Nuevos relatos publicados: 13

Feminizada y sometida (quinta y última parte)

  • 8
  • 8.670
  • Sin valorar (0 Val.)
  • 0

Luego de estar 15 minutos así amarrada, abierta y sintiendo como ese dildo llenaba mi culito, ella regreso a la habitación y tomando una de las bombas soltó algo en ella que hizo que comenzara a disminuir el tamaño del dildo que tenía en el culito, especialmente la bola que tenía abajo que se abotonaba en mi culito, luego tomo la otra, comenzó a apretarla y mientras yo sentía como mi culito se llenaba de crema, me dijo que la crema además de lubricante tenía sustancias que me iban a hacer sentir muy femenina, excitada y obediente, me explico que aunque el efecto se iba a sentir más fuerte durante la primera hora duraría por lo menos hasta el otro día, cuando termino de ponerla toda en mi culito salió nuevamente y regreso casi media hora después cuando el juguete ya había perdido todo su grosor y hasta había salido de mi culito, entonces me quito las amarras y me dejo colocar de pie, cuando lo logre me dijo que me desnudara y mientras lo hacía me fue entregando la ropita que debía usar, esta vez debía estar vestida como una niña, me entrego pantis y sostenes rosados de princesas, unas pantimedias blancas y me coloco un vestido de falta rosado muy hermoso y femenino, me puso guantes y unos zapatos rosados y luego me hizo posar de muchas formas para tomarme fotos mientras me humillaba por ser tan putica, tan femenina y delicada.

Así posando termine arrodillada en la cama y ella aprovecho el momento para atarme nuevamente, esta vez con la nalguita parada y las manos atadas a las rodillas, luego me dio vuelta y con una almohada logro parar mi nalguita mientras me acostaba con la boquita hacia arriba así atada y sometida, después de unas cuantas fotos, humillaciones y que ella jugara con uno de sus vibradores entre mis piernas por debajo de mi faldita y encima de mi ropa interior haciéndome gemir y mojar mis pantis, ella tomo su fusta y comenzó a castigarme dándome nalgadas, luego se quitó sus pantis y los metió en mi boquita y me castigo con algunas otras cosas en las piernas y la nalguita, yo recibía sus castigos cada vez más excitada y caliente asi que note con mucha alegría cuando rompió mis pantimedias y metiendo su mano entre mis pantis me encontró toda mojada y caliente, ella me metió primero sus deditos y luego un dildo haciendo a un lado mi calzón y cuando lo tuve adentro se levantó su faldita, saco sus pantis de mi boquita y me puso su culito justo en la boquita, así mientras ella hacia que lo chupara, se movía encima de mí, luego siguió su colita, ella la metió en mi boquita y haciendo un 69 comenzó a comerme toda por la boquita mientras jugaba con el dildo en mi culito, así estuvimos un largo rato, entonces ella se levantó y sacando el dildo de mi culito comenzó a comerme toda como a una hembra, me lo metió todo por mi culito abierto y caliente y luego de humillarme, escupirme y meter sus dedos en mi boquita termino llenando mi culito con su leche mientras me tenía así sometida, amarrada y feminizada.

Luego de descansar un momento sobre mí ya con su colita afuera de mi culito mojado y abierto ella se paró y luego de tomarme algunas fotos me dijo que había disfrutado mucho de nuestro encuentro y tenía algunas sorpresas para mí, las primeras eran unos supositorios con algo que simulaba el efecto de las hormonas y que me iba a hacer sentir muy femenina, delicada y excitada dentro de algunas horas, también me iba a regalar un plug anal vibrador que se conectaba a través del computador, ella me coloco las capsulas en el culito todavía lleno de su lechita y luego de poner el plug en mi boquita para que lo mojara lo metió en mi culito, así ya lista me comenzó a liberar, cuando estuve libre me indico que fuera el baño pues ya me iba a preparar para irme para la casa, yo la obedecí y fui a hacer chichi sentadita como una mujercita teniendo mucho cuidado de que el plug no se saliera de mi culito y cuando regrese la encontré organizando varias cosas encima de la cama, ella me ordeno que me quitara el vestido y las pantimedias, la obedecí y cuando estuve lista me quito ella misma el sostén y las pantis, para colocarme un traje de látex rosado que llegaba hasta mi pecho y era abierto entre mis piernas, luego me acostó en la camita y me coloco un pañal de adulta rosado, unas pantis rosadas muy grandes y un protector de plástico rosado con imágenes de princesas, me mostro en el traje como con una bomba de aire se inflaban mis pechos y como se dejaba salir el aire, con el traje inflado me coloco un arnés en la cintura y otro en mis pechos y luego de asegurarlos cada uno al frente con un candado de combinación numérica me coloco nuevamente el collar con la placa de cuquitos y me ordeno que lambiera su culito, yo la obedecí y las dos nos pusimos en cuatro en la cama como dos perritas que se están conociendo, yo lambí, chupe y bese su culito, lo tomaba con mis manitos para meter la lengüita lo más que podía y luego lambia y besaba ese rico y hermoso culito, también baje mi lengua y lambí sus bolitas y metí su colita en mi boquita en varias ocasiones.

