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Primera doble de Carmen

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Hola a todos los lectores de CuentoRelatos, soy Jonny. Para los que no han leído nuestros relatos, somos una pareja madura en los 50 iniciándose en este mundo liberal.

Carmen es de cabello negro, corto hasta los hombros, rizado, de cintura pareja por la edad y los embarazos, con estrías, pechos grandotes 36c aún firmes y parados a pesar de la edad, culito recién estrenado por mí y reestrenando por el corneador, apetitosa todavía para algunos hombres que aún la chulean en la calle.

Jaime nuestro corneador, tiene 15 años menos que nosotros, apiñonado delgado, simpático, con un caramelo de 16 cm, grueso, imaginativo, aguantador y muy lechudo.

Yo soy delgado, blanco, aún con pelo con un caramelo de 15 cm, también imaginativo y caliente.

Vivimos en el Edo. de México cerca de la CDMX.

Precisamente por cuestión de mi calentura sexual de ver coger a mi esposa con otro, le insistí a Carmen para dejarse compartir, al principio casi me cuesta el divorcio me argumento que ya no la quería, que si no era una trampa para dejarla, en fin mil cosas, la llegada de Jaime a la oficina e n donde trabaja Carmen, y la atracción la atracción física en ambos, facilitó las cosas, se pudo convencer después de mucho tiempo, solo puso la condición de que ella escogería al candidato y la primera vez lo haría a solas con él, por supuesto, el candidato ya estaba escogido, después de algunos encuentros, abrió también la oportunidad de convencerse de estrenar el culo, el cual me había negado, y lo aceptó pienso yo que más por mí, por darle ese gusto también a Jaime nuestro corneador, con el cual sigue muy entusiasmada.

Carmen antes fue conservadora y hasta cierta forma tímida, este viernes vi en Carmen el cambio que ha tenido, desde su forma de vestir, la forma de maquillarse, de comportarse en la cama, etc., ahora muestra un semblante distinto, está más dispuesta habla de sus gustos sexuales, de fantasías, de platicar con la confianza de no enojarme ni recriminarle, la forma y posiciones como se la coge Jaime, la diferencia que siente con su verga y la mía, dice que cada una tiene si magia sexual y que ambas la satisfacen, pero también por la juventud del corneador disfruta más las metidas de verga que Jaime le da.

Aprovechando la plática, me dijo que este viernes quedó con Jaime para volver a hacer el trio y por primera vez tener una doble penetración, que sintió curiosidad y se le antojó pues una de sus amigas de la oficina les contó que ya lo probó y que se siente muy rico.

Hemos convenido narrar está historia desde los dos puntos de vista, de Carmen y el mío pues cada uno tiene diferentes perspectivas.

Por la ventaja que tienen ambos de salir a las 3 de la tarde los viernes, se nos facilita hacer planes ese día, sin que Jaime tenga problemas en su casa.

Así que el viernes pasé por ellos a su oficina, Carmen me pidió que le llevará una bolsa con ropa que compró en la semana para la ocasión, por curiosidad la revisé y vi una minifalda tableada negra, un body de encaje rojo, con copa media para lucir sus pechos, con broche en la entrepierna para usar sin calzón o tanga y facilitar cualquier maniobra en esa zona, medias de auto ajuste color rojo, zapatillas negras con tacón del 7 para parar más la nalga.

Esta es mi versión:

Seguro Jaime le pidió que se vistiera así y no dudo que le pidió su parecer al comprarlas, pues al cabron igual que a mí le causa morbo cogerla sin desnudarla totalmente.

Como esposo lo veo desde mi calentura y mi gozo qué me da verla compartir con el otro.

Nos fuimos al bar de la vez pasada para tomar algo antes de ir al hotel, pedimos la mesa en la zona más discreta para poder platicar y acariciar a Carmen como un preámbulo de lo que recibirá en el cuarto del hotel.

