Mi primo y yo nos chupábamos los penes a escondidas
Mi primo y yo éramos unos jóvenes de 18 años y solíamos jugar videojuegos casi todos los días, en algún momento salió una escena de una mujer desnuda, me excité mucho y se me notaba que tenía una erección, mi primo se dio cuenta comenzamos a reírnos porque él también estaba erecto.
En ese momento los demonios del placer se...