Mi suegro emputece a su hija Corina

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Después de la penitencia que mi suegro me había impuesto al hacerme follar con todos mis cuñados a la vez, yo pensaba que sus planes habían culminado todas sus nueras nos habíamos convertido en sus putas ¿Qué más se podía pedir?

La siguiente vez que me tuve que recibí la orden de conectarme al sistema me di cuanta de mi error, ante mi apareció mi suegro acompañado de su hija Corina, esta era la hija menor de mis suegros y por tanto mi cuñada, una de las consecuencias de que mis suegros hubieran tenido tantos hijos, y la distancia temporal era que Corina, su benjamina, era de una edad muy parecida, e incluso inferior, a parte de sus sobrinos, nuestros hijos. Había sido durante años el ojito derecho de papa, pero en las discusiones que tuvieron lugar tras la separación de mis suegros este sintió que ella se había puesto de parte de su madre.

Corina hacia muy poco que había cumplido los 18 años, tenía el pelo corto y en esta ocasión llevaba una falda a medio muslo que dejaba al descubierto unas piernas preciosas.

-¿Pero qué hacía con mi suegro y porque este había dado la orden de que nos conectáramos, la conversación entre ellos me sacó de las dudas:

-¿Así que quieres que te pague los estudios universitarios?

-Es lo lógico, dijo ella, soy tu hija, respondió ella.

-No te creas que soy tonto, dijo él te pague tus estudios en ese internado tan caro y sé que muchas de las asignaturas las aprobaste follando con los profesores, respondió él

Después de un momento de silencio mi suegro añadió:

-Está bien pagare tus estudios, pero te lo tendrás que ganar, haciendo para la empresa, lo que mejor sabes hacer follar, y vas a empezar ahora mismo haciéndolo conmigo.

-¿Estás loco? Dijo ella, eres mi padre.

-Lo tomas o lo dejas, dijo él.

Ella lo pensó un momento, y respondió:

-Está bien, pero que sepas que lo hago por dinero, no porque sienta ninguna atracción hacia ti.

Mi suegro no dijo nada solo le hizo una señal para que se acercara u se sentara encima de él, sin duda como padre e hija lo habían hecho muchas veces, pero en esta ocasión iba a ser diferente, Corina se sentó en las rodillas de su padre y el muy cabron alzándole la falda llegó hasta su culo y comenzó a acariciárselo, ella acercó su boca a la de él, y los dos se dieron un beso con lengua nada filial.

Ella llevó una de sus manos hasta la polla de su padre y se puso a acariciárselo por encima del pantalón su polla se puso dura y ella dijo:

-Eres un cerdo, poniéndote, cachondo con tu hija.

Es que eres una zorra le respondió él, y luego le ordenó, venga quítame los pantalones y chúpame la polla, cree que es lo que mejor has aprendido en el internado.

Ella hizo caso de su padre y se los bajó la polla de él quedó al aire y ella dijo:

-Papito no es que la tengas gigante, pero no está mal de tamaño, las he chupado más pequeñas.

Abrió su boca y se tragó la polla de su padre y comenzó a manejarla, este comenzó a gemir mientras le decía:

-Eres una zorra, la chupas mejor que alguna de las putas con las que he ido, se ve que en el internado en vez de estudiar te has dedicado a hacer otras cosas.

-Se ve que sabes mucho de que te la chupen, so cabrón, respondió su hija.

Y siguió chupándosela hasta que me suegro quiso pasar a la fase siguiente y le dijo:

-Zorra ya es hora de que follemos

Ella se levantó del sillón donde se la estaba chupando a su padre, se alzó la falda, se bajó las bragas y acariciándose el coño dijo:

-Si cerdo, me has puesto cachonda, tengo el coño mojado.

Mientras su padre la miraba tocándose la polla, hasta que ella con la falda levantada, fue hasta donde estaba su padre, se puso de pie encima de él y poco a poco fue descendiendo, hasta que su coño entró en contacto con la polla de su progenitor y comenzó a subir y bajar, mi suegro al sentirlo dijo:

-So guarra follas mejor que la puta de tu madre, y que muchas de las otras putas con las que he follado.

Ella siguió moviéndose arriba y abajo, y su padre estaba gozando a tope como demostraba, no solo la cantidad de palabras guarras que decía, sino la forma de gemir. En ese momento ella le estaba cabalgando de espaldas a él y no paraba de decirla lo puta que era, pero de repente ella decidió girarse y puso una de sus piernas sobre el hombro de su padre que dijo:

-Me encanta tu coño, además de lo caliente que lo tienes es lindo de ver.

-Gracias, papaíto, dijo ella.

Continúo girándose mientras mi suegro seguía gimiendo, se le notaba que lo estaba pasando maravillosamente, dio otro giro y se coloco de cara a su padre, después pego sus tetas a la cara de su progenitor y siguió cabalgándole, él llevó sus manos hacia su culo y se lo agarró, mientras le decía:

-So zorra tu culo es mucho mejor que el de la puta de tu madre.

