Encontré este relato en un equipo que estaba reparando. Es una carta que le envía una mujer a su ex marido padre de su única hija:
La primera vez que tu viejo me vio calata fue en tu casa, cuando salía de la ducha, el pendejo esperaba que entre al cuarto para espiarme por la cortina, me veía completamente calata cuando me estaba secaba.
Luego un día espero que salga de la ducha y se metió de frente al cuarto haciéndose el huevon que no sabía que estaba calata y me estaba cambiando, lo mande a la mierda y lo amenace que lo iba a acusar, pero lo que si no pude evitar fue ver el bultaso de su pantalón, y siempre me quede con la duda de si ese bulto había sido su pinga, porque si era así alucinaba que rico sería sentir una pinga así y que me la clave por el poto.
A veces cuando me quedaba a dormir y estábamos cachando, lo vi varias veces que nos miraba por la cortina, yo no te decía, al contrario, me movía más y gemía más fuerte para que se arreche más y se quede así de arrecho, tú sabes que me encanta montarme encima de la pinga mientras me chupabas las tetas, al propósito me volteaba para que me des por el poto y se gane como me entraba, yo lo miraba y le sonreía y en la oscuridad veía que se tocaba la pichula.
Una vez me lo encontré entre San Isidro y Lince, nos pusimos a conversar y le mencione que estaba necesitada de plata, y me dijo que él me podía ayudar, le dije así y como es, yo misma le dije en son de broma que se cobrara con mi culo, que veía como me comía con los ojos en la casa, es decir "boca come, poto paga", y me dijo que dependía de mí, y le dije fuera huevón, pero me insistió y me dijo que yo siempre le había gustado y que daría lo que sea por verme calata en una habitación aunque sea tocar mi enorme poto blanquito, se moría por mi poto, me decía que era enorme, redondito y durito, que le gustaría lamerme el hueco del culo y meterme la lengua hasta el fondo. Sabía que era durito porque varias veces me había metido la mano, inclusive una vez me metió la mano cuando estaba con falda y como me gusta estar sin calzón, su dedo se metió al hueco de mi culo que me hizo estremecer. Yo solo me reía, y le dije que solo cachaba con pingones, que me hagan gritar de placer y que me agrandaran la chucha y que dejen muy feliz a mi poto que era bien tragón, entonces se rio y me dijo que no me iba a decepcionar, yo me reí y le dije que de repente ni se le paraba.
Como estaba con saco, me dijo mira y me hizo mirar su pantalón y me asombré del bultaso que tenía y le dije que esa no podía ser mi pinga, y me dijo si quieres agarra para que veas que si es así. Como estábamos sentados en un parque en el Olivar de San Isidro, era de noche y el parque era grande y oscuro, le dije haber muéstremela, se bajo el cierre y realmente que tal pingasa que tenía, solo con verle la cabeza me arreche y me pregunto si le provocaba, no le podía sacar los ojos de encima, que tal pingaza, por la menos tenía 20 centímetros y era anchaza, no me contuve y se la cogí, el aprete y se la comencé a correr. Luego reaccione y le dije que se la guardara. Ahí fue donde me pregunto si le había gustado y le dije que me había quedado asombrada, que su pinga me hipnotizo. Conversamos un poco más y antes de irme, al propósito al levantarme hice que se callera mi cartera para agacharme dándole la espalda y como estaba con falda me la levanto y se ganó con mi hilo dental rojo, lo único que dijo fue que rico culo tienes y me metió la mano y su dedo medio hasta el fondo de mi ano, le dije que sabía que iba a hacer eso y que estábamos parches, ya que yo también le había agarrado la pinga. Le dije si quieres este poto, junta tu platita que mi culo cuesta. Luego le pedí que me vuelva a mostrar su pinga. Se la saco otra vez, se la volví a correr y le pregunte si creía que entraría a mi boca. Me dijo porque no pruebas, le dije que si quería cachar conmigo le iba a dar una probadita para que se quede con las ganas y luego me busqué pero con plata, nos fuimos a sentar a la parte más oscura y alejada del parque, miré a todas partes para ver si alguien nos veía y me agache, que rica pinga, me la metí a la boca con dificultad, pero me arrechaba la sensación de tener semejante pinga en mi boca y a la vez sentir que me asfixiaba, ya que no podía respirar con semejante pingota, se la lamí, mordí, le pase la lengua y mientras se la chupaba se la corría para probar su leche, que rico se vaceo y fue tanto que se escapaba por mis labios. Me dijo que no me preocupara que de todas maneras cacharíamos algún día y que me iba a hacer gozar y gritar como loca.
