Capítulo 3: El “badboy” y el “twink”
Hannah:
Los rayos del sol se filtraban por la ventana, a pesar de que la cortina estaba corrida sobre la misma ¿Qué hora seria? Intente buscar la hora en mi reloj, pero no concordaba con la que debería ser la hora real “cambio de zona horaria” pensé
Mire a la otra cama y Jean y Patrick dormían plácidamente, sería bien entrada la noche cuando jean, Aiden y yo volvimos al hotel, la verdad no esperaba que la isla fuera tan bella de noche, pareciera no dormir nunca, la gente seguía en la calle, aun cuando nosotros ya nos retirábamos a dormir, aun recordaba la mirada de Jean a su alrededor, parecía no poder creerse que estuviera en un paraíso como este
Con cuidado me escabullí hacia el balcón de la habitación, tratando de no despertar a nadie, para ver el amanecer que comenzaba el nuevo dia, “whao…. Esto es realmente bello” pensé mirando el mar
Si no hubiera estado tan concentrada en mi enojo, tal vez lo hubiera visto, fui una tonta, pensé que estábamos perdiendo el tiempo al venir aquí, tiempo que podía pasar junto a mis amigos, pero aquí estaba, en el lugar más bello del mundo, junto a las personas que más quería.
“Leo” pensé, la había cagado, había peleado con él a pesar de que lo único que hizo fue intentar darnos la bienvenida, a su estilo, a pesar de que invadimos su… “luna de miel” con Aiden, pero tenía que disculparme, intentar sanarlo todo
-hey!- dijo Jean entrando al balcón mientras se restregaba los ojos con una mano
-oh, ¿te desperté?, lo siento mucho- dije
-no, descuida, me preocupé al no verte en la cama- dijo jean
-siempre me ha encantado ver el amanecer- dije –deberías volver a dormir, es muy temprano y solo hemos dormido unas pocas horas-
-no, no tengo sueño, debe ser cosa del jet lag- dijo jean –este lugar es hermoso- dijo viendo el paisaje
-si lo es- dije –y pensar que pudimos pasar toda nuestra vida sin saber que un lugar como este existía-
-sí, ¿es ese leo?- pregunto jean fijando su mirada hacia un pequeño muro de piedra blanca a unas pocas cuadras del hotel, Leonardo estaba sentado sobre el pequeño muro y junto a él, había una botella con un líquido transparente, (el cual dudaba que fuera agua) que bebía de vez en cuando…
-así parece, es el- dije
-¿está bebiendo tan temprano?- pregunto jean
-vamos- dije entrando de nuevo a la habitación -tengo que hablar con el-
-ok- dijo jean poniéndose sus sandalias y caminando detrás de mí
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Jean:
El lobby del hotel estaba muy lleno de vida para la hora que era, la gente parecía estar apenas llegando, de pasar toda la noche fuera ¿es que acaso esta gente nunca dormía?
-Leo?- dije acercándome a el
-hey jean!- dijo Leonardo, que por el tono en que lo dijo se notaba lo borracho que estaba
-¿leo, estas bien?- pregunto Hannah acercándose
-mejor que nunca- dijo Leonardo sin apartar la vista del mar
-¿estas despertando o es que no has ido a dormir?- pregunte
-lo segundo- dijo el
-¿Qué has estado haciendo?- pregunto Hannah
-pues, bebiendo y caminando y pensando- dijo Leonardo –mucho de la primero y lo último-
-¿en qué has estado pensando?- pregunto Hannah
-en un poco de todo, más que nada sobre como todo puede irse a la mierda en solo un segundo- dijo Leonardo
-sí, sobre eso leo, quería disculparme por lo de ayer, he sido una tonta, lo único que quería era pasar tiempo con ustedes y no me percate que Patrick planeo este viaje con esa intención, no fue sino hasta ayer que Aiden nos llevo a ver la isla, que me di cuenta que no importa donde estemos, si en el templo o en casa o aquí, lo importante es pasar cada uno de nuestros momentos juntos- dijo Hannah –así que por favor, no… yo… me gustaría quedarme con ustedes, ¿no has comprado el boleto de vuelta o sí?-
-nah, sabía que volverías en si- dijo Leonardo- pero eso no es lo que me preocupa-
-oh gracias al cielo- dijo Hannah más aliviada
-¿entonces qué?- pregunte a lo que Leonardo simplemente me estiro su mano la cual tenía un pequeño folleto
-¿qué es?- pregunto Hannah acercándose con curiosidad
-¡OH POR DIOS!- dije sin poder creérmelo – ¡es Román!-
-¿Quién es Román?- pregunto Hannah –oh, ese no es…?-
-sep- dijo Leonardo –por eso nos parecía tan familiar-
-aun no entiendo, ¿Quién es quién?- pregunto Hannah
-este- dije señalando al tío
-Joey- dijo Hannah
-exacto, Joey es Román, un actor pornográfico gay- dije
-¡¿Qué?!- Dijo Hannah – ¡pero por dios! Hay que decirle eso a Patrick-
-eso será divertido- dijo Leonardo
-y con lo que Patrick deseaba un buen chico- dijo Hannah
