Nuevos relatos publicados: 12

DISTOPIA IX

  • 17
  • 8.818
  • 9,86 (7 Val.)
  • 0

Jonas

Salimos del restaurante y ya el sol se ocultaba por las grandes montañas del horizonte. Camine un rato con Mathias recorriendo algunos locales y hablando de lo genial que sería vivir en un lugar como este, luego de varias vueltas decidimos ir al hotel.

 Al llegar Mathias subió hacia la cama y comenzó a ver el juego de fútbol que  había dejado por la mitad el día anterior. Me quede en la sala revisando mi móvil, algunos mensajes de mi madre, otros de Paris y había uno en particular que me puso todos los músculos de mi cuerpo tenso, sabía que tenía una conversación pendiente con Chris. Pero con qué cara le diré, después de la pelea tuve sexo con el chico que lo golpeo, era una cosa inverosímil, pero sabía que en algún corto plazo había que enfrentarme a él.

Echo la vista hacia arriba y veo como Mathias está muy entretenido con el juego dando gritos y brincando desde arriba. De pronto llaman a la puerta y cuando abro había un pequeño carro con unas frutas dos copas y una botella de champaña que a mi parecer era muy costosa. Entro con el carro lentamente y lo dejo muy confundió en la sala.

- Acaso ordenaste algo, porque me acaban de mandar esto-. Le pregunto señalando la encomienda.

Mathias en seguida se asoma por el balcón y esboza una sonrisa. Verlo sin camisa y con esa perfecta expresión me hace querer besarlo y abrazarlo, pero me contengo y solo oigo su respuesta.

- Queee rápido llego el servicio. Dice Mathias desde el balcón, baja las escaleras y me abraza.- hoy quiero una noche con mi chico. Dice agarrando las dos copas y sirviendo champaña dándome una.- Ven sube, quiero tenerte cerca, me muero por besar todo tu cuerpecito.

Me sonrojo con lo que Mathias está diciendo, se veía muy sexy en ese  bóxer negro sosteniendo una copa se le notaba mucho su paquete, se da la espalda y sube para terminar de ver el partido. Yo lo sigo y me acuesto, él me abraza y pongo mi cabeza en su hombro para poder ver el  reflector y disimular que estoy observando el aburrido partido.

- Marhias no se que le vez, sólo son unos chicos detrás de un balón, no le veo ninguna ciencia.

Me brinda una sonrisa y me explica las jugadas, a medida que me contaba iba aprendiendo un poco más sobre el juego

No era fanático del fútbol, solo me gustaba el surf esa era mi gran pasión. Debía ser la primera vez que me quedaba observando un partido de esos. Pues miraba más al sexy cuerpo de Mathias que al proyector. Oigo sonar mi móvil y en la pantalla transparente sale a relucir el nombre de Christian. Me estaba llamando y no sabía qué hacer, sabia que esto pasaría tarde o temprano.

Trato de disimular y me aparto unos segundos para ir al "baño", mi reacción fue algo nerviosa, en el transcurso veo por un espejo como Mathias me mira confundido parado de rodillas en la cama, trato de apresurarme antes de que pueda decir una palabra.

 Al contestar pude oír la  voz  de Chirs un poco enojada y algo confundida. No sabía que decirle, se me vino a la mente una de esas excusas baratas que siempre inventaba y Chris me término creyendo, le había dicho que dormiría porque el día estuvo muy cansado, el se despidió y prometió verme en la región del Norte. Su voz se notaba algo preocupada, no fui capaz de contarle lo que en verdad paso la noche de ayer sentía que la vida se me estaba complicando, no debí acercarme mucho a Chris. Ahora no sabía cómo remediar todo lo que habíamos empezado en su casa.

Me sentía mal con Mathias, sabía que si descubría lo que había pasado lo mataría, una de las cosas que notaba cada vez más de él era su protección, era muy posesivo con sus cosas hasta conmigo y a decir verdad eso me ponía muy caliente. Ahora comprendía su reacción anoche, sabía que haría todo lo que fuera por alejar a sus seres queridos de las personas que no eran convenientes para él.

Salí del baño un poco asustado, borrando su número del móvil y lo vi parado en un muro frente a la puerta del baño, se notaba un poco molesto, su mirada estaba fija en mi móvil.  Pues parece que noto mis manos como temblaban y pegaba de mis caderas.

-Era él verdad?-. Me dice muy serio, con sus manos entrelazadas a su pecho.

- No es lo que estas pensando Mathias-. No podía mirarlo a los ojos-.  Sólo quería saber cómo se encontraba y...

- Estaba bien! No quiero saber nada de ese imbécil, lo de ayer se lo tenía merecido, al decir verdad disfrute el momento.

