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Entre más fresa más perra (2)

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Los días pasaron y yo evitaba salir lo más que se pudiera, Edgar volvió a la casa con algunos vendajes, pero ya nada preocupante y hacíamos lo normal, estábamos en casa, veíamos series y películas, yo trataba de salir temprano a hacer mis cosas ya que los malandros se levantaban tarde y estaban en el portón hasta altas horas de la noche así los evitaba, pero por más que trataba no podía olvidar lo que me había hecho su "líder" Y pensar que tenía una foto mía así como si fuera su perra, su puta, su juguete...

Pero algo estaba mal en mi pensar eso me calentaba y me lanzaba a Edgar como perra en celo, hacía que me cogiera 2 o 3 veces al día y aún así no podía evitar comparar su polla (promedio) con el monstruo de aquel señor negro, feo y malviviente.

Así pasaron los días y poco a poco fui olvidando lo ocurrido y mi cuerpo también me llegue a encontrar con los tipos en el portón unas cuantas veces pero los ignoraba a pesar de que ahora sus miradas eran más lascivas (ya tenían material para imaginarse muchas cosas) y eso mismo me daba rabia como pudo haber pasado eso entre más lo pensaba más me molestaba pero como ya había decidido antes no iba a hacer nada pensé en que ya pasaría.

El edificio tiene un área de lavado común al cual nunca iba porque teníamos lavadora en el cuarto, pero un día se descompuso y tuve que ir a lavar unas prendas eran como las 11 del día por lo cual subí normal no vi a nadie y pensé que era raro ya que siempre se llega a escuchar que ahí están algunas vecinas comadreando y echando el chisme de la colonia, sin más me puse a tallar unas blusas y no me di cuenta que el viejo feo había subido y estaba detrás de mí hasta que dijo "miren mi juguete favorito".

Di un brinco del susto y lo voltee a ver con mirada de despreció se acercó y me dio una cachetada fuerte que si no hubiera estado cerca del lavadero me hubiera tirado "ya te dije que no me veas así perrita, se te olvidó lo bien que la pasamos el otro día?, porque a mi no y tengo muchas ganas de volver a jugar".

Con algo de miedo y adolorida todavía con la cachetada le dije que se alejara que iba a gritar y que alguien iba a venir, se mofó de mi diciendo que sería inútil que mejor me portará bien si no quería que toda la colonia supiera lo zorra que soy que compartiría la foto con todos y además que Edgar sería el más afectado en todo esto no dudó ni un momento cuándo ya estaba pegado a mi poniéndome contra el fregadero tocándome y como rayo mi cuerpo volvió a recordar el placer que casi había olvidado, se acercó a mi oído y me dijo "justo así me gustan las perras que se resisten al principio pero no pueden negar que aman mi verga".

Yo traía un short que cubría un poco más del muslo, una playera blanca suelta y ropa interior muy monótona típica para lavar ropa pero eso no pareció importarle e igual le excitaba un montón cuando se restregó a mi pude sentir su monstruo en mi culo , desabrocho mi short y lo bajo hizo a un lado mi calzón y sabía que iba a pasar, le dije que se detuviera si me cogía ahí iba a gemir y nos podían escuchar, me jalo del pelo hacia él y paso su verga entre mis piernas parecía que estaba montando una rama de un árbol por lo grande y dura que se sentía y me dijo "Mejor aún si te escuchan quiero que sepan los vecinos que eres mi putita y que vean lo guarra que eres, se detuvo un momento y pero si quieres seguir con tu fachada de niña fresa te doy una opción puede montar te haciéndote gemir como la puta que eres y que todo el edificio vea que eres una perra o te quito las bragas te tapó la boca para que no se escuchen tus gemidos y en la noche vas a la privacidad de mi cuarto a sacar lo zorra que eres sin que nadie se entere".

Pensé en las opciones una era que me follada una vez haciendo que todos los vecinos se enterraran y me vieran siéndole infiel a Edgar y la otra era que me fallara 2 veces pero en secreto, al parecer de ambas formas yo terminaba con la vagina llena y engañando a Edgar.

"Bueno mamacita si no te vas a decidir yo ya estoy bien duro así que yo decidiré”, estaba apuntando su verga a la entrada de mi vagina cuando alcanzo a decir "Espera está bien tapame la boca no quiero que nadie sepa esto".

