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Y así fue como engañé a mi marido

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Por motivos del trabajo de mi esposo le toco viajar a la Ciudad de México y me toco acompañarlo pero antes que nada voy a presentarme: somos un matrimonio de lo más normal mi esposo de 46 años y servidora de casi 45 años, omitiré nuestros nombres tenemos 2 hijos, una mujer de 21 años y el varón de 13 años y vivimos en la provincia en el estado de Colima en la costa.

Actualmente él trabaja en una empresa del gobierno y yo hasta hace 5 meses me quede sin trabajo pues en el banco en el que laboraba hicieron recorte y me toco la liquidación de manera que tenemos si se puede decir una vida cómoda en lo económico de eso no me quejo (de otras cosas sí).

Pues regresando al relato y aprovechando que yo estoy libre mi esposo me pidió que lo acompañara y que nos fuéramos unos días solos, así que hable con mi madre para que me hiciera el favor de estar pendiente de mis hijos y arregle todo y nos fuimos solos. El viaje era de miércoles a sábado y a mí la verdad me ilusionaba pues sabía que no tendríamos otra luna de miel por lo menos nos podíamos disfrutar solitos o por lo menos era lo que me imaginaba, así que volamos vía Guadalajara a la Ciudad de México.

Yo no me considero una belleza pues soy normal para mi edad, mido 1.69 y de cuerpo y mis tetas normalitas después de haber amamantado a mis 2 hijos, lo que si tengo son 2 buenas nalgas que según mi esposo y demás hombres que me ven me dicen que las tengo ricas, mi esposo se ha descuidado un poco y con tanto cigarro y a veces tomadora su físico le ha cambiado.

Pues llegamos ese mismo miércoles a México y nos fuimos a instalar a un hotel cerca de Paseo de la Reforma e Insurgentes y después de cenar de lo más normal en el restaurante del hotel nos subimos a la habitación y mi esposo se metió a bañar primero y luego seguí yo. Me tarde un poquito porque ya traía los vellos de mi vagina un poco largos y me gusta traerla bien depilada y más pensando que habría acción me puse y me deje mi vagina bien rasuradita y salí del baño solo con mi toalla enredada en mi cuerpo como suelo hacerlo en casa y mi esposo estaba viendo la tele y me puse mi pijama que no es más que una blusita que apenas me tapa mis nalgas y dejan ver mis pezones y mis nalgas y me acosté junto a él y lo abrace y le di un beso, pero a cambio recibí un gesto de molestia y me dijo que mejor nos durmiéramos pues en la mañana tendría un día muy pesado y se dio vuelta y se acomodó para dormir.

A mi casi me daba el infarto y sabía que no había sido buena idea acompañarlo, pero ya estaba ahí y entonces seguí viendo la tele un rato hasta que escuche que mi maridito empezó a roncar como todas las noches lo hace y dije pues me toca lo mismo ni hablar. En eso al estarle cambiando a la tele salió una película porno donde una mujer le estaba dando una mamada a un hombre que se veía que lo estaba disfrutando mucho y aprovechando que mi marido ya estaba dormido solo le baje al volumen y me puse a ver la película mientras me dormía y al tiempo de verla empecé a sentir como mis pezones se ponían paraditos y sentía que mi vagina se contraía de manera que me estaba calentando con la película y mejor la apague, no sin antes separar mis piernas y como no traía pantis pude tocar mi vagina bien mojadita y solo suspire y me dormí.

Esta demás decir que en lo sexual ya casi ni tenemos contacto y cada día se hacen más esporádicos como las cogidas que antes nos dábamos, pues continuando ya en la mañana sentí cuando mi esposo se levantó a bañar para salir al trabajo y yo seguí acostadita cuando se acercó para despedirse como tenía mi pijama enredada le mostré toda mi vagina bien depiladita, cosa que ni se inmuto y se concentró en darme un beso y decirme que luego me llamaba y que tuviera cuidado si salía del hotel y se marchó. Entonces yo seguí acostada y me dormí otro rato hasta que me dio hambre y me levante para arreglarme y salir a comer algo, entonces me metí a bañar y tengo que confesar que todavía me sentía excitada por la calentura que me dio al ver la peli y me vestí con unos pants y una blusita pegada que se marcaban bien mis tetas y también mis nalgas y baje al restaurante del hotel.

