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Mi final de sexo: Militar 2, Catracho 0

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Era un día domingo, con una tarde calurosa en la capital y con mucho bullicio por parte de los miles de seguidores de los equipos favoritos de Honduras, que estaban peleando futbolísticamente la final del campeonato. Yo estaba en un pequeño bar- restaurante, en el centro de la ciudad y observando en partido por televisión, ya que no soy fanático de ir a los estadios. Estaba junto a Dennis, un joven militar de unos 23 años, el cual forma parte de un escuadrón especial de los militares, llamado "Cobra". Este escuadrón tiene una disciplina y especialización mayor que el resto de los soldados y una mejor fortaleza física.

Dennis, no un tipo guapo, pero tiene un físico tremendo. Es de piel oscura, con poco vello, de cara redonda y pelo y ojos color negro. Es "chaparro" , con 1.67 mt. De estatura., pero lo compensa con una musculatura fenomenal, con unas gruesas piernas, que moldeaba su ajustado pantalón. Y en medio de este, se notaba un ‘bulto’ grande y bien formado. La camisa que andaba, también le quedaba "socada" y en sus brazos se notaba una robustez propia de quién tiene algún tiempo de hacer ejercicios. Su corte de pelo, era estilo hongo, muy a la moda entre los militares. Todo un tipo para tener encima!!.

A Dennis lo conocí en un lugar llamado "Parquecito del Soldado", que queda frente a una institución militar y que es bien asediado por chavas y "chavos" por la gran cantidad de soldados y militares de bajo y mediano rango que llegan allí y que laboran en Estado Mayor. Estaba esperando una su novia y aproveché para platicar con él. Desde hace algún rato lo estaba observando, ya que aparte de su recia personalidad, me llamó la atención, por ese bulto, que ya mencioné. Estando parado, le era completamente visible. Y sin malicia, yo lo volteaba a ver a cada instante. El me contó, que tenía que presentarse al día siguiente, a las 6:00 de la mañana en el Estado Mayor, en donde estaba asignado, pero que por no andar dinero (sueldos para los soldados en Honduras, son bastante bajos), tendría que irse a dormir a esas instalaciones.

¡He aquí la luz, me dije!. –Dennis, nos acabamos de conocer, pero si tú quieres, te invito a tomar unas cervezas y vemos el partido, para que te relajes y no te vayas tan temprano a meter a ese lugar. Concordamos en eso y es por ello, que desde hace una hora estamos en este bar.

Estando allí, platicamos de varias cosas y entre ellas del "pegue" que tendría con las chavas por su físico. El comentaba que no era así, que muchas chavas se fijan en el "pisto" (dinero) y otras cosas y que si tenía algunas chicas, pero no la gran cosa, pero que cuando estaba con ellas, les demostraba lo "caliente" que puede ser.

Le dije, que eso lo mostraba con la "cosota" que tan visible se notaba en su pantalón y diciendo esto, me atreví a tocarle el muslo, como una doble señal, tanto de amistad como de interés. –"Bien, no creas que es tan grande, pero me defiendo bien y se coger bien a las mujeres y a veces, como dicen, "todo lo que sea carne al gancho"". Me dejo estremecido y mudo. Quería llegar a ese punto, pero no tan rápido. El notó lo pensativo que estaba y me dijo: - "Qué pasa…?". Te has quedado callado… O es qué no me crees?. Si queres te lo demuestro y dicho esto, se acercó a mi oído, como para decirme algo en secreto y la sorpresa fue que me dio una lamida que me dejó sin aliento, literalmente y con su mano, me agarró mi mano derecha y me la puso encima de aquel "bulto", el cual lo sentí tibio y compacto.

Yo estaba entre confundido y excitado. Yo quería llegar a esto y soy el que toma la iniciativa. Sin embargo, en esta ocasión, yo era el que se dejaba llevar. Y se siente bien. Yo aproveché la situación y quise seguir acariciando sus genitales y él me dijo que no, que aunque estábamos algo retirado del centro del local, habían muchos clientes y había que ser discretos. Sabia que así debía de ser, pero se me subió la calentura muy pronto. Seguimos así por un rato más y al terminar el partido, ganando el equipo local (Olimpia) y con una algarabía general, Dennis me dijo que le gustaría acompañarme al hotel, para darse un baño y que luego se iría a presentar al estado mayor. Yo le dije que no había problema, que sería un placer tenerlo allí, aunque sea por un rato.

