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Becaria nueva en la oficina

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Esta historia me sucedió hace un par de años, yo tengo 35 años y trabajo en una entidad bancaria en la ciudad de cadiz (España)

Era el mes de junio y nuestro jefe nos indico a todos los compañeros de la oficina que nos mandarían una becaria, que cuando llegara que la hiciéramos pasar a su despacho,

Pues resulta que durante toda la mañana nos mandaron tres becarios para la entrevista y de los tres mi jefe elegiría a uno o una de ellos.

El primer candidato era un chico de 22 años bastante torpe, con bastante mala presencia, por lo cual cuando se presento ante mi lo pase al jefe y a los cinco minutos salio y por lo tanto mi jefe me dijo que ese no era buen candidato.

El segundo candidato era una chica alta de 1.70 rubia y bastante pechugona pero al hablar mas vale que no abriera la boca, paso al despacho y a los cinco minutos fuera.

La tercera candidata era una chica que media 1.65 morena que apareció por la oficina con un traje blanco y el pelo suelto. Al entrar creí que era una clienta pero cuando pregunto por mi y me contó que venia para una entrevista la verdad que la verga se me puso como un palo, ya que al pasar por una cristalera y al dar el sol en su vestido pude contemplar que solo llevaba un tanga azul y sin sujetador.

El pase al jefe y este al entrevistarla a los cinco minutos le dijo que ya la llamaría.

Al salir el jefe me pregunto que me parecían los candidatos y le dije que la tercera ya que era simpática (la verdad que estaba muy buena para comérsela), el jefe me dijo que la llamara y que seria nuestra becaria en los próximos 6 meses, la llame y la cite en la oficina al día siguiente.

Al día siguiente eran las ocho y apareció con un vestido rojo con un escote que quitaba el suspiro ya que enseñaba sus 95 de pecho, estuvo todo el día currando y yo durante todo el día la tuve que enseñar a trabajar, pero ella no paraba de rozarme cada vez que podía y eso motivaba que me tenia todo el día con la polla que me explotaba, incluso tuve que ir al baño un par de veces para bajarme la calentura.

Al finalizar el día ella salio como era costumbre a las 3.00 y yo tenia que quedarme a terminar mis cosas ya que al pasar todo el día junto a ella no pude acabar mis obligaciones, me pregunto si Salí y le dije que me quedaría un par de horas mas, ella se fue.

Pero a los 10 minutos la oficina estaba vacía y yo solo en ella, pero sucedió la cuestión de este relato.

La becaria que llamaremos rosa, llamo a la puerta y al ir a abrir la puerta estaba ella con el vestido rojo, la hice pasar y pensé que se le había olvidado algo, pero me dijo que venia a darme ago que tenia.

Me dijo que iba al almacén y a los cinco minutos me llamo, pensé que querrá?

Al entrar en el almacén me la encontré sentada en unas cajas y me acerque, y ella me pregunto directamente:

¿Juan te gusto? Yo le respondí que a que venia eso.

Ella me respondió: desde que llegué ayer no me quitaste la vista de encima, lo de forma cortes le pedí perdón por si se había molestado y ella me respondió:

Quitándose todo el vestido rojo y dejándose solo en un diminuto tanga también rojo. Eso hizo que mi polla saltara con una tremenda erección y ella se acerco a mí y empezó a besarme.

Al principio me contuve pero ella no paraba de meterme la lengua lo mas profundo de mi boca y con la mano empezaba a tocarme por encima de la ropa, y me dijo creo que te gusto.

Me quito la camisa y los pantalones y en mi bóxer estaba mi polla que reventaba, ella se agacho y me bajo los bóxer y me dio una tremenda mamada,

Después de mas de cinco minutos estaba que no podía mas y ella al darse cuenta paro y yo que no había estado quieto empecé a meterle manos bajo el mini tanga y cual fue mi sorpresa que para urna chica de 26 años tenia el coño totalmente rasurado excepto una mata finita.

Le baje el tanga y lo pude comprobar, entonces así desnuda me dijo que hiciera con ella lo que quisiera que estaba a mi entera disposición, que estaba para ser mi becaria para todo.

Lo primero es que le empecé a besar los pechos y al pellizcarle los pezones estos se erizaron y ella me contó que si me gustaba sus 95 de pechos, yo mientras solo seguía mamándoselos.

De ahí pasamos a un frenético mete-saca que ella no paraba de jadearme con que la siguiera follando, al cabo de 10 minutos ella, había tenido dos orgasmos y yo en su segundo empecé a eyacular y a corredme en ella.

Al mirar el reloj habían pasado más de tres horas y nos despedimos hasta el día siguiente, que nos veríamos en el trabajo.

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