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El jefe de mi esposo tiene nueva amante

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Soy Camila de 38 años, piel clara, cabello largo y castaño, tetas y culo grande y cintura algo común, a mi esposo le gusta que me mantenga buena así que me ayuda a cuidar mi físico.

Trabajo y de ahí he tenido varias amigas que me han contado sus experiencias sexuales pues siempre he sido muy abierta a ello y entre esas experiencias aquellas con pareja me han contado de su aventuras con otros, el tema de ser infiel me llamo la atención algunas veces pero nunca me atreví a probar por miedo a ser atrapada... Bueno no hasta está ocasión.

Mi esposo había salido de viaje por el mismo trabajo y había olvidado entregar unos informes a su jefe así que me ofrecí a llevarlos, me dio la ubicación y fui creyendo que iba a su oficina pero cuando menos lo noté era una casa, específicamente la casa de su jefe, toque la puerta y me recibió su jefe vestido casual y un poco manchado, le di los documentos y me llegó el aroma a comida preguntando curiosa si estaba cocinando a lo cual respondió que si.

Amo cocinar y aún no quería volver a casa así que le pregunté si quería ayuda a lo cual dijo que si, durante el proceso sentí algunas miradas suyas pero no le di mayor importancia, al terminar me invitó a cenar y acepte, comimos juntos y charlamos de una forma que incluso me pareció algo romántica, me preocupaba un poco que su esposa llegará pero el me calmo mencionando que había salido a un viaje.

Ya era hora de irme y estábamos en la puerta cuando me dijo "¿Estás segura de irte? Podrías quedarte conmigo hoy" me puse algo nerviosa cuando dijo eso pero aún más cuando sentí su mano en mi mejilla y la otra en mi cintura, estaba entre la puerta y él mientras le decía no estar segura al estar ambos casados y dijo "así es mejor, una rica aventura..." Cuando su manos empezó a tocar y apretar mis nalgas.

Me sonroje y le dije que si con la cabeza, sonrió y me jalo hacia el para besarnos muy rico, durante el beso bajo el cierre de mi vestido y las mangas, sentí que iba a quitar más y me separe para pedirle que nos fuéramos a algún cuarto él acepto y siendo "caballero" me dejo ir frente a él aunque sabía bien que solo quería verme el culo en especial en las escaleras donde tenía una muy buena vista de mi.

Entramos al cuarto y me dio algo de recelo ver algunas fotos de él con su esposa pero me distraje rápido al sentir sus besos en mi cuello y como me presionaba el vientre pegando mi culo a su erección, bajo el cierre de mi vestido y los tirantes hasta bajarlo y dejarme en el conjunto de lencería que uso como ropa interior.

Estaba jugando mucho con mis tetas sobre el sostén y luego siguió metiendo sus manos debajo hasta levantarlo, llevo sus manos atrás y finalmente lo desabrocho, bajo las manos y también me quitó las bajas mientras me besaba las piernas, todos sus movimientos me calentaban cada vez más e incluso le pregunté si me quitaba los tacones a lo cual dijo que no porque le parecían sexis.

Me quedé sin ropa y voltee a verlo y ayudarlo a quitarse la suya, aunque solo me llevará 4 años el pensamiento de hacerlo con alguien mayor me excitaba más y aún más el ver su cuerpo bien formado, me agache a quitarle los zapatos y pantalones y salió vi su verga muy dura abajo del bóxer (incluso se salió un poco de estos) sin esperar más se la saque y me quedé unos segundos apreciando y tocándola hasta que sentí su mano en mi cabeza para después separarse de mi.

Y como si él fuera un rey se sentó en un sillon de su cuarto con la verga bien dura y las piernas abiertas, ya estando abajo me fui a gatas frente a él mientras con su mano tomaba mi cabello y le daba un par de vueltas haciendo una coleta, me acerque tierna chupando la punta y él con su mano me empujó un poco metiendo más su verga, dijo que debía saber cómo chuparla rico.

En cierto modo era verdad a mí esposo siempre le han fascinado mis orales por como lo hago correrse en mi boca, veía al jefe mientras se la chupaba y el presionaba cada vez más, era diferente pues el tenía bastante bello en su verga y yo estaba toda depilada en mi coño.

Me sorprendió escuchar como gemia con mi oral, hasta que en un momento se puso de pie sin sacarla y me hizo mirar hacia arriba, bajo sus caderas y pude sentir su verga abrirse paso en mi garganta hasta quedar con sus bolas en mi barbilla y sus bellos casi tapando mi nariz, tenía muy poca práctica con la garganta profunda así que de inmediato tuve arcadas y le apreté la mano para que la sacará.

La tuvo unos segundos ahí y saco de golpe toda su verga dejándola caer en mi rostro, tome rápido aire por la nariz y boca y con un ligero instinto le lami las bolas un poco mas, me soltó el cabello y me ordenó ponerme en 4 en el mismo suelo, le pedí una almohada y me dio un cojín del mismo sillón donde estaba sentado el cojín apestaba a él pero decidí no decir nada.

Se puso detrás de mi con su verga en mis nalgas y sentí sus manos subir desde mis caderas hasta mis hombros, lo hizo varias veces en masaje lo cual me hizo relajarme y más que bajo jugando con mis tetas, bajo su cuerpo a besar mi espalda y sin detener el masaje su verga se deslizo y entro en mi coño.