Una vez que fui a tu casa, no estabas, pero el salió a atenderme, le dije que vaya a mi casa porque quería que me arreglara algo. Le dije que en media hora lo esperaba y que por si acaso llevé plata. Así que lo espere solo con una toalla y le dije que necesitaba cambiar un foco, pero como el techo era alto no alcanzaba y necesitaba que sostenga la escalera. Como estaba con toalla, al propósito hice que se me callera, para que me vea calata, yo le dije que la dejara ahí y siga sosteniendo la escalera para no caerme, al bajar le dije ya cumplí tu fantasía de verme calatita. Cuando me das por dejar que me agarres, se hizo el huevon y me dijo a qué te refieres, y de frente le dije si quería cacharme. Me dijo que tenía cincuenta soles. Así que atraque. Como le dije para ir al cuarto del fondo, pensé que no había nadie, así que salí calata de la sala y el casero estaba bajando las escaleras, me miro, pero yo seguí hacia mi cuarto.
Yo he cachado con un montón, yo pensaba que tú eras el mejor cachero que había tenido y el más pingon hasta ese momento, pero me equivoque, que rico me cacho tu viejo, apunta de pura sopa hacía que me venga, también le metí una chupada de pinga que me volví loca, cuando me empezó a meter solo con sentir como se agrandaba mi chucha y como entraba poco a poco semejante cabezota que tenía su pinga me volvía loca, me vine varias veces sin que todavía haya entrado todo, lo mejor fue cuando me preparo el poto, era experto moviendo su lengua y me preparo el ano para recibir semejante pinga. Al principio me asuste porque pensé que no me iba entrar, pero me equivoque, un poco más me mete hasta los huevos, que rico sentía como se habría cada vez más mi ano, pero lo tenía que hacer poco a poco porque me estaba partiendo en dos. Hasta ahora lo recuerdo y realmente fue el mejor cachero que he tenido. Nadie se le iguala, a veces me masturbo pensando en él. Con tu viejo lo hicimos muchas veces y en todas partes, que rico cachaba, que rico sentía su pinga cuando se le chupaba tenía que abrir la boca lo más grande que podía para que pueda entrar, como cuando me abría la chucha y sobre todo cuando me daba por el poto, que rico se habría mi ano, él fue quien me dejo el huecaso que tiene mi poto. Al principio le cobraba, pero después lo hacía gratis con tal de sentir el placer que me daba. Que rico y hermosa pinga tenia, hasta a veces cuando estaba arrecha lo iba a buscar a las obras donde trabajaba para irnos a un hotel. Un día mi casero me llamo la atención por lo que hacía y le pregunte si estaba picón porque no eres quien me cacha, que yo sabía que me he espiaba por la ventana del baño cuando me bañaba y cuando venias ms cacheros. Le dije que no diga nada, pero si quiero te la chupo y cachamos un rato, este mes no tengo para pagar la casa, así que al casero también comencé a pagarle el cuarto con mi poto. Mi poto me ha dado muchas satisfacciones y me ha sacado de apuros. Por lo menos abre probado unas 500 pingas, de todas las razas, lo máximo que he cachado es con 8 a la vez. A veces me quedaba en la casa de alguna amiga y tirábamos entre todas, yo era la más arrecha y les provocaba a veces éramos tres o cinco chicas, decían que nunca lo habían hecho, pero al final les gustaba.
Tu viejo me dijo que tu hermana era bien rica y que le encantaban sus tetas y culo, no sé si entendí mal, pero me dio a entender que la vio calata o que también se la cachaba o le metía mano. Me dijo que después de mí, tu mama era bien cachera y que le gustaba también que le den por el poto y era super mamona y se tomaba la leche, que inclusive una vez hicieron un trio con un amigo y le dieron por los dos huecos a la vez, que tenía buen culo.
