Sigue la fiesta de año nuevo en la pileta (parte 3)
Tras una larga sesión de besos y caricias entre los cuatro, Luli pidió que Diego la sentara en un desnivel que tenía la pileta en uno de sus extremos, lo que le permitía apoyarse en el borde con su espalda y sus codos, dejando sus piernas en el agua a medio muslo. La depositó suavemente y ella se ar...