- Ayer te excediste, aparte de golpearlo estabas muy tomado. Parecías una bestia enfurecida. No te dio vergüenza con toda esa gente a tu lado.

- Es que no podía dejar que otra persona te pusiera la mano, sólo yo puedo besarte-. Me dice dándome un pequeño beso, luego me puso de espaldas contra la pared, empezó hacer movimiento con su pubis y besarme el cuello como si no hubiera mañana. 

Me bajo el pantalón y busco rápidamente el lubricante, me unto un poco y luego introducido su gran mástil rapidamente.

- aaaahh, despacio me duele-. Digo emitiendo un pequeño gemido.

Sentía como su pene entraba y salía de mi culo, cada vez me daba más fuerte, nuestro sudor se unía y podía escucharse en cualquier rincón de la habitación nuestros gemidos. Mi esfínter se resistía con cada una de sus embestidas. No podía dejar de gemir el dolor cada vez se hacía más insoportable y notaba su gran verga abrirse paso en mi cuerpo. Trataba de mantener mi culo bien en pompas mientras me daba pequeños azotes que me ponía cada vez más caliente. Sentía como su pecho apretaba mi espalda y como sus manos recorrían mi delgado cuerpo

- Me vuelves loco Jonas, te amo demasiado, nunca te separes de mi, quiero estar siempre a tu lado-. Era lo que me decía Mathias sin parar, me fue arrimando hasta que caí boca bajó en la cama, y empezó a perforarme frenéticamente. Parecía poseído, yo gemís de placer y giraba mi cara para darle pequeños besos.

- Aaah me vengo Jonas-. En ese momento se separó de golpe y yo del dolor me torcí un poco cayéndome todo el semen en mi cara. Mathias viendo la escena empezó a recoger su propio semen con la lengua luego me beso, compartiendo su fluido conmigo, era una mezcla entre dulce, salado y amargo, te dejaba con una sensación de quieres más de esos besos con néctar.

Luego se acostó en la cama mirando el techo y se empezó a reír.

Yo me le acerque lentamente, y le pregunto con mi mirada fija en su cuerpo.

-Que te causa tanta risa?. Mis manos empiezan a jugar con sus rosadas tetillas lentamente.

- Estivo genial, Jonas eres lo mejor que me ha podido pasar. Eso hizo ponerme muy ruboroso y lo único que hago es sonreír al compas de sus labios.

Lentamente me fui aserrando y observo su hermoso cuerpo, y empiezo a besar cada uno de sus lunares hasta llegar al de su labio para fundirnos en un apasionado beso.

- No quiero separarme nunca de ti Mathi. Tú también eres lo mejor que me ha pasado. Lamento tratarte mal las veces anteriores, es que me gustabas tanto que no sabía cómo disimular. Y debo admitir que me daba un poco de celos las veces que besabas a tu novia.

- Oye Jonas, ya te dije que no es mi novia. Sólo estoy disponible para ti, eres lo más especial ahora. Quisiera pasar unos días más aquí a tu lado, pero ya sabes cómo son las cosas. Te agradezco por brindarme la confianza de estar a tu lado, ahora te protegeré no dejare que nada te pase. Luego de estas palabras nos quedamos viendo TV un rato, nos contábamos historias. Hasta lentamente nos fuimos durmiendo.

 

Mathias

Siento la puerta sonar, alguien nos estaba llamando. Vi en la ventada que todo estaba a oscuras así que me extraño, me visto rápidamente y trato de envolver con la sábana a Jonas que seguía durmiendo con una cara muy angelical. Bajó rápidamente y por el ojo de pez puedo ver a un señor mayor algo demagrado.

- Buenos días joven, Lady Jade los espera en la estación a las 6 y punto, es mejor que se arreglen rápido, no le gusta que le hagan esperar. Me dice cuando le abro la puerta.

- A las seis? Acaso se volvió loca? Es muy temprano. Pongo mis manos en la cabeza, miro que el señor pone una cara de pocos amigos y luego asiento con mi cabeza.

Lo invito a pasar, el se queda en la sala mientras subo y llamo a Jonas, le explico todo rápidamente y nos vestimos muy rápido, ayer se nos paso el tiempo hablando de nuestras vivencias que se nos olvido hacer las maletas.

- Ya estamos listos-. Le dice Jonas muy alegre al señor.

- El parking los está esperando en la entrada del hotel, buen viaje jóvenes. Espero verlos prontos por aquí.

Nos despedimos, rápidamente bajamos y como estaba dicho, el conductor nos estaba esperando en la entrada, el trato del hotel fue excelente. Al llegar al terminal vimos a Jade sentada en un sofá con una taza de té, al vernos se para y sonríe caminando hacia nosotros. Estaba muy cambiada, con un vestido blanco perla y el cabello rojizo puesto hacia un lado, conservaba su aspecto elegante sin mostrar nada extravagante como es de costumbre en esta región . Atravesamos la puerta de cristal que nos separa y rápidamente nos pregunta.

