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Historia de como Mr. Costa encuentra una chica interesante

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Es extraño cuando estás en una localidad en donde no hay calidad en el sexo. Todas vainilla, sin nada interesante que mostrarte mucho menos que hacerte sentir. Quería pasarla bien pero con alguien que sienta las ganas que tenía. Cualquiera piensa en putas, pero las putas son un bodrio para alguien que busca el sexo de otro nivel como yo. Fetichista por excelencia, alguien que disfruta ser dominante y degradar a mi acompañante, una puta era muy poca cosa para mis propósitos. Tenía contactos, de putas con las que había tenido algunos encuentros en los cuales ya conocían mi nivel, pero seguía insistiendo que quería algo original y no forzado.

Mis amigas, la mayoría vanilla y con la cosa aburrida de que tienes que invitarlas a salir, decirles cosas para que te den una noche bien vanilla y enamoradiza, algo que a mí poco me satisfacía y a ellas sí. Mis amigas las más putas, a ellas las sacas las invitabas a salir y unos tragos y me daban el culo en plena discoteca pero es una mierda, esos culos ya me los conocía y además que estaban más borrachas y cogen solo para complacerse pero no para complacerte no me pareció alternativa.

Entonces agarré el celular y empecé una cuenta en una aplicación de citas. Francamente, no esperaba mucho. En esa aplicación a pesar de que estás en una región fuera de la capital aparecen las típicas pitucas y hasta las que se quieren dar de pitucas cuando no lo son. Para quienes no saben que es pituca, es una chica que sigue la corriente de Estados Unidos, las populares riquillas. A mí no me gustan las riquillas y eso que he estado en ese círculo y me parece estúpido. Son arrogantes, individualistas, aburridas, desabridas y hasta monses como dicen ellas, hasta para coger cogen como en gringolandia. En mi profesión veo y tengo compañeras y socias pitucas que son más aburridas, solo hablan de cómo pintarse el cabello, que comprar y sus conversaciones estúpidas de siempre, para colmo quieren que les haga el favor.

Entonces, estaban ahí las pitucas en la aplicación, exhibiendo sus viajes, sus cabellos falsos, sus maquillajes y caras falsas, sus outfits y tanta estupidez. En los primeros días que empecé con esa aplicación solo me aparecía eso, pero en la mitad del proceso abrí la aplicación y empezaron a salir cosas interesantes. Francamente yo no soy de discriminar y esas cosas, mientras follen bien rico y tengan nivel, normal. Me encontré con una flaca, no era pituca obviamente, cabello natural. Le mandé like y esperar si le da like también.

En la noche la chica le da like y se arma la cosa. No me escribió pero yo le escribí. Me gustaba su cabello negro, natural, como para jalarlo mientras me la follo, había subido fotos de perfil enseñando las curvas. Morena y los jeans le encajaban bien en sus fotos. Ya con la experiencia le di trámite sin apurar las cosas, ya sabía que material es y que ella no quería algo serio y si lo quería pues haría que cambie de opinión y disfrute. Conversamos, en la típica conversación de conocerse hasta que quedamos en verse el fin de semana en un lugar público. El trato de la flaquita era chévere, amigable. Podría tener algo de nivel.

Nos encontramos, fui cambiado pero no tan arreglado, lo normal. Ella fue con su jean bien apretado, una casaca y un maquillaje normal a diferencia de las pitucas que se cambian la cara con el maquillaje. Le dije que era un gusto conocerla, ella respondió lo mismo y fuimos a caminar. Conversamos para conocernos varias cosas hasta que me di cuenta que la flaca estaba muy emocionada y me tiraba una miradita, le dije vamos por tal calle, era una calle silenciosa que ya me la conocía para hacer el trámite, ella aceptó. Caminando por esa calle, empezamos a agitarnos, ya sabíamos lo que venía solo faltaba concretarlo, agarré el parque de esa calle y en la esquina parados le dije que me gustaba mucho, que me parecía además de atractiva interesante, ella se sonrió, agachó su cabeza, yo confiado en que se avergonzó me tomó sorpresivamente por la cabeza y me besó bien rico. El beso fue muy excitante, ella se me pegó y cuando besaba lo hacía extenso y alocado, eso me excita, cuando ella tiene la iniciativa y quiere que me la folle. La detuve, pero no para frenar la situación si no para acrecentarla. Le dije si le gustaba y ella se sonrío motivada y pude ver como se mordía los labios ligeramente y me dijo que si, casi sin responder verbalmente solo moviendo su cabeza como si estuviese pensando algo emocionante. Ahora la tomé yo de la cintura, la acerqué a mi cuerpo y la besé. Que rico me respondía el beso, como si quisiera comer mi boca, hasta su cabello se iba por nuestras bocas al ser tan frenéticos los besos. Tomé una nalga de ella y la acaricié mientras la besaba.

