CAPITULO III
Jonas
- Oye freak, por que tan solo?- Al oír esa frase me volteo, veo que se está tomando un trago, luego agarra otro y sonríe.
- Déjame en paz- Dije yo un poco molesto. Pues sabía que en algún momento tenía que quedarme solo en esta fiesta.
Siempre es lo mismo por eso es que no voy a estas cosas. En el distrito Este no se acostumbraba hacer fiestas, sólo pequeñas reuniones en ocasiones especiales como cumpleaños, la verdad, de todos los 5 distritos éramos los más anticuados y estirados. Por eso no somos tomado mucho en cuenta, de esta región provenían las personas de bajos recursos, pocos tenían la suerte de emigrar. Si es así, entonces yo era uno de esos "suertudos".
- El chico está molesto- Dijo burlándose.- Déjame animarte!- Dicho esto sirvió 2 tragos más, se sentó en donde estaba Paris hace unos minuto y me ofrece uno de estos trago.- Brindemos.
- Creo que no hay nada porque brindar, además no hablo con personas alcoholizadas- Me levanto y voy hacia el pequeño muro que da vista a la playa. Noto que el aire acaricia mi cabello y mi cara, miro luego a Mathias que empiezan a coquetear con una chica. Al cabo de unos minutos se dirige a donde estoy.
- Lo siento, no sé qué me pasa, de verdad no soy así, pero el día no me ha salido tan bien como digamos y quiero olvidarme de todo por esta noche- Me dice cabizbajo, con las pálidas manos en su perfecto rostro. Luego se para justo a mi lado para mirar el mar.
- Me imagino que salvar a un "Freak" de ahogarse y luego llevarlo a su casa, debió arruinarte tu maravilloso día- Me expresó sarcásticamente, mientras mi mirada se pierde en el horizonte.
- Si supieras- Hace una pausa y me se pone más cerca de mi.- Eres lo mejor que me ha pasado hoy- Dice un poco nervioso con una sonrisa que le hacía lucir su perfectos dientes blancos.
Mis mejillas se ruborizan y volteo a verlo. No podía creer que Mathias había dicho eso. Mi mirada se cruzó con la de él y le pregunto confundido.
- Que quieres decir con eso?- Dicho esto escucho una voz.
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Mathias
Estas loco!. Pensé, como le vas a decir eso. La cabeza me daba vueltas y no podía dejar de ver su dulce rostro.
- Mathiaaaas!- Escucho a Manuel diciendo desde lejos. Volteo a verlo y su mirada es de preocupación.
- ¿Qué pasa?- Le digo un poco asustado.
- Natasha- Es lo único que dice, cuando hecho la vista hacia la puerta está mi novia entrando con Verónica.
- Esto era lo único faltaba- Digo molesto. Me acerco a ella y veo que Verónica la está intentando calmar. Mi corazón comienza a palpitar fuertemente hasta que sus labios se separan.
- Debemos hablar- Su cara no expresaba ningún sentimiento. Me agarro por la chaqueta y me llevo hacia un cuarto estilo salón que servía para reunirse, jugar consola u otras cosas.
Tuvimos como tres años planeando hacer este lugar y si no fuera por el padre de Natasha nada se hubiera cumplido. Ella le insistió para que invierta y así poder decorar el lugar y equiparlo con productos de primera.
Estuvimos hablando por más de treinta minutos, me contó que sus padres le habían dejado venir con la condición de que no llegara tarde, para calmar su molestia le prometí dedicarle mañana todo el día. Tuve que mentirle y decirle que todo fue un malentendido y luego de cinco minutos de besos salimos de la habitación a bailar. Me sorprendí al ver al chico surfista bailando con una rubia bastante guapa. Se notaba que no era un experto bailando pero igual seguía el ritmo de la música. Natasha se paró justo al frente de ellos y comenzó a mover sus caderas. Todos se la quedaron mirando, pero me valía madre esas miradas, era solo mía. Me le acerque y la abrase por la cintura, luego le di un pequeño beso en sus carnosos labios.
- Te amo- Me dice uniendo nuestros labios de nuevo. Para ser sincero de todas las mujeres con quien he estado Natasha es la que mejor besa, sus labios son como una droga para mí.
- Yo más- Le digo, de pronto visualizo al amigo de mi hermano que está justo al frente.
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Jonas
- Quien es la chica que está bailando juntó a Mathias?- Le pregunto a Paris.
- Se me había olvidado decirte, ella es Natasha, estudia con Mathias y es su novia- Suspiró luego dijo- Llevan ya como 5 años de novios, se me hace un poco extraño que nunca la hayas mirado en el instituto si es una de las chicas más codiciadas, parece que se van a comprometer muy pronto.
Esto último me dejo en shock, no podía moverme.
- Wow! Deben estar muy enamorados- Me daba celos verlo con esa chica.
Ahora entendía lo que me pasaba, me gustaba Mathias! Se robó mi corazón en tan solo un día. Pensé mirándolo, seguía bailando con su novia muy acaramelado. En eso se voltea y me ofrece una estupenda sonrisa, luego besa a tu novia.