- Como amaneció la feliz pareja?. Parece que ya se les agotó las pequeñas vacaciones, en este maravilloso lugar.

Jonas me mira y soltamos una risa cómplice. se sonroja y yo le agarro la mano y digo.

- Con un chico como esté a su lado cualquiera duerme bien. Y me le acerco para abrazarlo.

- Pues veo que se quieren mucho, al decir verdad hacen una linda pareja. Nos sonríe dándonos un pequeño giño.

- jajajaj... si señora ya nos lo han dicho-. Dice Jonas con algo de vergüenza.

- Bueno basta de hablar y vamos a entrar en el tren. Les guarde un puesto que de seguro les encantar tengo que compensarlos por haberles dado solo una habitación. Subimos unas escaleras en espiral justo en ese mismo salón y entramos rápidamente al fabuloso tren.

Jade nos guió hasta nuestro vagón, era casi igual que el anterior, pero este tenía unos ventanales más grande y las paredes cambiaban de escenario estaba puesto en modo jungla, y todo se veía como si estuviéramos en el antiguo Amazonas del que tanto oíamos hablar en las clases de historia y geografía antigua. En la mesa había una gran cantidad de comida y dos sillas doradas muy elegante que estaba al borde de esta. Jonas se quedo muy sorprendido, estaba analizando todo con mucho detalle.

- Quiero tener uno de estos en casa-. Dice asombrado tocando las paredes que simulaban el paisaje.

- Cuando me gradúe que hagan la distribución de profesiones y tenga mi casa, comprare uno de estos Jonas-. Le digo sentándome en la mesa a comer un poco.

- Ustedes disfruten su viaje, nos vemos cuando ya entremos a su región-. Dice Jade saliendo del lugar un poco apurada.

- Oye Jonas no quieres comer, está muy sabrosa la comida. Tal vez sea la última vez que vea una mesa así repleta de esquicitos platos.

- No tengo hambre, sólo quiero estar en ese sofá abrazándote-. Me dice pasado sus manos por mi hombro.

- Deja terminar y te complazco en todo lo que me pidas-. Le ´pongo mi mejor sonrisa y luego me giro para degustar los excelentes majares.

Deje la mesa casi sin comida, la verdad soy de esos que come mucho y nunca pierde la figura. Después del jugar un poco al fútbol eso era lo que más me gustaba hacer, comía hasta 8 veces al día. Cuando acabe me senté con Jonas en el sofá, estábamos viendo una película de esas románticas, al terminar nos quedamos conversando un rato hasta que pudimos ver el humo emitido de las grandes industrias a las afueras del Norte. Sin dudas el viaje de regreso es mucho más rápido que el de ida.

- Creo que llegamos, mejor nos acomodamos antes de que Jade entré y nos encuentre así abrazado-. Dice Jonas sobándome con sus delicadas manos mi pecho.

- Ok pero primero déjame ver tu cuerpo antes de que salgamos de aquí. Le digo con una mirada algo caliente.

Lentamente Jonas se fue desnudando y se sentó en mis piernas moviéndose de un lado al otro y besándonos con mucha pasión. Esa escena hizo que mi pene se pusiera tieso rápidamente y cuando le toco las nalgas para meterle uno de mis dedos suena la puerta. Jade nos gritaba del otro lado y no encontraba como abrir, hasta que Jonas se oculta en el baño y yo trato de tapar mi gran erección.

- Ya estamos muy cerca, de la estación, espero que hayan disfrutado y pasado bien...un momento y el otro chico… tu novio?.

- Novio? Jajajaja nada de eso señora, Sólo somos buenos amigos-. Dice Jonas saliendo del baño.

- No le paré Jade el es un poco tímido con esto de las relaciones. Mi novio y yo quedamos encantados.  Digo poniendo énfasis en la palabra NOVIO. Jonas enseguida pone sus ojos en blanco.

- Quee no somos.....

- Fue un placer conocerlos, nos vemos en otra oportunidad, cuídense mucho. Y si vuelven a ir me escriben yo con gusto los recibiré-. Nos despedimos de Jade y nos dispusimos a salir del vagón con nuestras maletas. En eso Jonas me queda mirando fijamente y dice.

- Jurame que nada va a cambiar-. Me dijo con unos ojos llenos de lágrimas. - Jurame que vas hacer el mismo Mathias de hace dos días.

- Amor que estás diciendo? Claro que no cambiare nada. No te dejaría por nada del mundo, eres todo para mí. Te quiero mucho, estamos juntos en todo ahora-. Le digo abrazándolo y dándole un fuerte beso.

