Nuevos relatos publicados: 22

Mi doble vida

  • 3
  • 11.650
  • 9,00 (9 Val.)
  • 6

Hola queridos, soy yo de nuevo, Tania, travesti de clóset y ahora quiero publicar en esta categoría de confesiones un poco sobre mí.

Biológicamente me tocó nacer hombre, sin embargo mental y emocionalmente me siento toda una mujer.

Desde muy joven, mi gusto por la ropa femenina se manifestó con mucha intensidad, zapatillas, medias, faldas, bras, en fin, todo lo referente a ropa femenina me llamaba mucho la atención, mi aspecto era de hombre, pero mi curiosidad por usar ropita femenina siempre fue más fuerte que yo... Y no pude contener mis ganas y comencé a probarme primero zapatillas, el aspecto que tomaban mis pies cuando calzaba tacones era hermoso, siempre he tenido pies muy cuidados, es una de las partes que más adoro de mi cuerpo.

Soy alta 1.77 metros, ni delgada ni gordita, siempre he sido "llenita" lo que se puede catalogar como "gordibuena" jiji, piernas llenitas, muslo jugoso, tobillos delgados, cintura mediana, nalgas redonditas y creo yo que antojables... Pechos medianos, siempre tuve acumulación de grasita, lo que me favoreció para lucir una especie de tetas pequeñas y muy, muy sensibles, podría decir que femeninamente sensibles. Mi cara es varonil a medias, nariz mediana, ojos café y labios medianos, me gusta la forma de mis labios, cuando los pinto se ven muy femeninos.

Tuve una juventud (y creo que toda mi existencia de doble vida), tan es así, que en mi vida de hombre soy casado, pero no puedo engañar a mi ser... No sólo me gusta usar ropita femenina, siento fascinación por los hombres, ¡me encantan!, Sus maneras, su físico, su fuerza, si manera de expresar cariño y en el aspecto sexual no hay nada en el mundo que me guste más que un buen macho abrazando mi cuerpo de la manera que él lo desee, estoy hecha para satisfacer a los hombres de eso no tengo ni tuve dudas nunca.

En mi vida he tenido muchos, al principio pensé que no iba a conseguir un hombre por la conducta machista en extremo de mi país, afortunadamente estaba equivocada, no sé qué fue, tal vez aún en mi papel de hombre se percibe mi carga sexual (alguna vez me dijeron "te ves como hombre, pero proyectas una hermosa mujer, incluso hueles a una mujer deliciosa")

Por mi vida han pasado muchos hermosos hombres, de todas las clases, todos los físicos y educaciones, estoy agradecida por eso, nunca me he quedado con ganas de nada.

Se pensaría que la vida para alguien como yo es difícil y atormentada porque no tengo el sexo que yo quisiera, pero no... Estoy a gusto así, tuve la oportunidad de cambiar de sexo más no lo hice porque me siento aceptada y valorada como soy, una mujer muy temperamental en el ambiente sexual, tierna con los hombres y muy complaciente, creo que así soy feliz.

Ahora soy una mujer madura, (tengo 52 años) la apertura sexual de los hombres hacia mi no ha disminuido, debo decir que me cuido mucho y estoy conservada. Actualmente tengo amigos que conocen mi condición y me aceptan tal cual. Ya sólo me visto cuando tengo una cita con alguien y lo hago siempre en un cuarto de hotel o en la casa de mi hombre en turno.

Digo todo esto porque así he sido, Tania, una mujer completa con cuerpo de hombre y quiero decirle a quien tenga la misma condición que yo, que no es malo, no estás "enfermo" ni mal de la cabeza, tan solo eres una hermosa mujer escondida en el cuerpo equivocado y que hay muchos hombres a los que les gustan las chicas como nosotras.

Quiérete mucho y nunca te quedes con ganas de nada hermosa.

Gracias por leer queridos, cómo siempre les dejo mi correo para recibir sus mensajes, me encantan y me mantienen calientita jiji [email protected]

Besos!

Tania Love

(9,00)