Ya tenía tiempo de no relatarles alguna de mis cachondas anécdotas, pues bien, aquí les dejo una más de mis tantas experiencias esperando sea de su agrado.
Esto que les voy a contar sucedió en una fiesta infantil a la cual me invitó una amiga.
Fue un sábado en un salón con un lindo jardín especial para fiestas infantiles.
Sinceramente no tenía pensado pasar mucho tiempo ahí, ya que al ser una fiesta infantil pensé estaría algo aburrida al menos para mí.
Para la ocasión elegí ir vestida de bra de media copa y tanga en color morado, blusa negra escotada, leggings y zapatillas.
Al llegar al salón me recibió mi amiga y su marido, los salude y pregunte por su hijo para darle su regalo, la fiesta transcurría de lo más tranquila al menos para mí ya que los niños y sus padres se divertían con los juegos e inflables que había ahí, yo me encontraba platicando con algunas amigas y notaba que un chico de aproximadamente unos 25 años me observaba y en varias ocasiones lo caché mirándome las nalgas y el triángulo que mi panocha formaba en mis leggings, su mirada cargada de lujuria y morbo me empezó a poner cachonda.
Al poco rato el esposo de mi amiga se me acercó y me dijo que quería presentarme a un amigo le dije que sí y oh sorpresa era el chico el cual me había estado observando, comenzamos a platicar, me preguntó si tenía algún hijo o hija pequeña en la fiesta le dije que no que me había invitado la esposa de su amigo ya que éramos muy buenas amigas y nos conocíamos prácticamente de toda la vida, él me dijo que estaba ahí por qué traía a su sobrinito a la fiesta ya que sus papás iban a llegar más tarde y continuamos charlando muy amenamente.
El cada que podía no dejaba de verme ahora las tetas por el escote de mi blusa así como las nalga, mis piernas y obvio la panocha, yo me ponía más cachonda con esas deliciosas miradas, la plática transcurría de lo más normal y de pronto me preguntó si era soltera, casada o? A lo que le contesté que casada y note que esbozó una sonrisa, él me dijo que era soltero, que tenía novia y así poco a poco y con más confianza la plática se fue tornando más íntima, le comenté que me gustaba ser muy clara y directa al decir las cosas directas y sin rodeos y no se en que momento llegamos al tema del sexo, llegaron los papás de su sobrino y me dijo que por que no nos íbamos a otro lugar, me le quede viendo y le dije ok vámonos.
Salimos de la fiesta y le dije “a dónde iremos?” Ahora él se me quedó viendo y me dijo “mira las cosas como son y cómo me dijiste que te gusta ser clara y directa te voy a decir que desde que te vi me gustaste y la verdad estás bien buena y quiero ver si se puede dar otra cosa?”.
Lo miré de frente y pregunte “qué otra cosa?”. Me tomo de las manos así de frente y sin dejar de verme a los ojos, me dijo “te quiero coger que dices?”. Yo la verdad es que ya estaba más cachonda y con ganas de que me comenzará a manosear muy rico, así que de igual manera viéndolo a los ojos me acerque más a él y le dije al oído “te tardaste mucho en pedírmelo”, por respuesta me beso y comenzó a manosearme por todo el cuerpo, mientras nos besábamos sentía sus manos recorrerme toda y eso me calentó a más no poder.
Seguimos ahí parados cachondeándonos súper rico y me dijo si nos vamos a mi departamento, rápido le dije que sí y nos subimos a su carro.
Durante el trayecto me fue acariciando las piernas, la panocha por encima de mis leggings y tocaba muy rico mis tetas, yo le acariciaba la verga sobre el pantalón y nos besábamos cuándo podíamos.
Al llegar a su departamento entramos cerramos la puerta y nos volvimos a besar como locos, está vez ya la hacíamos de una forma más lujuriosa y al mismo tiempo nos quitamos uno al otro la ropa.
Una vez desnudos me acomodo en un sillón y me comenzó a chupar la panocha, lo hacía realmente muy rico y entre gritos de “no paresss, no paresss papiii, asiiii, asiii, mmmm, que ricooo” y gemidos me hizo tener un delicioso orgasmo, y no apartó su boca y su lengua de mi panocha hasta que termine, nos besamos muy rico y ahora era mi turno de devolverle el placer de hacerme venir con una rica mamada de verga.
Así que me acomode para comenzar a chuparle la verga empecé por pasarle la lengua por toda la cabecita de su deliciosa verga y mientras lo hacía le acariciaba los huevos, después pasé toda mi lengua por su verga y al llegar a sus huevos los lamí y me metí a la boca cada uno para después volver a lamerlos y volver a pasar la lengua por su verga, me acariciaba la cabeza y jugaba con mi cabello y mis tetas mientras gemía y decía “ahhhh que rico la mamasss, que bien se siente tu boca en mi verga, mmmmm, que ricooo” y al llegar otra vez a la punta de su verga volví a pasar la lengua y entonces comencé a chupársela por completo.
Sentía como se retorcía del placer cada que le chupaba toda la verga, seguía chupando y chupando su verga, el no dejaba de acariciarme la cabeza y las tetas y de pronto me metí toda la verga en la boca, le acaricie los huevos y sentí como su verga se hinchaba y el comenzó a bufar, se puso tenso y explotó dentro de mi boca, trague toda esa rica y caliente leche hasta que dejó de salir, limpie su verga y me acomode junto a él.
Me beso y me dijo “que rico me lo chupaste” y comenzó a pasar sus dedos por mi panocha, que ya estaba que ardía por tener su verga dentro, se acomodó para que me subiera sobre él y colocando su verga en la entrada de mi panocha me deje caer sobre ella, lance un fuerte gemido y un “aaaah que ricooo, que ricooo y el solo gimió mmmm, todaaa tuya PUTAAA”.
Comencé a subir y bajar en esa deliciosa verga que me estaba dando mucho placer, y el chupaba mis tetas muy rico, abría mis nalgas con ambas manos y yo brincaba sobre su verga una y otra vez ensartándome muy rico.
Me daba deliciosas nalgadas y metía sus dedos en mi culito, y empujaba su verga hasta el fondo de mi panocha, me estaba haciendo disfrutar al máximo esa rica cogida.
Al momento de sentir que me venía, me clave toda su verga y me quedé quieta gimiendo y gritando “aaaah, papiii, que ricooo, me vengooo” y el “siiii putaaa, vente dame tus jugos bañarme la verga y huevos con ellos, uffff que ricooo, me aprietas la verga putaaa”, sentí desfallecer y quedé montada sobre el y con su verga dentro de mi, fue delicioso.
Una vez repuesta volví a subir y bajar sobre su verga ahora lo hacía lento y con calma y el chupaba mis tetas, mordisqueaba mis pezones y las apretaba muy rico, sus dedos seguían entrando y saliendo de mi culito, en uno de los sentones que me di me tomo de la cintura y ya no dejo que subiera, hundió su verga hasta el fondo y lanzando gruñidos y gemidos me grito que se venía, contrajeron mi panocha para darle mordiscos con ella a su verga y grito “aaaah, muerde tu perrito putaaa, que rico perrito tienes putaaa”, se vino dentro de mi panocha y me quedé sobre el hasta que su verga salió solita de mi mojadísima panocha.
Fue una deliciosa sesión de sexo quedamos de volver a repetir tan grata experiencia.
Bueno espero le haya gustado y ya les contaré en otra ocasión la vez que volvimos a coger.
Le mando un beso y gracias por leer mis anécdotas.