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En el estacionamiento de la plaza

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Hola de nuevo, otro relato de las aventuras que nos gustaban vivir a mi ex y a mí.

Durante toda la semana no la había podido ver, porque a su papá le dieron vacaciones en su trabajo y como era muy celoso con ella y no le gustaba mucho que yo saliera con ella, (tal vez por ser la mayor de sus hermanos) o no sé, pues solo le llamaba por teléfono y platicábamos un rato, así que los besos, manoseo y sexo que nos gustaba tanto, se fueron acumulando durante la semana.

Como les había comentado, nos conocimos en las canchas de basketball donde yo jugaba, y después ella comenzó a ir a jugar ahí. Yo jugaba en un equipo que había formado con mis amigos y lo inscribimos en una liga, donde los partidos eran los sábados o domingos.

El viernes por la noche al estar hablando por teléfono, ella me dijo que su papá pensaba ir a una reunión con sus compañeros de trabajo y que ella le había dicho que no tenía ganas de ir, que mejor la dejara acompañarme al partido del sábado, accedió pero no con mucho entusiasmo, así me dijo ella. Total que el sábado pase por ella, al ir llegando a su casa, me encontré con su familia que iba de salida a su reunión, su papá bajó la ventanilla de su carro y me preguntó a qué hora era mi partido, yo le dije que era dentro de 45 minutos, a lo que él me dijo, a penas y vas a llegar, nos despedimos y llegue a su casa, me estaba esperando en la puerta de su casa. Estaba vestida para la ocasión, de pants, playera y tenis, subió al carro y después de no estar juntos toda la semana, no perdimos tiempo y nos empezamos a besar de manera desesperada y a meter mano por donde podíamos, le tocaba sus tetas con ambas manos, mientras ella tocaba mi pene sobre mi pants:

I: ya tenía muchas ganas de sentir tus besos y que trates de comerme aquí mismo.

Yo: también yo, pero ya vez que tu papá no te dejó verme en toda la semana, así que te imaginas que tengo muchas ganas de sentir tu cuerpo y poder tocarte por todos lados.

I: también te quiero sentir todito!! Pero a qué hora me dijiste que era el partido?

Yo: ah sí!! Mejor vámonos o no llegamos.

Así que nos dejamos de tocar y tomamos camino hacia el deportivo donde jugaba, durante el camino ya se imaginarán, con toda la tensión sexual de ambos acumulada, ella iba sobando mi pene sobre mi pants y yo iba con mi mano sobre su muslo y tocando su vulva sobre su pants, ella abría sus piernas y se acomodaba para que pudiera tocar mejor, nos estábamos excitando mucho:

I: me gusta que me toques así, sobre mi pants, se siente muy bien y con estos días sin vernos, ya necesito tu pene dentro de mi.

Yo: si quieres después del partido nos vamos a mi casa y o la tuya, al fin está sola.

I: no creo que se pueda en mi casa, mi papá se llevó mis llaves y me dijo que después del partido me llevaras a casa de mi abuela y que le llamaba por teléfono para ver a qué hora llegaba, ya vez como me cela.

Yo: ujule pues ya veremos que podemos resolver.

Ella ya llevaba su mano dentro de mí pants, y jugaba con mi líquido pre seminal que hacía su presencia después de tanto manoseo, le costó trabajo meter su mano porque yo usaba licras debajo de mi short del uniforme del equipo, yo no perdía tampoco el tiempo y ya tenía mi mano dentro de su pants y le seguía tocando su vulva sobre su panty, que ya estaba mojada., se me facilitaba seguir tocando la porque el carro era automático y pues una mano en el volante y la otra sobre su cuerpo. Al llegar a las canchas donde sería el partido, uno de mis amigos nos vio cuando estacionaba él carro y se acercó, para decirnos que se había cancelado el partido porque el otro equipo aviso hace unos momentos que no llegaría, así que solo los salude desde lejos a los demás y cuando él se fue, le dije a ella:

Yo: pues ni mandada a hacer esta cancelación, nos vamos a dónde? Tenemos que seguir con esto que empezamos.

I: pues tú decide, ya me tienes muy húmeda y ya te quiero mamar tu pene y que me lo metas, anda arranca y vámonos, en el camino decidimos.