Ni siquiera pensé en un condón en ese momento y solo sentía su verga desnuda meterse cada vez más adentro de mi y sus manos tocarme muy rico por fuera, mi mente estaba confundida en el placer de lo que hacía, sus manos subieron a mis hombros e hicieron presión lenta hasta que mi cabeza tocó el cojín y mi espalda estaba arqueada empinando más el culo.

Su verga me llenaba toda y tocaba la parte superior de mi coño justo en mi parte sensible, estaba como una gatita en estiramiento, estaba gimiendo al cojín y él levanto mi rostro al tirar de mi cabello para poder escucharme en todo el cuarto, no sabía que tan mojada estaba hasta que escuchaba los jugos de mi coño salir en cada embestida.

Sus bellos me hacían cosquillas en el coño y su mano libre estaba apretando mis tetas que hervían como si estuvieran a punto de sacar leche, cada que sus bolas chocaban en mi me sentía en el cielo y no podía evitar pensar como ni siquiera mi esposo de años, a quien le había cumplido cientos de fetiches, me había tratado así alguna vez.

Mi mente estaba un tanto perdida pero aún podía escuchar como me decía insultos y lo hacía cada vez más sexual con sus palabras, nuestros cuerpos chocaban sin parar y sentí como cerro sus piernas que estaban a mis lados y eso hizo que las mías se juntaran haciendo presión en mi coño con mis muslos.

Ese movimiento me hizo llegar a un límite fuerte donde solté un grito de placer por el orgasmo que estaba teniendo, hubiera aguantado más pero está primera experimentación con el sexo duro había sido demasiado, él lo noto y se quedó presionando su verga unos segundos y la hizo palpitar muy rico, incluso creí que iba a recibir un creampie en ese momento pero en su lugar la saco.

Me dio su mano diciendo "ven aquí mi amor", desde ese momento todo el tiempo en adelante me llamaba así, me levanté y nos besamos frente a frente, nos dejamos ir y caímos en la cama, seguimos el beso conmigo boca arriba y abierta de piernas, solo sentí una pequeña advertencia de la punta en mi entrada y de ahí toda su verga se desplazo dentro de mi de nuevo y como respuesta mis piernas los abrazaron son fuerza y detuvimos el beso.

Se incorporo y tomando mis muslos me empezó a jalar hacia él con fuerza metiendo toda su verga en mi mientras mis manos se quedaban paralizadas a mis lados, apenas podía tener los ojos abiertos y cada que podía lo veía directo y su cuerpo caliente y con sudor me excitaba más, además del sentir mis tetas y chocar con mi pecho muy rápido.

Aprovecho mi boca abierta y empezó a pasar sus dedos en mis labios, jalo suave mi lengua hasta sacarla y frotar su dedo pulgar ahí, me sentía muy sucia haciendo eso pero no fue nada a comparación de después que bajo la mano y apretó mi cuello de manera sexual, para después bajar a chupar mis tetas.

No se que me pasaba pero de repente me sentía más caliente y su verga de él era mil veces mejor que la de mi esposo, mis piernas lo estaban abrazando y antes de que mis manos hicieran lo mismos puso una de sus manos sobre la mía y vi como se entrelazaban ambas manos con los anillos de casamiento de cada uno, fui interrumpida en un largo beso el cual al separarse libero un momento mi cuello y lo lleno de besos, chupetones y algunas mordidas.

No siempre fui amante del sexo duro pero esa noche lo estaba disfrutando como nunca antes, su mano regreso haciendo más presión, y tenía su boca en mi oído así que podía escuchar sus gemidos bien cerca, mi mente cada vez se ponía más nublada hasta que me hizo la gran pregunta "¿Dónde lo quieres?", sabía que lo mejor era hacerlo sobre de mi pero en ese momento estaba tan caliente que lo primero que dije fue "dentro, ¡dentro!"

Soltó mi mano y cuello y me abrazo metiendo sus brazos por debajo de mi, mis manos igual lo abrazaron y sentí el calor de otro orgasmo recorrer todo mi cuerpo hasta mi coño, no estoy del todo segura pero creo que se junto con un squirt, empecé a temblar del placer y él estaba olfateando mi cuello.

Sus movimientos seguían hasta que sentí su verga palpitar y sin detenerse el semen salía disparado manchando todas las paredes de mi caliente coño, siguió unos segundos más hasta que sus bolas quedaron vacías, nos besamos más en el rostro y labios y después él saco su verga y se quedó acostado.

Pensé en irme a mi casa pero en su lugar me quedé a tomar una siesta con él, la cual fue larga pues cuando vi ya había amanecido, me levanté y tome un baño rápido, me despedí de él y fui a casa, en todo el camino pensé en la aventura que habíamos tenido y fantaseaba con repetir, por suerte mi fantasía se cumplió, robe el contacto del teléfono de mi esposo y tras hablar un tiempo nos organizamos y fuimos a un motel.

Desde entonces nos volvimos amantes y lo hacíamos cada que ambos estábamos libres, ni mi esposo ni la esposa de el sospechan nada y lo agradezco pues si me dieran a elegir me iría con el jefe jeje, bueno gracias por leer, espero que disfrutarán esta aventura.

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