Eran las nueve de la noche
Eran las nueve de la noche.
Javier, era un joven moreno, doble y chaparrito. Había cogido el tifus. Estaba en cama. Sus escalofríos lo hacían temblar.
Genara, su abuela, una mujer de 55 años, delgadita, chaparrita, con buenas tetas y en camisón, se metió en la cama con él para que ent...