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Despidiéndome de mi ex y comprometiéndome con mi contadora

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Y sin pensarlo apareció por última vez Marla, una ex saliente la cual estaba intrigada al saber de mí, ya que había desaparecido repentinamente al relacionarme rápidamente con “La contadora”, pues ahora gozaba de mi nueva relación y de las maravillas que me hacía en la cama, fue el cierre de una y el comienzo de la otra, de mi mujer actual.

Citándonos por mensaje de texto

M: Hola, perdido… que es de ti, en que andas que ya te olvidaste de mi… o es que ya estás de novia

D: Hola… no nada andando full trabajo, y tú que tal

M: Bien, bien… y estas ocupado en estos días para vernos… o no se ir a tu depa y pues no se conversar un rato que dices

D: Puedo ir a tu negocio si deseas… así como antes… digo si tú quieres

M: Y porque no en tu departamento? ¿O tienes visitas habituales… seguro que es eso?

Fui al grano, si podíamos tener algún encuentro fugaz no lo desaprovecharía y sería bajo mis condiciones

D: Marla, la verdad… la verdad es que he conocido a alguien y estamos conociéndonos como amigos, no sé qué pueda pasar… si deseas podemos vernos y claro si no pasará nada lo entiendo, eres una mujer muy sexi y ardiente, pero tampoco quiero jugar contigo, tienes mi respeto y amistad sobre todo y lo sabes.

Paso un buen rato sin responderme, hasta que me llego su intrigante mensaje

M: Ok, ok entiendo… que bueno por ti que estés conociendo a alguien, me imagino que por eso desapareciste

D: No solo por eso Marla, sabemos que tienes muchos problemas con tu ex, y además estas dedicada a sacar a tus hijos adelante, no quisiera causarte confusiones ni problemas. Eres una mujer muy valiosa para tu familia y como siempre me lo repetías, me pedías discreción… espero sigan con tus proyectos por delante y ser una empresaria exitosa, discúlpame si me aleje, pero no quisiera tratarte como una mujer más… espero me entiendas

M: Si, si descuida, no debí insinuarte nada, discúlpame tú a mí, cuídate mucho y mucha suerte en lo que estés haciendo, en el trabajo y el amor… en todo

D: Gracias, espero también te cuides y tengas todos los éxitos del mundo

M: Cuídate un beso

Sentí que fui cortante, sin embargo, empecé a maquinar en ir a verla de improviso a su negocio, y pues a los mejor se daría ese último encuentro de despedida y realmente esos encuentros suelen ser de los mejores y más deliciosos.

Luego de verme con mi novia contadora, la deje en su departamento ya que estaba en unos preparativos de la fiesta de su sobrinito y ayudaría a su hermana, así que fue perfecta esa oportunidad para ir a su negocio de Marla, aparecer y quizás insinuarle un último encuentro sexual en su cocina, como lo hacíamos tan deliciosamente en ese habitual lugar.

La despedida con Marla

D: Hola Marla, ¿ocupada?

Ella toda sorprendida

M: Eh… Hola… que sorpresa, si algo ocupada… dime necesitas de algo, ¿de algún pastel?

D: Si, necesito de ti – sigilosamente sin que nos oigan

Ella se puso algo nerviosa y sonrojada me dio una respuesta positiva

M: ¿Si me esperas hasta más tarde… quizás… o te esperan en tu departamento?

D: No, hoy estoy libre para ti – guiñándole

M: Ok, ok… me agarraste de improviso… regresa en un par de horas

D: Ok, regreso

Volviendo por un instante al tema de mi mujer la contadora, aproveche en buscar anillos de compromisos, algo sencillo para dárselo en un momento especial, simbólicamente, estaba dentro de nuestros planes ir a Cancún, y pensé que sería una oportunidad única, en esas dos horas, compre un anillo y lo metí en mi casaca, y ya de regreso por Marla, la encontré cerrando su puerta de su negocio.