Al estar allí el desayuno estuvo normal no sin antes decir que algunos tipos se me quedaban viendo y sobre todo sentía que me desnudaban y se querían comer mis nalgas. Total que termine de desayunar y solo subí a mi cuarto para lavarme los dientes y dije pues me saldré a dar una vuelta cerca porque falta rato para que mi marido regrese y así lo hice y salí a la calle a mirar y después de caminar un rato encontré un tianguis con muchos puestos a la orilla de una de las avenidas y empecé a recorrerlo y compre unas cosas. En eso llegue a un puesto que vende ropa interior y mallas de todos los modelos y entre, el encargado era un muchacho de unos 26 o 28 años alto medio fornido con un arete en la oreja y un percing en la ceja y nada guapo con aspecto de vago por lo menos fue la primera impresión que al verme dijo:

-Ayy Señito pasele estamos para servirle y le damos lo que quieraaa! Y a buen precio!

Y al escucharlo dije:

-Chamaco baboso mira nomas -pero no hice caso y solo me dedique a mirar la ropa y mallas que por cierto había algunas que se veían sexys y eran de mi agrado que hasta pensé en comprar para sorprender a mi esposo, pero luego reaccione y me dije cálmate te vas a llevar otra desilusión y seguí viendo la ropa y como le estaba dando la espalda colgado estaba un espejo y pude ver cómo me miraba las nalgas y se sobaba su pene por encima de su pantalón y no sé porque pero al verlo eso no me desagrado y dije bueno por lo menos este si se calienta con verme y me sentí bien que el chamaco baboso que yo decía me estaba deseando y tenía su pene parado al ver mis nalgas entonces al sentirme deseada seguí viendo la ropa pero ya más relajada y en cuanto podía me estiraba como queriendo alcanzar alguna prenda pero solo era pretexto solo para parar más mis nalgas y que tuviera mejor vista y al hacer esto sentía que me estaba calentando y el me preguntaba que si buscaba algo en especial y yo le decía que solo estaba mirando. Entonces me dijo:

-mire señito me acaba de llegar esta mercancía y que con todo respeto a usted le quedaría súper bien -y tomo unas pantis tipo bóxer con encaje que estaban sobre la mesa y me las mostró y la verdad estaban bonitas y sexys pero se veían chicas para el tamaño de mis nalgas y le dije ya en confianza:

-pues están bonitas pero creo que no me quedarían.

- para nada creo que se le verían muy especiales un poco ajustadas pero divinas -y bajo su mirada hacia mis nalgas y las recorrió y por un instante y echo un suspiro y entonces ya estando transformada me puse de lado y le mostré mis nalgas y le pregunte:

-En verdad piensas que se me verían bien?

- se lo aseguro que se le verán bien ricas

Y haciéndome la tonta le pregunte: -qué?

Y como sabiendo que respuesta quería escuchar me dijo en voz baja:

-Ay señito sus ricas nalgas se le verían riquísimas.

Y lejos de molestarme solté una risita como aceptando el atrevimiento y ahí estaba yo coqueteando con un chamaco que ni conocía pero me estaba tratando bien y despertando esa puta que llevamos dentro, entonces decidí que era suficiente y le dije que iba a pensarlo y si me animaba que regresaba y que aparte pues no había probador para poder probar la ropa y me dijo:

-Eso es lo de menos allá enfrente y me apunto hacia una vecindad tenemos la bodega y se puede probar lo que quiera.

-ok -le respondí y me volvió a decir:

-Ya sabe estoy para servirle y le puedo dar lo que quiera.

Y me salí y empecé a caminar de vuelta al hotel y en el camino iba pensando todo lo que había pasado pero sobre todo lo bien que me sentí al hacerlo y lo caliente que me puse con ese chamaco y llegue al hotel y me desvestí y me quite toda la ropa quedando desnuda y al entrar al baño me acorde y al pasar por espejo me vi mis nalgas y me decía en verdad se le antojaron al vendedor? Y más aún me preguntaba si me las viera así todas desnudas me cogería? Que tanta falta me hacía por cierto y eso me ponía más caliente pero a la vez me volvía a la realidad y dije ya cálmate y así desnuda me puse a ver la tele en fin que faltaba rato para que llegara mi esposo y volví a llegar al canal porno que se veía como una mujer estaba cabalgando la verga de un tipo y otro le tenía la verga en su boca y se la estaba chupando riquísimo y termine viendo la película para entonces ya estaba bien caliente y mi vagina súper mojada. En eso me suena el celular avisándome mi esposo que ya iba camino al hotel para salir a comer y así con la calentura me metí a bañar una para quitarme la calentura y otra para que mi esposo no me notara que dicho esta ni lo notaria. Entonces salí y me cambie me puse unas pantis sexy de encaje con su brasier y una falda a media pierna y una blusa con un escote algo pronunciado y al llegar me dio un beso y me dijo “vamos a comer pero como parece que va a llover comeremos en el restaurante de abajo” y yo pensé trágame tierra no puede ser que ni siquiera saldríamos.