Uno quiere que sus hijos sean distintos a uno, pero la sangre y genes llama y es igual de puta y cachera que su padre y madre, a los tres nos gusta la pinga y que nos den por todos los huevos, la mama cachera y lesbiana, el papa cachero y maricon, la hija tenía que salir más puta que ambos. Te acuerdas que la amiga de nuestra hija se quedaba a dormir en su cuarto, nos sintieron cachando a mi marido y a mi, las despertaron los gemidos que daba con mi marido y nos estuvieron espiando. Luego como a las dos de la madrugada escuchamos gemidos en su cuarto, ella y su amiga se estaban sopeando, estaban calatitas y como ambas son tetonas, como se chupaban las tetas, su amiga tenía unos dedos en su chucha y la otra jugaba con su poto. Luego se sopeaban con un rico 69. Mi marido y yo estábamos mirando desde la puerta de su cuarto que estaba semi abierta, se arrecho con ese espectáculo y nuevamente comenzó a cacharme en el pasadizo mirando lo que hacían pero no hicimos ruido.
Espere que mi hija y su amiga terminaran y lo hicieron cuando refregaron sus chuchas una contra otra. Para ese momento mi marido estaba exhausto y se fue a dormir. Yo seguí observando todo lo que se hacían. Luego me metí calata a su cuarto, se paltearon y les dije que no se asusten, que había visto lo que habían hecho y que les enseñaría como pueden gozar más y les enseñe mi vibrador, así que me comencé a tirarme a su amiga chupándole las tetas, chucha y su ano, a mi hija no pensé en tocarla por el tema del incesto y en eso siento que me están comiendo el culo, la muy pendeja y puta de mi hija me estaba lamiéndome el ano y se estaba tomando la leche que mi marido había dejado en el hueco de mi poto, se la tomo todita y luego siguió lamiendo el hueco del poto y mi chucha hasta dejarla limpia sin leche. Así que ya no aguante hicimos un rico trio, me las cache a las dos, estaban super arrecha. Mi marido se había quedado dormido, felizmente tiene el sueño pesado y no se despertó porque si no nos hubiese tirado a las tres, porque es bien arrecho. Me pidieron que lo despierte para que se las cache porque querían pinga, pero no lo hice, primero tenía que cacharmela rico yo. Nos quedamos dormidas calatitas, ellas quedaron rendidas. Mi marido se tenía que ir temprano a trabajar y al no encontrarme fue al cuarto de las chicas y nos encontró dormidas, me paso la voz y me dijo te las cachaste, le dije que no me aguante y fuimos a cachar a mi cuarto un mañanero más.
Mi marido me dijo que a veces al sonar el teléfono le pasaba la voz a mi hija, salía calata de su cuarto a contestar el teléfono, pero en vez de recibir el auricular le daba la espalda y le restregaba el culo con su pinga, el solo se hacía a un lado. Mi marido me lo conto y le pregunte si quería cachársela, me dio está loca es tu hija y ahí quedo. En la noche que me estaba cachando le pregunte si realmente no quería cachársela, como estaba arrecho me dijo que le gustaba su culo, sus tetas y su chucha peluda porque ya varias veces la había visto calata. Lo que hice fue abrir mi puerta y gemir fuerte para que mi hija escuche, cosa que hizo y nos hicimos los disimulados que no la veíamos. Cuando terminamos, él se fue a la sala y mi hija paso por mi cuarto al baño y yo estaba con las piernas abiertas chorreando leche de mi chucha, la recogí con mi dedo y me lo lleve a la boca, la mire y le sonreí le dije que estaba bien rica la leche, como vio que no estaba mi marido entro y me dio una lamida de chucha para tomarse la leche. Se levanto, sonrío me dio las gracias por invitarle mi leche y regreso a su cuarto. Con mi marido nos acostamos y esperamos como media hora. Salidos sin hacer ruido y se estaba masturbando en su cuarto, había sacado mi consolador sin que me dé cuenta, le dije a mi marido que entre con cualquier excusa a su cuarto y se la cache. Pensó un momento e ingreso, le dijo, escuché ruido y pensé que tenía pesadillas, se asustó, pero no retiro la mano de su chucha, yo estaba observando desde la puerta del cuarto. Le dijo que era normal lo que estaba haciendo y como estaba calato, ella no le sacaba los ojos de su pinga y se pasaba la lengua por la boca, le dijo que si deseaba el como hombre la podía dejar satisfecha y le mostro su pinga, se incorporó y ella se la metió en la boca, puta madre se veía que no era la primera pinga que chupaba que bien lo hacía, tanto así que mi marido no aguanto y se vacío en su boca, se la tomo todita, él le comenzó a comer la concha y el ano y se la metió de golpe. Que tal suspiro que dio mi hija, y se le salió todo lo vulgar, le comenzó a decir que no pare de cachársela que quería más pinga, que le dé duro, se volteo y le pidió que le dé por el culo, que quería gemir igual que yo y en pleno cache entre calata y se asustó y se pudo a llorar pidiendo perdón, le dije hijita no te preocupes hay pinga para ambas, y de frente se puso a chuparme las tetas e hicimos un delicioso trio, que rico cachamos, nos pusimos en cuatro y mientras nos chupábamos las tetas, mi marido nos las metía un rato a cada una, cuando mi marido se quedó sin fuerzas, nosotros nos seguimos torteando para venirnos una vez, que rico 69 nos hicimos. A partir de ahí cachábamos todos los días los tres. Dormíamos los tres juntos y andábamos las dos calatas por la casa, inclusive delante del casero. A veces estábamos viendo tv. Yo Iba a la cocina a preparar algo y ella ya estaba montada sobre mi marido cachando. A veces ella llegaba de estudiar y me encontraba cachando y se integraba ahí mismo a tirar. Que tiempo aquellos. Hasta que comenzaron a ver problemas y se terminaron nuestros juegos.