-dios, no puedo creer que Patrick se levantara a un actor porno y aun mas, al mismísimo Román…- dije sin salir de mi asombro
-lo sé, es increíble ¿verdad?- dijo Leonardo
-Hay que decirle a Patrick que se aleje de ese tío lo más pronto posible- dijo Hannah
-¿Por qué?- pregunte -¿Qué hay de malo?-
-¿Qué hay de malo?, por dios Jean, ¡es como salir con una prostituta!—dijo Hannah
-y ahí estas devuelta con el drama- dije
-¿cómo pretendes que no arme un drama con esto?- dijo Hannah
-Hannah por favor, ¿qué hay de eso se pasar un buen tiempo juntos?-
-una cosa es querer pasar nuestros últimos momentos juntos y otra muy diferente es permitir que Patrick salga con esa clase de personas- dijo Hannah
-¿últimos momentos juntos?- pregunto leo
-oh, cierto, aún no he contado- dijo Hannah
-¿estás bien?- pregunto Leonardo preocupado
-sí, si… no es eso a lo que me refiero- dijo Hannah –es que…-
-¿es que qué?- pregunto Leonardo –suéltalo de una buena vez-
-pronto tendré que irme leo- dijo Hannah
-¿irte?, ¿A dónde?- pregunto Leonardo
-a casa, a Madrid, al finalizar el verano, ustedes comenzaran un nuevo semestre y yo comenzare mis pasantías, después de eso solo queda la graduación y tendré que volver a casa- dijo Hannah
-pero, esta es tu casa- dijo Leonardo –digo, No aquí en mykonos, pero tú me entiendes-
-lo sé y ustedes son como mi familia, pero mi padre, mi madre y mi hermana están en Madrid, esperando mi regreso, ese fue el acuerdo, estudiaría aquí, pero mi verdadera vida, mi familia, me espera allá- dijo Hannah
-pero- dijo Leonardo- es una mierda-
-lo sé, por eso estos días he estado un poco, tu sabes, molesta porque extraño mi familia, pero la idea de irme, de dejarlos, me rompe mucho el corazón, por eso quería pasar todo el tiempo que fuera posible con ustedes, por eso me dolió mucho que te fueras sin siquiera decir adiós- dijo Hannah
-aun así, sigue siendo una mierda- dijo Leonardo
-sí, es una lástima que tengas que irte, pero para eso aún falta mucho, todo un semestre y la graduación probablemente sea el próximo verano, así que tenemos casi todo un año- dije –además, estamos en el paraíso, hagámosle caso a Patrick y vivamos como si fuera el ultimo día-
-sí, es lo mejor- dijo Hannah
-sí, tengamos el mejor verano de todos- dijo Leonardo –por el verano de nuestras vidas- dijo levantando la botella en señal de brindis para luego dar un gran trago y pasárselo a Hannah
-oh bueno- dijo Hannah sin importarle, dándole también un buen trago y luego pasándome la botella a mi
-no pensaran que beberé de eso sin haber desayunado siquiera…- dije
-oh vamos- dijo Leonardo
-venga Jean, esto es un juramento, por el mejor verano de nuestras vidas- dijo Hannah
-pero- dije
-¿recuerdas la conversación en el avión?- pregunto Hannah
-si pero-
-Jean, si quieres que las cosas cambien, debes comenzar por cambiar tu mismo, disfruta la vida, ¿quién sabe cuándo puedas volver a este paraíso gay?- dijo Leonardo
Y en cierta forma, tenía razón y recordé los tíos que estaban ayer en la playa, como miraban a Patrick, lo sexys que eran, joder yo también quería algo de eso, quería divertirme un rato, vivir una buena aventura y ¿porque no? Tal vez ligar un poco
-ah que más, a la mierda toda- dije tomando la botella y dándole un gran trago
-siiiii- dijo Hannah celebrando
-así se hace- dijo leo poniéndose de pie, mientras se tambaleaba un poco a lo que Hannah tuvo que agarrarlo de un brazo –ahora vamos a despertar a mi novio- dijo Leonardo
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Leonardo:
Durante la noche, Aiden estuvo escribiéndome para saber si me encontraba bien, no solo con eso también me llamo en un par de ocasiones, pero al parecer, además de eso estuvo esperándome ya que cuando entre en la habitación estaba dormido, pero por la pose en la que estaba, parece que se hubiera quedado dormido sin darse cuenta
-hey, Aiden baby- dije moviéndolo un poco para que despertara
-hey- dijo el desperezándose -¿Qué hora es?-
-son las 6 y algo- dijo Jean
-¿estas llegando?- pregunto Aiden
-sep- dije
-estás loco bebe- dijo Aiden sonriendo
-lo necesitaba- dije
-lo sé- dijo Aiden levantándose – ¿ya están bien?- pregunto viendo que Hannah estaba con ellos
-en parte- dije
-¿Cómo así?- pregunto Aiden
-con Hannah, ya todo está bien, pero mira esto- dije entregándole el folleto a Aiden
-jajajajajajajajaja con que eso era- dijo Aiden divertido –por eso nos parecía tan familiar- dijo mirando el folleto
-yeap, es Román- dije
-¿Qué vas a hacer?- pregunto Aiden
-no lo sé- dije –por ahora, quiero dormir-
