Un día salí de fiesta a un bar donde siempre había chicas guapas. Era en una colonia céntrica donde hay muchos bares y edificios de departamentos.
Conocí a una chica muy linda, mucho más joven que yo. Yo estaba algo tomado, así que solo me dejé llevar, estaba con la chica y su amiga que estaba con otro tipo más grande que ella. Era obvio que a las dos les gustaban más grandes.
Fuimos al departamento del otro tipo, y mientras ellos ya se habían pasado al cuarto, nosotros seguíamos en la sala, platicando. No creí que fuera a pasar algo con la chica, hasta que le dije que mejor fuéramos a mi departamento (cerca de ahí) y accedió solo con una condición: que la llevara en mi auto después. Para ese momento, yo ya tenía varias horas sin beber y se me había bajado un poco el efecto. Llegamos a mi departamento y empezamos a besarnos en la sala. La desnudé y le comencé a comer la pucha. Estaba deliciosa. Me pidió que me desnudara e hicimos un 69.
Me dijo que me pusiera un condón y se subió en mí, se movió como loca y en unos minutos ya nos habíamos venido los dos. Vuelvo al punto, su madre le marcaba como loca porque ya había pasado su hora de llegada.
Me puse un pants deportivo (jogger) sin nada abajo. Nos subimos al auto y comencé a manejar. Pero me bajé un poco del pants para sacar mi verga y le pedí que la mamara. Fue un trayecto de media hora aproximadamente (porque tomé el camino largo) donde no dejó de chupármela y me vine delicioso.
Cuando recién la dejaba recibí un mensaje de una chica de mi edad con la que cogía seguido. Estaba ebria y quería pasar la noche en mi departamento. Le dije que la vería en 30 minutos ahí. Ahora tomé el camino corto. Llegué. Me bañé rápido y me tomé una pastilla. Ya me había venido dos veces. Llegó la chica, estaba muy tomada, pero sabía lo que hacía, pues nos veíamos seguido.
Un auténtico bombón. Un culo impresionante y unas tetas medianas y redondas que me encantaba comerme al menos una vez a la semana. Empezamos a coger, con ella era siempre a pelo, y disfrutaba mucho como me venía en su vagina. Estuvimos cogiendo un rato, como yo tomé pastilla estaba durísimo. Ella ya se había venido y par de veces y le dije: “¿Te la puedo meter por el culo?”. Y dijo que ok, así que la puse boca abajo con una almohada a la altura de su pelvis. saqué lubricante, lo embarré en mi verga de 20 cm y en su ano. Metí un dedo, dos, mucho lubricante y empecé a meterla.
Ella estaba vuelta loca lo disfrutaba muchísimo estuvimos un rato así hasta que me dijo “me vengo, me vengo” y tuvo un orgasmo. Mientras le hacía el culo, me prendí muchísimo y le llené el culo de leche.
Estaba super caliente y quería más por la vagina, así que fui a lavarme la verga para metérsela. Ella no quería, decía que así, pero no le hice caso y en unos minutos estaba arriba de mi recibiendo mi pene.
Nos quedamos dormidos y al otro día me preguntó qué habíamos hecho. Me reí y le conté todo, estaba sacada de onda, pero muy excitada.
Me dijo que había sido su primera vez y le recordé que hasta se vino y me dijo que estaba bien, pero que no siempre lo haríamos por atrás.
Ella no lo sabía, pero por ser del segundo turno le tocó hoyo doble.