Nuevos relatos publicados: 0

La confesión del Padre Jorge

  • 6
  • 8.346
  • 9,70 (23 Val.)
  • 10

Era una mañana de domingo… tocaba la infaltable misa semanal… para mi era terrible asistir, el padre era un viejo latero que apenas y hablaba… no se le entendía nada de lo que decía…. Pero por mis hijos asistía… la cosas es que ese domingo las personas estaban hablando mas de lo normal… algo pasaba, no me aguante y pregunte, - que paso?- dije… - pero como no supo esta enfermo el Padre?- … la verdad no tenia idea, y pensé que era un alivio… lo único que quería que el nuevo cura no fuera tan fome… pero bueno… nada que hacer. Cuando estaba sentada me distraje por un momento con un hombre moreno muy alto, de caminar firme y hombros anchos…  su rosto era calmo pero con una mirada profunda y muy intrigante… nunca lo había visto… las misas hubiesen sido mas entretenidas si fuera siempre… de pronto uno de mis hijos me hablo y lo perdí de vista… ufff… era lo único bueno que me paso ahí.

La misa ya estaba por comenzar… cuando en ese momento miro al altar y tal fue el asombro que sentí al ver a aquel moreno con el traje del padre…no lo podía creer…  empezó la misa… yo no pude dejar de ver esa mirada tan prohibida.. esos hombros fuertes que sostenían una sotana que ocultaba todas las partes que quería conocer…. Mmm… no podía creer que miraba al padre de mi iglesia con tantas ganas….en ese momento… nuestras miradas se cruzaron… no puede ser…. Era mi imaginación o ese hombre me miro con deseo???...ufff… la misa se hizo muy corta… y después quienes quisieran podían confesar sus pecados con el padre… claro la fila era mas larga que ningún día… pero yo necesitaba acercarme a ese hombre… o padre o cura… que importaba… pero estaba con mis hijos… tampoco podía esperar mucho… así que solo pasare rápido por la confesión y volveré después sola y con mas tiempo…. Al momento de llegar donde el padre sentí su voz… profunda y potente… mmmm…. Sentí mas deseos… al arrodillarme frente a el, sentí como tenia de húmeda mi entrepierna imaginando mil cosas… como confesarle al padre que lo deseaba de esa forma tan carnal… no podía… entonces empecé a confesar tonterías que nada importaban… y el me miraba a los ojos por entre los diseños que tenia la puerta del confesionario… ooohhh… mas húmeda sentía mi entrepierna… entonces me pregunto si me sentía incomoda por que el fuera nuevo… yo le dije que solo era cosa de confianza… y ahí … uuuu… de nuevo esa mirada… de su boca salió una frase que marcaria mi día…. – hablemos solos para que sienta mas confianza- … me dijo que fuera a la oficina parroquial al otro día y ahí me atendería.. – Padre cual es su nombre?- … pregunte… y el con su bella voz me dijo – Jorge… soy el Padre Jorge-… y me fui.

Al día siguiente deje a mis hijos con una amiga y acudí a mi confesión… la encargada de la oficina tenia la orden de dejarme entrar a la casa parroquial… pues el padre dijo que yo me sentiría mas tranquila allí… y si puede ser era una casa muy acogedora… sentí mucha curiosidad por ver la cama de un Padre… y me acerque a una pieza cuya puerta estaba entreabierta… sentí curiosidad y mire… oooohhhhh… tal fue mi sorpresa a ver que era el Padre Jorge desnudo… después de un baño… su piel húmeda… las gotas de agua corrían por su pelo llegando al su cuello y deslizándose por esa exquisita espalda… y sus nalgas eran increíbles… firmes y trabajadas … no pude evitar sentir excitación… y ocurrió lo inevitable… me empecé a tocar… mis pezones estaban duros  de placer… y se hacían notar debajo de esa blusa… luego mi mano empezó a bajar … mmmmm… que placer sentía al saber que era un hombre prohibido… mis manos tenían vida propia y así … sin mas ni mas… me vi masajeando mi clítoris y retorciéndome de pasión… era tal mi éxtasis que no pude ver lo que pasaba… fue entonces cuando abrí mis ojos para seguir contemplando ese monumento de cuerpo, y lo veo de frente a mi mirándome impávido… viendo como se movían mis manos…  mi vista bajo hacia su pene… el cual estaba erecto al ver la escena que yo le mostraba… no lo pudo evitar… es Padre pero hombre finalmente… el que me viera así de excitada y saber que provocaba placer me calentó aun mas y ciertamente a el también… miraba al cielo preguntando por que mandas estas pruebas… pero no resistió mas… llevo su mano a su pene el cual estaba erecto… muy duro y se notaba…para el fue algo nuevo… nunca antes se había tocado con tal lujuria…. Y yo… era testigo de tan rico momento…. Cuando el movía su mano de arriba abajo casi por instinto ya no aguante, me desvestí y me acerque… esa seria la primera vez que veía el cuerpo de una mujer excitada frente a el… y casi como una iniciación me agache, como lo hice para la confesión… pero esta vez seria para tomar su pene muy duro y meterlo en mi boca…. Ooohhh… sentía como el temblaba de placer…. Nunca nadie le había hecho algo así…. Y yo… nunca sentí antes una calentura así… ya nada me importaba… solo quería ser suya… quería ser la primera hembra en montar a ese exquisito macho…. Aaahhhh… su cara… como me decía cosas con su mirada…. Ooohhh… que rico sabor tenia ese pene virgen… entonces el se dio cuenta que no podía mas con esto… y me tomo con fuerza y determinación cruzo mis piernas por detrás de las suyas y…. Ooohhhh… que delicia era sentir ese pene virgen en mi entrepierna… todo fue muy animal… el empezó a rozar mi clítoris el que estaba húmedo y caliente… muy hinchado con los roces entre ambos… y luego lo mejor… me tiro a la cama separo mis piernas, me miro, sonrió y me penetro… su rostro se deformo de placer y el mío … el mío mostraba su cara mas erótica… yo lo miraba con deseo … con hambre de mas… ya sentía una explosión en mi… sabia que yo iba a terminar…. Empecé a gemir… y el me miraba con mas deseos… y así… sentí que me venia…. Ooohhh… nunca había sentido el placer de lo prohibido… fue el mejor orgasmo que había tenido… muy húmedo y palpitante… lo mire y me di cuenta que ahora era el quien terminaría… y lo separe de mi… el automáticamente tomo su pene y lo empezó a masturbar… yo me agache y abrí mi boca…. El supo que lo recibiría feliz y me lanzo la leche mas caliente que nunca antes había recibido entre gritos de placer…. Fue delicioso…. La trague, me vestí… lo bese y me fui de ahí.

Al domingo siguiente fui muy arreglada a misa… pero ya había vuelto el padre de siempre… solo quedaría en mi mente ese Padre Jorge que me hizo renovar la fe.

(9,70)