Continuando con las fantasias con mi primo, el otro día me encontraba sola en casa y con el pensamiento puesto en él comencé a tocar mi cuerpo, me recoste en la cama, me saque la blusa y el pantalón quedando solo en sosten y panty...acaricie mis senos y aprete mis pezones un poco, fuí bajando mis manos poco a poco hasta llegar a mi pubis , baje un poco más para abrir ms labios y poder acariciar mi clitoris que para entonces ya estaba durisimo (y empezaba a lubricar tanto que hubiera deseado que él estuviera ahi para hacerme el amor). Era tanto el placer que yo estaba sintiendo solo con imaginarlo que metí un par de dedos en mi vagina y continue jugando hasta alcanzar un orgasmo.
Como aún tenía miedo de hablar con él prefería cerrar los ojos cuando tenía sexo con mi marido, así podía seguir imaginando que quien me hacía el amor era mi primo, las ganas de estar con él cada vez eran más. Un día volvio a verlo nuevamente en una reunión y al tenerlo cerca sentí un leve cosquilleo ue recorrio mi cuerpo luego de que me dio un beso en la mejilla. Olia delicioso, aun lo recuerdo.
Después de ese momento quería dejar de pensar en él y en todas mis fantasías, pero ya era imposible. Yo lo miraba de repente poniendo especial atención en su boca, esa boca con la que ya había soñado y también por momentos miraba abajo para apreciar el bulto entre sus piernas...quería en ese momento confesarle que deseaba tanto que me tomara entre sus brazos y que me cogiera justo como yo soñaba, deseaba tanto probar sus labios. Nuevamente tuve esa sensación que me hacía apretar fuertemente las piernas por que la presencia de ese hombre de verdad me hacía mojar mi ropa. Aunque él no tenía idea de mis verdaderos pensamientos y todas mis sucias fantasías a mi la situación me parecía sumamente excitante, imaginarme en sus brazos ya se había convertido en parte de mi vida diaria. Cada que podía me masturbaba pensando en él.
A veces todo esto me parecía una completa locura y al no verlo tan seguido llegué a pensar que todos estos sueños pasarían, pero no fue así. Un día lo ví bailar de una manera que me dejó fascinada, estaba yo sentada admirando esos movimientos de caderas que solo me hacían pensar más en su pene, fue entonces cuando por fin me decidí a confesarle que me gustaba, que me parcía sumamente atractivo y que si era posible quería ser su amante; pero no pude, almenos no ese momento. Pasaron unos días cuando pude hablarle pero no de frente, lo hice por medio de facebook, pensaba que así sería menos vergonzoso si él me ignoraba o no respondía como yo esperaba.
No sabía como empezar a platicar con él, todo me parecía absurdo para comenzar, y luego después de tanto pensar solo me decidí por un simple "HOLA", después de haber dado click para enviar ese mensaje los nervios me invadieron, no sabía si el respondería, pues como casi no hablabamos. Ese momento me parecio eterno, sabía que si él no respondía era por que no le interesaba si quiera platicar conmigo, y si eso sucedía tendría que dejar todo en una fantasía y un momento vergonzoso; pero no perdí la esperanza de que él también tuviera algho de interes en mi. Mientras esperaba su respuesta, el corazón empezó a latir más fuerte, apretaba mis manos y mordía mis labios, de pronto una sonrisa picara se dibujo en mi rostrto cuando vío que él había respondido. Ahora solo quería saber si yo le gustaba pero no se lo quería preguntar directamente, así que se me ocurrio la pregunta más boba...pregunte si sabía de algun cirujano, alegando que quería ponerme más en algun lado ( que tonta me sentí), pero en seguida dijo que para nada me hacía falta, fue entonces cuando supe que después de todo yo no le parecía indeferente. Desde entonces empezamos a platicar un poco más acerca de lo que nos gustaba, de sexo, él propuso que fueramos haciendo preguntas sin dejar de contestar ninguna y asi fue. Ahora podía masturbarme con mucho más ganas por que sabía que él también tenía ganas de coger conmigo........