Me cogió de la mano, me estremecía toda, mi cuerpo sabia donde me llevaba, al infierno, a su infierno y eso me excitaba como una sucia perra en celo como hacía tiempo que no me ponía.
Este caballero que el solo contacto de su piel conseguía que me estremeciera toda, su solo contacto despertaba en mis sensaciones tanto tiempo olvidadas, ¿Qué me ocurría?
¿Era su aplomo?, ¿era su seguridad, era su mente perversa y lujuriosa? Yo creía saberlo y solo de pensarlo se me erizaban los vellos de la piel, en lo más profundo de mi alma lo sabía y solo pensarlo mi sexo, tanto tiempo dormido, reaccionaba solicitando lo que tanto ansiaba, volver a sentirme poderosa y esa sensación me excitaba.
Mi mente aun no quería decirme lo que mi cuerpo me gritaba, lo que mi sexo tanto tiempo dormido me gritaba, ve, déjate llevar, goza, disfruta, vive, hazte dueña de tu dolor, ese que tantas veces te llevo al placer, abre tu mente, déjate guiar, lo deseas, te sientes viva de nuevo y sabes que te desean, aun tienes mucho que dar y mucho que recibir, cierra tus heridas y disponte a recibir otras, pues así es la vida.
Sientes la excitación en tu sexo, sabes que es inevitable, no puedes reprimirlo y no quieres reprimirlo, haz lo que tanto deseas, grítale a tu amante lo puta que te sientes con solo una orden suya, hazlo, grítaselo, soy tuya.
Deja que fluya, no te atormentes más, libera tus demonios, saca a esa bestia sedienta de placeres que llevas oculta, sabes que te va a llevar al paraíso, grítale a tu señor lo que tanto deseas: Soy tu puta.
Fdo. Malvado Diplomático