Ya en el hotel, tuve el placer de ver como se desnudaba ante mi atenta y ansiada vista. Al quitarle su camisa negra, tipo polo, vi un torso ancho, con líneas de músculos bien definidos. En su pecho, se notaban unos incipientes vellos que hacían una leve cruz, con la vertical que se dirigía a su ombligo y que terminaba en este, para crecer en forma de un tupido triángulo atrás de este. Tenía unos brazos con unos "gatos" (músculos en el antebrazo) asombrosos. Y cuando se quito el pantalón, quedo en unos de esos calzoncillos blancos de antaño, y enseñándome unas piernas gruesas, levemente velludas y con unas nalgas de ensueño. Eran redondas, fuertes, bien "paradas". Cómo deseaba mordérselas y acariciarlas!!.

Ya estando sólo con el calzoncillo, metió al baño y oí abrirse la llave y caer un chorro de agua. Yo estaba a la expectativa de lo que seguiría. Se bañaría y se iría o pasaría algo mejor?. . Estando en esos cabildeos mentales, cuando le escuchó decir. – Ha que horas vas a entrar a bañarte, no era que estabas caliente?. Te aseguro de que aquí te vas a quitar el calor. Jajajajajaja!.

Y ni corto ni perezoso, rápidamente me quite la ropa, quedando en un bóxer pegadito, que me gustan ponerme en esos momentos especiales. Dennis estaba bajo el chorro del agua y con su ropa interior mojada, se notaba muy bien la forma y líneas de su verga. Estaba dormida y recostada a su lado izquierdo. En la parte baja, se notaban muy bien sus "huevos", que colgaban libremente y le hacía que su calzoncillo se bajara en el centro. Cuando yo llegué, el me dejo el chorro libre y cuando estaba refrescándome, sentí cuando el se acerco por detrás de mí, poniendo sus manos en mi cabeza y bajándolas suavemente desde allí hasta el ombligo, Esto y el sentir su cuerpo pegado al mío y el calor de sus genitales rozando mis nalgas, me pusieron "la carne de gallina", no del miedo, sino de la excitación.

Su cadera comenzó un movimiento circular alrededor de mis nalgas, sentía muy bien el grosor y longitud de su miembro, cuando de vez en cuando me apretaba las nalgas contra el. Sentía como poco a poco, esa "serpiente" comenzaba a crecer, queriendo entrar a mi oscura, húmeda y regocijada cueva. Acercó sus labios a mi oído y m susurró: - "Quiero que me la mames".

El agua seguía cayendo suavemente en mis hombros, cuando me arrodillé frente a él y me acerqué al prepucio de su pene. Comencé a acariciarlo, besando y acariciando a lo largo su verga y sus huevos, usando para ello, mis labios y manos. También acaricié sus envidiables nalgas y las piernas, tan compactas y duras. El ponía sus manos en mi cabeza y me ayudaba con el ritmo.

Su paloma estaba llegando al clímax y pude notar que su tamaño no era algo exagerado. Llegaba a medir unos 16 CMS. (6 ½ pulgadas), y era algo gruesa, con su cabeza y tronco completamente erecto al frente. Tenía una cabeza rosada y de buen grosor y de sabor. Se la agarré con mis dedos y empecé a acariciar en mis labios y metérmela dentro de la boca. Primero la cabeza y poco a poco el resto de ella. Luego, me la metía y sacaba casi completamente, manteniendo sólo la cabeza dentro de mi boca, en cada arremetida, mi lengua se la acariciaba con pasión. La sensación era súper!. El me agarraba la cabeza y con fuerza presionaba para adentro y para afuera, dando suspiros de placer y gozo. Yo gozaba también, con el tacto de sus formidables miembros, al acariciar con fuerza también, sus piernas, nalgas,, brazos, espalda , huevos, pecho… Un gozo en ambas vías, pero usando sentidos diferentes.

