Me cogí a mi segunda alumna
Se acostó en la cama nuevamente, yo me levanté y le puse la verga en la boca para que me la mamara mientras le acariciaba las tetas, “me encantan”, le dije, “son tuyas y de muchos”, me respondió. Esta vez la puse de pie empinada y comienzo a penetrarla con mucha fuerza, ella no se contuvo y comenzó a gemir...