En fin bajamos y comimos todo normal, yo ya no dije nada y como era de esperarse nos subimos al cuarto y yo me puse a leer y él se puso a trabajar en su laptop. En eso le suena su celular y me dice que tiene que volver a la oficina pues faltaba de completar un trabajo y la verdad como ya estoy acostumbrada ni me molesto y me dijo que lo más seguro que regresaría ya noche y le dije que no había problema que me quedaría y se despidió y se fue y yo seguí leyendo y me dije mira nomas solo cambie el lugar pero es exactamente lo mismo y me dije aunque esto puede cambiar y si no es hoy ya no lo podré hacer y de inmediato pensé que resultara si fuera al tianguis y tomara la propuesta de aquel chamaco que casi me cogía con solo la mirada y me dije va, y deje mi libro y saque un vestidito negro que llevaba de una sola pieza que me quedaba poco debajo de mis nalgas y tenía un poco de vuelo y me lo puse. Entonces pensé si lo voy a hacer lo tengo que hacer lo mejor posible y entonces me quite las pantis y me saque mi brasier de manera que se dibujaban mis nalgas y mis pezones en el vestido y me mire en el espejo y dije mira nomas que puta te ves y se nota que andas buscando verga pero me arme de valor y me salí caminando rumbo al tianguis.

Debo confesar que nunca había vestido sin nada debajo lo que hacía que me sintiera extraña pero a la vez me gustaba esa sensación y me había excitado salir así. Para esto ya era como las 5 pm y en el trayecto no faltaron los piropos tranquilos pero también unos vulgares que no hice caso lo que quería era llegar al tianguis y después de caminar llegue y ya estando en tianguis como había algo de gente pues pase más desapercibida y me dirigí al puesto de ropa y de lejos vi el puesto y él estaba en la pura entrada y cuando me vio a lo lejos pude ver una sonrisa como de lujuria y que me recorría de arriba abajo con su mirada y al llegar al puesto me dijo :

-Guauau mire nomas que preciosura paseleee. Qué bueno que se decidió ¡le voy a mostrar todooo!

Y yo ya me imaginaba a que se refería de manera que entre y le pregunte:

-entonces puedo tomar las prendas que quiera para probármelas?

Y me respondió que sí las que yo quisiera, entonces le dije voy a escogerlas y utilizando la misma táctica me coloque en la misma posición frente a espejo para verlo y efectivamente ya me estaba mirando mis nalgas de una manera ya descarada y se sobaba su pene y entonces me dije pues sale que se haga y tratando de alcanzar según las prendas me estiraba y como traía el vestido se me subía hasta el nacimiento de mis nalgas y el al verme ya no le importaba y se agachaba para poder ver mis nalgas o algo mas y al estar así y sentirme tan deseada y observada tenía la vagina bien mojada y repetí la acción como 4 veces y él estaba como hipnotizado y luego me volteo hacia él y le pregunto por las prendas que me había mostrado y me dio 3 bóxer y me dijo para que escoja la que le guste, entonces ya súper caliente me fui con todo y me puse de espaldas y le dije “entonces crees que se me verían bien?”. Y al aprovechar que no había gente cerca y al decir esto me levante mi vestido y le mostré todas mis nalgas desnudas y me dijo:

-Ay mamacita que ricas nalgas tienes me encantan -y me dijo tomándose su pene- mira como me pusiste -y se le veía un bulto riquísimo, Y le pregunte:

-Te gustaría cogértelas?

Y me respondió tartamudeando “¡siii chiquita te daría una rica cogida que me tienes ardiendo”, entonces le dije “yo también quiero que me las cojas pero la condición será que uses condón” y me dijo “no hay problema aquí adelante hay una farmacia” y dicho esto me dijo “espérame” y salió no sin antes encargar el puesto a la chica. Fue un tiempo que se me hizo largo y que me hizo reflexionar que ahí estaba yo seduciendo a ese muchacho y sobre todo le estaba pidiendo a gritos que me cogiera y que me quitara toda la calentura que traía, pero me dije pues al cabo nadie me conoce y la verdad tenía muchas ganas de ponerle los cuernos a mi maridito y seguí con mi plan y sentía como mi vagina me palpitaba de tan caliente que la tenía y de pronto llego y me dijo “listo, vámonos mamacita que te voy a dar la cogida que andas buscando” y eso me excito aún más y le volvió a encargar el puesto a la chica y salimos rumbo a la vecindad que quedaba justo enfrente pasando solo la banqueta.

Entramos y se veían unos cuartos acondicionados como bodegas y al pasar nos encontramos a un señor que venía con unas cajas y le saludo y le dijo:

-¡Qué onda mi Mike!

Y él le respondió: -aquí mi Peter voy por una mercancía

Y al señor solo le dio una risita sarcástica y le dijo: -Suerte matador!