-¿no le dirás nada a Patrick?- pregunto Jean
-sí, pero para tener esta conversación necesito esta sobrio y descansado- dije
-buen punto- dijo Aiden
-ya hablaremos de ello más tarde- dije
-ok, como quieras baby- dijo Aiden –bajare a comer ¿vienen?-
-sí, estoy muerta de hambre- dijo Hannah
-¿Dónde está Patrick?- pregunto Aiden
-aun no despierta- dijo jean
-recuerden no decirle nada hasta que yo despierte- dije quitándome la franela y arrojándome a la cama
-descuida, no le diremos nada- dijo jean
-ya te traeré algo de comer cuando volvamos- dijo Aiden saliendo junto con los chicos y cerrando la puerta detrás de si
Segundos más tarde, me quede dormido como un tronco
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Patrick:
“Joder, creo que me estoy enamorando” Pensé al despertar, la verdad uno sabe cuándo te gusta mucho una persona, ya que piensas en esa persona al dormir y es lo primero que piensas al despertar
Y esa mañana en lo primero que pensé fue en Joey, joder, aun podía sentir el calor de su cuerpo cuando me beso contra la pared y por supuesto, esa parte de mi cuerpo no tardo en despertar
“Como me pone el tío ese” pensé mirando a mi alrededor, pero ni jean ni Hannah se encontraban en la habitación “¿Dónde estarán?”, esta situación de la habitación compartida no gustaba en lo más mínimo, no podía pajearme, no podía andar sin ropa, ¿y cómo demonios haría si tenía que meter a un tío aquí?, aunque pensándolo bien, ¿a quién iba a meter, a Joey?, él tiene su propia habitación.
Mi polla dio un brinco al imaginarme en la habitación de Joey, con el tío sobre mi cuerpo y…
“joder” pensé levantándome de la cama, “¿Qué horas serian? ¿Dónde estarán los chicos? ¿Me dará chance de una paja antes de que lleguen?”
Tal vez debería ir a buscarlos, ¿pero dónde? “en la habitación de Leonardo y Aiden” pensé poniéndome mis bermudas y saliendo de la habitación. Pero al llegar y tocar la puerta, no hubo respuesta “¿Qué raro, habrán salido todos sin mí?” pensé girando la perilla, la cual cedió y abrió la puerta. Dentro solamente estaba Leonardo durmiendo sobre la enorme cama matrimonial “¿Dónde están los demás?”
No sé si era el hecho que desde el accidente, semanas atrás, no había estado con nadie, o la maravillosa noche (sin sexo) que tuve con Joey, pero que bello se veía Leonardo en la cama, las pálidas sabanas contrastaban mucho con su oscura y ahora bronceada piel.
“creo que tengo una calentura acumulada” pensé agarrándome el miembro sobre mi ropa “me hubiera dado chance de hacerme una paja, a fin de cuentas no hay nadie por aquí”. Pero en esas estaba, cuando algo sobre la mesa de noche me llamo la atención, era un folleto sobre una fiesta gay, “¡NO PUEDE SER!” era el,
En ese momento, mi mente dio mil vueltas y volvió a caer en la nada, me sentía estúpido, me sentía derrotado, me sentía como un imbécil, se suponía que en este viaje encontraría a un chico bien, de buenas costumbres, no alguien como yo, no otra puta de discoteca, y ahora, joder esto era mucho peor, un actor porno.
Joder, incluso me contuve anoche de no hacer nada con él, para que no pareciera que soy un fácil, que tonto fui, “!eso es!” pensé, ya no tenía por qué pretender ser un santo, podría tirármelo y…
Sin pensarlo más salí de la habitación de Leonardo camino a las escaleras, de dos en dos escalones la subí, hasta llegar a la habitación 35, el corazón me latía a mil, y mi polla estaba poniéndose dura de anticipación, joder estaba a punto tirar con el mismísimo Román.
<<toc toc>>
Un par de segundos más tarde, un muy despeinado y somnoliento Román abrió la puerta
-¡Patrick!- dijo el sorprendido, al parecer estaba despertando -¿ocurre algo?-
Durante unos segundos me quede en silencio sin saber que decir, joder de solo verlo me hervía la sangre, y mis ganas de saltarle pudieron conmigo, así que sin más me lancé sobre él y comencé a besarlo.
Román me tomo de la cintura y comenzó a responder mis besos con fuerza, con exigencia, me excitaba más (si podía) saber que el sentía la misma urgencia que yo, que me deseaba de la misma manera.
-pensé que querías esperar- dijo el entre besos, quitando mi franela y arrojándola lejos, para luego unir su cuerpo al mío
-cambie de opinión- dije restregándome más a su cuerpo, sintiendo como su miembro iba despertando, creciendo en tamaño “joder es enorme” pensé
La poca ropa que nos quedaba encima, termino en el suelo unos minutos mas tardes. Román y yo terminamos en la cama, haciendo un 69, donde yo disfrutaba de su enorme herramienta, a la vez de su experta lengua entre mis nalgas.
