Estaba en ese entonces en Ciudad de México, para bien o para mal, tuve la necesidad de rentar una habitación de un departamento, en la modalidad de rommie, debido a que me tuve que quedar a trabajar por una temporada en la ciudad, eso por allá del año 2022, recién finalizando la pandemia, un día de descanso, estaba aburrido, metido en la soledad de mi habitación, mientras que los compañeros de departamento, cada uno estaba en su habitación.
Debo mencionar, que, ninguno de los rommies con los que convivía, tenía conocimiento de mi gusto o de la “otra vida” que tengo, así es que, dentro de lo posible, mantenía la mayor discreción en mis actividades, así es que, mientras estaba en mi cuarto, con mis audífonos puestos, estaba entretenido, viendo algunos videos de tipo pornográfico, así como leyendo algunos relatos eróticos, para pasar el tiempo, pero ya me estaba poniendo excitado con todo eso.
Me puse a navegar en algunos grupos que tenía agregados en mi página de Facebook, entre los cuales, puse mayor atención a uno que era de Trasvestis y Transexuales de la Ciudad de México y Estado de México, leyendo las diversas publicaciones de los miembros del grupo, cuando leí una publicación reciente que me llamo la atención, que decía que era una chica TV, Estilista, que trabaja y vive en Ciudad Nezahualcóyotl, que era activa, me tome el atrevimiento de mandarle mensaje privado, el cual contesto en poco tiempo.
La conversación fue iniciada por mi mensaje, esperando su respuesta, después, ella contestando y siguiendo el hilo de la conversación de la siguiente forma:
Yo: “Hola, leí tu mensaje en el grupo, me intereso, yo radico por Iztapalapa, cerca del Metro Canal de San Juan, espero me permitas contactar contigo y si me lo permites conocerte”.
Ella: “Hola, Que bueno, yo estoy cerca de la Glorieta del Coyote, en Ciudad Neza, me podrías mandar una tuya por favor, para saber con quién hablo”.
Yo: “Si por supuesto, te envió foto mía, Gracias por contestarme”. Le envíe una foto y espere su respuesta.
Ella: “Mucho gusto, no sé si te parece, pero me gustaría que nos viéramos hoy mismo, te invito aquí a donde vivo, podemos conversar y convivir un poco, si te gusta la idea, te veo después de las 3pm”.
Me sorprendió gratamente, así como grandemente, la rapidez con la cual iba la situación, pero no le vi problema, a lo que le contesté:
Yo: “Si, por supuesto, si no tienes inconveniente, al rato te veo, solo me organizo y con todo gusto llego a donde me digas”.
Luego de eso, me mando un numero de celular, en el cual tenía su cuenta de WhatsApp, ya acercándose la hora convenida, Sali de donde rentaba, dirigiéndome inicialmente al punto de referencia que decía inicialmente en el mensaje, que era la Glorieta del Coyote, durante el trayecto, Ella me envió un mensaje y la conversación siguió de la siguiente forma:
Ella: “Hola, ¿Me gustaría saber si nos vamos a ver?”
Yo: “Hola, Si, de hecho, ya estoy iniciando mi camino hacia el Coyote, para que una vez llegue ahí, me digas a donde te puedo ver”.
Ella: “Ah que bien, estaba esperando que me confirmaras, mira te voy a mandar la dirección, llegas directo ahí por favor”.
Me envió la ubicación por medio de la app de WhatsApp, la cual no era demasiado lejos de donde me había dicho en un principio, después de algunos minutos de camino, llegue al lugar acordado, le mande mensaje, me contesto rápido, diciendo que le esperara y que ella llegaba por mí, pasaron si acaso 10 minutos, gire mi vista hacia mi derecha y fue entonces que la vi acercarse, me sorprendió, porque de primera impresión.
Me recordó mucho en lo físico, a la persona con la cual había tenido mi primera vez, hace ya muchos años atrás, de primera vista fue de mi agrado, vistiendo un pantalón de mezclilla azul pegado, blusa femenina de color rojo con negro, con motivos floreados, tenis blancos, teniendo una figura de complexión delgada, con buena forma de pierna, de figura realmente femenina, no tenía busto, pero no le vi problema, de cabello teñido de güero, de mi estatura, si no es que un poco más alta, se acercó a mí, diciéndome:
Ella: “Hola, un gusto conocerte”. Al decirme esto, se acerca a mí, me da un abrazo, le correspondo con el mismo afecto.
Yo: “Hola, el gusto es mío realmente, me has gustado de primera vista, es agradable tener esta visión frente a mí”.
Ella: “Me halagas, si gustas, vamos a comprar algo de tomar y vamos a donde vivo, para convivir un rato, te comento, que, en este momento, esta una de las personas con las que vivo, pero él no se mete ni dice nada, espero que no tengas inconveniente con eso”.
