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Esclavo de mi fantasía (Parte IV)

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Acostado en mi cama, con una sensación de desahogo y calma, vuelvo a ver el mensaje de Samir en el celular.

“Me dijeron que te fuiste con Antonio, donde estás?” (Sonrió y lo pongo a un lado)

Simplemente decidí no responder concentrándome en algunas actividades que debía entregar mañana lunes en el instituto.

Dormí como nunca antes, desperté lleno de una energía que recorría mi cuerpo y me daban ganas de comerme el mundo, estaba muy feliz.

El hombre de mis fantasías me había buscado y Antonio me enseñó que ser gay es más que ser la puta de alguien.

En el bus, camino al instituto me escribe Antonio:

“Feliz día bebé” (Wow... me sentía afortunado y halagado).

Siempre estuve escondiendo mi inclinación sexual y aunque ahora estaba más seguro de mi mismo y de lo que quiero, no estoy listo para hacerlo público.

Sin embargo se encendió una llamarada dentro de mi que ahora ilumina mi camino.

Durante la mañana, estuve muy activo y participativo en todo. Al llegar la hora de almorzar voy con un pequeño grupo de la última clase al cafetín, allí veo a Samir e Inés.

Él con una sudadera negra y jeans, su cabello castaño medio largo y semi ondulado cubriendo parte de su perfecto rostro, mientras abrazaba a Inés con uno de sus brazos. Ella con un vestido de sexy escote la hacían blanco de todas las miradas (Debo reconocer que a pesar de ser gay ella despertaba cierta curiosidad en mí).

La pareja bomba del instituto! Ellos al verme hacen señas para que me acerque. Yo con la fuerza y seguridad que me impulsaban ese día camino a su mesa y los saludo como los mejores amigos. Ella me dice con voz curiosa y pícara observándome de arriba abajo:

Inés: ... Martin te veo diferente...! Estás radiante! Será que alguien enloqueció tú corazón?

Yo: (entre risas y viendo a Samir discretamente) Quizás... ayer pase un día genial!

Samir: (siguiendo el juego) cuenta... quien es? El sábado en la fiesta no contaste nada y luego te desapareciste.

Yo: Me fui porque no me sentía bien. Me despedí de algunas personas pero ustedes dos estaban desaparecidos.

(Inés sonríe y besa a Samir en señal de complicidad)

Inés: y que te paso? Qué pena contigo, seguro necesitabas atención medica?

Yo: Siii! Algo me callo mal... pero luego me dieron lo que necesitaba para estar mejor.

Samir me dio una mirada seria y le dijo a Inés:

“Amor busquemos a Isabel para ir a clases antes de que se haga tarde” (nos despedimos y cada quien tomo su camino)

Al terminar la última clase, salgo del aula, voy caminando y me consigo de frente con Samir y dice señalando el salón:

“Entra, tenemos que hablar”

Una vez adentro cierra la puerta y dice con voz baja pero reclamando:

“Como que te dieron lo que necesitabas? Por qué no contestas mis llamadas? Que hacías con Antonio?

Yo: Samir estás celoso? (Haciéndome el sorprendido)

Samir: No! Solo me preocupe por ti! ( Mientras se calma un poco y continua) Antonio solo te quiere coger!!!

Yo: y tú que quieres de mi? Él se portó muy bien conmigo, se preocupó...!!! (Haciendo énfasis en esta última palabra y continuo)... en tomarme en cuenta!!!

Samir: eso es por interés! Al estar aquí yo te demuestro que me preocupas! (Acercándose frente a mi)

Yo: y yo te demostré que soy capaz de entregarme completamente a tus deseos...! Y Antonio no tiene miedo de sentir mis...

Samir me toma con fuerza de mis brazos acercándome a su cara donde podía sentir su respiración molesta en mi rostro, interrumpiéndome dice:

“Yo no tengo miedo de nada...”

Él se queda sin palabras solo viéndome y yo quede atrapado en sus grandes ojos color ámbar en un silencio eterno... se va acercando más a mi y de pronto suena algo en el pasillo, me suelta y se aleja.

“Me tengo que ir, luego hablamos” y sale casi corriendo.

Yo me senté en la silla del profesor para entender lo ocurrido. Será que Samir quiere algo más que mi culo...? Un mujeriego que no podía contar con cuántas mujeres se había acostado, se preocupa por mi? pensé.