Estarán pensando, pues al primer hotel que este en el camino, la verdad no íbamos a los hoteles, porque aprovechando que durante la mañana en mi casa no había nadie, pues la usábamos para coger ahí y cuando sabía que alguien estaría, pues íbamos al cine o a otros lugares para poder fajar rico y a veces hasta coger en donde nos dieran ganas, que luego les contaré.

Yo: pues vamos a mi casa, espero que no estén mis hermanos.

I: y si mejor me cumples una fantasía?

Yo: cuál? Tenemos varias en mente, pero tú dime cual.

I: vamos a coger en el carro, pero quiero que me lleves al estacionamiento de la plaza que esta por aquí cerca.

Yo: ok, pero si de eso se trata, quiero que tú también me cumplas una, espero que digas que sí, porque no te gusta mucho la idea.

I: ah, ya se cual, pero es sábado por la tarde y hay mucha gente en la calle, eso no se vale, me da pena.

Yo: ándale, voy a buscar calles que estén más tranquilas para llegar a la plaza, mientras tú me lo vas mamando y yo te voy dedeando.

I: ok, solo acepto hacer eso hoy porque ya te tengo muchas ganas.

Antes de arrancar me bajé un poco el pants y ella acomodo su asiento para que pudiera acomodarse y poder mamarme el pene, así que tome camino hacia la plaza que estaba más o menos a 15 minutos de donde estábamos, con la plática ya se me había bajado la erección, así que le volví a meter la mano, ahora si debajo de su panty, y sentí de inmediato su humedad, lo que ayudó a que mi pene recobrara la erección casi de inmediato, ella se acomodó abriendo más sus piernas y comenzó a gemir ligeramente.

I: ya viste que si estoy bien mojada, méteme los dedos.

Yo: está bien, pero ya sabes, acomódate para que me lo mames.

I: está bien, pero estoy nerviosa, nos van a ver los demás carros.

Yo: pues yo creo varios ya vieron que te voy metiendo mano, además en la siguiente calle casi no va a ver gente, es la de la zona de oficinas, que hoy no vienen a trabajar.

Era una zona de oficinas que por ser sábado, había muy poco movimiento, y era bastante larga, así que pasé por ahí, rápidamente ella se acomodó poniendo sus rodillas en el asiento y me sacó el pene, que ya estaba desesperado por salir debajo de mis licras.

I: mmm... está muy duro y lubricado, como me gusta ponértelo.

Yo: ándale que de todos modos no puedo ir muy lento en esta calle.

Inmediatamente me comenzó a dar una rica mamada, me besaba la cabeza, se la metía toda, de arriba a abajo, con su mano la apretaba ligeramente y la soltaba, me la iba mamando como sabia ella que me gustaba, mientras yo le pasé la mano sobre su espalda y sus grandes nalgas, por debajo de su pants y su panty, para primero tocarle ligeramente su ano y después seguir hasta alcanzar su ya húmeda vagina, que por la posición en la iba pude meter fácilmente uno de mis dedos, ella solo suspiro y dio un ligero gemido. Iba manejando a baja velocidad aprovechando que no había mucha gente y la rica mamada que estaba recibiendo, ella aumentaba cada vez la velocidad de sus movimientos de boca y lengua, en un momento que saco mi pene de su boca, me dijo:

I: nadie nos ve?

Yo: no creo hay muy poca gente.

En cuanto terminaba de decir eso, ella con una de sus manos se bajó el pants hasta sus rodillas, y se dejó su panty.

I: para que no te estorbe tanto, y si alguien ve, pues que sea solo tu mano debajo de mi panty.

La escena era muy excitante, su trasero estaba a la altura de la ventana del auto, ella lo subía y bajaba mientras mi dedo estaba dentro de su vagina.

Yo: wow que rico se ve tu trasero así, ahora imagina que alguien te lo está viendo allá afuera.

I: me están viendo?

Yo: no, pero allá adelante hay un guardia de seguridad del edificio y está afuera.

I: pasa más rápido entonces.

Y así fue, acelere un poco y alcancé a ver que el guardia solo vio un poco de lo que iba pasando en el auto, ella me seguía mamando el pene y yo en lo mío, seguía dedeandola. Al estar cerca de terminar la calle, le dije que se detuviera.

I: por que, si está muy excitante esto y más que ya estoy a punto de que hagas venir con tu dedo.