Yo: “Esta bien, no tengo problema, vamos, tú me dices donde compramos y de ahí a donde me indiques”.
Fuimos a una tienda, a unos pasos cerca de donde fue por mí, compre varias cervezas, algunas frituras, después empezamos a caminar hasta una puerta de un edificio que estaba cerca de la tienda, saco unas llaves, con las cuales abrió la puerta y pasamos al interior, me dirigió a unas escaleras, que subimos, entramos a un apartamento, no muy grande, pero tampoco pequeño, estaba sentado un hombre en una silla de una mesa de un comedor, que estaba entrando, comiendo algo.
Al verlo, exclame en voz alta, “Buenas Tardes y buen provecho”, contestando esta persona que “Buenas Tardes, gracias”, saludando ella con “Ya volví” luego diciendo, “con tu permiso, voy a pasar con él, estaré en mi habitación”, llevándome a una puerta contigua a la puerta donde entramos, la cual daba acceso a una habitación, al entrar veo una cama matrimonial, bien tendida, un closet armable, lleno de ropa, algunos pares de calzado en el suelo, un tocador con su espejo y un sillón de dos plazas, ella me llevo directamente al sillón y me hizo tomar asiento, para luego decirme:
Ella: “Permíteme un momento, me voy por unas cosas y regreso contigo”.
Salió del cuarto, regresando pocos minutos después, con un par de vasos de vidrio, un plato y en envase de salsa picante, en el plato vacíe las frituras, vertiendo bastante salsa picante en las mismas, mientras ella, empezó sirviendo la primera dosis de cerveza en los 2 vasos, dándome uno de los vasos, tomando asiento junto a mí en el sillón, tomando un breve trago cada uno de su vaso y empezando a platicar, de inicio, sobre lo que trabajamos, gustos, comentando los temas para conocernos, entre los tragos constantes, se acabaron los 2 primeros envases de cerveza.
La platica fluyo tranquilamente, con el paso del tiempo y los constantes tragos, ya algo más desinhibidos, por el alcohol circulando en nuestra sangre, ella deja su vaso en el suelo y me suelta la siguiente pregunta:
Ella: “Sabes, desde que te vi, me surgió una pequeña duda, he estado poniendo atención al como eres y como te vez, tus acciones y gestos, así que responde ¿Que roll te gusta jugar en la cuestión sexual? Como tu pudiste leer en mi publicación, yo soy más activa”.
Yo: “Bueno, he sido tanto activo como pasivo, aunque últimamente o más bien, regularmente he sido más pasivo”.
Ella: “Oh mira, eso suena interesante, me parece por demás atractiva la situación a partir de este momento, entonces…”
Termino de decir eso y se acercó a mí, tomando mi cara con sus manos y me empieza a besar, con bastante pasión, me deja de besar y agarro su vaso, terminando su contenido de un solo trago, haciendo yo también lo mismo, ella tomo tanto su vaso como mi vaso y los puso encima de la cómoda, volviendo a sentarse en el sillón, pone una de sus manos sobre mi pierna, la cual comenzó a acariciarla, acerco su cara a mi oído y me dijo susurrando en un tono cachondo.
Ella: “Sabes, también desde que te vi al llegar, me gustaste mucho y ya que estamos aquí, los dos solos, encerrados, sin que nadie nos molesté ¿Porque no me dejas ver algo más de ti?”
Luego de decirme eso, me paso su lengua en mi oreja, bajo por mi cuello, para luego, subir nuevamente a mi oreja, la cual empezó a lamer, mientras que, con su mano, acariciaba mi pierna, se pone ella de pie rápidamente, pone sus manos en mi cintura, indicándome con el movimiento de sus brazos para que me pusiera de pie, entonces, ella se pone en una posición detrás de mí, abrazándome por la espalda y empezando a llevarme paso a paso hacia la cama.
Me fue llevando poco a poco, así abrazados, mientras que con cada paso, me hacía sentir su erección, cada que pegaba su cuerpo al mío, con todo propósito se pegaba más a mis nalgas, pudiendo yo sentir su verga a través del pantalón, cada que se rozaba en mis nalgas, me hacía sentir mayor curiosidad por verla ya fuera de su prisión de tela.
Mientras ella seguía pasando su lengua por mi cuello y orejas, cuando por fin llegamos al borde de la cama, me hizo girar, poniéndome de frente a ella, empezó a besarme, pasando nuevamente su lengua por mi cuello, subiendo a mis orejas, volviendo a besarme, mientras que, con sus manos, de una forma hábil, desabrocho mi cinturón y el botón de mi pantalón, y con sus pies, con algunos movimientos que parecían ya practicados, logro quitarme mis tenis.