-eres perfecto- dijo mordiendo uno de mis redondos glúteos
-te necesito…- dije entre suspiros
-¿si?- pregunto el pasando nuevamente su lengua por mi orificio -¿Dónde?, ¿aquí?- dijo metiendo su lengua
-ohhhh joder…. Si, justo ahí- dije entre gemidos
-voy a follarte- dijo poniéndose de rodillas entre mis piernas, dejándome boca arriba sobre la cama, mientras él tomaba un preservativo y lo desenrollaba sobre su enorme polla
Joder no podía creerlo, estaba a punto de ser follado por Román, si tan solo el supiera la cantidad de veces que me masturbé viendo sus pelis, fantaseando con su enorme pollon, con esa forma tan salvaje de follar.
Román puso la cabeza de su polla en la entrada de mi culo y comenzó a empujar, sin pausa, pero sin prisa
-ohhh si!- dije sintiendo como entraba en mi cuerpo
-me encantas- dijo pasando su mano por mis marcados abdominales, mientras aceleraba sus embestidas
-oh, si Román- dije perdido en la lujuria del momento
-¿Qué?- dijo el deteniéndose en seco
-no pares Román, sigue- dije
-¡joder!- dijo el sacando su polla y poniéndose de pie
-¿Qué paso?- dije abriendo los ojos y mirándolo sorprendido
-con que eso era todo- dijo el sentándose de nuevo en la cama dándome la espalda –pensé que te gustaba de verdad-
-joder, claro que me gustas Román, estas jodidamente bueno…- dije
-no Patrick, me llamo Joey, Román, es solo un personaje, pensaba que tu atracción hacia mí era porque de verdad te gustaba yo…-
-no entiendo porque te molestas, pero Román…- dije
-¡Joey!- dijo el interrumpiéndome
-lo siento, Joey- dije corrigiéndome -¿podemos al menos terminar lo que empezamos?-
-dime algo Patrick, ¿esa atracción que tienes hacia mí, es porque soy un actor porno, o porque de verdad te gusto?- pregunto el poniéndose de pie nuevamente y volteando a verme
-ayer no lo sabía, me he enterado esta mañana- dije –digo, me parecías familiar, pero no lograba ubicarte de donde-
-entonces lo de ayer- dijo Joey –la cena, y todo lo que hablamos-
-lo sentía de verdad, joder ¿alguna vez pierdes la erección?- pregunte mirando como durante toda la conversación su miembro había permanecido duro
-estoy acostumbrado a mantenerla por largos periodos de tiempo- dijo el sin darle mucha importancia -¿lo sentías?- dijo el haciendo énfasis en el pasado
-si, Rom… digo, Joey- dije al ver como abría la boca para corregirme –tú fuiste el que lo mantuvo oculto, pensaba que eras un chico de bien, incluso anoche por más que quería, no me acosté contigo, pensando que sería lo mejor, y hoy me entero, no gracias a ti por cierto, que eres un actor porno ¿Cuándo planeabas decírmelo?-
-ex actor porno- dijo el
-es igual Román- dije
-¡mi nombre es Joey!- dijo el irritado
-joder, lo siento, es difícil, te he conocido toda mi vida como Román- dijo Patrick
-no Patrick, el chico que conociste ayer, ese soy yo, el verdadero yo- dijo Joey visiblemente decepcionado –pensé que esto- dijo señalándonos a ambos –era real, pero si solo quieres estar conmigo porque fui Román, entonces… entonces lo mejor es que te vayas- dijo el caminando hacia la puerta
Tome mi ropa y me vestí rápidamente –no te mentí Joey- dije mientras terminaba de ponerme la franela –a diferencia de ti-
-no quería que te fijaras en mí solo por eso- dijo Joey –quería que quisieras estar conmigo, no con Román-
-¿qué más da?- dije acercándome a el –quiero estar contigo y tu conmigo-
-adiós Patrick- dijo el abriendo la puerta y cerrándola detrás de mí, una vez que había salido de su habitación
“joder” pensé molesto –el engañado fui yo- dije camino a las escaleras
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-todo esta divino- dijo Hannah probando el desayuno del hotel
-puedes comer todo lo que quieras- dijo Aiden a su lado –Leonardo suele repetir varias veces durante el desayuno-
-entiendo por qué- dijo la rubia chica saboreando su omelet -¿tu estas bien solo con eso?- pregunto señalando el plato de frutas con yogurt que comía Aiden
-si- dijo Aiden sonriendo –tengo que mantener la figura-
-joder- dijo Jean –ser modelo no debe ser sencillo-
-pero estas de vacaciones, deberías tener un poco más de libertad- dijo Hannah
-ya estoy acostumbrado- dijo Aiden -¿y que tienen pensado para hoy?-
-pues no lo sé- dijo Hannah -¿Qué pensaban hacer ustedes dos?-
-dudo que lo que fueran a hacer, pudiéramos disfrutarlo nosotros- dijo Jean
-hahaha- dijo Aiden divertido –da igual lo que fuéramos a hacer Leonardo y yo, el dormirá por unas horas, quizás hasta el almuerzo, así que si quieren hacer algo, puedo llevarlos y servirles de guía-
-suena bien- dijo Jean
-eso sería muy dulce de tu parte- dijo Hannah