De repente, Dennis fue reduciendo el ritmo y me dijo, que paráramos, que quería cogerme y que no quería acabar en mi boca. Terminamos de bañarnos, enjabonándonos un poco y luego de secarnos, salimos al dormitorio y nos tomamos unas cervezas que teníamos, sentados en la cama. En ese tiempo, su verga, no perdió su erección y cómo estaba desnudo (yo, soy más puritano en eso y me puse el bóxer de nuevo), me mantenía caliente, ya que era un placer visual ver esa pija, como un pequeño mástil, en completa dirección al techo del cuarto. En mis adentros, yo me decía que era una verga ‘chica’ y que no tendría mucho placer, ya que siempre me han gustado las "vergas grandes", de unos 17 a 20 CMS, más difícil de encontrar, pero más excitantes y penetradoras. Pero Dennis me enseñaría esa noche , que algunas chicas lo hacen más rico que las grandes!!.

Al ratito, yo me acerqué a mamarle la verga, poniéndome en medio de sus piernas y cuando ya tenía la paloma bien parada, agarré un condón y con mis manos, se lo puse en la cabeza de su verga y con mis labios, lo fui empujando hasta llegar a la base. Luego de una mamada "plástica", Dennis me dio vuelta y me dijo que me pusiera como agachado y con la cabeza y brazos en la cama. Luego, él procedió a ponerse atrás de mi y ha tocarme suavemente las nalgas, con sus dedos y meterme varios de ellos dentro de mi agujero. Uno, dos al mismo tiempo. Era una sensación sabrosa el sentir la penetración y el ensanchamiento de los músculos anales. Siguió haciendo esto, con la finalidad de prepárame para el "dedo mayor". Pero tan rico lo sentía, que en un momento de dije que parara, ya que por poco y eyaculo de tanta excitación. Pocas veces me había pasado algo similar en una pre-penetración.

De repente, siento que algo más grande esta entrando en mi dilatado agujero y la sensación de ardor y a la vez de excitación recorre por todo mi cuerpo. Dennis ha comenzado un sabroso entra y saca cadencioso y lento, lo cual me hace disfrutar cada una de sus arremetidas, las cuales poco a poco se van haciendo más rápidas y dolorosas. Aparte de un mete y saca rítmico, hace un estupendo movimiento circular, que comienza cuando el saca la dura verga y al momento de meterla de nuevo, hace un giro circular con sus caderas, el cual termina cuando me la mete al fondo y luego hace lo mismo, todo en segundos y durante un buen rato. Va…mete al fondo…saca…mete… Un ritmo que me hace delirar de placer!

Luego, se levanta un poco, flexionando sus rodillas y se sube casi encima de mí, quedando su cadera encima de mi trasero e inclinándose al momento de metérmela, sabroso! Sabroso! Ahhhhhhh!. En esa posición me la mete hasta el fondo en cada embestida, lo chico de su verga queda compensado con su fuerte, profunda y rápida arremetida, que me hace clamar de la lujuria, vez tras vez. Agggg!. Ahhhhhhh!. – Qué rico lo haces!,Dale, dale, métemela toda. Ahhhhhhh!. Rico sonido hacen también la bolsa de los huevos que pegan con mis nalgas, Clap! Clap!. Tan excitante y frenética ha sido la sensación, que en medio de esta, no resisto y eyaculo sin control. En ello ha ayudado que en cada metida, con sus manos me ha estado friccionando mi verga y no resistí.

Cuando estábamos cogiendo de lado, con mi pierna izquierda semi-levantada, para permitir una introducción más profunda. De repente, siente sus jadeos más fuertes y sus metidas con mayor rapidez. En sus jadeos escuchó: Ahhhhhhh! - Me vengo, me vengo….Ahhhhhhh!. Siento su verga como explotando en mi interior y como creciendo en el momento de su clímax. Yo le pido, que no la saque, que me la deje adentro hasta que se se vuelve flácida. El accede a ese pequeño favor, lo que da un gozo extra.

Una vez terminado, nos levantamos y nos damos un baño junto. Dennis se cambia y antes de que él se vaya, le doy algo de dinero, no solicitado, ni como pago, pero se lo doy porque sé que lo necesita. En otra vez, me lo pagará, porqué se que habrá otra vez. Cómo si leyera mis pensamientos, me da las gracias y me dice que en tres semanas, el sale de nuevo de franco y ya con "pisto", y que en esa ocasión el invitará el paseo. Anhelo esa segunda cita. Pocos hombres me han hecho gozar tanto y tan rico.

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