- Desde que están bailando no han parado de expresar su amor- Me dijo poniendo los ojos en blanco.
- Ya me voy- Le dije rápidamente a Paris.
- Si quieres te acompaño.
- Disfruta tú la noche- Le di un beso pero ella como estaba bailando se rodó y mis labios se posaron en los suyos. - Perdón no fue mi intención dije apenado y luego me fui.
Estaba afuera del refugio recordando como Mathias besaba a su novia con lujuria. Fui a la parada del tren y por suerte estaba llegando uno a la estación. Entré a la casa y me dirigía a dormir cuando sonó mi celular.
- Nicolás bebió mucho y no hay nadie quien lo lleve, conseguí irme con Manuel pero él se quedo allá dijo que se iría más tarde- Escucho a Paris diciendo preocupada.- Su papá no ha parado de llamarme.
- Voy para allá- Digo cansado colgando el celular.
Había acordado en la fiesta irme con Nicolás y como me fui sin decirle nada sentía algo de culpa. Salí de la casa y me dirigí al refugio, la calle estaba vacía y oscura así que camine muy rápido a la estación, estando allí no pasaba ningún tren.
En eso pasa un carro pequeño y se estaciona justo donde estoy. Mi corazón comienza a latir por el miedo.
- Jonas eres tú?, que haces aquí tan tarde?, entra al auto- Me sorprendí al ver un rostro familiar, se parecía mucho a Chris, el que una vez fue mi amigo de la infancia. Al ver mi cara de confusión me pregunto.- acaso no te acuerdas de mí?- Abrió la puerta y me hizo una seña para entrar.
- Cuanto tiempo ha pasado?- Es lo único que logró decir entrando en su coche.
- Pues mucho. La verdad pensé que jamás te volvería a ver- Me sonrió y luego siguió diciendo- Hacia dónde te diriges a estas horas?
Le indique la calle y en el transcurso le conté todo lo sucedido con Nicolás y la fiesta, y empezamos a recordar viejos momentos.
Yo tenía 9 años cuando su familia se mudó frente a la mía. Vi el camión de mudanzas pasar varias veces. Cuando fui a jugar en el jardín veo a un chico un poco más grande que yo, asomado por la ventana. El me sonríe luego se marcha, esa escena se repitió hasta que un día se acerca y me dice.
- Hola me llamo Christian, soy del norte- Tenía una sonrisa de oreja a oreja, y su mano extendida.
- Yo...yo me llamo Jonas- Lo imitó y extiendo mi mano como la suya.
Él se ríe agarra mi mano y me hace un extraño saludo.
- De donde provengo se saluda así. Luego me pregunta. Puedo jugar?.
- Claro, claro....
Así fue como conocí a Chris, todos los días iba a mi casa y jugábamos hasta que el sol se ocultaba. En la escuela siempre me protegía de cualquiera que me molestaba, al salir me esperaba y nos íbamos caminando. Se convirtió en un hermano y siempre me contaba sus vivencias...
- Jonas, llegamos, es aquí- Me dice mirándome.
Sale del auto y me abre la puerta, me acompaña hasta la puerta.
- Gracias por traerme Chris, la verdad fue bueno verte- Le dije despidiéndonos. Cuando se iba le grito.- Espera, espera, dame tu número.
- jajajaja Jonas pasan los años y sigues siendo el mismo chico distraído, me he tomado la molestia de anotarlo en tu móvil cuando ibas pensando en el auto.
Le doy las gracias de nuevo y luego se marcha. Todavía conservaba algunos rasgos de cuando era niño como sus ojos turquesa y esos labios carnosos, ahora su cuerpo había cambiado sorprendentemente. Dejo de ser el chico flaco, que utilizaba unas grandes gafas para la vista y con cabello rapado.
Ahora era muy alto debía de medir 1.85, su cuerpo estaba como el de un adonis, llevaba el cabello de una forma moderna algo largo un poco bajó a los lados, le quedaba estupendo y las gafas las había dejado atrás. Pues fue difícil reconocerlo, tiene un físico que volvería loco a cualquiera.
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Mathias
Vi bailar a el amigo de mi hermano con esa chica. Serán novios? Pensé, hasta que se dieron un beso. Mi cara se tornó sería, y entendí que estaba en lo cierto, luego se fue muy apurado.
Quería ir y preguntarle que le había pasado pero no tuve el valor. Después de unas horas estaba arreglando la basura dejada por las personas en el salón, fui a donde Tomas.
- La fiesta estuvo increíble bro- Le dije a Tomas que estaba acostado en un sofácama en la sala de juegos junto a Verónica, ella se levanta y luego dice:
- Sin duda la mejor de todas, le estaba diciendo a Tomas para venir más tarde y quedarnos un rato en la playa.
- Estupendo!, así le enseño a nadar.
- Sabes que el agua no es lo mío- Dice Tomas levantándose.- Oye math ya nos vamos es muy tarde.
Los dos abandonaron la habitación, le había dicho a Tomas que me quedaría en el refugio durmiendo. No me gustaba estar en casa cuando papá estaba, el ambiente entre nosotros es un poco tenso, por eso prefiero ignorarlo. Sólo quedaban pocas personas en el edificio entre ellas mi hermano.