Con sus manos, tomo mi playera por la parte de la cintura y de un jalón rápido, me la quito por completo, momento que aprovecho para acercar su cara y empezar a pasar su lengua por mi pecho, poniendo especial énfasis en chupar mis pezones, alternando entre uno y otro, también empecé a tocarle su cuerpo, pero aún tenía la mayor parte de su ropa puesta, la cual intente quitarle, sin mucho éxito realmente, así, cejando mi inútil intento, por lo que me deje hacer. No supe en qué momento fue, pero, mis pantalones ya me los había bajado hasta los pies, me sentí un poco desbalanceado y me quise mover, para tratar de acomodar mi ropa, en ese movimiento que quise hacer, ella aprovecho y con sus manos me empujo hacia la cama.
Caí de espalda sobre la cama, sin decir ella nada y de un movimiento rápido, tomo con ambas manos mis pies y los levanto por completo a la altura de sus hombros, dejando ambos pies juntos en lo alto, los sostuvo con una mano en esa posición, mientras que con su mano que dejo libre, me saco el pantalón, jalándolo y pasandolo por mis piernas levantadas, hasta quitarlo por completo, dejándome solamente con el bóxer puesto.
Luego de eso, se inclinó hacia abajo, mantuvo mis piernas en alto, sosteniéndolas con una de sus manos, mientras, que se acomodó, de tal forma que su cara, la dejo a la altura de mis nalgas, con una de sus manos, levanto mi bóxer y luego de haberlo hecho, con su mano, separo mis nalgas, dejando a su vista mi agujero anal, el cual al sentirse observado de esa forma tan inesperada, se frunció en respuesta, cuando noto esa reacción, dijo en un tono de voz juguetón, “Muy Bien, esto era a lo que me refería de que quería ver algo más de ti, estaba ansiando verlo, que rico se ve, ya quiero hacerlo mío”.
Terminando de decir esas palabras, pude sentir como acerco su cara hacia mi entrepierna, empecé a sentir algo húmedo, lo sentí primero en mis nalgas y luego en mi anito, ella estaba lamiendo toda esa parte, me estaba dando un beso negro, pasando de manera muy deliciosa su lengua por todo mi agujero, percibiendo la sensación de la humedad de la saliva que iba soltando en él, pasaba su lengua por todo mi agujero, bajo por la raya de mis nalgas, subió hasta mis testículos, volvió a poner su lengua en mi culito, con esas intensas lamidas.
Ya estaba consiguiendo que empezara a estar gimiendo de placer, siendo bastante insistente en estar lamiendo mi culito y en soltar una buena cantidad de saliva, me daba cuenta, porque era notoria la sensación de esa humedad, después de minutos de intenso y de delicioso placer, se quitó de esa postura, se pone de pie y me toma de la mano, haciendo que me levante de la cama y que tome asiento en la orilla de la cama.
Una vez estuve sentado, ella se paró frente a mí y se empezó a quitar parte de su ropa, al poco tiempo, quedo únicamente en un calzoncito de tela ligera, del cual se percibía un bulto que aparentaba buen tamaño, ella noto que mi mirada estaba fija en esa zona en particular.
Con un sencillo movimiento de su mano, saca de entre su calzoncito, un pedazo de carne, de al menos 18 cm de largo, de un grosor notable, se empezó a masturbar frente a mi cara y con cada movimiento de su mano de subida y bajada, la fue acercando a mi boca, hasta que metió la cabeza de su verga en mi boca, sin pensarlo mucho, comencé a mamarla, metiéndola hasta donde me era posible y chupándola por completo, entre los jadeos y gemidos que ella iba lanzando con mis constantes movimiento, pero no permitió que fuera mucho tiempo.
Saco su verga de mi boca, me hizo levantarme de la cama nuevamente, pero ahora, me hizo ponerme en posición de perrito sobre la cama, sentí como con sus manos separo mis nalgas y vuelvo a sentir como su lengua pasa por mis nalgas, como está ensalivando profusamente e insistentemente mi agujero anal, que a diferencia de momentos antes, empecé a notar como intenta meter uno de sus dedos, el cual, para mi sorpresa se va abriendo paso, con cada movimiento de querer introducirlo y con las constantes lamidas que me estaba dando, se logra meter por completo, empezando ahora con un constante mete y saca de su dedo.
Con ese constante mete y saca, me hace gemir nuevamente, por ese placer que estoy sintiendo, empiezo a sentir, como ahora está introduciendo un segundo dedo, de la misma forma, logro abrirse paso, ambos dedos, están dilatando sin vacilación y sin contemplación a mi culito, así como también no ha dejado de estarlo lamiendo.
