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Historia de una hotwife: Tres socios de mi esposo me cogen

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Septiembre, 2022, estábamos en la ciudad de México, cuando mi marido recibe una llamada, de su abogado, comentándole que tenia que presentarse en Guatemala, para firmar papeles relacionados con su negocio. Me comento; mi amor, tengo que irme, pero el lunes volveré a primera hora. Llego el día viernes, por lo que lo acompañe al aeropuerto internacional de la ciudad de México. Me fui bien arreglada, estrené un mini vestido de color negro, pegado, muy sensual que resaltaba mis atributos, una medias color carne, unas zapatillas que muchos hombres quisieran de artes, un escote provocador, aquel mini vestido resaltaba mi vientre plano, mis caderas y mis glúteos, era un deleite para los caballeros que se encontraban en el aeropuerto, finalmente, mi esposo se despidió de mí, dándome un beso.

Yo me dirigía a casa, cuando sonó mi celular, numero desconocido, dude en responder, pero finalmente lo hice, era Santos, el socio de mi esposo, me dijo: Hola Verónica, disculpa que te moleste, pero Joel dejo unos papeles en su oficina y me gustaría entregártelos son importantes sé que salió de viaje, pero a ti te los puedo entregar, por lo que le dije que sí, pero que no quería ir hasta la oficina, e inmediatamente me dijo, que me veía a un costado del Ángel de Independencia. En un restaurante de cierto prestigio. Me comento a las 7pm estará bien, a lo que respondí que sí.

Cuando llegue para mi sorpresa Santos, no se encontraba solo, estaba acompañado de 4 caballeros, mas. ¡Hola Verónica!, Me dijo, dándome un beso en la mejilla, ¡qué guapa!, menciono, a lo que le conteste, gracias. Inmediatamente me presento a los cuatro caballeros, ellos son, Jorge, Maximiliano, Constantino y Oswaldo, todos ellos de aproximadamente 37 años. Son socios de Joel, menciono Santos. Lucían varoniles, y cada uno me saludo de beso, por lo que empecé a sentirme deseada y aumentaba mi lujuria. -Siéntate Verónica, dijo Oswaldo, y me cedió la silla, a lo que acepté, gustas un vino dijo Constantino, respondí tímidamente ok. La música de fondo era agradable, comenzamos a platicar, y Jorge me comenzó a acariciar mi pelo y me tocaba mi mejilla, a lo que yo sonreía. Maximiliano dijo, Verónica, estas tremendamente bella y buena, queremos proponerte un gangbang, -quede asombrada- Santos me tomo de la cintura, mientras decía sabemos que eres una dama en la mesa y una puta en la cama. Sin darme tiempo de responder, Oswaldo, me tocaba mis muslos, por lo que dije, claro vamos.

Pidieron la cuenta y nos dirigimos a un hotel 5 estrellas, sin perder tiempo, los caballeros iniciaron con caricias, tocando cada una parte de mi cuerpo, tiernamente me comenzaron a besarme en la boca, en el cuello, me sentía completamente excitada, subieron, mi vestido, y Maximiliano, bajo mi tanga, y la olio, inmediatamente, empezaron tocando mi intimidad, introduciendo sus lenguas, sus dedos en mi vagina, en mi ano, mordisqueando levemente mis labios vaginales, expertos en chupar mi clítoris, pezones y boca, me hacían gemir de placer, Oswaldo, comenzó a recorrer mis largas y torneadas piernas, besando mis muslos que ya escurrían de humedad. Después de jugar con mis vagina y ano, me hincaron y sacaron sus miembros erectos, y me dijeron escoge puta, yo me sentía, muy afortunada de tener cinco miembros, esos penes llenos de venas gruesas, intentaba meterme dos al mismo tiempo aunque era imposible, una por una de las vergas iba haciéndoles felaciones, a lo que ellos gemían, -que rica estas- -eres una diosa- Jorge, se agacho y fue directo a mi vagina, mis labios mayores ya estaban hinchados de placer la sangre fluye por mi vulva y mis líquidos vaginales ya fluían en gran cantidad. Mientras seguía dando sexo oral, también sus miembros escurrían y sus líquidos me los bebía, Santos y Constantino, dijeron te gusta la lluvia dorada perra. -A lo que respondí si, e inmediatamente me bañaron con sus orines, abriendo la boca sentía que me ahogaba con tanta agua de riñón.

