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Devuelta con la esposa de mi primo, tuvimos una sorpresa

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Después de tener un revolcón con Diana la esposa de mi prima, pasaron varios días. Mi primo llegó de viaje y como de costumbre fui a visitarlos, mi primo hablaba de su viaje que en su trabajo lo habían ascendido y que estaba en un gran cargo, pero la verdad nada de eso me importaba yo solo quería ver a Diana me prendía demasiado, no hay nada que me vuelva loco que unas buenas piernas y unos pies bien cuidados y arreglados, y ella tenia esas dos cosas, y aparte le agregamos su buen culo que tiene, ese día tenia puesto un short de mezclilla demasiado pegado, una blusa roja y unos zapatos con tacón, que me tenían vuelto loco, no me quería parar para que no se me notara mi ereccion.

Pero no se si Diana lo hacía adrede y paseaba por toda la casa meneando su culo.

En un rato que mi primo se metió al baño, no aguante las ganas y me paré la pegue a la pared y le di un beso mientras le agarraba las piernas y le decía que la iba volver hacer mía, ella solo me correspondía el beso y soltaba pequeños gemidos.

Paso ese día y solamente me despedí de ellos y les dije que me iría que luego los veía. Llegó el fin de semana y mi primo me invitó a comer a un restaurante, cuando repentinamente recibe una llamada y dice que tiene que volar a Guadalajara de carácter urgente por motivos de su trabajo, me dice que si lo llevo al aeropuerto después de recoger unas cosas en su casa. Llegamos y nos dirigimos a dejarlo Diana y yo. Desde que llegue a los mariscos no dejaba de echarle el ojo a Diana. Llevaba puesta una falda negra, una blusa ombligera blanca y unas chanclas. Procedimos a dejar a mi primo y se despidieron y él decía que volvía pronto que él nos hablaba.

De vuelta a casa de mi primo durante el camino le fui tocando las piernas a Diana ella al principio no quería.

Y: estaremos solos este fin de semana, tenemos que aprovechar, perrita

D: no me digas así y ya te dije que me sentí mal la última vez por lo qué pasó

Y: vamos se que te mueres por volverle a poner los cuernos a mi primo (le agarre las piernas y toque su vagina por encima de su calzón)

D: ya pancho!! No sigas

Y: y si sigo queee

Ella tomó mi mano y la apretó junto a su vagina y la movía en forma circular

Y: bájate el calzón.

Todo el camino del aeropuerto a la casa de mi primo que vive en el fraccionamiento El Cid, está largo el camino, la verdad que perdí la cuenta de cuantos orgasmos tuvo, solo se qué pasó gimiendo y mordiendo se la boca.

Al llegar a su casa la baje del carro cargándola y me la lleve a su cama, la muy perrita ya estaba muy caliente, y se quitó la ropa, se puso en cuatro

D: vamos dame de perrito, ya estoy muy caliente

Me quite el pantalón, la agarre de su cintura y con una embestida fuerte se la metí de una, sólo se escuchó un largo grito y después solamente se escuchaba el clap, clap de la penetracion.

D: yaa yaaa yaa voy acabar, no no bajes el ritmo

Y para que acabara más rápido la comencé a nalguear y a tocar sus tetas.

D: ahhh ahhh yaaa acabeee

Y: yo no he terminado vamos móntate

Se quitó de la posición de perrito y se montó en mí pero dándome la espalda, y en esa poción con una mano tocaba sus tetas y con otra su clítoris.

D: hay viene otrooo orgasmooo, ahhh me vineee me vineee

Y al mismo tiempo que yo salieron chorros de leche de mi pene, nos acostamos y ella se recostó sobre mi pecho.

Y: vez que te morías de ganas por otro polvo

D: no sé qué me pasa que me excito y me dan ganas de que me pegues un buen revolcón.

Y: bueno hermosa me tengo ir.

Y así fue me fui no sin antes pegarle unas buenas nalgadas y la muy perrita solo puso cara de placer.

A los días llegó mi primo y me dijo que quería hablar conmigo, que fuera a su casa.

Llegue a su casa y estaba en la sala con Diana sentada en sus piernas.

Raúl: amor bájate poquito que quiero hablar con ustedes dos.

Y: qué pasa, te ascendieron a gerente de la empresa?

R: no, es algo más personal que quiero hablar. No se como empezar, pero he visto que ustedes dos me ponen el cuerno, aquí en mi casa

Y: de qué estás hablando Raúl (obviamente nos íbamos a negar)

R: no mientan que tengo cámaras por toda la casa ustedes no las ven por qué las tengo muy bien escondidas, y he visto como te culeas a mi mujer

Diana y yo solamente estábamos callados sin nada que decir

R: pero en lugar de enojarme o sentirme mal, al ver esos videos y ver como otro hombre se culea a mi mujer excito

Se paro y se dirijo al cuarto, saco una bolsa y le dijo a Diana que lo abriera,

Lo abrió y en la bolsa había un baby doll,

R: quiero que te lo pongas y tengan relaciones enfrente de mi, quiero verlos ya que eso me prende.

Yo estaba con cara de asombro la verdad no podía creer que mi primo estuviera diciendo eso.

R: vamos al cuarto todos, tu (Diana) ponte eso que te esperamos en el cuarto.

Nos fuimos al cuarto y mi primo se sentó en un sofá y se comenzó a desvestir hasta quedar en pelotas.

Diana entró al cuarto con su babydoll blanco, tanga de encaje, brasier y ligueros puestos.

R: vamos cojan delante de mi, quiero excitarme.

Nos comenzamos a besar con algo de timidez, pero fuimos perdiendo el miedo y comenzamos hacerlo, mi primo excitado en el sillón mientras veía cómo me culeaba a su mujer y como le hacía de todo, el solamente se masturbaba y le decía a Diana que gimiera fuerte que eso lo prendía más, y así duramos buen rato hasta que uno por uno fue terminando, la verdad pasaron mas cosas, después les contaré sobre algo qué pasó en la casa de mi primo en un juego de baraja.

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