Yo: yo también estoy a punto de venirme, pero se acaba la calle y ya casi legamos a la plaza.

Así que se acomodó de nuevo en su asiento, pero no se subió el pants, eso me permitió seguir tocándola, pero ahora por encima de su panty, que ya estaba muy pero muy mojada.

Llegamos a la entrada de plaza y tenía una parte que era techada, así que me dirigí a esa área en busca de un lugar donde no hubiera muchos carros o mucho movimiento de personas, por ser sábado había mucha gente, que casi llegó al último nivel del área techada. Encontré un lugar junto a una camioneta que estaba casi al final del área.

I: ya estaciónate aquí, si no llegamos al final y esta descubierto.

Yo: ok, pero primero reviso que no venga gente.

I: no me importa, ya quiero que me lo metas.

Me detuve, apague el carro e hice para atrás el asiento y ella inmediatamente se subió frente a mi, y comenzó a besarme y a sobar mi pene con su vulva, se movía de atrás hacia adelante y gemía muy rico:

I: ya me tienes muy excitada, tenía muchas ganas de estar así contigo, toda la semana sin ti me acumuló mas mi deseo de sentirte dentro de mi.

Yo: de verdad que si me hacía falta sentir tu cuerpo y tu humedad.

Le hice a un lado su panty y con la humedad que ya tenía, se me hizo fácil que la penetrara, comenzó con los movimientos de cadera y de arriba a abajo, los dos estábamos extasiados de sentir nuestros cuerpos, yo la agarraba de sus nalgas y se las abría, ella gemía cada vez más fuerte y aumentaba la velocidad de sus movimientos, apretaba mi pene con su vagina y se vino muy rico, mojándome bastante y sentí como sus fluidos llegaban hasta mis testículos y mis nalgas, mientras yo le subía la playera que traía y le mamaba sus hermosas tetas; estuvimos así un rato, en esa posición hasta que me dijo:

I: creo que alguien nos está viendo.

Yo: en donde está, no alcanzo a ver quién o por donde está.

I: en el carro que acaba de llegar, atrás de nosotros, no lo vi cuando llegó.

Yo: pues ni yo lo vi, como vez le seguimos dando show o ya nos vamos.

I: pues que se siga dando su taco de ojo. Es más acuesta por completo el asiento, para que pueda ver más.

Y así lo hice, lo acosté por completo y seguimos cogiendo, cada vez más rápido y más fuerte, el carro se movía bastante y los vidrios laterales ya estaban comenzando a empañarse, así que le dije:

Yo: bajamos la ventana, para que nos pueda ver mejor? Si no el vidrio de atrás se empañara y ya no va ver nada.

I: ok pero solo un poco.

Lo bajé un poco, y fue lo suficiente para que el que estuviera viendo, no se perdiera el show, seguimos cogiendo un rato en esa posición, hasta que ella me dijo:

I: creo que me voy a venir otra vez, pero quiero gritar un poco más fuerte.

La verdad que de tan excitados que estábamos, ni nos dábamos cuenta de nuestros gritos y jadeos.

Yo: está bien, que sea show completo.

Comenzó con movimientos más rápidos hasta que los dos nos venimos, casi al mismo tiempo, los dos estábamos sudando y el carro lleno de olor a sexo, se recostó sobre mi un ratito y se pasó a su asiento, se acomodó su ropa y volteó a ver quién nos estaba viendo desde su carro, yo me acomodé también la ropa y por el retrovisor trataba de ver quien estaba en ese carro que disfrutó del show, después de unos minutos, se bajó una muchacha del carro y nos volteó a ver, y desde ahí nos dijo, que bien se la pasan, y se fue hacia la plaza.

I: yo pensé que era un hombre quien nos estaba viendo.

Yo: también yo, pero vaya sorpresa, que ella se haya quedado viendo como cogíamos.

I: eso sí, me gustó mucho cumplir estas dos fantasías que teníamos.

Yo: a mi también, dos menos de la lista.

Nos tomamos unos minutos para relajarnos, y salir de ahí, en el camino a casa de su abuela, ella recargo su cabeza en mi hombro e íbamos platicando de lo excitante y emocionante que había sido. Llegamos a la casa de su abuela y nos despedimos de un rico y húmedo beso.

Gracias por su tiempo de leerlo, espero muy pronto poder relatarles otro más.

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