-¡hey Aiden!- dijo Fabricio acercándose a la mesa junto con Pierre y Donatello
-hi- dijo Aiden poniéndose de pie y saludando a los tres chicos
-los esperamos anoche, pero no llegaron- dijo Fabricio en perfecto ingles
-Lo siento, estuvimos con los amigos que acaban de llegar- dijo Aiden señalando a Hannah y a Jean
-hi- dijo Fabricio sonriendo amablemente
-buenos días- dijo Hannah asintiendo con la esperanza de que le entendieran
-¿Dónde está el novio?- pregunto Donatello
-durmiendo, noche larga- dijo Aiden
-de cualquier manera, los chicos y yo iremos a nadar un rato en el yate… ¿si quieres venir?- pregunto Fabricio
-prometí que les enseñaría los alrededores- dijo Aiden señalando nuevamente a Jean y Hannah
-oh, cool, tráelos entonces- dijo Fabricio
-¿en serio?- pregunto Aiden
-claro, mientras más, mejor- dijo este sonriendo –otros amigos también irán, seremos un grupo grande-
-déjame preguntarles- dijo Aiden –chicos, Fabricio nos está invitando a su yate un rato, quería saber si quisieran ir?- dijo Aiden en español
-oh, muy amable de su parte- dijo Hannah –si no es ninguna molestia, nunca he ido a un yate- dijo la rubia chica -¿Qué opinas tu Jean?-
-sí, suena bien- dijo Jean observando al trio de chicos
-perfecto- dijo Aiden –está bien, déjenme subirle algo de comida al dormilón y buscar las cosas de playa- dijo Aiden en ingles
-cool, nos veremos en el muelle a las 9- dijo Fabricio
-¿el chico viene?- pregunto Pierre señalando a Jean con un gesto de cabeza
-venga- dijo Donatello codeándolo
-¿te gusta el twink?- pregunto Aiden sonriendo –sí, el también ira-
-bien- dijo Pierre –nos vemos entonces- dijo dando media vuelta y alejándose seguido por los otros dos chicos
Aiden tomo asiento nuevamente sin dejar de sonreír
-¿Qué ocurre?- pregunto Hannah
-nada- dijo Aiden sin poder borrar la sonrisa tonta de su rostro –creo que nos divertiremos bastante hoy-
-¿Qué hay de Patrick y Leonardo?- pregunto Jean
-Leo probablemente despierte a la hora del almuerzo, y creo que estaremos de vuelta justo a tiempo y Patrick, podemos ir a invitarlo ahorita- dijo Aiden –déjenme buscar algo de comer para llevarle a Leo- dijo Aiden poniéndose de pie y acercándose a la mesa del bufete
-eso, si no es que Patrick se va hoy también con el tal Joey- dijo Hannah
-déjalo- dijo Jean –a Patrick le gusta mucho, y el chico parece gustarle también-
-te recuerdo que es un actor porno- dijo Hannah
-igual no podemos decirle nada, hasta que Leonardo despierte- dijo Jean
-pero entonces deberíamos mantenerlo alejado de ese chico hasta entonces- dijo Hannah
-no lo sé- dijo Jean -¿realmente es tan malo?-
-¿tan malo?- repitió Hannah incrédula –Jean, el tío es prácticamente un prostituto-
-no lo es- dijo Jean
-se acuesta con otras personas por dinero- dijo Hannah
-pero parece un buen chico, al menos lo que pudimos conocer de el ayer-
-claro, así engatusa a todos- dijo Hannah
-¿de qué hablan?- dijo Aiden volviendo a la mesa
-de Román- dijo Jean
-me preocupa que Patrick este cerca de ese chico, quien sabe clase de cosas podría pegarle- dijo Hannah
– suenas como cuando llegue al departamento- dijo Jean
-oh venga Hannah, Patrick ha tirado con tíos más peligrosos que ese- dijo Aiden –al menos este estaba controlado con exámenes periódicos-
-cierto- dijo Jean
-aun así no me parece una buena influencia para Patrick- dijo Hannah
-Hannah no eres su madre, y Patrick está bien grandecito ya, él puede estar con quien él quiera- dijo Aiden
-pero debería saber con qué tipo de persona anda- dijo Hannah
-en eso, coincidimos- dijo Aiden –lo mejor será esperar que Leo despierte para decirle la verdad y que luego el decida que hacer-
-me parece lo más correcto- dijo Jean terminando de comer -¿subimos?, tengo que buscar mi traje de baño-
-sí, aprovechemos también para invitar a Patrick- dijo Hannah poniéndose de pie
-vamos, le llevare esto a Leo- dijo Aiden con una vianda de comida en su mano, mientras salían del comedor
-espero que mi bañador aun me quede- dijo Jean –no lo uso desde que mis padres me llevaron a la playa hace años- dijo llamando al ascensor
-¿es en serio?- pregunto Aiden
-no me sorprendería que hayan sido ellos quienes se lo compraron- dijo Hannah
-sí, fueron ellos- dijo Jean entrando al ascensor seguido de los chicos
-¿es en serio?- dijo Aiden nuevamente -¿Qué, son de spiderman o algo por el estilo?- dijo Aiden mientras las puertas se cerraban, segundos más tarde, las puertas del otro ascensor se abrían y de él descendía Patrick con dirección al comedor
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Patrick:
Joder, tampoco estaban en el comedor ¿Dónde demonios estarían los demás?