El sonriendo jalo mi calzón levantándome con él hasta que se rompió lo hizo bola y me lo metió en la boca y me la tapó con una de sus grandes manos la cual cubría la mitad de mi cara y con su otra mano dirijo su polla a mi vagina "extrañe coger con mi juguete favorito". Y de una embestida metió 3/4 de polla si no fuera porque me estaba cubriendo la boca mi grito se hubiera escuchado hará el edificio de a lado había olvidado lo que se sentía tener este monstruo dentro empezó un vaivén solo metiendo la mitad y sacando la hasta la punta, yo estaba concentrándome en no gemir muy duro pero no podía evitar que mi cuerpo se mojara después de unos minutos dijo "parece que ya te acostumbras te más así que ahora si te cogeré con gustó me jalo hacia el con su mano que tapaba mi boca y me clavo toda su polla ahí apreté los dientes y el apretó más su mano a mi boca ahogando mi grito.

Me la dejó adentro toda esperando a que mi cuerpo se adaptara "Bueno creo que es hora de irte entrenando" Nos dimos la vuelta conectados pos nuestras partes y él se recargo ahora en el fregadero "ahora quiero que tú te cojas sola, que tú te des las metidas como si yo fuera tu consolador".

En mi mente estaba entre adolorida, humillada y enojada pensando que este tipo estaba loco que no iba a cogerme yo sola con su polla como si esto fuera consentido “si no lo haces yo te cogeré duro sin cuidado alguno y créeme que te va a doler así que te recomiendo que no te quites tus calzones de la boca”.

Antes de que el empezará a hacer algo yo de puntas me alejé un poco de él, no me saqué ni la mitad cuando volví a meterme esa gigante verga la cual dentro se sentía aún más grande, me dio una nalgada "esa es mi perrita obediente". Estuve con lentos movimientos sacando y metiendo su verga de mi interior de algún modo me estaba gustando y su verga lo sabía ya que estaba dejándola muy mojada, él se hartó y me tomó del pelo haciéndome una coleta "te enseñaré como debes follar". Y jalándome el cabello hacia el empezó a darme fuertes embestidas, tuve que poner ambas manos en mi boca para que no se me saliera la mordaza improvisada eso me excitó más y cada vez que me metía toda su polla se escuchaban sus huevos botando en mi haciendo un sonido como de chapoteadero siguió follando me haciéndome tener varios orgasmos yo ya solo parecía una muñeca dejándome hacer lo que él quisiera hasta que otra vez me dejó pegada a él y sabía que significaba eso, me llenó de su esperma y casi al mismo tiempo yo tuve otro orgasmo sentí como en mis piernas escurría mucho fluido y no sabía si era de él o mío en ese momento no pensaba ni en Edgar ni en si el que me estaba cogiendo era un malviviente que me doblaba la edad, feo y gordo.

Solo me importaba haber tenido el mayor número de orgasmos seguidos en mi vida a tal grado que cuando me saco su verga caí al piso porque no tenía fuerza en las piernas me volvió a tomar del pelo y me dijo "pero mira como me has dejado la polla de sucia tienes que limpiármela saca la lengua".

Obedecí ya que no tenía fuerzas para nada más y en cuanto abrí la boca metió su verga ya estaba menos dura, pero me seguía ahogando tirándome del pelo para no alejarme me dijo "parte de tu entrenamiento es saber mamar pollas así que empieza a lamer la como si fuera un dulce y no pares con la lengua hasta que me la dejes limpia”, yo solo obedecí y como pude pase mi lengua por toda su verga peluda y con olor a semen, cuando intentaba alejarme o quería que volviera a lamer una parte me jalaba del cabello "ufff que rico lo haces perrita te tengo que comprar una correa para entrenar mejor".

Yo solo sentía su verga invadiendo cada parte de mi boca y con mi lengua saboreando una mezcla de mis fluidos con su semen pero no pude evitar pensar en sus palabras "perra y entrenamiento". Me iba a adiestrar como si fuera un animal. Y no podía hacer nada para detenerlo, cuando por fin decidió que le había dejado la polla limpia me soltó y fue a un tanque de gas saco un teléfono y dijo "sonríe a la cámara".

Eso me heló la sangre, grabó la bestial cogida que me dio él la cual parecía que yo había consentido esto y los múltiples orgasmos, metió el celular en su bolsillo y se fue diciendo "te espero a las 9 en mi casa vente muy sexy que te quiero disfrutar como se debe a y dile a tu marido que te vas a quedar en casa de una amiga o yo que se solo que hoy no vuelves no faltes si no quieres que todos conozcan a tu verdadero yo".

Yo seguía tumbada en el piso semi desnuda con los calzones rotos y llenos de mi baba y sintiéndome sucia y no por los fluidos que tenía en mis piernas y en mi boca si no porque me estaba haciendo su perra y me estaba gusta...

Continuará.

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