Al salir, estaba su familia en un rincón esperándolo con una sonrisa, y pude notar un señor que por su físico podía ser su papá. Y al otro lado estaba Nico, Tomás y Manuel discutiendo como era costumbre, al vernos dejan de discutir y se ponen a esperarnos ansiosamente.

- Wow, amigo Jonas estas muy cambiado se nota que el viaje le prestó, acaso es ropa nueva?-. Dijo Nicolás dirigiéndose hacia la familia de Jonas .

- Como estuvo el viaje campeón?-. Me dijo Tomás cargando mi maleta. - Estoy esperando que me digas con cuantas tías ligaste allá, eres muy afortunado hombre-. Giro para saludarlo y lo que veo me deja en shock.

Observo detenidamente  su indiscutible cabellera plateada, estaba parada junto en la puerta, hablando con Rebeca. No podía creerlo. Pero que hacia aquí?. Tenía que sacarla de la estación cuanto antes. Jonas no me lo perdonaría. Ignore las palabras de Tomás y fui rápidamente a la salida, le hago señas para salir y ella va delante hasta que se para en su coche.

- Mi amor que bueno verte ya te extrañaba. Dos días sin ti es como una eternidad-. Rápidamente se me acerco y me dio un beso en los labios.

- Se puede saber que ha sido todo esto Natasha?-. Le pregunto separándome muy rápido de ella y viendo hacia los lados para verificar que Jonas no nos viera, mi voz era algo densa y desesperada.

- Oye no me trates así. Llevo ya mucho tiempo esperándote y sabes que no soy de las que espera a nadie, sólo lo hago por ti, porque eres mi novio, lo que más quiero en esta vida.

- Natasha que yo sepa...-. Vi saliendo a Jonas, este me miro muy triste y se metió rápidamente en el auto de su mamá, veo por el vidrio trasparente como su mamá le toca la mejilla, y si mi vista no me falla puede notar algunas lagrimas gruesas saliendo de sus tristes ojos. Solo se me viene un pensamiento a la cabeza.- Que he hecho?

- Mathias que yo sepa solo tuvimos una pequeña discusión. Ahora si todavía sigues molesto por eso te dejo solo para que analices más las cosas.

Natasha rápidamente se montó en su carro y se fue muy enojada junto a Rebeca, ni siguiera se despido.

- Y que fue todo eso?-. Pregunta Manuel muy extrañado. - Sera mejor que te llevemos a tu casa debes de estar muy cansado. Mi mente no paraba de darme vueltas, era un estúpido laberinto. No encontraba ninguna solución, recorvada constantemente esos tristes ojos. Mi semblante cambio rápidamente no podía quedarme ni un minuto más en este lugar, quería pensar en cómo todo se me fue a la mierda.

- Si, si debe de ser el viaje, Tomás me llevas por favor. Digo rápidamente con las manos puestas en la cabeza

Nos montamos rápidamente y empezaron hacerme  preguntas sobre el viaje. Casi ninguna la respondí, no podía sacarme la imagen de Jonas cuando me vio con Natasha, la había cagado. Todo se me había venido abajo.

- Pues a Jonas no le fue tan bien como parece, a la final me dijo que todo había sido un desperdicio-. Comento Nicolás, sus palabras entraron rápidamente por mis oídos. Me quede en shock por un tiempo.

- En verdad  te dijo eso Nico?-. Le pregunte otra vez, para que me confirmara lo dicho.

- Jonas me dijo que el viaje había sido un total desperdicio. Que si tuviese la oportunidad de retroceder el tiempo no hubiera venido al Norte.  La verdad no sé porque  dijo esto último si al principio parecía muy contento.

- Ooooh! Bueno no es por nada pero sabemos cómo son en su región. No les gusta la diversión-. Dice Manuel buscándome una lógica a las palabras de Jonas.

Después de decir eso nadie dijo nada hasta llegar a mi casa. Vi que al  final de la calle estaba Jonas abrazando a su papá y entrando rápidamente a su casa. Quería ir rápidamente a su casa para contarle la verdad, quería tenerlo a mi lado. No soportaba verlo así. Sin duda le había dado una puñalada por la espalda. Entre a mi casa y luego les digo a mis amigos que estoy cansado por el viaje, quedamos en vernos mañana en la hora libre para ponerlos al día.

- Quiero estar sólo un buen rato, Nos vemos mañana chicos. Me despedí rápidamente, quería meditar un rato acerca de lo sucedió. Sabía que todo era mi culpa no debí mentirle acerca de mi relación con Natasha... continuara.

Llegamos al climax de la historia, y nos acercamos a su final... Espero que le haya gustado este capitulo. No se olviden de valorar!!!

(9,86)