Te acuerdas cuando estabas recontra borracho y te quedaste seco después que cachamos, me arreche verte calatito y sobre todo verte el poto de negra que tienes junto con tu cinturita. Ni sentiste cuando te puse mis panthyes y que rico se veían tus pies de hembra, delgaditos y formaditos, me arreche aún más y te puse mi hilo dental, ahí fue donde no aguante, te saque mi hilo y puse mi clítoris en tu poto, tú sabes que mi clítoris es grande y parece una pequeña pinguita, tú sabes que yo me cachaba a mis amigas pero ninguna tenías el cuerpo que tu tenías, tu cuerpo era mejor que el una mujer, un potaso, una piernas contorneadas y unos pies preciosos, aparte que eres simpático. Te alucine que eras una hembrita y te cache. Luego se me ocurrió lamerte el poto, y meter mi lengua a tu ano, Te abrí el poto y me di con la sorpresa que tenías un anaso y me di cuenta que también te cachaban, me asombre un poco pero igual alucine, se ve que el que te cacho tenía una pingaza porque tienes el poto y el ano recontra roto, no te imaginas el tamaño de tu ano, que rico te debieron hacer cachado. Me imagino como te debieron hacer gritar como loca para que te dejen tu poto y el ano de semejante tamaño, tienes un huecaso, ¿Me imagino que también le chupaste la pinga? ¿Tengo un par de amigos que nos pueden cachar, hacemos una competencia de quien chupa mejor la pinga y cacha más rico? A ver quien hace que se venga primero el otro, si tu poto o el mío.
Tu ni sentías lo que te estaba haciendo, saque mi consolador y que rico te entro, la verdad no se si sentías lo que te estaba haciendo porque comenzaste a gemir y levantaste tu culo como para que te entre mejor, me acerque a tu oído y te pregunte si querías que siga y si te gustaba y entre sueños me dijiste sigue y no pares, que te la meta todo, estabas durmiendo pero entre sueños gemías como hembra y me pedias más y levantabas el poto, Nunca voy a olvidar tu ano, que rico se sentía lamértelo y que rico te debe entrar una pinga, aunque se ve que has probado una grandaza porque tiene un anaso. te metí toda mi lengua mientras te agarraba la pinga y te hacia un pajazo
Te acuerdas cuando jugamos a la botella borracha con tu amigazo y los castigos eran quitarse toda la ropa. Yo fui primero la que se quedó calata, después el y al final tú, como se sorprendio del tamaño de tu ano cuando te agachaste para mostrárnoslo como castigo y te dijo que desde el colegio quería cacharte. Luego tú me castigaste haciendo que se la chupe y luego yo te castigue y tú se la chupaste y como gozo. Al final cachamos los tres bien rico. Me arrodille para chupársela a los dos y luego tú te arrodillaste y entre los dos se la chupamos. Luego me la metieron a la vez por mis dos huecos. Lo mejor fue cuando los dos nos pusimos en cuatro. Me metía la pinga un rato a mí y luego a ti y al final nos tomamos su leche con el sabor de nuestros culos en su pinga. Le dejamos la pichula limpiecita. Tenía buena pichula. Al final se cacho a la mama, al papa y luego nos enteramos que a la hija también se la cachaba bien rico porque a ella le encanta la pichula pero esa es otra historia.