Los 5 sementales, se miraron, me quitaron el vestido, y dijo Jorge déjale las medias y los tacones, comenzó a cogerme en la clásica posición de misionero, me la introducía lentamente y posteriormente rápida, duro, se movía hacia arriba, abajo, haciendo círculos, y nuestras manos se unían, al igual que nuestros sexos. Me cargo y por atrás llego Constantino, y con cuidado lentamente, introdujo su miembro en mi ano. -Aaaah gemi, gritaba y comenzaron a cogerme por los dos lados, posteriormente, me cargaron Maximiliano y Oswaldo, sentía que me partían en dos, ya había tenido muchas dobles, penetraciones, pero siempre es especial, ser penetrada mi ano se extendía y vibraba, continuaron con su rimo los dos enormes machos, era un martirio y delirio al mismo tiempo, mordían mis pezones, acariciaban mis piernas, de repente Maximiliano, me puso sus enorme manos en mi cuello, jalándome y apretándome sutilmente, esto me ocasiono sentirme asfixiada, fue una sensación de miedo y placer, y sentir tremendas trancadas era un suplicio delicioso, llego mi primer squirt, aaaaa grite mientras rasguñaba la espalda de Oswaldo, mis líquidos bañaban a mis cómplices.

Santos, me tomo pero yo le dije ahora quiero dominar por lo que lo avente a la cama, y lo cabalgue, mi ano, se introducía con cautela, y me daba sentones, ese tremendo miembro me destrozaba el ano, incluso sentí sangrar, pero seguí, gemía, Santos apretó mis nalgas, y me daba unas tremendas nalgadas, dejando mi trasero rojo por aquel castigo delicioso, que pedía más, Oswaldo, se sumó y ambos intentaron meter su miembro en mi ano, despacio les dije, si caben, claro puta, tienes mucha experiencia, ahhh se clavaron de un solo golpe, y me cogían los otros tres sementales, se subieron a la cama, y les empecé a dar una mamadas, y así continuaron, intercambiando, posiciones, cargándome, mi culo y vagina dilatados, mis piernas tiemblan de placer, era un tornillo, los socios de mi esposo, saben tratarme como la diosa puta que soy, una verdadera hotwife.

A través del espejo que había en la habitación, podía ver como tenía 5 hombres, devorándome, 5 vergas para mi sola, inmediatamente me pusieron de pie y me cogían uno por uno por el ano, Maximiliano me cargo y me puso en el tocador y me penetraba mi vagina, posteriormente levanto mi pierna y la puso en su hombro fue algo de dolor y eso que soy elástica, pero es que el era muy alto, sentí como su enorme miembro duro y caliente, entraba como mantequilla en mi vagina, sentí que llenaba mi monte Venus, en toda su totalidad, comenzó a moverse con firmeza como domando a una pantera, sus movimientos de cadera me hacia tener contracciones y mojaba más y más, ya corrían mis líquidos por mis muslos y piernas.

Maximiliano bajo mi pierna que se estaba acalambrando, y ahora fue Oswaldo, quien me cargo, me ensarto con maestría lo enlacé con mis piernas en su cintura para sentirme más cómoda, fue cuando Constantino, se incorporó y con su herramienta ya bien puesta la puso en mi ano, y entre los dos cargándome me daban tremenda cogida, tuve otro orgasmo, pero esta vez sin squirt, pero fue riquísimo.

Que delicioso gangbang, siempre ha sido mi delirio, tener muchas vergas, en mi cuerpo, disfrutar como cinco enormes pollas pelear por todos mis agujeros sexuales, Estos sementales metían sus penes donde quieran. ¡Ningún hoyo está prohibido! Por mi culo, doble penetración, varias vergas en mi garganta al mismo tiempo y doble vaginal. Me gritaron al mismo tiempo ¡Veronica Ishtar; es una verdadera diosa sexual!

Habian transcurrido mas de tres horas de sexo rudo, asimismo sexo dulce, Maximiliano, me obsequio un trago de vino a mi garganta, cuando lo bebi completo, dijo espera puta, lo llenare de orina, y los otros cuatro caballeros hicieron lo mismo, cuando tuve las cinco copas de orina, me las bebi una por una sin dejar una sola gota.

Posteriormente, Constantino, se metió entre mis piernas, pero esta vez consiguió que dos de los sementales me sujetaran por los tobillos mientras él empujaba su polla en mi coño empapado. "Sostén sus piernas mientras me la cojo". Me follaba tan fuerte que la cabecera golpeaba contra la pared. Estaba recibiendo golpes y amando cada minuto. Con dos machos abriéndome las piernas y el Constantino follándome el coño con fuerza, Santos, se había subido a la cama y, sin previo aviso, me metió el miembro en mi ano. Grite mientras todo mi cuerpo vibraba. Entonces mis dos sementales, agarraron mis tobillos con más fuerza cuando un enorme orgasmo atravesó mi cuerpo.