D: ¡Heyy que paso!, ya te ibas, no me ibas avisar…

M: No si, si claro que sí, pero se me presento un problema a resolver en mi casa, me lleves… vamos a mi casa

D: ¡Estas segura?

M: Si vamos, mis hijos están de viaje con su papá de vacaciones, vamos a mi casa ya te cuento en el camino

Ya juntos y conversando en el auto, tenía que estar en casa preparando una masa para los pasteles que tenía que entregar al día siguiente, y pues sería la primera vez que iría a su casa, estaba algo nervioso, obvio que si iba a su casa era por si o si iba a pasar una riquísima sesión amatoria como lo sabía hacer, esas manos que sabían amasar mi verga y mis huevos a placer.

M: Y quien es ella, de donde la conociste? Es soltera me imagino

D: Eh, si, si es un poquito mayor que yo, pero no parece, si… linda, no más que tu

M: jaja mentiroso, eres un florero, en fin… espero que te vaya bien… tú sabes…

D: Si Marla entiendo, no tienes por qué darme explicaciones, ya somos grandes… entiendo todo lo que me dirías, y sabes que pase lo que pase seremos amigos.

M: Ya vamos a llegar, cuadra tu carro al frente de mi casa para que no haya problemas con los vecinos y sus cocheras, no quiero que nos interrumpan

D: Ok, lo que órdenes.

Ya entrando a su casa y ayudándole a llevar materiales para sus pasteles, ingrese a su sencilla casa, era toda de pisos de parquet y con el olor habitual de como huele la casa de alguien que se dedica a postres, olores de vainilla, en su sala me indico que dejará mis cosas y la acompañara a la cocina, al principio estaba nervioso de que se hiciera tarde y me llamará mi “novia contadora”, así que a medio preparar de sus pasteles fui atrevido y directamente fui a abrazarla por detrás rodeando con mis brazos su figura y presionando sus tetas mientras le besaba el cuello y ella excitada a flor de piel debido a mis besos, accedió a follar si antes decirme

M: ¡Vamos a follar como nunca, para que nunca te olvides de mí!

Esas palabras encendieron en mi a un ser sediento de sexo, hambriento de comerme sus tetas y devorarme ese culo de deliciosas nalgas.

Acto seguido nos desvestimos, rápidamente íbamos de frente al acto, para variar bajo para darme una deliciosa mamada con el plus de sus manos que amasaban mis huevos y me pajeaban, para que en incesantes mamadas me llevará a ponerme a fierro, la lleve hacia el piso y quitándole sus calzón y piernas al hombro me fui devorando tan deliciosa vulva.

M: ¡auu, si si, sigue comete todo mi coño, vamos, para que me recuerdes!

D: ¡amm, umm, no tienes por qué decírmelo, am, am… nunca me olvidaré de tu rica conchita!

Y ahí estábamos follando a placer, despidiéndonos con un bello acto sexual

M: ¡Lámeme el culo, méteme tu lengua, fóllame, hazme tuya!

Iba besando, mordiendo, devorándome cada rincón de su culo, sus muslos, piernas

D: Ven hazme una rusa con tus tetotas, esos será algo que siempre me gusto y recordaré...

Me puso a mil, ver sus tetotas masajear mi verga, ver su cuerpo voluptuoso, algo gordita, pero de deliciosa piel blanquita de pecas, me puso a mil el follar en su casa… hasta que le dije

D: ¡Vamos a tu cuarto, quiero que tú me recuerdes que follamos en tu cama, vamos!

M: ¡Vamos!

