me acorrala mi madre.

"no, para nada, es una mujer muy atractiva, no quería parecer irrespetuoso" intento arreglar la situación.

La conversación se calma y termina en tono amistoso, deseándonos buenas noches.

Al día siguiente estuve pensando todo el día en cómo haría para deshacerme de mi madre en la aplicación sin que le cause un efecto rechazo y se deprima.

Después de todo, estaba aún fresca la herida de la separación de mi padre, quien la engañó con una veinteañera.

Al llegar la noche siento la notificación, mi madre escribe en la aplicación.

"Buenas noches, cómo estás"

Le respondo que estoy bien, cansado del trabajo.

Me pregunta en qué trabajo, le invento algo y trato de salir de esa entrevista.

Me pregunta si tengo pareja, le contesto que sí, que solo era un tramposo que era infiel.

Eso tal vez la disuadiría de seguir hablando, le recordaría a su padre.

Pero no ocurrió eso, siguió hablándome.

Me cuenta que está separada, que ahora es libre, pero está saliendo de a poco, tratando de recordar lo que era ser independiente y soltera.

Le pregunto si está saliendo con alguno de los que conoce en la aplicación. Me responde que aún no, que todavía no consigue alguien más que para un café.

Yo preguntaba por el café, pero ella sola dijo que "nada mas que un café", o sea que está considerando tener sexo con alguno.

Pregunto entonces si no ha estado con nadie más desde que se separó.

Me confiesa que incluso cuando estaba casada no tenía relaciones con su esposo (mi padre) desde hacía años.

"y recién hace un par de semanas pude volver a autosatisfacerme" me dice mi madre.

No sabía que decir, no esperaba tal confesión. Pero le comento que está bueno que disfrute de su cuerpo.

Ella sigue con su relato:

"El domingo último venía estimulada porque una de mis amigas me cuenta todo lo que hace con chicos como vos que conoce y se los coge."

"yo me hago la recatada, que me horroriza pero me estimula escuchar todas las historias de sexo de ella."

"este último domingo estaba muy caliente, y después de entrenar quería masturbarme, pero no pude porque llegó mi hijo temprano y me interrumpió"

"Me fui a bañar y mientras me duchaba me metí los dedos, yo soy muy gritona, pero tuve que hacer gritos sordos, mi hijo estaba en el comedor"

"recordaba las historias de mi amiga cogiendose pendejos, pero no me alcanzaba, así que en lugar de lavar mi tanga roja con la que hice gym, solo la use para secar mis labios vaginales y estimular mi clítoris"

"siento ruido afuera y me distraigo de lo que estaba haciendo, el miedo de saber que mi hijo podría saber lo que hacía me hace salir de la ducha sin terminar y lavo la tanga rápidamente para que no quede rastro de nada"

"me puse una toalla y salí a la cocina, allí me encuentro con mi hijo esperando, me doy cuenta de que de tanto pensar en autosatisfacerme me olvidé de sacar la carne del freezer para almorzar"

"de tan apurada que salí no me di cuenta que la toalla atada a mi escote quedaba muy corta de abajo, aún tenía gotas de agua cayendo por mis piernas, y sentía en cada paso como el aire pasaba entre mis nalgas"

"Mi hijo me dice que él va a comenzar a cocinar con lo que encuentre, que me vaya a vestir, evidentemente me vio por debajo de la toalla"

"me voy a dormir la siesta después de comer, no me puedo dormir, siento que mi hijo se mete al baño para ducharse, me entra pánico, deje la tanga colgando de la canilla"

"me levanto pensando en que hacer para entrar y sacar la tanga pero ya es tarde, se escucha el agua caer, mi hijo ya descubrió mi tanga roja"

"me asomo por la mirilla para ver qué hace, mi hijo parece correr la tanga con cierto asco y lo deja en el extremo de la pileta"

"No tomé en cuenta que ponerme a ver qué hacía con la toalla me permitió ver a mi hijo desnudo, ya era todo un hombre, increíble que yo le haya dado la teta y ahora era todo un señor"

"Verlo desnudo me causó cierta electricidad en mi interior, vi su miembro, mucho más grande que el de su padre, colgando se bamboleaba, por debajo unas bolas grandes parecían querer competir con su pene en protagonismo"

"me arrepentí de lo que estaba mirando y me fui a mi cuarto"

Respiro aliviado, sabiendo que mi madre no vio lo que hice con su tanga roja.

Ella sigue relatando:

"en mi cuarto me desnudo y me meto los dedos como hace mucho tiempo no hice, y mi mente había fijado la pija de mi hijo para estimularme, la única que había visto durante mucho tiempo"

"moje toda la sabana, mis dedos y temblando me quedé dormida mientras seguían los escalofríos de la excitación en mi cuerpo"

"me quede dormida, y al despertarme, fui con culpa a ver a mi hijo en el living, él se adelanta y prepara café"

"siento vergüenza y culpa por lo que hice, pero lo necesitaba, hacía mucho que no me estimulaba sola"

"Mi hijo tiene 25 años, como vos, y es parecido a vos, tal vez por eso me llamó la atención tu perfil, y tal vez llegó la hora de volver a sentir lo que sentí ese domingo pero ya no autoestimulado, sino con otra persona..."

¿Qué les va pareciendo hasta acá? Comenten que todo se tiene en cuenta para el relato.

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