Carmen se disculpó para ir al baño a cambiar su ropa, mientras platique con Jaime sobre sus salidas con Carmen, me dice Jonny tienes una mujer extraordinaria, dispuesta al placer, ¿siempre ha sido así? Le dije que no, que a abrió su sexualidad a partir de la primera salida con él, y que él es el segundo hombre al que le abre las piernas y ahora también el culo, y me responde pues no lo puedo creer, se ha portado muy puta y creí que ya tenían experiencia, esto lo hace más excitante, como si la terminase de desvirgar, y reímos.

Cuando regreso Carmen a la mesa la chuleamos, se veía divina con sus prendas y muy bien maquillada.

Se sentó a un lado de Jaime y le plantó un beso en la boca metiendo su lengua y dejando que él también la metiera, y le pidió una probada de lo que le vanos a hacer, en eso llegó el mesero con las bebidas que pedimos, después de cuatro copas muy cargadas, Jaime la tomó por la cintura y se la empezó a fajar, comenzó acariciando su pierna y subiendo la mano hasta la vagina para darle una buena sobada, ella abría las piernas para facilitar aún más la maniobra, con la otra sobaba sus pechos y Carmen le daba una tremenda sobada de verga poniendo la vega de Jaime parada a todo lo que daba, Carmen se dejaba hacer y jadeaba de lo caliente que estaba, y le pedía a Jaime que le dijera ¿qué le va hacer?, Jaime le decía, que en cuanto se subieran de nuevo al carro le haría mamar su verga y le daría dedo en el camino para ir aflojando sus entradas, y Carmen le respondía con un siii, eso quiero también llena de lujuria.

Yo viendo y oyendo tenía la verga igual que Jaime, bien parada como queriendo salir de la bragueta, solo estuvimos una hora en el bar, ni siquiera salimos a bailar, pagué la cuenta y abordamos nuevamente el auto para dirigirnos al hotel, ya nos urgía meterle la verga en sus deliciosos agujeros de Carmen, ella misma también lo pedía, diciendo ya quiero sentirlos a los dos.

Jaime le pidió a Carmen abordar en el asiento de atrás, mientras yo el cornudo manejaba al hotel, donde le darían verga a su mujercita.

Aparte del espejo retrovisor del auto le puse otro para ir viendo como atiende Jaime a mujer.

Inmediatamente que subieron ajuste el espejo y partimos al matadero, Jaime acarició sus piernas a través de sus medias y llegó a su entrepierna para desabrochar y darle dedo, sintió la humedad y lubricación de Carmen pues le dijo, gran puta mira como vienes chorreando, y aprovecho para lubricar sus dedos y meter uno en la vagina y otro en el ojete, lo supe por qué Carmen le dijo con cuidado, mételo despacito me dolió un poco, sin embargo se empezó a mover como pidiendo mayor profundidad en la embestida con los dedos, yo solo veía parte pero los gemidos de ambos y lo que se decían, me prendía mucho, Carmen ya tenía los pechos fuera y Jaime mamando, sus dedos abajo hurgando profundo su intimidad, después Jaime se levantó y terminó de sacar su miembro de la bragueta para pedirle a Carmen que se la chupara como ella sabe hacerlo, todo esto me daba mucho morbo, pensar que hace poco tiempo no quería ni mencionar algo así y ahora parecía a zorra pidiendo casi suplicando le dieran verga, me pidió que apurase a llegar al hotel, tuvo varios orgasmos pues ella es multiorgásmica, Jaime le aguanto sin venirse aunque ella suplicando le pedía que se corriera en su boca,.

Entramos al primer hotel que encontré de buena apariencia, en el garaje se compusieron un poco la ropa para pasar a la recepción.

Jaime me dio para pagarlo mientras se la seguía manoseando, sin importarle que hubiera más personas entre ellas había dos trabajadores del hotel que no quitaban la vista de las piernas y culo de Carmen que se veían al levantar la falda con la manoseada que le daba Jaime, además de lo caliente de la manoseada ayudaron las copas que había ingerido ya que esto la desinhibe.