Mi estómago dio unos gruñidos al oler el maravilloso aroma de la comida, y encogiéndome de hombros simplemente me dirigí a la mesa a comer algo. No fue sino hasta que comí el primer bocado, cuando me di cuenta del hambre que tenía, la comida estaba deliciosa, y en pocos minutos ya había devorado todo en mi plato, pero seguía con hambre.
Fui nuevamente a la mesa de bufet y tome un cup cake de chocolate, no sé si era el hambre, o el que Román/Joey me dejara a medias, pero me sentida muy insatisfecho
¿Qué demonios esperaba, que no me excitara saber que era Román?, digo el paso años de su vida creando esa reputación de dios del sexo y ¿pretende que no me excite?
Aunque también debía admitir que me decepcionaba un poco, digo, pensé que había conocido al amor de mi vida, la noche de ayer fue una de las mejores noches de mi vida, y eso que no tuvimos nada de sexo, de verdad que parecía un gran chico.
“Joder” pensé tomando otro cup cake “necesito hablar con alguien” dije camino al ascensor
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-¿Dónde demonios estará Patrick?- pregunto Hannah tomando su toalla y su cartera
-salió muy temprano- dijo Jean sacando su bañador de su maleta-¿creen que haya salido con Román?-
-supongo, porque no está con Leonardo, venimos de allá- dijo Aiden – ¿en serio te bañaras con eso?- pregunto Aiden
-¿Qué tiene de malo?, no es de caricaturas- dijo Jean
-no, pero dice virgen por todas partes- dijo Aiden tomando el bañador
-¡hey!- dijo Jean
-vamos, compraremos uno nuevo- dijo Aiden –el bañador más sexy que podamos encontrar-
-no entiendo que tiene de malo- dijo Jean saliendo de la habitación tras el
-que tienes que verte lo más sexy posible hoy- dijo Aiden
-¡así me gusta!- dijo Hannah vamos a exhibir a nuestro Jean para conseguirle un marido- dijo saliendo de la habitación tras los chicos
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Jean:
No sé realmente que pensaba Aiden, pero yo no planeaba exhibirme como un pedazo de carne, el pueblo (si es que se le puede llamar asi) de mykonos era realmente hermoso, esa mañana al salir del hotel, había mucha gente caminando por las angostas y claustrofóbicas calles.
El centro estaba lleno de restaurantes, tiendas de ropa, recuerdos, etc. Pero todas las paredes eran blancas, y los marcos de las ventanas y puertas, de color azul, el lugar parecía sacado de un mundo de fantasías, y lo mejor de todo, a un metro de nosotros, un par de chicos caminaban agarrados de la mano como si nada.
-este lugar no termina de sorprenderme, todo aquí es hermoso- dijo Hannah caminando tras Aiden que parecía saber a dónde ir
-es perfecto, llevo una semana aquí y no me canso de sus atardeceres, de su gente, de las calles- dijo Aiden –y las fiestas, joder esta gente sí que sabe cómo festejar-
-¿han salido mucho de fiesta tú y Leo?- pregunte
-no mucho, los primeros días fue como una luna de miel- dijo Aiden
-que romántico- dijo Hannah
-así fue, cenas románticas a la luz de la luna, almuerzos junto al mar, visitas turísticas, masajes de pareja, y mucho, mucho sexo- dijo Aiden
-parece que nosotros llegamos a arruinarlo todo- dije
-por supuesto que no- dijo Aiden pasando su brazo sobre mi hombro y caminando a mi lado
-si bien ha sido maravilloso, Leonardo y yo no somos muy románticos que se diga, a los días conocimos a Fabricio y a los chicos- dijo Aiden –y de ahí, todo ha sido como normalmente era nuestra relación antes de irme-
-¿Cómo?- pregunte con curiosidad
-follarse a todo el mundo, casi siempre entre los dos- dijo Hannah recordando
-hahaha algo así- dijo Aiden
-nunca entenderé esa relación de ustedes dos- dije
-algún día crecerás y lo harás- dijo Aiden –es aquí- dijo abriendo la puerta de la tienda para que pudiéramos entrar
-no soy un niño- dije entrando, un poco a la defensiva
-no, pero aun te falta experimentar cosas en el ambiente- dijo Aiden mirando los trajes de baño
-dudo que algún día llegue a hacer las cosas que ustedes hacen- dije buscando también entre los trajes de baño
-no digas de esta agua no beberé- dijo Aiden
-oh, eso es muy cierto- dijo Hannah mirando los trajes de baño femeninos
-porque el camino es largo y te puede dar sed- dijo Aiden -¿Qué te parece este?-
-¿Qué tiene de malo mi viejo bañador?- pregunto Aiden