Por fin salí del instituto, llegue a mi casa, entre a mi cuarto y me dormí mientras trataba de descifrar a Samir. Pasaron casi dos horas, cuando mi madre me toca la puerta y dice

“Voy a preparar la cena, vas a comer? Te pregunto porque tu papá tiene una reunión y comerá afuera, si no quieres no cocino”

Yo: Si, tengo hambre! pero voy a salir a caminar para hacer algo de ejercicio.

Salgo a caminar y de pronto me doy cuenta que estoy a un par de casas de la de Samir, me detengo y pienso “seguro esta con Inés” y decido regresar.

Al llegar a la casa entro a la cocina en silencio y está mi mamá preparando la comida, la abrazo, ella se sorprende y me dice:

“Me vas a matar del susto...! Pero qué bueno que llegaste rápido, en tu habitación está tu amigo de la escuela.

Yo sorprendido le pregunto “que amigo?”

Sra. Helena: ese que estudio contigo antes del instituto.

En mi mente “No puede ser!”

Salgo corriendo a la habitación, abro la puerta y allí está él! sentado en mi cama con las piernas abiertas, inclinado hacia adelante con los brazos como soporte en sus piernas, el cabello algo desalineado y viendo un juego de fútbol.

Vestía un pantalón deportivo negro y una camiseta deportiva roja sin mangas que dejaba ver parte de sus pectorales y sus fuertes brazos.

Samir: Martin!!! Cómo estás...? Tienes lo que te pedí?

Yo aún impactado y sin entender, respondí:

“Bien... sorprendido... (y en voz baja le digo) ... que haces aquí? ... que me pediste? “

Samir: es que tengo un problema y solo tú sabes cómo solucionarlo! (luego en voz baja y como una orden dice) cierra la puerta!

Cierro la puerta y el sonríe perversamente con la mirada que me vuelve loco (mi corazón estaba a mil palpitaciones por minuto, y se veía tan hermoso como esa ropa) y dice:

“Holaaa!!! (Guiñando el ojo)... siéntate a ver el juego conmigo (en voz baja pero seductora)”

Yo: Estas loco, afuera está mi mamá y yo nunca e tenido visitas en mi habitación! (Seguimos en voz baja y de fondo el sonido del juego en la TV)

Samir: siempre hay una primera vez... no? (Y sigue con esa sonrisa perversa mordiéndose el labio inferior)

Yo: que buscas? Mis padres no saben que soy gay. No quiero que sospechen! (Murmurando)

Samir: cálmate los amigos también se visitan! y ya te dije... tengo un problema que solo tú puedes solucionar!

Entonces Samir se endereza e inclina hacia atrás sosteniéndose de sus codos y deja al descubierto una gran erección que levantaba su pantalón deportivo como una carpa!!!

Mis ojos y labios se abrieron! Los ojos de la impresión (parecía una imagen de película porno) y mis labios para tomar aire y humedecerlos!

“Estas loco... no puedo!” (Le digo sin quitarle los ojos a ese espectáculo.)

De pronto se escucha la voz de mi mamá llamándome y diciendo:

“Martin... dile a tu amigo que se quede a comer con nosotros”

Samir se levanta de la cama dirigiendo su cara a la puerta y con su personalidad extrovertida responde a mi mamá:

“Será un placer... muchas gracias señora!!!

Yo volteo a ver a Samir asustado y luego mi mamá vuelve a hablar:

“En 10 minutos estará servida la cena”.

Yo: ok mamá! Gracias! (Mirando a Samir que estaba parado frente a mi con esa carpa entre sus piernas, él solo sonreía como si todo fuera un juego. Yo estaba aterrado).

Entonces Samir me dice mientras levanta sutilmente su camiseta para mostrarme sus abdominales:

“Tienes 10 minutos para resolver esto”

Mi corazón en la garganta, mi pene muy duro y mi boca hecha agua!

Me arrodillé frente a él y baje su pantalón, No tenía ropa interior! (Eso explicaba la gran carpa que se veía en su pantalón)

Tome ese trozo de carne que latía entre mis dedos y lo llevé a mi boca, apreciando su sabor masculino mientras observaba la cara de Samir viendo hacia arriba con los ojos cerrados. Definitivamente él lo estaba disfrutando (con su rostro hacía gestos de placer pero como un experto ningún sonido).