Una vez asignada la habitación nos dirigimos al elevador, solo alcance a oír de alguno de los que estaban en la sala, que mujer, seguro que le van a dar un buena verguiza entre los dos cabrones.

Los dos la abrazamos para seguir disfrutando de sus encantos y ella de las caricias que le propinamos.

Entrando a la habitación Carmen se dirigió al baño para arreglarse y maquillarse nuevamente.

Se dirigió al tubo para pole dance y nos deleitó con un estupendo baile erótico, arrimamos dos banquitos y Carmen nos pidió quitarnos la ropa, bailó al rededor del tubo con sus limitantes por no ser una profesional pero estuvo muy bien, nos hacía señas con su dedo como si estuviera mamando, y se movía muy sensual, se empinaba frente a nosotros mostrando las nalgas y las apretaba como si tuviera la verga dentro, poco después se acercó a nosotros y se hincó para agarra con cada mano las vergas que estaban duras y clamando atención de su boquita, nos masturbó por un momento antes de darnos una mamada alternando a cada uno.

Yo a pesar de estarla viendo, no me la creía después de que se resistió tanto para ser compartida.

Jaime se paró para empinarla subió la falda y abrió los broches de la entrepierna para dejar libre su panocha, apuntó con la punta de la verga y se la dejó ir, tomó sus caderas y la bombeo mientras me la chupaba a mi, volvió a tener otra serie de orgasmos intensos que la hicieron gritar de placer, seguro la escucharon en el pasillo del hotel.

Yo ya no pude aguantar y me vine en su boca, se tragó toda mi leche, Jaime aguanto un poco más dándole duro también hasta que se vino dentro de ella inundando con un buen chorro de leche.

Descansamos un ratito para dar tiempo a reponernos.

Carmen aprovechó para hacer una llamada.

Regresó para ponernos listos otra vez, inició con Jaime, le hizo otra manada de verga mientras a qué a mi me puso a limpiar su vagina con la lengua para que me tragara la leche del corneador, sabe que eso me calienta, cuando estuvimos listos lubrico el ano y nos tomó a los dos del pito y nos llevó al potro para que le hiciéramos la doble penetración, ella llevo la batuta, primero me puso a mi recostado, y de frente a mí fue clavando mi verga en la vagina, ya que la tuvo adentro se movió un poco para acomodarse, empino un poco el culo para después pedir a Jaime que ahora el se la clavara en el culo, le pidió hacerlo despacio para no lastimarla, primero ella con su mano la dirigió a su ojete para iniciar la cogida, después le pidió a Jaime que lo termine de meter con cuidado, cuando ya se la dejó ir toda hasta el fondo, se acostumbró a tener ambos miembros dentro se empezó a mover con un ritmo lento gozando cada movimiento, suspirando y gritando par de cabrones me están partiendo pero que rico se siente, yo aproveché para sacar y lamer sus tetas, atrás Jaime le

tomaba por las caderas metiendo y sacando del culo con ritmo lento para no salirnos, Carmen no aguanto tuvo un orgasmo intenso y nos gritó, vénganse conmigo también, quiero sentir su leche caliente inundar por dentro mis dos agujeros, se vino Jaime y después yo, nos quedamos un momento largo hasta que la verga de uno y otro se pusieron flácidas, al sacarlas por las orillas salieron unos hilos de semen juntándose ambos por las piernas de Carmen, fue una experiencia increíble, nos sentamos a la orilla de la cama y estuvimos un rato acariciando nuestros cuerpos, en algún momento nuestras manos coincidían en la cuquita o bubis de Carmen ella a su vez tocaba los testículos y nos besaba en la boca en forma alternada, nos dormimos un rato y nos vestimos para salir, entregué la llave en el lobby y nos dirigimos al garaje para abordar el auto.

Esta narración es desde el punto de vista de Carmen.

