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Solas en el cuarto

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Estoy con una amiga, en mi cuarto, sentada y cansada, recargada sobre la almohada. Un rollo de papel a mi derecha y a la izquierda una paleta chupada. El tiempo no existe cuando sueñas, cuando imaginas, cuando te diviertes o cuando te excitas. Soy Diana, una chica de universitaria, y lo que les voy a contar es algo que acabo de hacer hace unos momentos con mi amiga Paola. Soy una chica tranquila, pero con ganas de explorar mis deseos mas intimos al 101 por ciento. Llegar de la universidad en la noche no es facil y menos cuando es lunes. Afortunadamente hoy fue viernes y a pesar de no divertirme como deberia, lo hice acompañada de mi amiga y una rica paleta. Hoy vestí con unos jeans ajustado a mis caderas y a mi rico trasero bien parado del que yo misma estoy enamorada y excitada. Una blusa blanca ajustada a mis pechos y a mis caderas. Las miradas de los chicos me hace sentir deseable, sexy y linda, pero dudo que sepan como excitar a una chica tan solitaria como yo. Cuando veniamos de la escuela compramos una paleta que nos serviria de compañia esta noche. Al llegar a mi casa aventé mi mochila y me tumbé en mi cama.  Paola hizo lo mismo.Desnudé mi paleta, quitandole la envoltura lentamente como si fuera yo misma. Igual hizo lo mismo Pao. Miramos detenidamente las paletas y nos preguntamos ¿que podrias hacer con una paleta aparte de chuparla, nos reimos. A pesar de que no tenia calzón eso me hizo imaginarme algo excitante. Me recosté en la cabecera de la cama y flexioné mis piernas. Le dije a Paola que me observara. Mientras chupaba la paleta me fui imaginando como si estuviera mamando la punta de una verga ¡¡que rico!! La succionaba, la lengueteaba, me hubiera gustado que fuera real. Conforme saboreaba mi paleta, con la mano derecha fui desabrochando mis jeans. Bajé mi cierre lentamente y vi como se asomaba mi linda y bella rajita de vellos. Estaba exitandome, sentía que mis ricos y acidos jugos corrían por la entrada de mi vagina. Desearia que alguien se los tomara y que luego me diera un beso para probarlos. Mmm que rico. Se lo mencioné a Paola y le pedí que cerrara con seguro la puerta. Comencé a acariciar mi puvis con mis llemas.

Sentia mis vellos, cortaditos. Y con mi dedo indice lo fui acercando más a mi entrepierna. Dios estaba humeda, lo sentía. Comencé a formar circulos en esa parte. Estaba tocando mi clitoris. Hacia circulos lentamente como si fuera la lengua de un chico. Cerré los ojos para disfrutar de la sensación tan rica y excitante. Decidí por quitarme el pantalón y quedar desnuda de abajo, mostrando mi vagina totalmente abierta, lista para que alguien se acercara y me metiera su rica lengua y me probara, y que me penetrara con locura, con ganas de violarme y hacerme gritar como una puta loca. Paola me miraba y se mordia los labios. Se acercó y flexioné mis piernas y me abrí más para ella. Se recostó frente a mi y a mi vagina y mi rica entrada de mi trasero. Ay que rico!! Que excitada estaba. Metí la paleta a mi boca y use mis manos para abrir más la entrada de mi vagina, Dios, estaba humeda, que rico, miré a Paola  y le dije que si seria capás de probarme. Me miró a los ojos y se acercó. Comenzó por darme besos, sentia rico, acaricie su cabeza y le pedí que introdusciera su lengua, que me escupiera. Luego junté mi indice y mi dedo de en medio y los rosé lentamente por mi entrada, sentiendo el contacto de las yemas como si fuera la propia lengua de fer. Saqué la paleta de mi boca y tomé el rollo que tenía cerca, y puse mi paleta. Mirando mis piernas blancas, mi vagina, mi ano, estaba totalmente abierta, volví a pasar mis dedos en mi vagina y separé más mis pliegues, dejando ver mi linda entrada. Tomé mi paleta y ahora la rosé sobre mi entrada, sentia pegajoso pero rico, enmielaba mi vagina, mis ricos pliegues, veía como brillaban de enmielados, se veian ricos. No se si estoy enferma o loca o deprabada pero le pedí  a Paola que rosara su lengua por mi ano. Dios con solo escribirlo me excita.

Que lo bese, que lo pruebe y que me diga que le gusta. Cerré mis ojos, no aguantaba lo caliente que estaba. En ese momento sentí como algo suave y esponjoso tocaba la entrada de mi trasero. Dios era la lengua de Pao, sentia muy rico, sentia como queria meter su lengua. Le pregunte si le gustaba. Y me contesto que era lo más rico que había hecho y que me lo haría las veces que quisiera. Estaba sudando ya. No lo creía. Estaba siendo probada de una zona muy intima. Y aunque podria ser asqueroso me encantaba,  Tomé denuevo la paleta y no lo pensé dos veces, la excitacion me mataba, estaba super caliente. Coloque la paleta en mi vagina y la fui metiendo poco a poco mientras Paola me comia todo mi rabo. Gemia de placer, entre abri los ojos y miré a Pao como lengueteaba mi delicioso ano con desesperación. Lo probaba con gusto. Que rico, me decia. Tomó la paleta y la sacó de mi vagina y se la llevó a la boca, ¡¡sii!! Que rico le dije. La metió otra vez y se la chupó denuevo. Esto era tan excitante, tan pervertido. En ese momento se incó en la cama y se comenzó a quitár los zapatos, su pantalón. La ayudé como loca y desesperada. Mi amiga es tan guapa, piel clarita, cabello lacio, un lindo cuerpo que la mayoria de los hombres moririan por lamerle todo el cuerpo. Me volví a recostar denuevo y le pedí que estaba calienticima, que hiciera conmigo lo que quisiera. Tomó la paleta, la probo con la lengua, y succionó mis fluidos que llevaba. Me preguntó si estabamos solas. Le contesté que si. Y salió semidesnuda de mi cuarto. Sin saber que iba a hacer, regresó con un banco. Volvió a cerrar con seguro y me pidió que me sentara en él. Lo colocó junto a una mesa. Accedí a su petición y me dijo que me sentara de forma que me recostara, de dejando que mis codos se recargaran en la mesa y que me abriera toda, dejando ver mi vagina totalmente abierta al igual que la entrada de mi trasero. Tenia duda en lo que haría. Pero como mis ganas no se  iban, imaginé que haria algo excitante. Se incó en el suelo y al tenerla enfrente.

Observé como lo hacia denuevo. Mmmm gemí y disfruté como  paola chupaba mi ano, presionaba mi hoyo con la punta de su lengua. Dios, sentía que entraba. Que probaba todo de mi. Metió su indice en su boca, lo lubricaba y sentí como lo presionaba con fuerza en mi rabo. No podia creerlo. Que rico, que asqueroso pero que rico. Sentia su dedo dentro de mi. Gemia, y aún no estaba todo adentro. Tranquila nena, me decía. Poco a poco lo fue introduciendo, sentia como entraba, era una sensación muy rica. Lo sacó lentamente, dios podia jurar que sentia como si estuviera haciendo del baño. Cuando Paola saco su dedo lo miró, lo olió y lo probo, mirandome. Mmm que rico sabe, me dijo. Eso me excitó demaciado. Diana me gustas, decia. Sacó su dedo y lo metio en mi rabo, pero esta vez lo metio con mas fuerza y lo enbarraba en mis paredes analesanales, que rico, sentia como mi ano se abria más y más. Lo sacó y me lo dio a probar.

 

Continuará

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