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Regalo de cumple

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En mis tiempos libres me he dedicado a ser guía de clases dirigidas en algunos gimnasios, si bien mi contextura no es bien definida, resaltó por mi tamaño y el conocimiento que he dedicado de aprendizaje en esa área.

Hace alrededor de 10 años que rondaba los 30 y ella los 42 años, empezó a asistir a las clases que impartía. Una señora morena, bajita, con una figura mediana de buen trasero y un pecho no protuberante, pero llamativo a la que llamaremos Lara. Las clases transcurrían de forma normal y yo aprovechaba de observar esos atributos, pero sin pensar ir más allá porque en ese momento tenía una relación con mi novia.

La relación comenzó a hacerse más cercana con Lara, de vez en cuando me escribía para consultar cosas sobre los ejercicios, otras tantas salíamos en grupo con la gente del gimnasio y aprovechaba para ver sus actitudes. Ahí me di cuenta que era soltera, que no perdía ocasión para ligar y tener una sesión de sexo. En más de una oportunidad la vi irse en medio de las salidas con alguno que le hiciera la cacería.

Ya con un poco más de confianza comencé a escribirle más abierto, le comentaba lo que había visto en las salidas y ella solo sonreía o empezaba a contar que era muy caliente, que le gustaba el sexo y la pornografía. No había terminado de leer y aparece una foto de ella en una lencería azul clara con encajes. Ufff esto de una vez me puso a mil y le dije lo que había logrado, a lo que ella me responde con un video masturbándose. No me quedo otra que hacerme una gran paja a su nombre y enviarle fotos de mi miembro erecto.

Así pasaron varias semanas, fotos y videos iban y venían pero no lograba coordinar una escapada con Lara. En las clases nuestras miradas jugaban, se cruzaban, la veía con morbo, se me paraba el pene y ella lo notaba, se ponía leggings transparentes y unos hilos que mostraban todo lo que había abajo. Comencé a fantasear y pensar cómo la podía tener para mi.

Fue entonces que en mi cumpleaños se dio la oportunidad, nos reunimos todos los del gym y la noche transcurrió entre bailes, bebedera y cuentos de todos. Mi novia se cansó de la jornada y me dijo que se quería ir a descansar a la casa y que yo tranquilo me quedara disfrutando mi cumple. A los pocos minutos de ella retirarse recibo un mensaje de Lara que me dice "hoy es el día" y al cabo de media hora ella dice que se iba que ya era hora y yo me ofrezco en llevarlo porque no tenía carro, todos lo vieron como algo normal y salimos.

Caminando al carro yo ya tenía el pene que salía de mi short, y apenas nos montamos ella se aferró a mi y le bajo el pantalón para empezar a mamar. Era una experta, su especialidad sin duda alguna, lo metió todo, jugaba con su lengua mientras agarraba mis bolas.

Yo emprendí marcha para buscar un motel, y llegamos, ella tenía un short corto de encajes que dejaban ver sus torneadas piernas, una blusa blanca de tirantes que podías ver el borde de sus tetas. Apenas llegamos la abrace y empecé a bajar su short, para descubrir un hilo blanco que marcaba esa vagina deliciosa ya un poco mojada. al bajar el hilo todo estaba rasurado, me arrodillé y la empecé a mamar, quería comerme esa cuca madura que me ofrecían. Lara empezó a gemir.

L: Así profe cómeme la xuxita!

Mientras me agarraba la cabeza y me apretujaba a su raja. Con mis manos empecé a agarrar sus nalgas, que estaban bien duras producto del ejercicio. Seguí con las lamidas, cuál perro con su hueso, sacaba mi lengua y la pasaba por todos lados.

L: Ufff que rico no pares profe dame tu lengüita, la quiero en mi xuxa.

Me levante y con mis manos empecé a masturbar, se sentó en el borde de la cama y ahora me lo mamo con más libertad, que movimientos, sentía que me crecía en cada lengüetazo, ya no aguantaba más y le dije que quería cogerla antes de acabar. A lo que ella se colocó boca arriba y se lo metí de un solo empujón. Ella gritó ensartada y eso me puso a 100.

Y: Muéstrame las tetas maduras, dale las tetas a tu profe me las quiero comer.

Ella inmediatamente se bajó la blusa y me dejo ver esas ricas tetas carnosas y bien puestas, poco caídas para su edad, con un pezón prominente y aureolas marrones, las agarre con mis manos y empecé a masajeárselas mientras bombeaba.

Y: Así te quería tener, le decía, eres mi zorra, mi rica puta, dale a tu profe tus tetas maduras.

L: Yo también quería, ese pene prado todas las clases quería que fuese mío yaaa!

Y se vino su primer orgasmo. Yo empecé a bombear de a poco porque quería cogerla de espalda antes de acabar y ver ese rico culo. La puse en cuatro y se lo metí de nuevo. Recordé que me había dicho en sus textos que le gustaba por el culo. Me ensalive los dedos y empecé a meterlos en su culo. Lara se volvió loca, comenzó a menearse, adelante y atrás, en un vaivén de ir chocaba contra mis huevos y sonaba a sexo, soltaba sonidos vaginales productos del aire que iba entrando en cada embestida. Acelere el movimiento y estalle! Le llene la xuxa de mi esperma, una gran acabada producto de tantas ganas contenidas.

Nos levantamos y fuimos al baño porque no había mucho tiempo, comenzó a mamar de nuevo y lo puso como un fierro. Se puso de espaldas en la ducha, se echó jabón en la entrada del culo y me dijo:

Y: Quiero que me laves completa hasta por dentro.

Se lo apunte en la entrada de su hoyo y se fue sin resistencia, era un espacio cálido, con ganas de sexo, al parecer mis dedos la dilataron y la encendieron, comenzamos el vaivén en la ducha, aproveché para darle nalgadas, le agarre las tetas, le masajeaba el clítoris, le hablaba el cabello, le pedía que me mordiera las manos, que se tragara mis manos mientras le daba por su culito. Ella solo se dejaba hacer, se movía fuerte, le gustaba el juego con su profe.

La arrodille en la bañera y yo me agaché para una penetración mas profunda, comencé a llevar yo el control, la agarre por las caderas, en varios minutos ya ambos estábamos a punto de un orgasmo, ella comenzó a masturbarse y contraerse, yo acabando en su culo y ella chorreando con un gran squirt.

Terminamos de asearnos, recogimos, la dejé en su casa y partí hacia la mía... Me metí al baño de visitas de mi casa para quitarme el olor a jabón de motel y disponerme a entrar en mi cama. Sorpresa! Mi novia estaba desnudita con unas medias panty y tacones, esperando para darme mi regalo.

Este relato será parte de otra historia...

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