-que parece el típico bañador para niños, necesitas uno que deje ver mejor ese traserito que te gastas- dijo Aiden, lo que hizo que me viera a un espejo
-mi trasero no es nada del otro mundo- dije mirándome de espaldas
-todo es cuestión de saber lucirlo- dijo tomando un par y empujándome al probador
Un par de cambios de ropa después, Aiden se decidió por unos verdes, que aunque no eran tan ajustados como los de licra, me hacían ver un buen trasero como decía el
-estos son- dijo Aiden una vez descorrí la cortina del probador
-oh si!- dijo Hannah junto a el –te ves muy lindo en ellos- dijo Hannah
-olvida eso, te vez muy sexy- dijo Aiden –cualquiera querría follarte en ese bañador-
-no veo entonces por qué debo usarlos para nadar…- dije un poco cohibido
-porque quizás tienes un admirador secreto- dijo Aiden
-¿Qué?- dije
-¿Qué?- dijo Hannah igual de sorprendida que yo
-¿Quién?- pregunte curioso
-te lo diré, si usas ese bañador en el yate- dijo Aiden
-está bien- dije resignándome, a fin de cuentas no me quedaba nada mal, y si me hacía lucir bastante bien
-bien, yo pago- dijo Aiden sacando su tarjeta
-¿y quién es mi admirador?- pregunte acercándome a la caja luego de ponerme la ropa sobre el bañador
-te lo diré cuando estemos en el yate- dijo Aiden sonriendo
-no es justo- dije
-venga Jean, estas arrasando en mykonos- dijo Hannah codeándome –solo un día aquí y ya tienes un admirador
-no imagino quien pueda ser- dijo pensándolo bien, los únicos que había visto el día de ayer y hoy, eran los amigos de Leo y Aiden, pero dudo que les haya llamado la atención a ellos ¿o si?
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Aarón:
-¿de verdad saldrás con este chico?- pregunto Anieska arrojándose junto a mi sobre la cama
-¿Por qué no?- pregunte
-no lo conoces de nada- dijo la chica
-como si eso alguna vez te hubiera detenido a ti- dije divertido
-no, pero tú no tienes la misma experiencia que yo-
-si por experiencia te refieres a que no me tirado a tantos tíos como tú, entonces tienes razón, no tengo tanta experiencia- dije Aarón sarcásticamente
-como quieras, solo mantenme informada- dijo Anieska
Un par de horas más tarde, me acercaba al café donde me había citado con Marcus, al acercarme a las mesas, pude verlo bien, el chico era muy guapo, joder vaya que lo era. Marcus tenía el cabello negro, no muy corto, pero bien arreglado, de cara era bastante atractivo, y parecía tener un muy buen cuerpo
-Marcus- dije acercándome a la mesa
-Leonheart- dijo el poniéndose de pie y ofreciendo su mano en señal de saludo
-puedes llamarme Aarón- dijo estrechando su mano y tomando asiento
-haha, disculpa, es que tu apellido tiene mucho peso y siempre suelo llamar a la gente por su apellido, pero es un placer Aarón- dijo Marcus
-pareces conocer mucho mi apellido- dije
-como todos en la ciudad- dijo Marcus encogiéndose de hombros
-¿conoces a Leonardo?- pregunte con curiosidad
-lo conocí hace tiempo, es un buen chico- dijo el
No quise preguntar más sobre el, ya que parecía incomodo hablar sobre otra persona que nada tenía que ver en ese momento
-si, lo es- dije por salir del paso
-espero que tú me dejes mejor sabor de boca que el- dijo Marcus sonriendo
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Jean:
Después de comprar mi nuevo bañador, y algunas que otras chucherías para el viaje en yate, nos dirigimos al muelle, donde ya nos esperaba un grupo de aproximadamente 15 personas, entre chicos y chicas, todos contemporáneos con nuestra edad. Muchos chicos guapos, entre ellos los amigos de Aiden y otros que no conocía de nada
-hi, we’re here!- dijo Aiden saludando al llegar y entablando una conversación con Fabricio en ingles
-Aiden!- dijo Fabricio -¡estamos listos!, iremos en el Yate de Guillermo, es mas grande- dijo señalando al chico con barba que estaba junto a el –Guillermo es español, así que tú y tus amigos podrán hablar con el tranquilamente-
-oh, un placer- dijo Aiden en español estrechando la mano del chico
-el gusto es mío- dijo Guillermo sonriendo
-estos son mis amigos- dijo Aiden presentándonos a Hannah y a mi
-un placer, Jean- dije a lo que el tío solamente asintió
-yo soy Hannah, un placer-
-el placer es todo mío- dijo Guillermo sonriendo y besando la mano de Hannah –¿partimos entonces?- pregunto en ingles volteando a ver a Fabricio
-sí, iremos a un arrecife poco profundo- dijo Fabricio sonriendo