Luego de chupar su culito por décima vez ella me retiro y mientras sonreía satisfecha tomo unas pantis para colocárselas delante de mí, luego tomo un bolso que tenía preparado y fue echando cosas, mientras lo hacía me pregunto si me interesaría trabajar para ella, como una sirvienta, le pregunte, casi, serías como una mucama de mi hotel, respondió.

Yo muy coqueta y con la cabeza embotada respondí sin dudar que sí, ella me miro y después de darme un beso fue por algunos frascos de pastillas mientras me decía que tenía un hotel muy reservado en una zona de bosques fríos, era un lugar muy exclusivo con una clientela frecuente de personas que disfrutaban de tener relaciones sexuales de fantasía con travestis, antes de que preguntara me dijo que el empleo no era inmediato, antes debía pasar la prueba de selección de personal, además la vacante solo estaría disponible cuando terminara una ampliación que ya llevaba muy adelante, yo solo le respondí que estaría encantada y rápidamente pasamos al tema de los frascos que estaba empacando y su utilidad, sin preguntar ella comenzó a darme indicaciones, primero me mostro un tarro, me dijo que eran pastillas de hormonas femeninas, otro de relajación y feminización, y uno más para ponerme muy excitada, también me hecho toallas higiénicas femeninas por paquetes, tampones, supositorios y varias pantis muy femeninas, me dio que las pastillas debía tomarlas todos los días, también que debía en adelante usar solo pantis con ropa interior y siempre con una toalla femenina en la calle para no estar toda mojada, también hecho un paquete cerrado con candado de combinación el cual me dijo era para nuestro próximo encuentro, también me empaco la pijama que debía usar para dormir esa noche.

Cuando termino de empacar me quito el collar de perrita y me entrego una sudadera y un buzo, amplios y mientras me los colocaba me dijo que le avisara cuando estuviera en casa arreglada y con la pijama, pues quería ver cómo me tocaba y solo hasta que me mojara toda me daría las combinaciones que necesitaba para abrir los candados y quitarme la ropita que tenía puesta, yo me vestí y luego de besarnos y despedirnos comencé con mi regreso que tomaba más de dos horas. Confieso que el tiempo se fue volando y mientras manejaba sentía como me iba excitando cada vez más con la idea de tener estar así sometida y feminizada, de estar dominada y con la necesidad de servir de juguete sexual para poder ser liberada de la ropa que tenía puesta.

Apenas llegue subí rápidamente a mi apartamento y me quite la sudadera y el buzo, infle mis pechos y me coloque la pijamita, luego de comer algo y dado que tenía muchas ganas de hacer chichi y no podía quitarme la ropita termine haciéndolo en mi pañal paradita en la cocina con las piernas cruzadas como una señorita y así mojada recibí el mensaje de ella indicándome que debía estar lista, mientras prendía el computador y ya muy cómoda en casa comencé a sentirme muy femenina y excitada, entonces recordé las capsulas que ella había metido en mi culito y deje que hicieran todo el efecto posible mientras prendía la cámara y ella configuraba el plug que tenía metido en el culito para manejarlo a través de mi computador, cuando lo logro estuvo jugando mientras me humillaba y me trataba como una puta sucia, me hizo tocarme toda y cuando le dije que me había hecho chichi en el pañal subió la vibración a su máxima potencia haciéndome mojar toda así delante de ella, cuando vio como me movía y dejaba caer en la silla me envió las claves de los candados y mientras me deseaba una feliz noche me dijo que esperaba ansiosa nuestro próximo encuentro, yo le agradecí y todavía excitada le conté lo mucho que haba disfrutado y que no demoraría en volver a ponerme a sus órdenes.

Como anuncie esta es la última parte de este relato, espero que quienes lo lean quieran saber más y busquen en esta página cada una de las 5 partes y las disfruten tanto como esta, yo he disfruta mucho mientras escribía cada parte y mis pantis mojados son prueba de lo mucho que me he calentado escribiendo cada parte.

Me encanta recibir correo y compartir momentos eróticos virtuales, puedo enviarte fotos vestida como una mujercita y me encanta ser sometida, tratada como una mujercita, feminizada, humillada y castigada, mi correo es [email protected].

(Sin valorar)