Y siguieron follando, se les notaba que los dos lo estaban pasando divinamente, pro mi suegro comenzó a dar algunas muestras de cansancio y dijo a su hija:

-Puta tengo ganas de que lo hagamos en el suelo, ¿Crees que podrías?

-Papito, respondió ella, la zorra de tu hija es capaz de hacerlo en cualquier sitio.

Ella se levantó de encima de él, y se tumbó en el suelo de lado, mi suegro se levantó también del sofá y se colocó detrás de su hija, y desde esta postura se la volvió a follar en esos momentos se notaba que pese a las palabras groseras que pudieran decirse los dos estaban encantados de estar follando el uno con el otro, pero en ese momento mi suegro dijo:

-Estamos follando vestidos, y yo tengo ganas de verte desnuda, desnudémonos.

-¿A ti te parece que eso es propio de un padre y una hija? Dijo Corina con ironía

-Es propio de una zorra como tú, le respondió su padre.

Los dos se desnudaron por completo y siguieron follando, hasta que mi suegro dijo

-Puta, me voy a correr.

Corina se sacó la polla de su padre de su coño, le pidió que se tumbara en el suelo y cuando lo hizo llevó su boca hasta la polla de su progenitor y se puso a chupársela, en la cara de mi suegro se notaba lo feliz que le estaba haciendo su hija, esta le agarró su polla con una de sus manos, y con su lengua se puso a lamérsela, hasta que él se corrió, entonces su hija se puso a limpiarle la polla con su lengua, hasta dejársela bien limpia, pero ante los efectos de la lengua de su hija la polla de mi suegro se recuperó, ella con una poco de mala intención dijo:

-Pero papa, se te ha puesto dura de nuevo, nunca lo hubiera imaginado.

-So zorra, respondió el padre, que te has creído, no soy ningún viejo decrepito, puedo aguantar varios asaltos, y ahora so puta lo que me apetece es metértela por el culo, que, seguro que de virgen no tiene nada, puta.

-Si ese es tu deseo papito, yo soy una niña buena.

Y se puso a cuatro patas, su padre se puso detrás de ella, y al verla de culo dijo:

-Puta estas mejor que tu madre cuando tenía tu edad, espero que también folles mejor que ella por el culo.

Se puso detrás de su hija y la introdujo su polla por el culo, y le dijo:

-Menudo culo tienes, se nota que no es la primera polla que recibe, y además parece hecho especialmente para ello.

-Oyes papi no lo haces del todo mal.

Él se puso a moverse dentro del culo de su hija, lo hacía con rabia, igual pensar que su hija era así de puta le encantaba, y mientras le rompía el culo le decía:

-Toma zorra, eres una verdadera puta

El culo de su hija aguantaba los envites de su padre con toda naturalidad, se la notaba que tenía una cierta experiencia, hasta que mi suegro no pudo más, y se corrió llenando con su semen el culo de su hija.

-So zorra no sabes el momento tan increíble que me has hecho pasar, con tu madre en todos los años de matrimonio nunca había gozado tanto

En ese momento la conexión se cortó. Dejándome muy excitada y a la vez bastante intrigada, mi suegro nos había convertido a todas sus nueras en sus putas, pero ¿Haría lo mismo con sus hijas? Y de ser así ¿Nos tocaría a sus nueras ayudarle, o llevaría a sus propias hijas a tener sexo unas con otras? De momento eran preguntas que se agolpaban en mi mente y para las que en ese momento no tenía ninguna respuesta.

Unos días después recibí indicaciones de volver a conectarme y vi que Corina ya había empezado a trabajar para su padre, estaba sentada en el sofá, llevaba un vestido banco, muy corto que apenas tapaba sus piernas, poco después entro en el cuarto Ricardo, este era otro de los socios comerciales de mi suegro, cuando vio a mi cuñada sentada en el sofá se quedó sorprendido, y se le notaba baboseando, ante la visión de una chica de dieciocho años bellísima.

-Buenos días, Ricardo, dijo ella, con voz insinuante, mi padre se disculpa por no poder recibirte en persona y me ha pedido que te enseñe todos los detalles que quieras del proyecto.

Se le notaba en que proyecto estaba pensando, jajaja, se sentó al lado de la chica, y esta, manteniendo su ton insinuante le dijo:

-Si aceptas el proyecto lo celebraremos juntos.

Él estaba muy excitado y no se podía contener, llevó sus labios hasta los de la chica y se besaron apasionadamente.

-Está bien, dijo él, acepto el proyecto

Y llevó una de sus manos hasta las piernas de Corina y se puso a acariciarlas, ella e respondió llevando una de las suyas hacia la polla de Ricardo y comenzó a acariciárselo, mientras sus lenguas jugaban la una con la otra.

