Escapada a la montaña con mi madre (XII)
Se acercaba la hora de cenar, pero mi cabeza solo podía estar en un sitio, con la misma idea rondando una y otra vez. Las dudas comenzaban a asaltarme, y no eran pocas precisamente. Sí claro, por un lado la idea de ver a mi madre en medio de un gangbang, rodeada de tíos usándola como un juguete sexual... Dios, ...