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Un día agitado

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Todavía en la cama durmiendo suena el celular, y con voz de dormida:

Yo: hola.

Roberto: hola mi amor, tengo que hacer un trámite, pero antes paso por tu casa.

Yo: ¿eh, qué hora es? -me desperté de golpe.

Roberto: son las 10 am.

Yo: okey si.

Corté la llamada me di una ducha rápida, y no sabía cómo vestirme, así que no tuve mejor idea que ponerme una tanga un corpiño y un ligero con medias, y así me le iba a presentar a Roberto, ah y unos zapatos de taco; estaba un tanto cachonda esa mañana, y además Roberto me cogía muy rico realmente, con esa hermosa verga larga y gorda, me tenía loca.

A la hora golpean la puerta me asomo a penas por la ventana y era él, la idea era sorprenderlo, abro la puerta asomando la cabeza, y le digo ven pasa amor, cierro la puerta y cuando me vio, se asombró pues no esperaba verme así; nos besamos largamente y me dice que hermosa estas; le acaricie su miembro por encima del pantalón, y ya lo tenía como piedra, mientras le bajaba el pantalones seguíamos con nuestras lenguas, Roberto estaba desesperado, quería sacarse la ropa cuanto antes, le acaricie y le apreté bien los testículos, y le agarre bien el pene duro, le acaricie suavemente el glande con la punta de los dedos, y el largo un suspiro de su boca.

Me tomo del cabello y me fue bajando, me arrodille y me introduje todo su pene en la boca y fui chupando con suaves movimientos, el me tomo por la nuca y me llevaba a que me lo devorara, se movía y me cogia por la boca, y me ahogaba hasta dar arcadas, me levante y me solté el soutien y le pedí, “toma bésame las tetas”, las besaba le pasaba la lengua, las mordía apenas haciendo gritas y suspirar en un aliento, toma mi cintura y me da la vuelta, él me corre el hilo de la tanga a un costado, y apoyo un pierna sobre la silla, apoyándome sobre la mesa y sacando la cola hacia atrás, me ensarta por la concha y me introduce todo el trozo de carne de un golpe, con lo que me hace gritar, y sus movimientos son largos y profundos, “aaahhh aaaahhhh, aaaahhh”, sus manos se apoyan en mi espalda y se apoya en mi y hace que me recueste sobre la mesa, saca su pene de mi vagina y lo me la va introduciendo en mi culo, cuesta pero no tanto como la primera vez, ya me acostumbre al tamaño y lo siento todo dentro mío, bombea y bombea acelerando el ritmo, y siento que va a estallar, y nos venimos juntos, el descarga toda su leche caliente en mi interior.

Agitada me fui al baño a limpiarme la leche me corría por las piernas, así semi desnuda como estaba lo ayude a vestirse a Roberto, se estaba calentando nuevamente y le recordé que tenía el trámite y que se le iba hacer tarde; Roberto se fue y quedamos en llamarnos, me deje caer en el sillón después de la cogida que tuvimos, me quite el liguero y las medias y me cambie me puse una ropa de salir y me dispuse ir al shopping a caminar y relajar después de la mañana “intensa”.

Veo una oferta que dice ‘Masajes descontracturantes’, busco el lugar donde dan los masajes y entro al lugar, me atiende una señorita muy amable y me explica todos los detalles, después de aceptar me hace pasar a un box y dándome un bolso, me indica, quítese toda la ropa coloque todo dentro del bolso, y lo guarda en el locked, y me da una bata, cuando esté lista ella viene y me acompaña al box donde me darán los masajes.

Me desnude por completo y me coloque la bata, de color blanco y que me queda un tanto corta, después de guardar el bolso en el locked, salgo y me esperaba la señorita para acompañarme al box, el clima es relajado tranquilo y música de fondo muy suave, con lo cual ya te vas relajando de antemano; me hace pasar a un box amplio, no hace ni frio ni calor, el ambiente está en el clima perfecto, y la señorita me dice quítate la bata y recuéstate boca abajo en la camilla, sin problemas me quito la bata y quedo toda desnuda delante de ella, mientras le doy la bata observo que me recorre con la vista todo mi cuerpo, lo que hace que me moje un poco la entrepierna, me recuesto en la camilla y me relajo; por lo pronto la señorita que se llama Susana es la que me va a dar los masajes, escucho que ella está haciendo algo no sé qué es, pero por lo que pude observar al entrar debe estar tomando unos frascos con aceites y esencias pues de repente un rico aroma se siente en el ambiente y comienza a pasar sus manos muy suavemente por la espalda, los hombros, los brazos, y toda la espalda, me encanta, Susana me dice relájate y disfruta, y le respondo “si, me encanta”.

Después de un rato, comienza a bajar, y me masajea todas las nalgas, otra vez me hace mojar y aprieto los labios para no jadear y recordar lo de la mañana con Roberto, trato de pensar en otra cosa, y me pasa sus manos por las piernas y los pies, en eso me comienza a masajear por entremedio de las piernas de abajo hacia arriba, creo que se dio cuenta que estaba mojada pero no dijo nada; con su voz suave me dijo date la vuelta así te masajeo tu cuerpo de frente; me doy vuelta, y me mira los pechos, y me dice “que lindo los tienes y bien cuidados”, poniéndome colorada, le digo gracias, me recuesto y cierro los ojos, y comienza a masajearme los brazos, luego las tetas y se queda un rato en ellas, yo cierro las piernas pues me estaba humedeciendo, baja por mi vientre y llega a mis caderas, nota que tengo las piernas tensas y me dice afloja relájate, “estas tensa”, me relajo y roza mi vagina toca todos mis muslos y mis piernas, hasta llegar a los pies, se limpia las manos y me dice relájate ya vengo.

Lo que pasó después en el box de masajes, lo dejo para la próxima.

Espero les haya gustado, si desean pueden escribir sus comentarios a: [email protected].

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