Fuimos raudamente a su cuarto ingresando a lo cual ella directamente se subió en cuatro patas sobre su cama abriéndose el culo y repitiéndome toda arrecha

M: Dame por el culo, dame tu leche en mi culo

Fui directamente a clavarme ese delicioso ano, recordando como siempre nuestras atrevidas sesiones, aunque esta vez sería la despedida, lo entregaríamos todo

M: ¡Si, si… sigue! ¡rómpeme el culo… sigue así, cáchame bien rico para que nunca te olvides de mí, soy tuya!... sigue!… auu… auuu

D: Si… ah!! Sí que rico culo, jamás olvidaré ese culo, tus tetas, todo de ti Marla… eres una hembra sensacional…

Estuvimos así, hasta que descargue mi leche dentro de su culo, para luego ella sin medirse girará para lamerme y devorarse los restos de leche que aún podrían salir de mi verga, caya que lo entregamos todo; caímos rendidos sobre su cama y…

D: Así que este es tu habitación, esta linda, me hubiera gustado venir más seguido a tu casa para follar aquí… ya sabes

M: Si, me imagino que hubiera sido delicioso, pero al menos tienes en tu memoria este recuerdo, tengo que seguir haciendo mis pastales, me voy a bañar y seguir…

D: Vamos, te acompaño

M: Ya lo sabía

Su baño era algo sencillo, pero amplio en la ducha, así que aprovechamos en darnos un baño y mientras nos besábamos intensamente, empezamos a tener un segundo encuentro follándomela frenéticamente, mientras el agua caía sobre nuestros cuerpos, sentí compararla con mi mujer la contadora, pero cada quien tenía lo suyo, además si estaba ahí era por placer y por nuestra despedida.

Mientras acababa de eyacular en su boca y toda habilidosa me limpia cada centímetro de mi verga y lamia mis huevos, sentía que ya no podía dar más, vaya que me dejo muy satisfecho.

Ya cambiados y en medio de su sala, dándonos unas tiernas palabras de despedidas antes de que me pudiera llamar mi mujer, nos dimos tiernos besos y largos abrazos, y para ser sincero las mujeres son bien curiosas y se dio cuenta que en mi bolsillo de mi casaca estaba el anillo.

M: ¿y esto? – toda curiosa

D: Nada un regalo, olvídalo

M: ¡a ver?

Toda curiosa no dejo de quitar la mano hasta que puedo meter su mano en mi bolsillo, mirando que era una cajita con el anillo dentro

M: Eh, no entiendo… es para tu... para ella… no me dijiste que eran solo amigos

D: No, si... bueno somos más que amigos, no sé porque me preguntan sería mejor que no preguntes mucho, estamos aquí para despedirnos y gozar por úl…

M: ¡Estúpido! – dándome una bofetada

Quede algo sorprendido, así que tome mis llaves del carro y dándome media vuelta

M: ¡Espera, discúlpame!… soy una tonta, no debo ponerme así contigo… discúlpame, no tendría por sentir celos!… es la última vez y no quiero que te vayas así, no quiero que tengamos un mal recuerdo de despedida.

Algo temeroso, giré y le respondí el abrazo y le di tiernos besos en la mejilla.

D: Espero seas feliz y cumplas todas tus metas, no tengo porque enfadarme por tus celos, yo estaría igual si supiera que sales con alguien

M: Estamos tratando de volver con mi ex marido

D: ¿De verdad?, bueno… me imagino que es por tus hijos.

M: Si en parte… por eso quería verte, porque quizás ya después sería posible y quería que me beses, que me ames, que me hagas el amor… te extrañaba

D: Yo también, pero ahora que ya los dos estamos en nuevos planes, es mejor el adiós, te quiero mucho y espero seas muy feliz.

M: Yo también te quiero mucho y también espero que seas feliz con tu novia

Nos dimos unos últimos besos intensos y con un fuerte abrazo, nos despedimos aquella noche.

Ya camino a mi departamento, por suerte, mi novia contadora no me llamo, pues siempre esos preparativos de cumpleaños para niños suelen demorar, hasta que la llame, cuando llegue a mi casa y dentro del carro

D: Hola mi amor, como vas todo bien… ya acabando

C: Hola... uy no nada tenemos para un rato más… y tú que haces donde estas

D: Aquí en el auto

C: ¿En el auto? ¿Qué has salido a algún lugar?

