Para que puedan imaginarse más, yo tengo el pelo negro que tapa apenas mis ojos, ojos grandes y marrones oscuro, soy blanco con tonos rosas, delgado, aunque mis muslos y culito son gorditos, mis caderas anchas, y mido 160 cm. Esto pasó cuando yo tenía 18 años, estaba en último año e iba a verme con mis tres mejores amigos de ese entonces, voy a llamarlos Erick, Sam y Lauti. Los cuatro íbamos a juntarnos en la casa de Erick, siempre hacíamos pijamadas, éramos amigos desde hace años. Ellos ya sabían que soy gay, (Sam es bi, Lauti hetero y Erick pansexual), nunca hubo ninguna incomodidad entre nosotros 4, siempre tuvimos mucha confianza.
Ese día fui vestido con un short ajustado de color rosa, unas medias hasta mis rodillas y un suéter enorme. Bueno, luego de estar comiendo y jugando un rato a la play, terminamos la última partida, en la que yo como siempre (porque odio perder) hice un pequeño berrinche, ellos siempre me trataban como el bebé del grupo igual. Entonces Lauti empezó a hacerme bromas y a empujarme, Sam también me empujó y terminé cayéndome arriba de Lautaro, y después me quedé sentado encima suyo (también algo normal entre nosotros).
No pasó mucho tiempo hasta que Erick empezó a halagarme como de costumbre, diciéndome cosas como "estás muy lindo hoy", a lo que yo me sonrojaba y le respondía igual. Después Sam empezó a acariciarme el muslo, apretando ligeramente el mismo, yo me caliento rápido así que iba a decirle que no lo haga, pero cuando estaba por sacar su mano, Erick me la agarró y Lauti me agarró de la cintura, dejándome casi inmóvil. Me sorprendí un poquito pero después sonreí, aproveché que estaba arriba de Lautaro y empecé a moverme un poco, sintiendo su duro bulto chocando contra mi culito. Después ya me habían sacado el suéter y tenía a Erick encima de mi, besándome y comiéndome la boca, mientras Sam lamía uno de mis pezones y Lauti daba embestidas contra mi. Para ese entonces ya estaba hecho un desastre, todo colorado, despeinado, sin dejar de gemir y con el pene duro. Luego, me pusieron en cuatro y Sam empezó a comerme el culo, después Erick metió su verga grande en mi boquita y Lauti se pajeaba contra mi cara. Erick y Lauti se turnaron para follarme la boca, Sam empezó a cogerme el culo con rapidez, sentía sus bolas chocar contra mi una y otra vez, yo lloraba de placer mientras disfrutaba de estar comiéndome dos deliciosas pollas.
Al final, se turnaron entre los tres para llenar mis dos agujeros, terminé llenito de semen caliente, parecía un pastel de crema, se sintió tan bien.
Después de eso, nos bañamos y seguimos como si nada hubiera pasado.
Me encanta tu relato