Estaba Julieta en su estudio junto a sus pinturas, caballetes, pinceles y lienzos, sola acomodaba un poco las cosas, su taller era por fin mudado de lugar a una zona mejor, sus retratos de desnudos habían sido un éxito, suspirando recordaba cada trazo y cada aventura amorosa que había tenido con sus modelos... varios habían pasado por su pincel y por su cuerpo, tenía algo mágico observarles sentados, varoniles, pero vulnerables. Ella de mediana estatura, cabello rizado y rubio, senos pequeños y delgada, se volvía una dominatrix que en vez de látigo tomaba un pincel, y en lugar de marcas en la piel, dejaba impresionado todo en un lienzo. Sin embargo habían dos pensamientos que le rondaban la cabeza, uno era nunca haber sentido esa sensación de sus modelos de ser observados, les excitaría mucho verse provocados, solos, vulnerables?, y la otra era de un tono más sentimental, James el muchacho inglés que lograba ver desde el ventanal de su taller, con esa presencia de amor adolescente y esa timidez que le inundaba cada vez que se le cruzaba por la calle o en la parada de autobús, no pasaban de un cortés saludo o de un comentario simple del clima, a pesar de que su departamento estuviese justo frente al otro edificio y a la misma altura de su taller- tan cerca pero tan lejos-pensó con un suspiro... como le habría gustado tenerle de modelo…
Pasaban las 3 de la tarde y el calor arreciaba, el hecho de que viviese en un tercer piso no le salvaba, las corrientes de aire brillaban por su ausencia, aún sin las cortinas y con las ventanas abiertas el calor no se hacía menos doliente, decidió quitarse la blusa, su taller ya la había visto en esas fachas, y necesitaba deshacerse de la sensación de escozor que su blusa tejida le causaba, la fue a colgar distraída en sus pensamiento en el perchero cercano al ventanal, cuando al alzar la mirada se sintió penetrada por los ojos azules de James, el cual miraba absorto desde la ventana de su sala... ella viéndole enrojeció de vergüenza... él también lo hizo pero le costaba apartar la mirada, Julieta tuvo un recorrido mental de todas las ansias que tenía por este chico y de las pocas posibilidades que tendría de verlo otra vez.. así que se deshizo de su brasier exhibiendo sus senos en el ventanal. James quedó absorto con la escena que presenciaba, sus ojos no se separaban de los senos de Julieta, ella lo notó... le guiño un ojo, acercó el cojín donde sus modelos eran retratados y con indiferencia pasó a bajarse la falda y a sentarse abriendo sus piernas, sin mirarle sintiéndose observada tomó uno de sus pinceles y comenzó a pasar las suaves cerdas por sus senos, pincelando hasta sentir que sus pezones floreaban, vio de reojo a el otro extremo de la ventana y lo que vio le excitó más... ahí estaba James desnudo en su sofá con miras a su taller, manipulando su miembro viril, tumbado, el sol dejaba ver su cuerpo atlético, esto puso a Julieta a millón, comenzó a sentir húmedas sus bragas y en frente de él se las quitó.. lanzándolas contra el vidrio... observó a el chico de sus sueños darse mano con más fuerza... tanto esto le excitó que comenzó a usar su pincel para darse placer... con su mano izquierda jugaba con sus labios, clítoris... mientras introducía la punta de su pincel más grueso en su vagina, fritaba y gemía de placer.
Ver a James tan excitado, provocaba convulsiones en su vagina, sus jugos fluían a granel, de medio artístico su cuerpo se llenaba del más lujurioso placer, vio una lata de pintura a su lado, metió ahí su mano izquierda, manchándola de color azul rey, con dicha mano tocó sus senos pintándolos seguía introduciéndose el pincel al mismo ritmo que James masturbaba su miembro, en cierto momento observó como el chico se levantaba y se masturbaba de pie... a lo que Julieta respondió pegando sus senos al vidrio y moviendo su cuerpo en círculos pintando de azul el vidrio... mientras seguía masturbándose, se dejó caer en el mueble para acabar con un delicioso orgasmo... color azul.