Todo comenzó un día que mi novio y yo salimos de fiesta junto con un amigo del llamado Héctor... todo estuvo genial hasta que mi novio se pasó de copas y Héctor muy amablemente decidió llevarnos a casa.
Primero pasamos a casa de Juan (mi novio) a dejarlo ya que estaba muy ebrio, lo dejamos en su casa y de ahí Héctor me llevo a mí.
Ya en el auto me decía que estaba muy bonita que la verdad siempre le había gustado mucho y que la verdad me traía muchas ganas... yo al oír eso me saque de onda pero a la vez me excito mucho ya que es su mejor amigo
Después de eso paro el auto y se acercó a darme un beso, yo intenté resistirme y le dije oye no... Espera... pero le importo poco empezó a meterme la mano bajo el vestido negro pegado que llevaba y empezó a tocarme muy rico mi vagina por encima de mi tanga con sus dedos, ya a estas alturas solo podía gemir de gusto y lo besaba muy rico igual.
Sentía como entraba su mano en medio de mis piernas para tocar mi vagina que ya estaba húmeda, cuando el sintió eso me dijo... sabía que te gustaba igual por qué siempre andas así de zorrita con Juan, eso me prendió mucho más y empecé a bajarle el cierre no aguantaba más y le saque su pito, lo tenía grande y gordo y sin perder tiempo se lo empecé a mamar muy rico el solo gemía y se retorcía... Me decía... si Juan viera lo putita y caliente que es su novia.
Sin perder el tiempo me dijo que me quería coger ya que no aguantaba más y solo me hice a un lado la tanga y me monte encima del volante para meterme su pito... mmmm que delicia cuando me iba entrando la punta me abría lento mi vagina hasta que me deje caer toda y lo empecé a cabalgar duro y rápido quería comérmela toda, el saco mi pechos y los empezó a mamar muy rico yo me volvía loca gemía y gritaba encima de su pito hasta que me vine a chorros y lo abrace muy fuerte, el me seguía clavando diciéndome lo rica que estaba la novia de su amigo y lo mucho que siempre había querido cogerme, no duró mucho e igual se vino a chorros dentro de mi, yo solo sentía lo caliente de su semen dentro de mi y como apretaba mis pechos.
Acabamos súper rico ese día los dos, me acomode la tanga y el vestido y me llevo a casa, ambos acordamos no decir nada y que tal vez se repetiría en otra ocasión...