Nos despertamos abrazados y todos transpirados, ella me acariciaba todo el tiempo y me besaba. Cuando miramos el reloj de la mesa de luz esos que son digitales y con los números en verde marcaba las 19:10. Le digo en voz suave: hay que levantarse, tenemos que ir a buscar a Daniel.
Huy tienes razón me dice vamos a bañarnos entonces, yo le contesto que mejor por separados sino íbamos a demorar un montón y me responde que tenía razón.
Los dos usamos baños diferentes ya que había dos y tenían duchas. Al salir me la encuentro vestida elegante y picaramente me dice: tengo que parecer que fui a tomar el té con una amiga y me guiño el ojo.
Me pregunta si me gustaba y me acerco y le doy un tremendo beso y le digo: esto aún no termino y me responde: recién empieza.
Llegamos a lo de la hermana que vivía justo a mitad de cuadra con su marido. Nos recibe con un beso y contándonos como se había portado Daniel. Ella me presentó y le dice es el hijo de Mary te acordas. La hermana le dice: Mary claro la enfermera que cuidó a mamá, gran mujer y qué hijo tan guapo. Si le contrate esta semana que no está Ángela para que me ayude con Daniel y no estar sola.
Muy buena idea dijo su hermana, está bien tener a alguien en la casa de confianza. Me miró picarescamente y dice una excelente idea.
Luego de tomar algo donde Gladys le cuenta a su hermana que yo hace más de un mes que trabajó con ellos y que me llevo muy bien con Daniel que le hago hacer ejercicios y todo. Le describo a la hermana que le dicen Coca. Es un par de años menos que Gladys un poco más baja y con unas tetas de igual tamaño que Gladys. Quizás esta tenía más parado el culito, más redondo. Así que después de la charla que llevamos decidimos volver a la casa y así dejábamos descansar a la gente.
Cuando llegamos al dpto Daniel estaba confundido claro nunca me vio a esa hora en su casa y por ende no me reconocía. Se la paso repitiendo todo el tiempo quien era ese tipo y que hacía en su casa. A la que Gladys le aclaraba que era Juanjo el chico que te cuida a la mañana, vos lo conoces le decía. Y una de las veces me miró con un brillo en los ojos como de excitación y le dijo es el hombre que contrate para que se quede conmigo de noche. Ahí entendí el juego pero seguí haciéndome el inocente.
Al rato se tranquilizó Daniel y como que ya me empezó a tener más confianza, osea me reconoció. Le pusimos el pijama y nos sentamos a ver TV en los sillones del living. Gladys me dice que iba a preparar algo para cenar y que nos llamaba cuando estaba me tiro un beso y salió cerrando la puerta detrás de ella.
A la media hora nos llamó que estaba lista la comida y hacia allí nos dirigimos. Cuando abrí la puerta y la vi casi me desmayo estaba con el camisolín transparente negro con el que me había recibido y desnuda totalmente pero esta vez con unas pantuflas de taquito con unos detalles negros.
Cuando ve mi asombro se sonríe y nos dice que nos apuremos que se enfría la cena.
Sienta a Daniel en una silla y a mi me pone una al lado de la de él y se sienta en mi regazo. Ahora van a ser Buenos y van a comer todo lo que mami le va a dar de comer. Se estira para cortar un poco de carne para Daniel y acomoda su culo sobre mi paquete que está a punto de reventar. Así fue toda la cena le daba agua a el y después a mi pero normal aunque más sensual conmigo.
Así sufrí toda la cena un sufrimiento aunque de escondida le cole una mano entre las piernas y le metía un par de dedos en la conchita cosa que la excitaba también.
Llegó la hora que Daniel se fuera a dormir y ella le dio la medicación que él toma, después le tomó de la mano y lo llevó camino a la habitación. Antes de entrar se dio vuelta y me dijo ahora vuelvo y te llevo a vos y se mordió el labio inferior.
Para no ser menos me desnude lo más rápido que pude y me senté de una forma que cuando entra al comedor me vea con mi pija bien parada esperándola.
Habrá tardado como 15 minutos o más y cuando aparece el sorprendido soy yo. La veo entrar con los zapatos de taco agujas y toda maquillada, pero al verme así se queda con los ojos como un plato y la boca abierta.
Me dice: Mi amor chiquito como estas, y eso es por mi. Y camina hasta a mi y se para en el medio de mis piernas para darme un beso recaliente. Como puede va abriendo sus piernas y se sienta clavándose mi pija despacito. Estaba mojadisima y repetía por Dios que delicioso es esto, me encanta, nunca había sentido así mi amor. Empezó a pegar unos gritos y unos gemidos que la tuve que detener y decirle que se controlará más porque despertará a Daniel y quizás después no lo durmamos. Se acerca a mi oído y me dice: Tranquilo Bebé con la pastilla que le di ni con cañonazos se despierta y me chupa el lóbulo de la oreja. La separo diciéndole: Estás segura de lo que decis, vos me aseguras que no se va a despertar.