Mis machos tenían grandes sonrisas en sus rostros cuando rápidamente ataron con sus corbatas mis muñecas del poste de la cama y me pusieron en cuatro, luego tomaron mi muñeca izquierda y la bajaron a mi lado y ataron el otro extremo alrededor de mi tobillo izquierdo. Luego bajaron mi muñeca derecha y le ataron la cinta en el tobillo derecho. "Sucios cabrones", grite, con una sonrisa en mi rostro. En esta posición, apenas podía moverme. Mi trasero estaba en alto en el aire y mi cara enterrada contra la almohada, mis muñecas atadas fuertemente a mis tobillos. Jorge se subió a la cama, me separó las nalgas y comenzó a lamer mi agujero. "Oh Dios, esto se siente tan bien", dije. Los otros sementales miraron desde el borde de la cama.

Cuando comenzó a follar mi culo con empujones cortos y agudos, dentro y fuera. "Oh, fóllame bien el culo", le dije una y otra vez, mientras finalmente aceleraba el paso. Con las muñecas atadas a mis tobillos, solo podía quedarme a cuatro patas mientras Jorge se puso de pie y se inclinó sobre mí, sus manos agarraron la cabecera frente a mí y le dio a mi culo empujones duros y completos de su enorme polla. Grite; "Quiero una polla en mi coño al mismo tiempo”, Entonces Oswaldo, se subió a la cama y se acostó de espaldas con su enorme polla apuntando hacia arriba. Les dijo a los otros tres sementales que me levantaran y la colocaran sobre su polla. Ellos me agarraron de ambos lados y, como estaba atada, me levantaron suavemente por los brazos y las piernas y me colocaron para que estuviera a horcajadas sobre él. "Un montón de cabrones sucios", dije con una gran sonrisa en mi rostro.

Después de un tiempo, parecía exhausta, pero mis sementales estaban a toda velocidad y podían sentir que estaba a punto de alcanzar un gran orgasmo. Pude ver sus dedos de los pies apretados y sus muñecas lucían en carne viva mientras las cintas las sostenían contra sus tobillos. Estaba siendo follada de una manera diabólica, comencé a gemir y a gemir más y más fuerte. Estaba muy cerca de otro gran orgasmo ya que ambos penes eran como pistones entrando y saliendo de mi coño y culo. Posteriormente, se fueron cambiando mis machos, para que los 5, pudieran cogerme por todos mis agujeros. "Por favor, no paren… me voy a correr, me voy a correr", grite a todo pulmón, finalmente, deje escapar un rugido todopoderoso y mi cuerpo comenzó a retorcerse y temblar, durante varios minutos segundos. Desataron mis muñecas de los tobillos, mientras Constantino, me siguió cogiendo por el ano, dejando su semen, sentí una carga caliente, asimismo ardor, aaa que rica estas, Oswaldo, se vino en mi vagina, aprete mis muslos para sacarle toda la leche. Maximiliano, Jorge y Santos, me miraron y les dije su leche la quiero, en mi cara, Oswaldo dijo, ahora entiendo puta porque te mantienes joven, te gusta tener mascarillas de semen, a lo que Jorge dijo, perfecto, es hora de que Verónica recupere su juventud. Se dice que no hay nada mejor que una capa de proteína que se aplica en la cara para mantener la apariencia juvenil. Elimina las líneas y las arrugas y te da un resplandor resplandeciente y esta proteína es el semen. Así que se la empezaron a jalar, les ayude, y de repente tenía tres explosiones en la cara con una carga de esperma caliente y fundido, es la mejor manera de obtener un cutis radiante.

Tenia esos espermas pegajosos en mi cara, los deje unos instantes, el olor era intenso, pero delicioso, algunas gotas cayeron en mis ojos, aunque arde los deje un breve instante, el semen que cayó en mi boca lo trague, posteriormente con mis dedos limpie mi cara y me lleve la leche a mi lengua y después los trague, gracias diosa, dijeron los hombres, ya amanece tenemos que irnos, Jorge me miro, y sonriendo me tomo de las piernas y se llevó mis medias dijo estas son mías, de recuerdo del trofeo de una Dios puta, entonces Santos dijo yo me llevo la tanga, Oswaldo me quito los tacones, Maximiliano el vestido y Constantino mi sostén, parecían mercenarios repartiendo el botín, cuando terminaron les dije riendo, que voy hacer, ellos se vistieron y dijeron ese es tu problema mi amor y salieron. Tuve que hablarle a mi amiga Azalhia para que me llevara ropa, que delicioso gangbang había tenido con los socios de mi esposo, me hicieron su puta, y me encanto, los gangbang, me enloquecen, entre mas hombres me cojan mejor.

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