Hola lectores, pues bien como les dije la vez anterior soy nueva narrando así que disculpen si tengo fallas en el relato.

Pues bien como dice Jhonny esto es lo que yo viví en esta experiencia.

Jhonny en su narrativa me hace ver muy puta, pero me preguntó el y Jaime ¿que son? si hacemos lo mismo a la hora de coger, Jhonny compartiendo a su mujercita que antes tildaba de conservadora y mojigata ¿lo llamaremos pervertido?

Jaime engañando a su mujer y participando con nosotros, ¿lo llamaremos hipócrita?

Por qué eso sí, ambos son calientes hasta la chingada.

Voy a empezar desde que Jhonny nos recogió a la salida de la oficina.

Para no despertar malos comentarios en la oficina yo me fui adelante y Jaime atrás, llegando al bar tomé la bolsa con la lencería en rojo y negro que compré para agradar a este par de cabrones, me esmeré en un maquillaje un poco mas cargado, y un día antes fui a qué me arreglaran el cabello y las uñas y me rasure la entrepierna dejando solo un mechón de pelo, si esto es verme muy puta que será cuando me maquillo para una fiesta o me rasuro para andar en bikini en la playa o en el balneario.

Simplemente el lugar y el objetivo es diferente.

En el bar con la calentura de lo que platiqué con mi amiga Lupe de un trío con doble penetración y como lo ha gozando y los tragos que hacen que yo pierda la cordura ya se imaginarán, así que en cuanto Jaime me empezó a dar el faje, solo me puse flojita, cooperando y participando también, cuando me tocó las piernas tuve mi primer cosquilleo de calentura sexual y ya no quise parar, así que me dejé llevar y di las facilidades para que Jaime me tocara como y dónde quisiera, de la misma forma que yo le toqué y sobe su rica verga, nos besamos con mucha pasión, así que no pudimos aguantar más y nos fuimos al hotel, en el auto Jaime y yo nos fuimos en el asiento trasero.

Jaime me acaricio las piernas disfrutando de la textura de las medias que al igual que Jhonny los enloquece, llegó con una mano a la entrepierna, yo abrí las piernas para facilitarle la maniobra, con la otra me sobaba las nalgas, se siente delicioso, no sabes a cual caricia hacerle caso y solo aprietas tu sexo como para evitar que se escape.

Jaime se acomodó mejor para hacer a un lado el broche y meter sus dedos para masturbarme, me pidió subir un poco la nalga para darme dedo también en el chiquito, así lo hice pero me dolió un poco, le pedí que tuviera cuidado, una vez dilatado y lubricado con mis jugos se facilitó el mete y saca de sus dedos, yo también hacia lo mío y le saque la verga para masturbar, baje las copas del body para que me diera una manada de chiches, gozando mucho, ya que es mi punto débil, poco después me empujó la cabeza para mamar verga, así que bajé a darle lo que pedía, con su mano seguía dando dedo y yo con mi boca le daba placer oral, que delicia de orgasmo tuve.

Casi cogíamos en el asiento trasero, le pedimos a Johny que se apurarse a llegar al hotel.

Johny veía por el espejo, la forma en que me agasajaba Jaime, y sobaba su entrepierna excitado de lo que miraba.

Por fin Johny se metió al garaje del hotel, tardamos un poco en pasar a la recepción pues tuvimos que medio acomodar nuestras ropas.

Jaime le dio dinero a Johnny para que pagará la habitación ya que así fue el acuerdo de compartir los gastos, aprovechamos mientras para seguir fajando en el lobby, sin importarnos que nos vieran algunas personas, sentí la mirada de algunos de ellos pero no me importó inclusive si veían mis piernas y nalgas cuando Jaime me abrazaba para besarme y subía la falda que es tan corta que con poco se veía.

Cuando nos asignaron la habitación nos dirigimos al elevador, alcance a oír que alguno de los que estaban el lobby comento con otro, seguro le van a dar una buena cogida entre los dos, que envidia.