-Pararon un momento, él se quitó el polo rojo que llevaba, mientras ella se quitó el vestido quedándose únicamente con unas bragas blancas, él reconociendo a la diosa joven que tenía a su lado dijo:

-Eres una de las mujeres más hermosas que he visto en toda mi vida.

Llevó su boca hasta uno de los pezones de Corina y se puso a besarlo, mientras con una de sus manos fue hasta a las bragas de mi cuñada y metiendo su mano por debajo se puso a acariciarla, ella al sentirla se puso a gemir. Él le pidió que doblara sus piernas y cuando ella lo hizo, Ricardo le fue bajando las bragas, poco a poco, hasta quitárselas y en ese momento exclamó:

-Qué coño tan delicioso tienes.

Llevó su cabeza hasta esta zona del cuerpo de la chica, y rozando su bigote contra el coño de Corina, se puso a comérselo. Ella al sentir su lengua y el bigote del madurito se puso a gozar y dijo:

-Que bien lo comes, mi amor.

Ricardo estuvo comiéndole el coño un rato, hasta que Corina dijo:

-Mi amor, me lo estás haciendo muy bien, pero ahora me toca a mí devolvértelo.

Le hizo sentarse en el sofá, relajado y lanzándose sobre su polla, se la metió en la boca y dio comiendo a una mamada muy intensa, el comenzó a gozar y le dijo:

-Princesa la chupas mejor que muchas de las profesionales de lujo.

Yo al verlos no pude evitar, lo que se había hecho una costumbre viendo lo que mi suegro hacia que nos retransmitiesen, llevarme una de mis manos hasta mi coño e introducir uno de mis dedos en su interior.

Pero por supuesto ellos estaban ajenos a mis deseos. Ella siguió chupándosela, y el disfrutándola, hasta que no pudo aguantar más y le pidió:

-Princesa, me muero de ganas por probar tu coño.

-Si es lo que deseas mi amor, le contestó ella, tus deseos son mis deseos.

Corina dejó de chupársela, se puso a su lado llevó su boca hasta la de él y se enzarzaron en un beso apasionado, ella agarró la polla de Ricardo y se la meneó un poco para que estuviera completamente dura, y cuando la vio en plena forma le puso un condón, después se sentó encima de él, de espaldas hizo que la polla de Ricardo encajara con su coño y comenzó a cabalgarle.

Ricardo no parecía creer lo que estaba viviendo, una preciosa jovencita estaba cabalgando su polla, se sentía en la gloria, llevó sus manos hasta las tetas de la chuca y se puso a acariciárselas, pero Corina o estaba gozando también a tope, o había aprendido a fingir muy bien, sus gemidos eran también muy intensos, hasta que él le pidió a ella:

-Me gustaría hacértelo desde atrás.

-Mi amor, me tienes aquí para hacer lo que tú quieras, respondió ella.

Ella se quitó de encima de él y se puso a cuatro patas, él se colocó detrás de ella, se notaba que la visión del trasero de Corina le resultaba muy agradable, y desde esta postura le introdujo su polla en el coño de la chica, y comenzó a moverse de una manera impetuosa propia de un chico joven.

Los gemidos de Corina se intensificaron, y le dijo:

-Mi amor me estas llevando a la gloria.

Los dos parecían estar gozando a tope, pero él le pidió a ella:

-Mi princesa, me gustaría verte mientras lo hacemos.

Él se salió un momento, ella cambio de postura, se tumbó en la cama bocarriba, el se puso en una postura en que su cuerpo estaba a noventa grados con la chica, ella alzó una de sus piernas, y Ricardo la penetró en esta posición, nuevamente los dos, siguieron disfrutando a tope, hasta que Ricardo no pudo más y dijo:

-Mi Princesa me voy a correr.

-Hazlo sobre mi vientre amor, le pidió ella.

Él se apresuró a complacerla, le sacó la polla del coño, se quitó el condón y dejo que su semen cayera sobre el vientre de Corina, ella se lo restregó como su fuera una crema hidratante, él dijo:

-Ha sido fantástico mi princesa, espero que lo repitamos

-Yo también lo deseo mi amor, dijo ella, follar contigo el socio de mi padre, mientras hacemos negocios es delicioso.

-Por supuesto le dices a tu padre, que aceptó el negocio en las condiciones que hemos hablado, dijo él, pero será mejor que no le digas como me has convencido, jajaja.

Yo en ese momento pensé en que seguramente mi suegro había sido quien había planeado todo. Después él se vistió y dando un beso muy dulce en la boca a la chica se fue y Corina se quedó sola en el salón completamente desnuda, y no parecía para nada descontenta con lo que acababa de vivir y el señor del bigote llevaba razón mi cuñada era bellísima. En ese momento se cortó la conexión.

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