Claro mi amor, no confías en mi, querés que te lo demuestre. Y le respondo: Si quiero que me lo demuestres. Se queda sorprendida por la respuesta en primer momento y me pregunta: Querés que te lo demuestre? Si le conteste. Pensó unos segundo la respuesta y luego como que se le iluminó la cara, se transformó algo en ella cambió. Claro que si, todo lo que vos me pidas lo voy hacer te había dicho. Como pudo se salió de su monta me agarro de la pija y comenzó a caminar donde dormía Daniel y me decía: Ahora vas a ver de todo lo que soy capaz por vos.
Entramos a la habitación y prendió un velador de luz muy tenue y vi a Daniel durmiendo de costado como mirándonos. Ella tomó una banqueta que había la puso en medio de la habitación y me sentó en ella. Fue Hasta la puerta moviendo el culito muy sensual y volvió a mi montandome como en la cocina pero ahora mejor porque yo estaba más abajo y ella podía manejar el ritmo y la situación.
Empezó a subir y bajar despacito pero empezó a subir el ritmo y me decía a los ojos: ves que no se despierta, ves como no se entera de nada.
Y ahí la agarró de la cintura y empiezo a que la sentada sea más profunda y le empiezo a decir: Decime entonces quién es tu macho, decile a Dany quien es tu macho, con quien vas a coger como una puta. Me aferraba con todas mis ganas a su culo y la sentaba de golpe la subía y la sentaba. Así la tuve 15 minutos a ese ritmo y diciéndole esas cosas. Me pone las manos en el pecho para detenerme me mira y gira su cabeza mirando a Daniel que duerme y le empieza a decir: Mira el macho que tengo, el macho que me conseguí, mira como me coge, mira como me hace suya. Decía esto y acelera el ritmo estallando ella en un orgasmo increíble dejando una laguna en el piso como si se hubiera meado. Yo conservaba mi erección todavía pero seguía dentro de ella que poco a poco iba recobrando la cordura. Me dice: Vos no acabaste mi amor, me dejaste sola eso no se hace a su hembra, pensar que ese hijo de puta siempre me dejaba con las ganas.
No mi amor no te deje sola, simplemente me contuve porque ahora te voy hacer definitivamente mía frente a él y acto seguido le empiezo a meter un dedo en su culito. Ella adivina mi intención y lo aprieta diciendo: Nunca lo hice por ahí mi amor, me va a doler mucho. Soy virgen por ahí.
Por eso mi amor te lo voy a estrenar yo en demostración que eres mía y delante de él. Te voy a cuidar mucho no te voy hacer daño confía en mí.
Mirándome a los ojos me dice: prometí hacer lo que me pidieras y tu hembra no te va a defraudar, enséñame que yo voy a cooperar.
La levantó le saco la pija de la concha y se la pongo en la puerta de la cola: Metetela vos demostrale a ese lo que sos capaz por tu macho. Mirando a Daniel se fue bajando muy lentamente por mi pija y no decía nada solo respiraba profundo y se le caían lágrimas, cuando la tuvo por la mitad se detuvo y le pregunte si le dolía mucho, que si no quería no seguíamos que estaba lejos de mi hacerle daño.
Me mira y me acaricia: No mi amor no lloro de dolor, es de alegría nadie me había hecho sentir tan mujer, y está lejos de dolerme. Nunca pensé que fue tan hermoso sentirla por ahí.
Una vez que se sienta y entra completa me empieza a besar y le digo: Ya sos mía, ahora no podrás separarte de mi pija.
Nadie mi amor ya soy una adicta a ella y me beso largamente jugando con nuestras lenguas.
Me separo y le digo bueno ahora ya podemos ir a nuestra cama, la beso y le doy una palmada en la cola: Ya voy espérame allá.
Pongo la banqueta en su lugar voy apagar el velador y antes le digo a Daniel al oído: tu mujer es mía y me pertenece ahora. Cuando voy apagar el velador veo que ella está en la puerta se muerde el labio de abajo y sale corriendo para la habitación.
Salgo y cierro la puerta con llave por las dudas y cuando entro a la habitación la veo en cuatro con la colita parada y me dice: Ahora si podemos terminar estar más cómodos en nuestra cama. Y esa noche la terminamos en un remolino de sensaciones, la penetre de todas las formas, le deje leche en todos los agujeros hasta que nos dormimos rendidos.
Continuará