- Pensaba que ya te habías marchado, es muy tarde papá debe de estar preocupado. Le digo acercándome.
- Me han dejado aquí. Se olvidaron de mí- Dice riendo un poco borracho.
- Tendré que llevarte- Me dirijo a buscar mi chaqueta cuando aparece su amigo.
- ¿Dónde está tu hermano?- Me pregunta preocupado. Nicolás camina a dónde estamos y dice.
- Bro, gracias por venir, déjame buscar mi móvil- Sale del salón y nos deja solos. Veo que Mathias se pone algo nervioso y me dice
- No era necesario que vinieras, yo lo podía llevar.
- Ya estoy aquí. Me fui sin decirle nada, y pues habíamos acordado irnos junto.
- Si eso me acaba de contar Nico, te vi saliendo muy apresurado. Tu novia se quedo un poco confundida- Hago una pequeña pausa luego le pregunto. - Te sucedió algo?.
- jajajajaja- Se ríe a carcajadas luego sale atender una llamada y Nicolás sale corriendo detrás.
- Te cuidas por el camino!- Le grito.
A la media hora termino de arreglar todo, subo a la terraza, extiendo una sábana y me quedo mirando las estrellas hasta que me duermo.
El sol me despertó quería seguir durmiendo pero tenía que ir a cambiarme. Para luego salir con mis amigos. Al llegar Nicolás esta justo hablando con su amigo en la puerta. Los saludo con un apretón de manos a ambos. Y le pregunto si papá se encuentra en la casa.
- Acabo de llegar y para mi sorpresa la casa está vacía.
- Que extraño, la casa casi nunca está sola- Hice una pausa luego continúe. -Y se podría saber donde pasaste la noche Nico?.
- En mi casa!- Responde serio Jonas mirándome. - nos cansamos de llamar en la puerta de su casa y nadie salió.
- Oye, Nicolás puedes invitar a tu amigo a comer así le agradezco por lo que hizo ayer- Digo entrado a la casa, reviso la nevera y veo que hay lo necesario para hacer un buen desayuno.
A veces mi padre se atrasaba con el pago de la comida y yo tenía que resolver trabajando en la empresa del papá de Natasha. Este mes me había tocado trabajar en mis días libre pudiendo traer comida a la casa. Después de terminar llame a mí hermano que seguía hablando con Jonas y nos sentamos en la mesa a comer.
- Mi hermano cocina muy sabroso, cuando era más joven ayudaba a mi abuela de ahí aprendió las recetas- Dice a Nicolás.
- Está muy rica- . Habla un poco tímido.- Pero te podría ganar- Sonríe y luego deja de comer.
- Pues tendrás que cocinarme algún día- Le respondo.
- No es por alardear pero de donde soy la comida es mucho mejor que la de aquí- . Su mirada se posa en mi por un instante luego empieza hablar con Nicolás.
- Llegaste a buscarme muy rápido amigo, eso es lo único que recuerdo-. Oí decir a Nicolás al cabo de unos minutos.
- Después que Paris me llamó preocupada salí a buscarte y me encontré con un viejo amigo que me llevo hasta allá.
- Un amigo?-. Dice algo extrañado.- Pensé que yo era tu único amigo aquí.
- La verdad es que yo también. Pero ayer estuve con Christian, él es de quien siempre te he hablado.
- Si, si ya se. Tu ex novio- Dijo guiñando el ojo.
- Que te pasa? Por qué lo llamas así?- Dijo Jonas arrojándole una cuchara, dándole en el brazo.
- aaaaush!...Pues siempre hablas de ese chico, pareciera que en algún momento te hubiera gustado.
Cuando mi hermano dijo "ex novio" se me hizo un nudo en el estómago, de pronto siento dolor en la mano y notó una pequeña herida, de la sorpresa me había cortado con el cuchillo, me dirijo a la cocina a curar mi mano rápido y ellos se quedan hablando en la mesa, voy a recojer los platos para lavarlos en eso quito la camisa por el calor luego salgo al comedor. Jonas se queda mirando mi cuerpo por unos segundo y sigue conversando.
Cuando estoy a su lado, hace despertar algo en mí que ninguna otra chica a echo y esos tiernos ojos azules me vuelven cada vez más loco.
- Que raro, hoy no fuiste a surfear, ya era costumbre que fueras todo los días a la playa- Dice Nicolás extrañado.
- Estoy siguiendo tu consejo amigo. Me apartare del mar por un tiempo- Me miro Jonas guiñándome el ojo.
- Es bueno que dejes las olas, no vaya hacer que termines ahogado-. Le dije con una sonrisa.
- Tu quien eres para estar opinando o no, acerca de mi vida-. Dijo serio frunciendo el ceño.
- Tranquilo hombre, no te alteres es sólo una recomendación. No vaya ser que un día te ahogues y no tengas a nadie que te pueda salvar-. Dije con sarcasmo, refiriéndome al evento de ayer. Luego fui a mi cuarto y me acosté un rato a descansar…..Continuara.
Aquí otra entrega de DISTOPIA, no se olviden valorar y comentar. Saludos!