Le dije si le gustaba, ella me dijo que sí mientras seguía besándome. Tomé la otra nalga y la acaricié, ella respondió a querer subirse en mi y enroscarse de piernas en mi pubis pero se dio cuenta que estábamos en la calle y se frenó pero sentí su impulso. Sus nalgas eran firmes y paraditas. Nos calmamos y en besos ligeros le dije si íbamos a un hotel. Me dijo que sí con la cabeza y me besaba sonriendo, había llevado condones y fuimos a un hotel cerca de la zona que ya lo conocía. La flaca me tomó de la mano todo el camino, conversábamos de cosas, bromas para bajar la cosa, de lo que sería interesante conocernos a profundidad. Llegamos al hotel y fuimos a la habitación, ni siquiera supe como fue la habitación porque cuando cerré la puerta, esa morena se abalanzó hacia mí a besarme. Mientras me sacaba la ropa como podía y me bajó el pantalón en una para chuparme la pinga, estaba pensando. Ella succionaba de lo rico y se metía la pinga bien adentro, mi pinga gruesa se apretaba en esa boca estrecha. Estaba excitado porque agarraba mi pinga solita y se lo metía en la boca y chupaba. Bien excitado, pensé que esta flaca fácil hace la misma cosa en otras situaciones por eso la experiencia y en lo que estaba en la pensadera mientras ella controlaba la situación, decidí hacer lo que tenía pensado sea quien sea porque no la conocía muy bien.

Tomé el control y ahora si la hacía mamar de lo lindo, mi pinga a tope y con venas entraba en esa boca y mientras la flaca me miraba, me venía algunas lechadas y ella se las tragaba hasta que solté una lechada grande y como tenía el control de su cabeza casi se atora más mi pene pero se lo trago. Ella estaba muy excitada y por ella quería seguir chupando pero después de una chupada profunda le jalé del pelo y la levanté, pensando que quizás no le guste pero a esta le gustó y se lamía. Te gusta le dije y ella ahora si me respondió y me dijo que si. Habíamos dejado un asco el piso de la habitación, ni cuenta nos habíamos dado. Me puse el condón y ella me observaba mientras se desvestía. Una morena bien rica. Agarré esas nalgas y le di unos buenos palmazos que quedaron rojas en una, a ella le gustó. La coloqué en cuatro porque quería acabar con ella pero abierta de piernas.

Que interesante era la situación, buen culo, empecé a chuparle las nalgas y ella gemía. El ano era cerrado y la concha todavía estaba por verse pero se veía cerrada. Le pregunté si lo había hecho con alguien, me dijo que sí refiriéndose solo al vaginal, con su enamorado pero de ahí no. Me reí y le dije ahora esta concha va a sentir una pinga de verdad. Solo me interesé en el vaginal pero a ese culo cerrado le quería dar pinga pero no sé si la hacíamos, mi pinga es gruesa y solo con saliva puede ser raro, pero mis ganas por darle pinga a ese culo estaban después de haberlo lamido y ver que rico se veia. Le di una buena mamada a su vagina y empecé el asunto.

En la follada ella estaba en cuatro y metí mi pinga a lo duro, agarré su pelo fuerte y la empecé a follar vaginalmente, la chocaba duro y sus nalgas estaban enrojecidas, ese ano me coqueteaba. Que rica morena, como gemía, como se excitaba, como gritaba, como lo hacíamos como si nos conociéramos. Mi pene entraba rico en esa vagina, apretada. El inútil de su enamorado a lo mejor no tenía ni mierda porque ni mierda le había hecho. Estaba bien rica esa vagina, apretaba a lo natural y cuando tenía orgasmos no quería soltar mi pinga. Luego de darle en cuatro me concentré en darle abierta de piernas para acabar. A ese culo que le tenía ganas le metí una chupada bien rica que le excitaba, le metí otra chupada para ver si la flaca captaba que quería darle. Ella me dijo te gusta mi culito. Lo que estaba esperando, le dije sí me lo quiero romper que rico culo. Bien excitada me dijo rompeme el culo entonces quiero que lo hagas. Me gustas mucho y quiero que le metas a mi culito. La cosa era que yo pensaba en la flaca y dije que quizás le dolía porque no hay lubricante y lo vamos a hacer con saliva. Ella me dijo que si y que se lo meta. Que rico anal iba a salir ahí.

Le lamí ese rico culo, soy fetichista, me gustaba como olía y como pulsaba. Empecé con los dedos, salía con un poco de mierda y olor, que rico para el que le gusta como yo. Ya el culito se iba abriendo cuando se dilató algo, hice la prueba y le dije que si le gustaba cuando le metía los dedos ella me dijo que le encantaba. Agarré mi pinga bien parada y empecé a meterla poco a poco en ese culo. Poco a poco entraba la punta, parte de la cabeza. Cuando entraba parte de la cabeza la flaca gritaba, entraba apretado. Hasta que en esas metidas, sentí como el culo chupaba y en una de esas que el culo chupaba empujo mi pinga y entra bien rico, apretado. La flaca gritó al inicio pero cuando empecé a moverme metiéndole pinga por el culo gemía. Sentía como le metía a ese culo, apretado, le metía hasta a tope mi pinga mientras le agarraba de esas caderas, ella gemía y gritaba de placer mientras la besaba. Había salido un rico anal que quise venirme en ese culo. Le dije quieres que me venga en tu culo, ella me dijo que si además diciendo que la bese. Agarré y empecé a meterle pinga brutal, sus nalgas sonaban rico en mi pubis, le jalé el cabello y en una metida profunda acabé.

Besé a esa morena mientras sacaba mi pinga. Mi pinga estaba algo embardunada, que rico. Le metí una buena lamida a ese culo que abrí. La historia luego con ella es para otro relato, el culo que me comí es otro nivel.

(9,20)