Y eso en otras condiciones me hubiera hecho enojar pero como estaba no me importo es más hasta pensé y sí que tiene suerte porque se comerá mis nalgas y me cogerá todita, y llegamos hasta un cuarto y levanto una cortina y aparecieron muchas cajas de mercancía y solo había una silla tipo escritorio y al cruzar la sabia que ya no había regreso y que me entregaría a todo y así lo hice, entonces entramos y bajo la cortina y encendió un foco tenue que estaba en la pared y como desesperado me abrazo y me dijo: “¡ayy chiquita me tienes súper caliente desde la mañana que te vi me gustaste mucho” y nos fundimos en un beso y nuestras lenguas se entrelazaron al tiempo que paso sus manos por debajo de mi vestido y comenzó a sobar mis nalgas y me dijo: “Que nalgonas tan deliciosas tienes” y yo estaba como poseída con esas caricias y como me estaba tratando y mi vagina ya me chorreaba y luego me movió los tirantes del vestido y quedaron mis tetas libres y con los pezones bien paraditos y con sus manos toscas me las apretó bien rico y me sentía estremecer y luego bajo su cabeza y metió toda mi teta a su boca y me succiono riquísimo y me tenía en completo éxtasis y como pude con mis manos le empecé a bajar el cierre de su pantalón ya que quería sentir todo ese palo tan parado y logre sacarlo y lo tome en mis manos y pude sentir esa verga súper parada y lo se empecé a masturbar y en eso me dijo:

-Chiquita quiero que me la mames todita, chupámela!

Y muy obediente me baje hasta quedar con toda su verga gusto en mi boca y la pude apreciar la cual era de tamaño normal pero algo gruesa lo que si me encanto fue ver que tenía libre toda su cabecita y se le veía riquísima y no pude más y le empecé a pasar mi lengüita y luego lo metí todito en mi boca era una sensación diferente pues por primera vez tenía en la boca otra verga diferente a la de mi marido y eso no lo desaprovecharía y lo continúe mamando todito y el solo gemía y de decía:

-Chiquitita que rico mamas la verga me encanta! Síguele.

Y en esa posición y debido a lo caliente que estaba me acaricie mi vagina y pude sentir toda mi humedad y que mis labios y mi clítoris estaban súper hinchados y entonces deje de mamársela y le dije ya sin importarme nada y sintiéndome la más puta de todas:

-Ay cabrón ya cógeme ya quiero que me des toda tu verga que estoy hirviendo -y apoyada en la silla le ofrecí todas mis nalgas y separe un poco mis piernas entonces él se acomodó detrás de mí y se colocó el condón y me levanto el vestido quedando mis nalgas y toda mi vagina a su antojo y me dijo “ay mamacita ahora si van a conocer una buena verga esta nalgas tan ricas” y coloco su verga en mi vagina y de un solo golpe me la ensarto todita que me hizo gritar de tanto deseo contenido y lo que me provoco sentir esa rica verga todo dentro y yo empecé a mover mis nalgas pidiéndole que me la diera todaaa y entonces me empezó a penetrar con todas sus fuerzas haciéndome bramar de tanto placer y me decía:

-Te gusta chiquita? Es lo que querías verdad? Que te cogiera?

Y yo le respondía “siii mijo eso quería que me cogieras y me trataras como una puta” y seguía moviendo mis nalgas como desesperada y en esa posición me estaba cogiendo tan rico que me hizo alcanzar dos ricos orgasmos y de pronto sentí como acelero sus movimientos y me decía:

-Ay mamacita me estas sacando toda mi leche -y yo le decía “siiii vente y dámela toda” y en eso sentí como se estremecía y supe que estaba alcanzando su orgasmo y me tomaba de mis nalgas y me la metía toda como sacudiéndosela para que quedara toda su leche en su condón y yo estaba en el paraíso y luego me la saco y sentí mi vagina bien satisfecha y luego nos acomodamos y me dijo que le había gustado mucho y que era muy buena para coger y que tenía unas nalgas de campeonato y que cuando yo quisiera me volvía a coger y le respondí que yo también lo había disfrutado mucho y me había cogido bien rico y nos dimos un beso y salimos de la bodega.

Nos fuimos caminando hacia el tianguis para esto pasaron como 2 horas y al llegar al puesto solo nos despedimos con un saludo de mano y me fui caminando rumbo a hotel con la sonrisa y la satisfacción de haber recibido una rica cogida por un desconocido y al llegar al cuarto de hotel me quede un rato recostada como reposando la rica cogida.

Mi esposo llego como 2 horas después y como siempre ni se enteró la rica cogida que le habían dado a su mujercita.

Espero les guste y aclarando que todo esto que me paso fue 100% real en la actualidad continuo con mi marido y viviendo el mismo estilo de vida pero con la idea que si vuelvo a ir a México por supuesto que iré al tianguis.

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