Pasados unos minutos de estarme dilatando con sus dedos, así como también, de estarme lamiendo sin parar mi culito y con ello, el estar gimiendo de placer, retira su cara y abre con sus manos por completo mis nalgas, dejando a su entera vista mi ano bastante lubricado, a lo cual dice: “Creo que ya estas lo suficientemente dilatado para recibirme, ven ponte de pie”, luego de decir de esto, me pongo de pie, me hace girarme dándole la cara, me da un apasionado y delicioso beso, para luego, aventarme sobre la cama, cayendo de espaldas, tomando ella mis pies, poniéndolos en alto y acomodándolos en sus hombros, veo como pone su mano en su boca y ensaliva sus dedos.
Para luego bajar a su verga y ensalivarla, luego la acerco a mí entrepierna, bajando por mis testículos y siento como pone la cabeza de la misma en mi orifico anal, empezando ella a ir haciendo fuerza, ejerciendo presión, para meterla, consiguiendo de inicio que su cabeza logre perforar mi culito, logre vencer esa resistencia inicial que puso, abriéndose paso por mi dilatado anito sin mucho problema, soltando ambos un sonoro gemido de placer.
Ya que tiene la punta dentro de mí, no tardo en empezar a ejercer más fuerza, con la constante presión que va ejerciendo, va consiguiendo que su verga vaya entrando de forma constante, logrando meterla hasta la mitad, luego la saco por completo, vuelve a ensalivarla y luego la volvió a poner en la entrada de mi culito, metiéndola de forma constante hasta la mitad, ejerció más presión y logro esta vez meterla por completo, soltando ella un delicioso gemido de satisfacción, para luego vociferar: “Que rico culito que te andabas cargando”.
Para empezar a sacar su verga completo y meterla hasta el fondo, haciéndolo varias veces seguidas, entre nuestros gemidos y los susurros entre los que alcanzaba distinguir: “Que delicioso estas”, “Aprietas muy rico mi verga”, “La acabas de recibir por completo sin problema”, “Te quiero preñar”.
Ni tardo en terminar de vociferar, saco su verga por completo, para luego, meterla de un solo golpe, dándome un embiste hasta el fondo, para sacarla nuevamente por completo, tomando con sus manos mis nalgas y abriéndolas por completo, viendo ella mi agujero anal, que a sus ojos debe de estar bastante abierto, luego de haber recibido su verga hasta el fondo, de haber sido perforado por su pedazo de carne, el cual me estaba dando tanto placer, teniendo a su vista mi anito abierto, dice ella en un tono juguetón y cachondo: “Se ve bien rico tu culito bien abierto, le voy a dar verga hasta que quede bien satisfecho”, sin mediar palabra más, mete su verga hasta el fondo de un empujón.
Después, la saca solo un poco, metiendo de nuevo, empezando un constante mete y saca, esa constante penetración que a ambos nos provoca gemidos de placer constantes.
En esa posición, con las piernas arriba, me ha estado cogiendo por un tiempo que ha parecido interminable, ella está disfrutando de mi culo sin parar, así como yo también, disfruto de ese rico pedazo de carne que perfora mi interior, dilatando mi agujero anal, el cual ha recibido con gozada satisfacción a ese intruso que llega bastante profundo en mi culo, entre el constante mete y saca, ella alcanza a vociferar: “Estoy disfrutando muchísimo de tu culito, ya casi estoy por venirme, así que por favor recíbelo”.
Al terminar de decir sus palabras, empieza a meterlo y sacarlo con mayor rapidez, bastante mas fuerte, gimiendo con fuerza y resoplando, hasta que da un empujón hasta el fondo y puedo sentir como algo caliente inunda mi interior, mientras ella entre resoplidos y bufidos me da unas embestidas más, finalmente, saca su verga de mi culo, toma con sus manos mis nalgas y las abre, para tener a su vista mi culo, me imagino que bastante dilatado y hasta rosado de tanta verga que recibió, luego dice en un tono cachondo y juguetón: “Quedo bien abierto tu culito, hasta esta dejando salir unas cuantas gotas de mi leche, que rica cogida le di, espero lo hayas disfrutado”.
Le respondo, todavía excitado: “Si, vaya que lo disfrute, me cogiste tanto, que todavía la sigo sintiendo dentro”, al terminar de decir eso, ella se acerca a mi y me besa con pasión, nos acostamos ambos en la cama y nos quedamos dormidos así, abrazados, algunas horas más tarde, todavía no amanecía, desperté con una sensación extraña en mis nalgas, voltee a ver, era ella, que estaba pasando su verga bien erecta por entre mis nalgas, pero eso quedara para después…
MicifusARM
![]()
Buen relato es una de mis fantasías.
Que rico ser una nena trans deseada por hombres maduros
Muy buen relato. Solo de leerlo dan ganas
Me encantó tu relato, lo escribes muy detalladamente.