Entramos a la habitación y les pedí que me dejaran pasar al baño.

Hice mis necesidades y me lavé para que me pudieran mamar a gusto mi chochito, me acomode la lencería y volví a maquillar, vi que la habitación contaba con tubo, así que pensé en hacerles un baile erótico para hacer más memorable la ocasión.

Vi la cara de asombro en ambos, sobre todo cuando les pedí que se desnudaran y se sentasen enfrente, puse en el celular una melodía de las que se usan para stripers y les enseñaba las tetas un momento y las volvía a cubrir, lo mismo me empinaba para mostrar las nalgas y las apretaba y aflojaba como invitándolos a penetrarlas, hacía como si estuviera mamando una verga, me acerque a ellos y tome sus miembros una con cada mano, estaban duras y palpitantes, las empecé a subir y bajar dándoles el placer de la masturbación, abrí la boca para darles una mamada alternada, poco después Jaime se levantó y me empinó, subió la falda y desabrochó el body de la entrepierna, me la dejo ir desde atrás, yo jadeaba y gritaba de placer teniendo otros orgasmos intensos y escandalosos, Johnny se vino en mi boca y me trague todo el semen que arrojaba, Jaime me siguió dando pito hasta que soltó un buen chorro de leche, volví a tener otro orgasmo más, era una locura de placer.

Johnny y Jaime se recostaron un momento para reponerse, yo mientras realice una llamada a mi amiga Lupe para preguntar cómo le hacía para la doble dándome algunos consejos y me pidió que lo disfrutará al máximo, así que regresé con mis dos amantes y a Jaime le levanté el ánimo con otra buena mamada, mientras le dije a Johnny que me mamara la cuca y la limpiara del semen del corneador, eso lo calienta, cuando los sentí listos de nuevo tomé el lubricante y me lo puse en ambas entrada, les tome de la verga y los jale hacia el potro, puse a Johnny recostado boca arriba y de frente a él me monté y me fui clavando en su verga, sintiendo por adelantado el placer que me darían ambos miembros al estar clavados en mis agujeros me empine un poco para parar el culo y mostrar la entrada de mi ojete al que dirigí con mi mano la punta de la verga de Jaime, le pedí que me la clavara despacio para después moverme lentamente para sentir el placer enorme de las dos vergas dentro, sentir como pegan una y otra, me vinieron. varios orgasmos más, que disfruté y más cuando ambos soltaron sus chorros de leche caliente dentro, dándome un placer enorme, lo prolongaron dejándome las vergas clavadas hasta que se hicieron flácidas y sentí como escurrí el semen de ambos por las piernas.

Nos recostamos nuevamente en la cama y acariciamos nuestros cuerpos, yo palpaba sus pechos, vientre, testículos, ellos se también acariciaban mis pechos, nalgas y panocha para prolongar mas el placer recibido.

Nos dormimos un rato y al despertar nos vestimos para salir del hotel.

Jhonny entregó la llave en el lobby, los trabajadores que encontramos cuando entramos aún estaban ahí, a propósito me agaché para que se dieran un taco de ojo viendo mis nalgas, salimos al estacionamiento y abordamos el auto Jaime y yo en la parte trasera, ya no fajamos solo nos besamos y platicamos, dejamos a Jaime en una esquina donde pudiera tomar su transporte a casa, le di un beso de despedida y le agradecí la compañía para esta experiencia, me pasé al asiento de adelante con Jhony, me acarició las piernas y yo le sobe la verga, me preguntó, ¿comiste sientes?, ¿lo volverías a repetir?, le dije que muy satisfecha, y que si pero que dejaría pasar un tiempo.

Llegando a casa vimos una película en la TV y después nos fuimos a dormir.

Gracias por tomarse el tiempo para leer.

Me gustaría leer su opinión, ¿qué les pareció? y si hay lectoras su punto de vista.

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