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Un sentimiento llamado amor

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Amanecía en la casa de Takeru, este despertó sintiendo a Daisuke abrazado contra su cuerpo, se le quedó observando, muy detenidamente y empezó a decir, para si mismo, sintiendo la calma que daba aquella sensación

-"¿Por qué los humanos que han llegado a ser capaces de vivir en la tierra pisan el fondo del agua hasta que sienten dolorosamente? Creo que es por el recuerdo del tiempo de estar en el útero quedó en la psique profunda de los seres humanos, y las personas satisfacen temporalmente el deseo de retorno confiándose al agua que se considera como líquido amniótico.. Parece que una cápsula llena de agua se considera como el nacimiento de una madre, y una terapia que entra y duerme se ha vuelto popular, por lo que puede no ser una idea directa… ¿qué tipo de sensación es esa, me gusta el aliento en la piscina, me gusta bastante, me gusta sus brazos abrazandome, es ahora cuando me siento relajado, no deberia ser asi pero, la sensacion es tan comfortante..."-.

Extendó la mano hacia el cuello de Daisuke en silencio. Tenia incrustrado en el cuello algunas gotas de sudor, tal vez por algún sueño extraño en la noche. Su cuerpo se volvió abrumador incluso si la yema del dedo tocó la superficie de la piel de Daisuke de inmediato, Takeru le besó debajo de la oreja derecha mientras pasó el dedo por el cabello pelirrojo

A su vez, necesitaba ir al cuarto de baño así que se deshizo de aquel abrazo y abandonó la habitación para poder aliviarse

Al volver, Daisuke estaba despierto, salido de la cama, intentando espabilarse del largo sueño de la noche estando de pie con todo su miembro erecto, siempre tenia una pequeña erección en las mañanas, al ver aquella imagen Takeru se paró en seco y lo miró.

-Qué? -. Preguntó con su sonrisa habitual y a la vez una sonrisa de incomodidad

Takeru no reaccionó

-¿Qué? -preguntó de nuevo, sonriendole con una sonrisa nerviosa, su maravillosa sonrisa tímida.

Takeru se puso en movimiento. Sus ojos se mantuvieron fijos en él y Daisuke le siguió con la mirada, inmóvil totalmente, entonces, Takeru, puso sus manos alrededor de las caderas de Daisuke y lo empujó con un rápido movimiento sobre la cama.

Daisuke gritó con sorpresa, pero antes de que pudiera decir algo, ya se encontraba Takeru encima de él, sujetando sus muñecas contra las sábanas y sus labios sobre los suyos.

Invadió su boca con su lengua, por primera vez sin hacer daño, totalmente en calma, pero a pesar de eso, Takeru debía ejercer aún su papel de dominante, había algo en Daisuke al verle que le obligaba ser de esta manera con él, se obligó a alejarse de él y agarró las esposas que aún estaban pegadas a la columna de la cama y fueron usadas la noche anterior.

Las puso alrededor de sus muñecas, la polla erecta de Daisuke chocaba contra los pantalones de pijama de Takeru, en toda la tela.

- Dime... ¿que vas a h... -. Takeru lo interrumpió presionando su mano sobre su boca y lo miró, aparte de parecerle totalmente vulnerable estando debajo de él, era una persona completamente hermosa con esa sonrisa que le caracterizaba y ahora que era libre era mucho mas libre, alegre y feliz pero en vez de contestarle, bajó y comenzó a besarle el cuello. Instintivamente, Daisuke ladeó ligeramente la cabeza para revelarle el cuello y la garganta, Takeru sonrió, lo que acababa de hacer Daisuke era como se muestran los sumisos para mostrar su submisividad cuando se enfrentan con sus dominantes, con eso daba a entender que Daisuke sabia muy bien quien era y lo que quería, eso hizo a Takeru volverse loco.

Trabajó su camino hacia abajo. Le besó los hombros, trabajó con su lengua sobre sus pezones duros y suaves, sintió sus hermosos músculos por todo su cuerpo delgado hasta llegar a lo que merecía un poco más de atención.

-Te haré lloriquear, te eché de menos, no puedes abandonarme tanto tiempo-. Dijo acariciando inesperadamente su rostro y luego y puso sus uñas sobre sus hombros.

-Te haré mendigar y gemir como el pequeño chico necesitado que eres -. Volvió a decir mientras dejaba sus dedos correr por su cuerpo y sus uñas empujaban se hundían en su piel, la piel de Daisuke reaccionó con la famosa piel de gallina que se hizo visible en todo su cuerpo mientras se retorcía y se extendía por todo su sistema nervioso

Cuando encontró su polla erecta una vez más, Takeru se inclinó y comenzó a lamer alrededor de su entrepierna suave, besaba y lamía cada punto alrededor de su pene necesitado, pero ignoró a su miembro totalmente.

No pasó mucho tiempo hasta que Daisuke comenzó a gemir. Se movió ligeramente sobre la cama y cerró los dedos alrededor de las cadenas de las esposas.

Takeru se tomó su tiempo Experimentó más su impotencia, disfrutó mucho más de su vulnerabilidad, se perdió en aquella belleza y sumisión. Era suyo, para jugar, para torturar, para disfrutar, solo de él, ellos eran uno en esto.

Miró un momento al suelo y sacó una venda. Le sonrió seductoramente, se inclinó más hacia él y le cegó la vista con la vida, estaba completamente en sus manos

-Nos vamos a divertir mucho -. Le susurró al oído, alcanzó su lóbulo de la oreja dentro de su boca y lo mordió cuidadosamente.

Daisuke jadeó y cerró sus manos apretandolas alrededor de las esposas.

Takeru sonrió y aprovechando que Daisuke estaba ciego y con la cabeza apuntando hacia arriba por el placer recibido, Takeru le lamió la boca y la barbilla y le volvió a susurrar diciendo

-llorarás por mí cuando haya terminado y me sentirás cuando mi cuerpo no esté encima de ti, preparate para abandonar este mundo

Y la sesión empezó.

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