¿Y si me volviera prostituta ocasional?
Sábado por la tarde, tocan a la reja de la casa y salgo a recibir a Regina, la morena tetona que conocí en aquella aventura de un día en la Merced.
Hacía un mes ya que había vivido esa locura y no resistí la tentación de llamar a esta morena tetona y platicar con ella, la verdad, reconoz...