Toma mi cabello, me sienta en el piso de espaldas a la cama (sin sacar su pene de mi boca) y cuando estoy acorralado, comienza su movimiento pélvico con todo su cuerpo como dibujando una S cogiendo mi boca y llegando casi a mi garganta (me costaba respirar) mientras yo solo podía apretar sus fuertes piernas.

Y de pronto comienzo a sentir toda su leche caliente en mi boca (cómo no tenía baño en el cuarto y mi mamá estaba a pocos metros me la tuve que tragar toda) poco a poco deja de moverse y dice mientras lo saca:

“Solo tú... podías con esto” (subiéndose el pantalón no sin antes yo lamerle todo el semen que queda en su pene).

Y se escucha a Mi mamá: “chicos a comer!”

Mientras yo me siento en la cama para tomar aire, Samir sale de la habitación de lo más tranquilo y sonriente. Yo por el contrario tardo unos minutos y digo al salir:

“Ya voy, primero debo ir al baño”

Una vez en el baño me lavo la cara, la boca y me revise en caso de tener huellas del delito en la ropa. Dando tiempo también a que mi erección disminuyera.

Al llegar a la mesa estaban mi mamá y Samir riendo por alguna de sus payasadas (él es muy carismático y atento) y yo pensando “Si supieran lo bestia que es en la cama”.

Comimos y estuvimos un largo rato hablando en la mesa, fue muy agradable. Yo siempre he sido reservado y aunque siempre buscaba mantenerme en el grupo de Samir (“ya saben para que”), no me gustaba llevar a nadie a la casa (salvo actividades escolares), siempre lo evitaba por el miedo a que alguien notara mis gustos.

Samir se levanta y se ofrece para lavar los platos pero mi mamá dice:

“No, no te preocupes. Martin no trae a muchos amigos a la casa, y ahora que vienes tú no te pondré a lavar!”

Yo: No, me pondrá a mi! (Entre risas)

Samir: entonces me despido Sra. Helena ya es algo tarde y mañana hay clases.

Señora Helena: muy bien! Tienes razón! (Y mirándome a mi continua) Martin estos son los amigos que debes traer a casa!

Todos reímos y tanto Samir como yo caminamos a la entrada de mi casa:

Samir: escuchaste...! me tienes que traer más seguido a tú casa! (Y me da esa sonrisa sexy que me encanta)

Yo: casi muero...! Pero gracias por ser tan amable con mi mamá y hacerme quedar bien con tus historias.

Samir: hasta mañana...

Me da la mano, se da la vuelta, comienza a caminar; quedo hipnotizado viendo su firme trasero y de pronto se detiene, gira dándose cuenta que le miraba el culo y dice:

“Casi lo olvido... te dejé un regalo en la cama... para que veas que te tomo en cuenta” (sonríe y se va)

Entro rápido al cuarto, cierro la puerta, comienzo a buscar hasta que levanto la almohada y veo un bóxer negro con una nota que dice:

“Para que te diviertas” (estaba impregnado con su perfume y aroma corporal).

Lo puse en mi cara regresando instantáneamente mi erección, me acosté cerré los ojos deseando que él estuviera nuevamente aquí. De pronto suena mi celular, al ver que era Samir respondo rápidamente:

“Hola, que pasó? Estás bien?”

Samir: Si, solo quería saber si encontraste el regalo?

Yo: Si ya lo tengo, precisamente lo estaba disfrutando...

Samir: Ups... disculpa si interrumpo la diversión...

Yo: No, para nada.

Samir: entonces no te gusto?

Yo: al contrario me encanto...! Pero dos meses atrás lo hubiese disfrutado más, mucho más...! Ahora prefiero divertirme pero viéndote!

Samir: aaah... como en la primera noche que pasamos juntos?

Yo: exacto...! ...espera un momento! Tú no estabas dormido?

Samir: ...

Continuará en “Esclavo de mi fantasía, V parte” pero primero Samir quiere que lo conozcan en “De mujeriego a bisexual, confecciones de Samir 1”

Advertencia: Las confesiones de Samir contarán con sexo hetero, después de todo a quien no le gustaría ver al hombre de sus fantasías en acción incluso cogiendo a una mujer!

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