D: No, he venido al carro para sacar mis lentes que me olvide y de paso ver si tengo suficiente gasolina, no me acordaba, pensaba ir a verte, pero ay creo que es muy tarde, ya mañana iré a cargar gasolina

C: Ah ya, no amor, no creo, ya será lunes por la tarde… dime ya reserve el hotel de Cancún con las decas que tengo, para semana santa, más bien voy a confirmar los pasajes, ¡No importa si es con escala para que salga más cómodo?

D: Si, si ya tu encárgate de todo. Ya me dices nomas

C: Ok, vamos hablando

D: Ok, vamos hablando que todo salga bonito, diviértanse

C: Ok besos amor, que descanses

D: Besos

Y bueno para no hacer el cuento largo, ya cuando viajamos a Cancún por semana santa, fuimos muy felices esos días disfrutamos de la playa, de lugares turísticos, y como siempre follando deliciosamente disfrutando de sus ricas tetas y culo de mi mujer, sobre todo de su delicioso ano lo cual me entregaba para complacer a su hombre.

Una noche mientras disfrutábamos de un baño en el jacuzzi del hotel, pegada a mí y abrazándola tiernamente, por debajo de sus tetas emergí el anillo de compromiso, a lo cual ella muda, poniéndose las manos sobre su boca, como sorpresa, tuvo una explosión de felicidad.

C: ¡Es en serio, no es un juego, quieres! … me estas pidiendo…

D: Si, si, te estoy pidiendo que seas mi novia, ya eres mi mujer, pero quiero estar contigo… es real, lo que siento por ti es real…. Te amo, te amo mucho, quiero que seas la mujer de mi vida.

Sus ojos, algo sollozos miraron el anillo, lo tomo, a la vez que se lo coloqué en una de sus dedos, calzando a la perfección, ya que días anteriores, le escondí un anillo el cual me ayudo a conseguir ese pequeño anillo de fantasía fina, giro y me abrazo fuertemente dándome largos besos.

C: Te quiero, gracias por tomarme en serio, pensé que sería un juego para ti, no sabía cómo tomarlo, tenía mucho temo por como reaccionarias a mi forma de ser…

D: Lo sé, lo se tranquila… ya somos ahora uno… haremos las cosas bien… comenzó quizás todo al revés, pero es nuestra historia y lo llevamos a nuestra manera

Y aquella noche después de tantas veces que me entrego “su anillo” yo le di anillo, uno de compromiso, y hasta ahora seguimos amándonos, cuidándonos y protegiéndonos en plena pandemia, con altibajos y todo.

¿Qué fue de Marla?, pues le perdí contacto con ella y espero todo le vaya de maravilla, alguna vez la stalkee en sus redes y estaba más delgada, pero sin dejar de perder su sensualidad.

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Si quieren saber cómo inicio esta corta y ardiente aventura con Marla puedes leer los relatos:

Madre madura, follándomela a escondidas de su familia

Trágatela toda! ¿O quieres que se la traguen mi otras amiguitas

Y si desean saber del ardiente amor y sexualidad con mi contadora pueden leer los relatos:

Encuentro con la contadora de mi trabajo y compañera sexual

La contadora: una adicta a mi verga y a mi leche

La contadora: su pasado, nuestro presente y su ardiente culo

Historias entrelazadas entre sí, pero con un solo tema de por medio, el placer de gozar de dos mujeres espectaculares, dos hembras insaciables. Decidí por una de ellas y es con ella “La contadora” quien sigo gozando, con quien tuvimos muchas fotos y videos porno de por medio en plena pandemia y sobre todo mucho amor.

Un tributo por la ninfómana ex saliente que se fue, y por mi actual mujer ardiente, que goza de mí y sobre todo la propietaria de mi verga y toda mi leche.

Continuará…

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