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-armaste un buen grupo por lo que veo- dijo Aiden observando los chicos y chicas que subían al enorme yate
-sabes como soy, mientras más gente mejor, además, una fiesta en el yate, no sería lo mismo con poca gente- dijo Fabricio
-conozco tu idea de fiesta Fabricio, y mis amigos no creo que estén para eso- dijo Aiden sonriendo
-descuida, esta es una fiesta sana, además Guillermo, por mucho que me duela, es un hetero- dijo Fabricio
-sí, me dio esa vibra- dijo Aiden
-aunque no te creas, algo me dice que ese es de los heteros flexibles- dijo Fabricio acercándose a Donatello y Pierre junto con Aiden
-¿aun con esas ideas?- pregunto Donatello
-Fab, no descansara hasta que se lo haya tirado- dijo Pierre divertido
-me conocen bien- dijo Fabricio divertido -¿y qué hay de ti?- pregunto volteando a ver a Jean –Aiden trajo al chico-
-tú y tu debilidad por los twinks- dijo Donatello divertido mirando a Pierre
-déjenme en paz- dijo Pierre
-espera a verlo en bañador- dijo Aiden alejándose mientras sonreía con malicia
-¿todo bien?- pregunto Hannah al verlo acercarse
-de lujo- dijo Aiden
-¿Qué tal la pasan?, ¿quieren algo de beber?- dijo Guillermo acercándose
-¿Quién está manejando?- pregunto Hannah con genuina preocupación
-descuida, mi hermano esta al timón- dijo Guillermo sonriendo -¿eres española verdad?-
-si ¿Por qué?- pregunto la rubia chica sonriendo
-tienes un aire- dijo Guillermo –y no pierdes el acento-
-gracias- dijo Hannah sonrojándose -¿A dónde vamos?-
-no muy lejos, en un par de minutos llegaremos, es un pequeño arrecife cerca de un banco de arena, el agua es cristalina y no muy profunda- dijo Guillermo –perfecta para nadar-
-que bien, gracias por invitarnos a tu yate- dijo Hannah sonriendo mientras se agarraba el cabello
-ven acá Jean, busquemos algo de beber- dijo Aiden pasando su brazo por el hombro
-no deberíamos dejar a Hannah sola con ese sujeto-dijo Jean con preocupación
-descuida, Hannah sabe muy bien cómo cuidarse de los heteros, además- dijo volteando a verla –no parece que le moleste en lo más mínimo-
-parece que estuviera coqueteándole a ese sujeto- dijo Jean
-¿nunca le habías visto coqueteándole a un hetero antes?- pregunto Aiden
-no- dijo Jean
-antes solía hacerlo mucho, a Hannah ese tipo de situaciones le divierte- dijo Aiden
-¿pero y si el tipo quiere llegar más allá?- pregunto Jean
-eso depende de Hannah, a veces le mete a lo bi- dijo Aiden
-¿en serio?- pregunto Jean sorprendido
-sip, más de una vez Hannah le ha metido a un tío, una vez Leo tuvo que despedir un bar tender porque se había enamorado de Hannah, y no dejaba de molestar, aunque en realidad fue culpa de ella por coquetearle siempre que podía- dijo Aiden
-a pesar de que siempre pelean, parece que ustedes entienden muy bien a Hannah- dijo Jean
-se me da bien entender a la gente- dijo Aiden encogiéndose de hombros –como a ti por ejemplo-
-¿Qué hay de mí?- pregunto Jean, mientras el yate de se detenía y la gente comenzaba a quitarse la ropa con emoción, incluso unos chicos se lanzaron al agua, una chica conecto su ipod a unas bocinas y la música comenzó a sonar, en unos segundos se había armado una fiesta en el yate
-pues, que estás aquí para divertirte ¿no?- pregunto Aiden -¿Por qué no vas a nadar un rato?
-no lo sé…- dijo Jean mirando a los chicos mientras algunos comenzaban a bailar, otros ya nadaban en el mar
-¿Qué ocurre?- pregunto Aiden
-no me siento muy cómodo, ya sabes, mostrando mi cuerpo ante tanta gente- dijo Jean
-no seas tonto, ven acá- dijo Aiden quitando la franelilla de Jean, a lo que este se cruzó de brazos tratando de cubrirse –tú no eres una chica- dijo Aiden tomando sus brazos y separándolos de su pecho -eres un tío, y muy sexy por cierto- dijo Aiden
-¿puedo al menos quedarme las bermudas? Pregunto Jean
-no- dijo Aiden bajándoselas con un solo movimiento –recuerda que me prometiste…-
-y tú no cumpliste con tu parte del trato- dijo Jean cubriéndose la parte delantera del bañador
-deja ya de actuar como si fueras un crio- dijo Aiden –eres un hombre, hecho y derecho; sexy y con un buen cuerpo, así que lúcelo, además Pierre no te ha quitado los ojos de encima en todo el viaje- dijo acercándose al oído de Jean
-¡¿Qué?!- dijo Jean sonrojándose -¿estas bromeando cierto?-
-ve y averígualo- dijo Aiden empujándolo hacia el agua.