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Clase muy particular (Parte 2)

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Luego de que mi estudiante quedara tendida en el piso, decidí ir por un jugo o algo frío a la refrigeradora. Encontré un jugo de naranja el cual le lleve. Le ayudé a sentarse en el sillón, aún desnuda y le di el jugo para que estuviera más tranquila.

Ella: profe, que rico. Gracias.

Yo: te gusta este jugo de naranja?

Ella: me refería a todo lo que me hizo. Que rico todo. Cuánto aumentó mi nota?

Yo: te dije que serías mi esclava toda la noche, madrugada y hasta mañana, así que hasta mañana te doy la nueva nota.

Ella: está bien mi profe. Con tal de una buena nota, haré lo que me pida.

Yo: excelente. Así me gusta, obediente. Ya que me debes todas las tareas y trabajos que deje.

Mientras se lo decía, miraba sus pechos, gigantes, ricos, pezones rosados, se movían cada vez que Sofía respiraba, los movía a propósito.

Ella: profe, yo le gusto?

Yo: claro Sofi, estoy extasiado.

Ella: lo puedo notar en su pene, aún erecto, grueso, grande, se ve delicioso y espero que haya mucha lechita para mi.

Yo: claro, tenemos todo lo que falta de la tarde, noche y madrugada.

Ella: uy profe, pero son las 3 de la tarde. Si me va a coger así como lo hizo ahorita, igual en la noche, madrugada y en el mañanero, creo que necesitaré ayuda para aguantar.

Yo: ayuda??? A que te refieres?

Ella: profe, Lau también quiere una buena nota.

Yo: su amiga Lau? La que siempre anda contigo?

Lau era su amiga inseparable, al menos en la clase se sentaban juntas, Lau era un poco más alta, morena, pelo negro, una mirada mortal, sexy, labios carnosos, sus pechos no eran tan grandes como los de Sofi pero si eran del tamaño justo para perturbar la cabeza de cualquier, su trasero era delicioso junto a unas piernas de infarto.

Sofi: voy a llamarla para que venga y nos ayudamos con nuestras notas.

Luego de una conversación de introducción, entre broma y broma.

Sofi: bueno, yo te llamé para decirte algo, pero con confianza, entre nosotras. Me encuentro en el sillón de la casa del profe de Cómputo, estoy tratando de aumentar la nota del curso. Quieres venir a ganarte el curso.

Lau: suave suave, no te entendí. Explícame bien. Que estás haciendo???

Sofi: o sea, estoy ganándome la nota del curso del curso, solo soy obediente a todo lo que el profe me dice. Te interesa ganar el curso?

Luego de un pequeño silencio.

Lau: mándeme la ubicación y ya le llego.

Sofi procedió a enviarle la ubicación, Lau indicó que llegaría en un rato, así que puse a Sofi a comerse mi pene para tenerlo erecto.

Yo: Cométela toda, mámame hasta que venga Lau.

Sofi: si mi profesor, lo que Ud. guste.

Me mamaba despacio, suave, pasaba la lengua y me comía dulcemente. Poco a poco me comía todo el pene mientras me relajaba cada vez más, mientras yo me sentía el rey.

La detuve un momento, fui por una cerveza, agua y volví al sillón. La acosté a mi lado para mamarle los pechos, morderle sus rosados pezones, chuparlos mientras le metía 2 dedos. Ella gemía suave, pero largo. Cuando le mordía sus pezones sus gemidos eran más fuertes y excitantes, le pegue un par de veces en los pechos y su grito fue estremecedor, pero su mirada y sonrisa decía todo.

Luego de un rato de jugar, Lau llamó por teléfono.

Lau: ya llegué.

Le indicamos cual era la casa, le abrí la puerta. Ingresó y de pronto cerré la puerta.

Cuando entró vio a Sofi desnuda, sentada en el sillón, las piernas abiertas.

Sofi: al fin llegaste Lau. Cómo estás?

Lau: pero no has perdido el tiempo.

Yo: para nada.

Lau giró si cabeza y al verme también desnudo, excitado, su impresión fue inigualable, más cuando mordió sus labios al verme muy erecto.

Lau: ahh con razón. Te has dado gusto Sofi.

Sofi: claro y ahora creo que te toca si es que quieres una buena nota, amiga.

Lau: cuales son las reglas profe.

Yo: sea obediente 100% Así que venga, cómase mi pene como la perrita que sos.

Inició con ganas, mamo rápido, con fuerza, la tragaba toda, me chupaba los huevos, rico, apretaba duro mi pene, me volvía a ver y se sonreía.

Yo: Lau que rico lo haces, Sofi que esperas para unirte? Ven a mamar también.

Rápidamente empezaron a comerme el pene, ambas con un deseo total y yo excitado.

Yo: quiero verlas a Uds. comerse la una a la otra.

Su respuesta fue inmediata, ambas empezaron a besarse y a disfrutar de sus senos, mientras me sostenía el pene.

Lau: profe quiero ese pene adentro.

Se fue metiendo despacio mi pene, dándome la espalda, su gemido sonó en todo el condominio, Sofi le mamaba sus pechos mientras ella se sentaba en mi pene.

Yo: quiero que Lau se mueva despacio para que Sofi se le coma el clítoris.

Cada mandato mío era obedecido al instante. Mientras Sofi chupaba desde mis bolas hasta el clítoris de Lau, Lau gritaba fuerte, extasiada, yo le apretaba duro los pezones y le azotaba las nalgas.

Luego la puse de 4 en el piso, como la perrita que era, la penetre profundo. Cada vez sus gemidos eras ensordecedores.

Yo: Quiero que te comas la vagina de Sofi.

Sofi no tardó en acomodarse, mientras Lau no dudo ni un segundo en comerse toda esa vagina empapada.

Sofi se masturbaba, estaba a punto de dejar salir otro chorro mortal. Lau se comía su clítoris y se agarraba fuerte de las inmensas tetas de Sofi.

Cada vez daba más fuerte, más duro, con nalgadas impresionantes, jalando el pelo y de vez en cuando le daba una fuerte palmada a sus pechos.

En un momento Lau gemía como nunca, levantó su cabeza, gritó y de su vagina salió un chorro, un orgasmo que mojo toda mi sala y alfombra, cuando Sofi vio esa explosión, ella no se quedó atrás, por lo que decidió también estallar.

Yo: suave que yo no me he venido, Uds. si. Eso no es justo.

Tome mi pene y lo metía con más ganas a Lau, ella estaba temblando, yo sólo la penetraba a mi placer, saque mi pene, lo metí en su boca.

Yo: tómate mi lechita perrita.

Al regarme ella se dejó todo mi semen.

Lau: profe, que es esto tan rico. No sabía que ganar este curso fuera tan delicioso.

Yo: estás apenas empezando. Falta la noche madrugada y los mañaneros.

Ya que Lau estaba en estado de éxtasis, Sofi decidió mamarle los pechos para relajarla.

Yo: van muy bien las dos.

Lau: profe. Eso que no ha visto los juguetes y trajes que tengo en mi bolso para que nos divirtamos más.

Fui a su bolso y logré ver rápidamente trajes de colegiala, otro traje de sirvienta, vibradores y un par de cositas más que les contaré en la siguiente parte.

Nos vemos.

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